EN 16636 - Test de autoevaluación simple 1 Contamos con un miembro de la plantilla permanente y con experiencia en el equipo de dirección que es competente tanto teórica como prácticamente, calificado como Gestor de Plagas, y que es responsable formalmente de supervisar la adopción, la consecución, el mantenimiento y la comprobación de las aptitudes profesionales y de las prácticas de operación en toda la empresa. 2 Todos nuestros técnicos de servicio / usuarios profesionales dominan suficientemente el idioma local y poseen suficiente alfabetización y educación matemática para poder cumplir con sus responsabilidades incluyendo leer, escribir, calcular y comunicarse verbalmente con los clientes para interpretar sus requisitos y los requisitos técnicos especificados en las etiquetas, las hojas de datos de seguridad de los materiales y los protocolos de servicio. 3 Todos nuestros empleados que tienen contacto directo con los clientes en sus instalaciones han sido formados y certificados como competentes para vender y prestar los servicios que ofrecen en virtud de que cumplan unas niveles mínimos especificados y validados a nivel nacional de conocimientos, habilidades y competencia práctica. 4 Identificamos de manera rutinaria todos los posibles factores de riesgo específicos de las instalaciones o del sector de un cliente junto con las posibles consecuencias de una infestación. Los debatimos con el cliente para establecer los requisitos, las actitudes y las expectativas del cliente antes de proponer una línea de actuación y únicamente comenzamos a trabajar después de haber obtenido la aprobación formal del cliente. 5 Documentamos todas las visitas a las instalaciones de un cliente y mantenemos registros de: - El nivel y la naturaleza de las infestaciones - Las observaciones sobre las condiciones medioambientales locales que pueden sostener o fomentar la actividad de plagas - Los detalles de todas las intervenciones realizadas (incluida la localización y el uso de biocidas, etc.) - Todas las recomendaciones realizadas al cliente o para que el cliente las considere como acciones Sí No ? personales con el fin de reducir el riesgo de propagación adicional de una infestación. 6 De manera rutinaria evaluamos, informamos y debatimos los resultados de nuestras visitas de servicio con el cliente, prestamos especial atención a la efectividad (u otra circunstancia) de las acciones actuales, los riesgos que suponen y hacemos recomendaciones para las intervenciones requeridas por parte del cliente o de la empresa de control de plagas. 7 Todos los miembros de la plantilla que tienen contacto directo con los clientes comprenden y pueden explicar no solo qué diferentes normativas se pueden aplicar a las distintas circunstancias de los clientes sino también qué intervenciones son legales y se pueden realizar en cada una de las situaciones. 8 Realizamos de manera rutinaria un proceso formal en el que evaluamos, identificamos y registramos todos los riesgos que hay en la ubicación del cliente y que pueden suponer una amenaza para nuestros operadores u otras personas o que pueden derivarse de las intervenciones propuestas. De manera rutinaria tendremos en cuenta, comunicaremos y tomaremos medidas para reducir estos riesgos a un nivel aceptable como parte de nuestro planteamiento del servicio. 9 Siempre creamos y enviamos un plan a medida de cada cliente. Cuando elaboramos el plan tenemos en cuenta y debatimos la gestión del hábitat, los métodos biológicos, los métodos físicos y, finalmente, los medios químicos, optando por la intervención con menor impacto para el medio ambiente que satisfaga los requisitos del cliente. 10 Al menos una vez al año, evaluamos y registramos formalmente que la competencia profesional (conocimientos, habilidades y experiencia) y el desarrollo profesional continuo de cada uno de nuestros empleados que está en contacto con los clientes cumplen los requisitos mínimos aceptados en nuestro sector. Cuando hay constancia de deficiencias, podemos demostrar que hemos llevado a cabo con éxito una intervención de corrección. 11 Recogemos de manera rutinaria los residuos (por ejemplo, animales muertos, excrementos de aves, cebos gastados, trampas, contenedores de pesticidas, envases y bombillas, etc.) que se originen por la prestación de nuestros servicios y podemos demostrar que se eliminan de manera segura y de conformidad con la legislación y los códigos de prácticas relevantes a nivel local y europeo. Mayoría de respuestas SÍ: Parece que ha marcado las casillas de los requisitos que son absolutamente esenciales para lograr la certificación. Los cimientos para obtener la certificación parecen estar en su lugar pero para lograr la certificación profesional tendrá que asegurarse de que puede proporcionar pruebas a un auditor de las preguntas a las que ha respondido con un “SÍ”. Mayoría de respuestas NO o ?: Todavía tiene trabajo por hacer si quiere convertirse en un profesional CEPA Certified. Eche un vistazo a las categorías a las que ha respondido con un “No” y pida ayuda a su asociación nacional de control de plagas para elaborar un plan de acción que le permita obtener la certificación. Este test de autoevaluación tiene únicamente un propósito informativo. No se debe utilizar para las auditorías.