TÍTULO “QUITAR DE AQUÍ, PARA PONER ALLÍ” BANCO DE HUESOS AUTORES :(E mail contacto: arubio82@hotmail.com) Rubio Ventura, Andrea. Quirófano de Traumatología. Hospital La Paz .Madrid. Moreno Pavón, Ana. Quirófano de Traumatología. Hospital La Paz. Madrid. Agüero Martín, Ángela. Quirófano de Traumatología. Hospital La Paz. Madrid. Somoza Dochado, María. Quirófano de Traumatología. Hospital La Paz. Madrid PALABRAS CLAVE Banco de Huesos, Donante óseo, Aloinjerto, Injerto óseo INTRODUCCIÓN Hoy día el mundo del trasplante ha conseguido concienciar a la sociedad de la importancia que tiene su cuerpo para otras personas. Mucho se habla de trasplantes de órganos de pacientes difuntos a vivos, pero ¿qué hay del hueso? Es un trasplante “agradecido” que no necesita de Donante difunto para dar a su Receptor una solución a su defecto óseo. Es algo que está en auge y a lo que queda mucho terreno por explorar .En la actualidad el uso de injertos óseos constituye una práctica habitual en las COT. La Unidad de Banco de Huesos del Hospital de la Paz de Madrid tiene su inicio en el año 1988 . La obtención del injerto óseo procede de las cabezas femorales extraídas durante el reemplazo protésico de la cadera parcial o total. Para llevar a cabo estos procedimientos la enfermera juega un papel muy importante puesto que es la responsable de la gestión de la Unidad, entrevistar a los donantes, recogida de piezas óseas, almacenarlas, prepararlas para implantación en cirugía….todo ello bajo la supervisión del responsable médico. OBJETIVOS Dar a conocer la importancia de la Unidad de Banco Huesos, su funcionamiento y la labor que se realiza. Presentar un protocolo de trabajo que garantice la calidad del material óseo desde la extracción hasta su implantación. Ofrecer injertos óseos seguros y libres de todo tipo de enfermedades. BANCO DE HUESOS. En concreto, el nuestro es un Banco doméstico ya que su actividad está orientada al autoabastecimiento del servicio de traumatología. Hacemos una breve reseña acerca de los tipos de injerto y sus características para entender mejor sus aplicaciones. • TIPOS DE INJERTOS Autoinjerto (propios del paciente) Es el injerto ideal porque no va a provocar ninguna respuesta inmunológica en el huésped. El problema radica en que la cantidad de hueso que se puede obtener del propio paciente es limitada. Aloinjerto (de la misma especie). Tiene como ventaja que nos permite disponer de la cantidad de hueso necesaria e ilimitada para la reconstrucción del defecto óseo y la respuesta inmunológica del huésped suele ser moderada debido a la congelación de las piezas anatómicas que disminuye notablemente su antigenicidad. • INDICACIONES CLÍNICAS DE LOS ALOINJERTOS LA utilización de aloinjerto óseo cobre especial importancia en: 1. La reconstrucción de defectos óseos tras resecciones tumorales. 2. La reparación de defectos óseos en cirugía de recambios protésicos, especialmente cadera y rodilla. 3. En fracturas agudas y sus complicaciones como la pseudoartrosis. 4. La realización de artrodesis vertebrales. El empleo del autoinjerto, sin duda es el ideal, pero supone mayor morbilidad para el paciente (nuevo abordaje, despegamiento muscular, mayor sangrado, debilidad del hueso en la zona dadora y más dolor postoperatorio). Para evitar todos estos inconvenientes tenemos tres alternativas: Sustitutivos óseos (fosfato tricálcico, hidroxiapatita y la matriz ósea desmineralizada). Útiles para el relleno de cavidades pero menos útil para la cirugía vertebral. Las proteínas morfogenéticas, son muy costosas y aún pendiente de demostrar su efectividad. El injerto de hueso crioconservado, de fácil adquisición, precio razonable y que supone un buen sustrato para el crecimiento óseo. De ahí, la utilidad e importancia de la Unidad. • MÉTODO DE CONSERVACIÓN La proteína morfogénica osteoinductora se conserva estable en la crioconservación. Como el proceso es aséptico no se utiliza esterilización secundaria. El hueso obtenido por estas técnicas conserva integras sus propiedades biológicas y físicas En la unidad, el método de conservación que utilizamos, es el frío;simple, sencillo y que disminuye la actividad enzimática de las colagenasas. Para ello disponemos de tres unidades de congelación. Dos de ellos horizontales y uno vertical. Mantienen la temperatura entre 75º C y 80º C bajo cero. Los arcones disponen de un sistema de alarma que se dispara cuando disminuye la temperatura. En caso de avería se inicia un protocolo de actuación. • SELECCIÓN DEL DONANTE: Se debe rechazar un donante, cuando exista una mínima duda en relación con sus hábitos sociales y su historia clínica: PERFIL DEL DONANTE: 1- Pacientes que van a ser sometidos a una artroplastia de cadera parcial o total. 2- Los donantes deben cumplir unos requisitos previos a determinar en la anamnesis. Causas que descartan automáticamente a un donante: Padecer enfermedades trasmisibles tanto infecciosas como neoplasias. Infecciones sistémicas activas. Enfermedades sistémicas del tejido conectivo. Procesos metabólicos óseos. Terapias prologadas con esteroides. 3-Si es apto, se sugiere al paciente la posibilidad de la donación de la pieza ósea, que de otra manera sería desechada. Si acepta, se realiza una entrevista protocolizada con el paciente para contrastar los datos de la historia y firmar el consentimiento informado. 4-Se realizarán unas analíticas (bioquímica, serología y hemocultivos), previa a la cirugía para verificar los resultados. 5-La extracción debe realizarse en el quirófano, de manera estéril, siguiendo el protocolo de una cirugía reglada. • PROTOCOLO DE LA EXTRACCIÓN 1. Extracción de 20cc de sangre, previo a la canalización de la vía, para: hemocultivo, bioquímica y serología. La enfermera de B H procederá a lavado de manos quirúrgico. 2. En una mesa pequeña totalmente estéril se prepara todo lo necesario para recibir la cabeza y prepararla para su almacenamiento. Toma de fragmento de cápsula articular, previo lavado. Toma de fragmento de tejido óseo, previo lavado. Lavado de cabeza femoral. Toma de fragmento para testigo. Fragmento para A. Patológica, con formol. Guardar la cabeza femoral en la duquesa de plástico y frasco de cristal. 3. Si todo transcurre según lo previsto, ya en la Unidad: Se etiquetarán todas las muestras. Se anotará en el libro de registros. Las muestras de tejido óseo y articular se manda a microbiología. Se centrifuga la sangre extraída, para guardar el suero en la seroteca durante un periodo de 5 años. La cabeza junto con el testigo, se colocarán en los arcones siguiendo el orden que marca la numeración de la pieza ósea, facilitando así su búsqueda. A los 3 meses el testigo se envía a microbiología. Si los resultados nos confirman que están libres de enfermedades, la pieza ósea se pone a disposición para ser utilizada. Las piezas óseas tienen un periodo máximo de 5 años de conservación, si no se han utilizado en este tiempo, se desecharan. • UTILIZACIÓN DEL ALOINJERTO 1. Al igual que en el caso del donante, es imprescindible que el receptor dé su conformidad y autorice el consentimiento informado. 2. Una vez descongelados los injertos no pueden ser vueltos a congelar y deben ser desechados si su utilización no es llevada a cabo. 3. El médico responsable es el que elige la/s cabezas que considere más adecuadas. 4. El mismo día de la intervención se comprueba el grupo de sangre y el Rh del paciente y se realizará una extracción de sangre para serología. 5. Se toman muestras para cultivo del receptor, como una medida más para que en caso de infección postoperatoria se pueda descartar si la infección es consecuencia de la colocación del injerto en condiciones inadecuadas. El procedimiento para la preparación del aloinjerto se hace en las mismas condiciones de esterilidad que se utilizaron para la extracción. La enfermera de Banco de Huesos prepara el aloinjerto lavando la pieza con suero abundante. Se quita toda la cortical y partes blandas con la ayuda de una gubia. Sobre una tabla y con un escoplo se trocea la cabeza de manera que permita introducirlo en el triturador. El triturado del hueso irá en función de las necesidades de la cirugía. Se registra los datos del donante y del receptor. MATERIAL Y MÉTODO: Ámbito del estudio: Unidad de Banco de Huesos del Hospital Universitario de la Paz. Es un estudio cuantitativo descriptivo, longitudinal cuya muestra se compone de todos los pacientes sometidos a artroplastia primaria de cadera desde el inicio de la Unidad en 1988 hasta diciembre de 2007. Nos hemos basado en el Protocolo de Funcionamiento de la Unidad desarrollado por su responsable médico y las enfermeras que trabajan en la Unidad. Tras una primera fase de revisión tanto bibliográfica como estadística y accediendo a los documentos y archivos de la Unidad, se analizan comparando los pacientes que son entrevistados como donantes potenciales, con el número de piezas óseas tomadas (y que cumplen los requisitos )y el número de pacientes que requieren aloinjerto en cirugía por algún defecto óseo o reconstrucción tumoral. RESULTADO: Los datos recogidos tanto de donantes como de receptores, nos permiten afirmar que existe un buen funcionamiento de la unidad con resultados positivos desde sus inicios. No hay ningún caso de contagio de enfermedades al emplear el aloinjerto. Basándonos en una comparativa en la actividad asistencial desde el 2003 al 2007, pudimos observar que con una media de 400 entrevistas realizadas a donantes potenciales, fueron recogidas 200 piezas óseas. Es un buen promedio teniendo en cuenta los criterios de exclusión y el tipo de paciente al que se le suele realizar la artroplastia (porcentaje elevado de pacientes insulino-dependientes). En cuanto a los pacientes a los que se les aplicó aloinjerto, la media fue de 112 pacientes/año CONCLUSIONES: Todos los datos nos permiten concluir, en que el funcionamiento y el trabajo desempeñados en la Unidad son muy importantes en C.O.T a la vez que rentables. Los injertos óseos siguen siendo el material más empleado, aunque no están exentos de inconvenientes, como puede ser la trasmisión de enfermedades. Como ventaja tenemos que la cantidad es ilimitada y más económica que los sustitutivos artificiales. El trabajo realizado por el personal de la Unidad y la buena gestión de ésta, permite obtener aloinjertos libres de enfermedades y en perfectas condiciones. Con el esfuerzo y la colaboración de los miembros del bloque quirúrgico, esperamos que la ampliación y mejoras de la Unidad estén próximas, para ofrecer un mejor servicio y más posibilidades a nuestros pacientes. BIBLIOGRAFÍA: Protocolo del Banco de Huesos del Hospital La Paz. María Victoria González de Aledo. Sagrario López Sánchez. Mª Sol Narciso Miranda. Año 1995. Actualizado en Enero 2008. Vicario Espinosa C. “Los aloinjertos óseos en Cirugía Ortopédica y Traumatología (II)”. 2004. S. Amillo. J. Cañadell. “Banco de Huesos y otros tejidos del sistema musculoesquelético”. 1989 Begoña Fernández Latorre. Pilar Orio López. “Enfermería quirúrgica y banco de huesos” (Enfermería científica nº252-253 Abril 2003) Agradecimiento: Dr. Martínez Miranda, y Dr. Fernández-Baillo. 2. 1. 3. 1. 2. 3. 4. 5. 4. 5 Una vez se obtiene la cabeza femoral, se realizan las tomas para anatomía patológica y testigo óseo. La enfermera procede al almacenamiento de la pieza ósea. Se prepara el aloinjerto descongelado para utilizarlo en una cirugía. En este caso se tritura para manejarlo mejor. Aloinjerto en artrodesis vertebral. Aloinjerto para corregir un defecto en el fondo acetabular tras un recambio protésico de cadera