4A ZÓCALO PIEDRAS NEGRAS Lunes 9 de abril de 2012 FRASE DEL DÍA OpiniónEditorial » “El futuro no pertenece a nadie. No hay precursores, no existen más que reza- gados”. Jean Cocteau, escritor, pintor, coreógrafo. DE POLÍTICA Y COSAS PEORES CATÓN Enciclopedia Espasa E N LA CLASE DE CATECISMO el padre Arsilio le preguntó a Rosilita: “¿A dónde te gustaría ir, buena niña? ¿Al cielo o al infierno?’’. “La verdad, padre -contestó muy seria la pequeña-, después de todo lo que he oído tengo curiosidad por conocer ambos lugares’’... Don Martiriano, marido oprimido por su mujer, doña Jodoncia, llamó por teléfono al doctor. “Mi esposa se dislocó una mandíbula -le dijo-, y no puede hablar. ¿Podría usted atenderla ahora mismo? Ella no quiere ver a ningún otro médico’’. “Lo siento -respondió el galeno-. Ahora no tengo citas’’. “Muy bien -dice don Martiriano-. ¿Puedo decirle que la atenderá, digamos, allá por noviembre?’’... En la oficina de la dirección del glorioso Ateneo Fuente, centenaria institución de mi ciudad, Saltillo, estaba la gran Enciclopedia Espasa en sus más de un centenar de grandes y gruesos tomos. Era director del Colegio don José García Rodríguez, maestro venerable, como el de la “Juvenilia” de Miguel Cané, poeta autor de los mejores sonetos que en Coahuila se han escrito, y al mismo tiempo prócer cívico, pues fue de los primeros que desconocieron al gobierno espurio de Victoriano Huerta. Otro insigne y querido ateneísta, el licenciado Severiano García, llamado “El Chato” por sus estudiantes, profesaba la cátedra de Lógica, y sentía gran respeto por aquella enciclopedia. En sus páginas, solía decir, estaba todo el conocimiento humano. Cierto día un joven catedrático de nuevo ingreso, a quien para efectos de esta narración llamaremos Fulano, se atrevió a contradecir al Chato. “La Enciclopedia Espasa -declaró con suficiencia- no es tan perfecta como dice usted, maestro. Yo busqué en ella una palabra de uso muy común, y no la hallé”. “¿Qué palabra es ésa?” -se amoscó don Severiano. “Barómetro” -replicó, seguro, el neófito. “Seguramente la enciclopedia la registra” -acotó el licenciado García. “No, maestro -repitió el otro-. Mire”. Y así diciendo se puso de rodillas para sacar de la parte del anaquel el tomo correspondiente a la letra ve corta. Y es que el muchacho pensaba que la palabra “barómetro” se escribía con v. “¡Ya se hincó Fulano!” -exclamó, burlón, el Chato. Desde entonces esa frase: “¡Ya se hincó Fulano!”, se usó en el Ateneo para señalar al que caía en evidente error. Están desapareciendo las enciclopedias en que por siglos hemos abrevado. Ahora se nos presentan ya no en papel, sino en los artefactos digitales propios de nuestro tiempo. En verdad yo no lamento eso, pues me gusta la idea de llevar varias enciclopedias en la bolsa de mi camisa. Siento nostalgia, desde luego, por los preciosos libros que ahora constituyen un elegante adorno. Pero en lo que a enciclopedias se refiere me parece mejor el tiempo de hoy que el del pasado. Y espero que nadie me diga por hacer esa declaración: “¡Ya se hincó Fulano!”. Don Languidio, caballero senescente, le dijo a su esposa: “¡Te tengo una buena noticia! ¡Compré una de esas camas de agua que salen en las películas eróticas!’’. Responde ella con tono desdeñoso: “Pues te diré: a juz- gar por la forma en que te he visto últimamente, de lo único que va a servir esa cama es de tinaco”. Se encontraron dos amigos que hacía mucho tiempo no se veían. Uno de ellos estaba de visita en la ciudad. “Ahora debo ir al trabajo -le dijo el otro-, pero te invito a cenar en mi casa. Mientras tanto te voy a decir cómo puedes pasar un buen rato. Tengo una vecinita que vive sola, y a la que de vez en cuando visito con propósitos. Vive en la esquina de la calle 26 con 35. Dile que vas de parte mía a pasar con ella unos momentos gratos’’. El amigo le dio las gracias, y quedaron de verse aquella noche para cenar. El otro se fue a su trabajo. Después de atender los asuntos pendientes tomó el teléfono para llamar a su esposa y decirle que aquella noche tendrían invitados. Pero el teléfono sonaba ocupado, y ocupado. Se inquietó el tipo, y decidió ir a su casa. Para su sorpresa encontró a su mujer en brazos de su amigo. “¡Desgraciado! -le gritó hecho una furia-. ¡Te dije esquina de 26 con 35, no 16 con 25!’’... Llegó una linda muchacha con el siquiatra. Tenía opulentas formas (la muchacha, no el siquiatra) tanto en la región norte como en el hemisferio sur. “Doctor -le dijo al analista-. Sufro un extraño desorden mental. Creo que soy paraguas’’. “Muy bien -responde el siquiatra-. Acuéstese en el diván y ábrase’’... FIN. UN POLÍTICO A LA MEXICANA INDICADOR POLÍTICO DON CONCHO CARLOS RAMÍREZ » Josefina: Campaña mostrenca » Ganar votos o vender imagen L AS CAMPAÑAS PRESIDENCIALES HAN DEJADO ver ya cinco puntos específicos: 1.- SI SE REVISAN CON atención las encuestas presidenciales, la dimensión de los indecisos es un peligro para el candidato puntero y una oportunidad para los otros dos. De ahí que la búsqueda del voto de los indecisos sea aspecto esencial de las campañas electorales. Hasta ahora, López Obrador es el que ha comenzado a jalar algunos indecisos. 2.- LAS CAMPAÑAS SE GANAN con votos, no con perfil o imagen, y los votos se consiguen, se aseguran y se acarrean; no hay más. Mientras López Obrador y Enrique Peña Nieto afinan su aparato electoral para promover, garantizar y prepararse a acarrear a los votantes el día de la elección, Josefina parece andar en la luna: Su campaña aparece mostrenca, no sabe de dónde viene y tampoco sabe a dónde va. 3.- LAS ELECCIONES SE GANAN con equipos que operen afuera del grupo de campaña y no hacia dentro. Por eso Josefina volvió a perder la oportunidad al privilegiar el reposicionamiento de Roberto Gil con el cargo de “jefe de gabinete” donde ya ha fracasado, cuando lo esencial es saber con claridad quiénes son los operadores electorales. Hasta ahora, Josefina ha desperdiciado a tres operadores eficaces: El ex gobernador guanajuatense, Juan Manuel Oliva, el ex gobernador jalisciense, Francisco Ramírez Acuña y el ex gobernador oaxaqueño, Diódoro Carrasco, tres especialistas efectivos en organizar votantes pero que parecen estar de adorno y que podrían salvarle la campaña a Josefina pero a condición de que tomen el control de la organización. ¿A quién le importa que Gil sea “jefe de gabinete”? Lo esencial es saber quién va a garantizar los votos y quiénes van a poner orden en la campaña y no en el equipo interno de campaña. 4.- LAS CAMPAÑAS SE BASAN en la imagen de los candidatos, pero los perfiles deben dar garantías de efectividad. Peña Nieto pareció haber neutralizado su desliz de los libros en Guadalajara y López Obrador ha bajado un poco sus negativos, en tanto que Josefina se estancó en la imagen de género que ya no le garantiza votos. La encuesta diaria de GEA-ISA en Milenio Diario es reveladora: La tendencia no se mueve por hechos diarios sino por sucesos de fondo; y para eso justamente sirven las encuestas: Indagar qué motiva al votante. 5.- EL PUNTO POLÍTICO DE las COSAS NUESTRAS JORGE VILLEGAS Colores L playa. LEGARON LOS VACACIONISTAS LUCIENDO LOS colores del arco iris. Volvieron colorados de tanto quemarse al sol de la campañas radica en la posibilidad del candidato o de la candidata para poner la agenda política. Agobiada por la lucha interna entre su equipo de trabajo, Josefina ha puesto la agenda negativa, es decir, la que le afecta: Tardó en reaccionar al mareo, tardó más en reaccionar al estadio vacío y tardó en reaccionar al incidente en Tres Marías, lo que revela que tiene muchos miembros de equipo pero ningún operador de cuarto de guerra. La reacción de comunicación social de Josefina ha sido no lenta sino inexistente. Todo war room se forma de operadores y provocadores, no de asesores tropezándose unos con otros y culpándose otros a unos. Es la hora en que Josefina no pone la agenda política. LOS CANDIDATOS SE HAN CONFIADO en que no existe pasión por la elección, que habrá un enorme abstencionismo y que la clave de la victoria Negros del coraje por los abusos en estará en garantizar los los precios y tarifas. lectores leales o los que Pálidos como tísicos de sólo pensar decidirán a última hora en las deudas que contrajeron. como voto útil. Por eso es Con la tez amarilla por los camaroque las campañas no han nes que los intoxicaron. prendido, Peña Nieto y Con el gris de la preocupación por López Obrador tratan de cómo hallarán sus casas. disminuir sus negativos y Con los ojos rojos de tanto sol y tantodos se han aglomerado tas desveladas. en el centro. En cambio, Nosotros en cambio, los recibimos Josefina tiene una doble verdes de la envidia. carga: La de candidata jvillega@rocketmail.com mujer y la de representar al partido que está en el poder y que podría verse obligado a regresarle el poder presidencial al PRI. EN ESTE CONTEXTO, JOSEFINA VOLVIÓ a perder la oportunidad política: Frente a la crisis en su equipo por sucesos externos que no pudieron ser administrados y atenuados, la reorganización de su campaña la hizo al interior y no al exterior y con los mismos. La experiencia de campañas anteriores --Echeverría, Salinas, Calderón-- ha enseñado que el equipo de trabajo de un candidato es el candidato y por tanto bastan algunos manotazos; pero el peor error de una campaña radica en magnificar los problemas internos y proteger a los consentidos por el hecho de serlo y no por la eficacia. Roberto Gil es un buen político pero ineficaz jefe de campaña presidencial, por lo que consolidarlo no significa más que mantener el problema interno. Cuando el candidato es fuerte y sabe operar campañas, su equipo debe pasar a segundo plano. MIENTRAS PEÑA NIETO SE HIZO del control del PRI y López Obrador doblegó al PRD, Josefina no ha podido tomar las riendas del PAN; de hecho, el presidente nacional panista, Gustavo Madero, es el mejor aliado del PRI y del PAN; pero en lugar de desplazarlo o hacerse a un lado, Madero se aferra a la posición: De la Madrid desplazó a Javier García Paniagua del PRI, Salinas puso a Manuel Camacho como secretario general y Calderón desdibujó el PAN de Manuel Espino. EN UN MOVIMIENTO INTERESANTE, JOSEFINA metió al CEN a Juan Manuel Oliva y a Ramírez Acuña, pero Madero los ha neutralizado. Si Josefina quiere ganar las elecciones, debe poner orden en el PAN y designar a Oliva como presidente y a Ramírez Acuña como secretario general y darle a Diódoro Carrasco poder electoral. La incorporación de Santiago Creel y de Ernesto Cordero nada dicen a la campaña de búsqueda de votos y de nueva cuenta sólo siguen enredando el equipo de campaña de por sí ya autoneutralizado, porque el problema de la candidata panista no es el desorden en el equipo donde todos se tropiezan entre sí, sino la ausencia de un equipo de trabajo para buscar y garantizar votos. MIENTRAS PEÑA NIETO Y LÓPEZ Obrador están dedicados de tiempo completo a buscar votos, Josefina pierde el tiempo reuniéndose con su equipo para poner orden cada rato y carece de buscadores de votos. Al final, las elecciones se ganan con votos, no con sesiones de gimnasio o con baños de pueblo comiendo quesadillas pero provocando la ira mediática de la gente porque no hay nadie que le organice bien esos eventos.