montuosas anteriormente descritas pertenecen al terreno j u r á sico inferior (liasico ú oxfordense), salpicado á trechos por numerosos bancos del neocomense. En varios puntos de la cordillera principal se presentan vestigios de rocas eruptivas, cuya edad relativa es difícil determinar, y además algunas, pero muy limitadas manchas del terreno terciario inferior (eocenoí). El terreno triásico asoma apenas en dos puntos de la costa Noroeste, situados entre Deyá y Estallenchs. La extensa llanura que separa las dos cadenas montuosas, pertenece al terreno terciario medio (mioceno medio y mioceno superior), salpicado por algunos islotes neocomenses y otros numuliticos. Entre estos últimos figura el aislado promontorio de Randa. Debajo del mioceno medio, y casi en el centro de la isla, existe una formación lacustre, notable por los depósitos de carbón de piedra (liñito) que contiene, y que se explotan desde hace muchos años en Binisalen, en Selva y en Biniamar. Este antiguo lago tiene, según Hermite, 80 kilómetros de diámetro. El terreno cuaternario, bastante desarrollado en Mallorca, se halla representado por dos formaciones diversas y de origen marino. La primera y la más extendida, compuesta de arcillas rojizas y de cantos rodados calizos, arrancados al terreno j u rásico por violentas corrientes, forma una faja ó zona muy fértil que, tendida al pié de la gran cordillera, se extiende desde el litoral de Palma, por Santa María, Gonsell, Binisalen, Inca y La Puebla hasta la bahía de Alcudia. A la segunda formación pertenecen los depósitos del asperón calizo (vulgo mares), constituido por la aglomeración de diminutos granos calcáreos, que se explotan en diversos puntos de la costa, (Goll den Rabassa, Gap Enderrocat, Andraitx, etc.), como piedra de construcción, muy apreciada por su fácil labra, su poca densidad, y por la dureza que adquiere en contacto con el aire. Los aluviones modernos forman grandes depósitos en la Albufera y en la Albufereta de Alcudia, en el Prat de San Jordi, en el Salobrar de Campos, en la Porrasa, y en otros puntos del litoral donde desaguan los torrentes, formando pequeñas, pero insalubles marismas. " V e g e t a c i ó n * . — E l conjunto de los terrenos que consti-