Comisión Europea - Comunicado de prensa Previsiones económicas de primavera de 2016: Mantener el rumbo en una coyuntura delicada Bruselas, 3 de mayo de 2016 La Comisión prevé un crecimiento del 1,6 % en la zona del euro y del 1,8 % en la UE en 2016 © European Union 2016 Se prevé que el crecimiento económico en Europa siga siendo moderado, pues la trayectoria de sus principales socios comerciales se ha ralentizado y algunos de los factores que hasta ahora habían sido propicios están comenzando a desvanecerse. Así pues, se prevé que el PIB de la zona del euro siga registrando un crecimiento moderado durante el período 2015-2017. Según las previsiones de primavera, la Comisión espera que el PIB de la zona del euro crezca el 1,6 % en 2016 y el 1,8 % en 2017, tras experimentar un crecimiento del 1,7 % en 2015 (previsiones de invierno: 2015: 1,6 %, 2016: 1,7 %, 2017: 1,9 %). Se prevé que el crecimiento del PIB en la UE se sitúe en el 1,8 % en 2016 (un leve descenso respecto al 2,0 % registrado en 2015) y ascienda levemente hasta el 1,9 % en 2017 (previsiones de invierno: 2015: 1,9 %, 2016: 1,9 %, 2017: 2,0 %). La política monetaria muy expansiva ha sentado las bases para el repunte de la inversión, al facilitar y abaratar el acceso a la financiación. La política presupuestaria en la zona del euro debería de contribuir al crecimiento este año. Ahora bien, pese a que a principios de 2016 se registró una nueva disminución de los precios del petróleo que prolongó el efecto positivo de tal fenómeno sobre la renta real disponible, la intensidad de ese factor dinamizador debería irse desvaneciendo a medida que los precios de esa materia prima vayan recuperándose. Igualmente, aunque las exportaciones de la zona del euro se siguen beneficiando en cierta medida de la depreciación del euro, el reciente aumento de su tipo de cambio podría hacer que los efectos de la ralentización del crecimiento exterior se dejen sentir con mayor intensidad en la zona del euro. El vicepresidente Valdis Dombrovskis, responsable del Euro y el Diálogo Social, ha declarado: «Prosigue la recuperación económica en Europa, aunque el contexto internacional es ahora menos propicio. El crecimiento futuro dependerá cada vez más de las oportunidades que nosotros mismos creemos. Así pues, hemos de intensificar nuestros esfuerzos de reforma estructural a fin de corregir los problemas que se arrastran desde hace tiempo en muchos países, como los elevados niveles de endeudamiento público y privado, las vulnerabilidades del sector financiero o el descenso de la competitividad. Aplicar políticas decididas de reforma y modernización de nuestras economías es la única manera de garantizar un crecimiento fuerte y sostenible, más empleo y unas condiciones sociales adecuadas para todos los ciudadanos». Pierre Moscovici, el comisario de Asuntos Económicos y Financieros, Fiscalidad y Aduanas, ha declarado:«El crecimiento en Europa se está manteniendo, pese a las mayores dificultades del entorno mundial. Hay signos de que, gradualmente, las políticas aplicadas están logrando más empleo y fomentando la inversión. No obstante, queda mucho por hacer para corregir la desigualdad. La recuperación de la zona del euro sigue siendo desigual, tanto entre los Estados miembros como entre los segmentos sociales más fuertes y más débiles. Se trata de una situación inaceptable que requiere una actuación resuelta de los gobiernos, tanto a nivel individual como colectivo». Todas las economías de los Estados miembros deberían crecer para 2017 Está previsto que el crecimiento económico aumente o se mantenga prácticamente estable en la mayoría de los Estados miembros durante el período considerado. Se prevé que todas las economías de los Estados miembros crezcan de aquí al año próximo, aunque el crecimiento seguirá siendo desigual en los distintos países que componen la UE. Se prevé que las exportaciones netas de la zona del euro sigan lastrando el crecimiento en 2016, tornándose neutra su contribución en 2017. Por lo tanto, el crecimiento dependerá de la demanda interna: se prevé que el próximo año la inversión aumente al 3,8 % en la zona del euro y la Unión Europea, y que el consumo privado se modere al hilo de la reducción de la renta real que traerá consigo el previsto repunte de la inflación. Proseguirá la mejora del mercado de trabajo Se prevé que prosiga la recuperación moderada de los mercados laborales, sustentada en el retraso de su respuesta a la mejora de las condiciones cíclicas y en la contención del aumento de los salarios. En algunos Estados miembros, las reformas del mercado de trabajo introducidas en los últimos años y las medidas de política presupuestaria también están contribuyendo a la creación neta de empleo. Aunque las disparidades entre los mercados de trabajo persistirán durante algún tiempo, se prevé que el desempleo en la zona del euro se reduzca hasta el 10,3 % en 2016 y el 9,9 % en 2017, frente al 10,9 % en 2015. En el conjunto de la UE se prevé que el desempleo descienda del 9,4 % en 2015 al 8,9 % en 2016 y al 8,5 % en 2017. La política presupuestaria sigue siendo propicia; las perspectivas presupuestarias están mejorando Se prevé que el déficit total de las administraciones públicas de la zona del euro y de la UE siga disminuyendo este año y el próximo, sobre la base del crecimiento económico y los bajos tipos de interés. Se prevé que el déficit de las administraciones públicas en la zona del euro disminuya del 2,1 % del PIB en 2015 (UE: 2,4 %) al 1,9 % en 2016 (UE: 2,1 %) y al 1,6 % en 2017 (UE: 1,8 %), en una hipótesis de mantenimiento de las políticas. Se espera que la política presupuestaria de la zona del euro siga siendo ligeramente expansionista este año. Entre tanto, se prevé que la ratio deuda/PIB siga disminuyendo gradualmente desde el 94,4 % en 2014 hasta el 91,1 % en la zona del euro (UE: 85,5 %) en 2017. Los precios de la energía siguen marcando el rumbo de la inflación Los precios del petróleo disminuyeron nuevamente a principios de 2016, situando la inflación en cifras negativas. Se espera que la inflación se mantenga cercana a cero en el futuro inmediato, pues los precios de la energía son más bajos que hace un año. Las presiones externas sobre los precios son también débiles, en un contexto de ligera apreciación del euro y marcada atonía de los precios de los productores mundiales. La inflación debería de aumentar de manera más significativa en el segundo semestre del año en curso, a medida que los precios de la energía vayan recuperándose gradualmente y los precios interiores aumenten al hilo de la consolidación de la demanda interna. La inflación de los precios al consumo se calcula en un 0,2 % en la zona euro este año (UE 0,3 %) y en el 1,4 % en 2017 (UE: 1,5 %). Se mantiene la atonía de las perspectivas de crecimiento mundial Probablemente el año pasado las economías del resto del mundo registraron el menor ritmo de crecimiento desde 2009 (3,2 % en 2015), a consecuencia de la ralentización de los mercados emergentes. Las perspectivas de crecimiento del PIB mundial se han reducido aún más debido a la ulterior ralentización de las principales economías avanzadas, y las expectativas de un ligero repunte están sujetas a una gran incertidumbre. Se prevé que la economía mundial crezca un 3,1 % en 2016 y un 3,4 % en 2017. Riesgos considerables en torno a las perspectivas económicas europeas Importantes incertidumbres penden sobre estas previsiones. Entre los riesgos externos cabe citar la posibilidad de que el menor crecimiento de los mercados emergentes, en particular de China, tenga repercusiones más fuertes o sea peor de lo previsto. La incertidumbre ligada a las tensiones geopolíticas sigue siendo elevada y podría afectar a las economías europeas más negativamente de lo esperado. El crecimiento europeo también podría verse frenado por movimientos bruscos en los precios del petróleo o turbulencias en los mercados financieros. Además, los riesgos asociados a la evolución en el interior de la UE siguen siendo considerables, por ejemplo en lo que se refiere al ritmo de aplicación de las reformas estructurales o la incertidumbre que pende sobre el resultado del referéndum en el Reino Unido. Por el contrario, las reformas estructurales podrían tener un impacto positivo superior al estimado y las políticas monetarias muy flexibles podrían transmitirse a la economía real con mayor intensidad de lo previsto. Antecedentes Estas previsiones tienen en cuenta todos los datos y factores pertinentes, incluidas las hipótesis sobre las políticas públicas, de que se disponía a 22 de abril de 2016. Solo se incluyen las políticas anunciadas de forma creíble y especificadas con debido detalle. Las proyecciones no contemplan cambios en las políticas. Estas previsiones también se basan en una serie de hipótesis externas sobre la evolución de los tipos de cambio, los tipos de interés y los precios de las materias primas. Las cifras utilizadas reflejan las expectativas de los mercados basadas en los mercados de derivados en el momento de hacer las previsiones. Las presentes previsiones económicas serán tenidas en cuenta en la elaboración del ejercicio de primavera del Semestre Europeo. La Comisión debe actualizar sus previsiones económicas en noviembre de 2016. Para más información: Previsiones económicas de primavera - sitio web y #ecforecast (documento únicamente disponible en inglés) Previsiones económicas europeas – sitio web explicativo Siga al vicepresidente Dombrovskis en Twitter: @VDombrovskis Siga al comisario Moscovici en Twitter: @Pierremoscovici Siga a la DG ECFIN en Twitter: @ecfin IP/16/1613 Personas de contacto para la prensa: Annika BREIDTHARDT (+ 32 2 295 61 53) Audrey AUGIER (+32 2 297 16 07) Annikky LAMP (+32 2 295 61 51) Solicitudes del público en general: Europe Direct por teléfono 00 800 67 89 10 11 , o por e-mail Attachments Annex to IP-16-1613.pdf