Un PUente entre Dos MUnDos EN AMÉRICA LATINA, EL BÉISBOL SUELE SER EL MEJOR CAMINO HACIA EL ÉXITO, Y ESA TRAVESÍA SE CELEBRA EN LA CEREMONIA DEL SALÓN DE LA FAMA DEL BÉISBOL LATINO EN REPÚBLICA DOMINICANA PUBLICADO ORIGINALMENTE EN LA EDICIÓN DE ABRIL DE 2013 DE LA REVISTA YANKEES MAGAZINE Y EN EL ANUARIO OFICIAL 2013 DE LOS YANKEES DE NUEVA YORK. y r r e n D e K Por Un PUente entre Dos MUnDos L a caravana atravesó un campo abierto con caballos salvajes, hileras de palmeras y fachadas pintadas de color pastel, donde la gente advirtió su presencia y comenzó a reunirse en la acera, sonrió y saludó. Las personas que iban en las camionetas devolvían el saludo. Ahora sí era un desfile. Este breve recorrido a lo largo de la costa sudeste de la República Dominicana, desde Casa de Campo hasta el centro de la ciudad de La Romana, comprendía pocas millas, un viaje de solo algunos minutos, pero en el medio hay un mundo de diferencia. Esa tarde de febrero, niños miraban fijamente a través de las ventanas de las camionetas, luchando contra el reflejo del sol. ¿Podían ver algo? ¿Reconocían a alguien? 60 YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L I Un hombre que iba en una de las camionetas se preparó para tomar una fotografía. Mientras enfocaba el lente, los niños lo vieron y enderezaron su postura, como si los dirigiese un titiritero; pasaron de desgarbados a fabulosos con un clic de la cámara. En un momento, parecían momias; al siguiente, todos se movían como Beyonce. A lo lejos, podía verse el horizonte, que ponía al descubierto un terreno de color cobre donde niños de entre 8 y 10 años jugaban béisbol. Usaban una pelota de tenis gris, palos como bates y sacos de café rellenados como bases. El viento soplaba. Nubes de polvo atravesaban el campo de juego. La caravana se detuvo allí, al lado del camino. De los vehículos se bajaron algunos de los mejores peloteros latinoamericanos de @ YanksMagazine I @Yankees_Beisbol todos los tiempos. Los hombres se acercaron a los niños. El juego terminó. Los niños corrieron hacia los hombres, a quienes habían reconocido de inmediato. Allí estaba Minnie Miñoso, quien ahora tiene 87 años, deslizándose por el césped de color marrón con una entrada ágil. Llevaba unas gafas de sol de grueso armazón dorado y cristales negros, al estilo de Elvis. Estaban Tony Peña, Luis Tiant, Tony Armas y Bernie Williams. En ese momento, chocaron dos mundos. Allí estaban los protagonistas de carreras deportivas exitosas, con todas las guirnaldas de la adoración, mezclados en un terreno polvoriento con vidas que probablemente eran demasiado jóvenes para medir el éxito, pero estaban lo suficientemente Un PUente entre Dos MUnDos WILLIAMS impresionadas como para decir: Queremos ser como ustedes. Y sucedió lo que tenía que suceder. Los niños comenzaron a ponerse en posición de juego. Tan pronto uno abanicó con el bate, otro se lo arrebató de las manos. De esta forma, el bate recorrió el terreno de juego pasando de mano en mano. Cuando uno de esos niños hizo swing, aunque perdió el bate en un forcejeo, brincó de alegría. Acababa de dar su mejor swing delante de Juan Igor González, quien se sonrió y aplaudió cada movimiento. “¿Quién es su jugador favorito?”, preguntó un hombre en un español rudimentario. Se escuchó una respuesta a coro en tono agudo: “¡Robinson Canó!”. “¡Alex Rodríguez!”, gritó otro. “¡Curtis Granderson!”, dijo el último. “Mírenlos”, se dijo el hombre a sí mismo, impresionado. “Estos muchachos son fanáticos de los Yankees”. La procesión avanzó hasta una esquina del terreno donde solo había un letrero. El letrero indicaba que en ese lugar iba a construirse el Museo del Salón de la Fama del Béisbol Latino, un proyecto multimillonario que podría terminarse en 2015. Se tomaron fotografías. La caravana volvió a organizarse y se desplazó hacia el centro de La Romana 62 YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L I para el verdadero desfile de los inmortales del béisbol, donde serían escoltados por soldados de caballería, jugadores de las pequeñas ligas y bandas de música. Los niños saludaban con la mano mientras observaban cómo se alejaba la larga procesión por el camino hasta desaparecer. Se quedaron con el sol, el juego y una gran sensación de deseo. M ás tarde esa noche, el grupo regresó a Casa Grande, una propiedad frente al mar en Casa de Campo, un centro turístico de 7,000 acres del más alto prestigio. Casa Grande es la casa para huéspedes de la familia Fanjul, propietaria del centro turístico y de varios negocios inmobiliarios y de producción azucarera internacionales. Las leyendas del béisbol de América Latina y los invitados celebraron junto a un bufé donde se sirvió pescado local guisado en leche de coco, pollo, bistec y vegetales asados. Había surtido de postres, dulces y pasteles, copas altas de champaña y vasos de ron dorado. Los hombres se veían acalorados con sus camisas, saco y corbata, pero sentían el alivio de las constantes caricias de la brisa del océano. Casa de Campo es la sede del Salón de la Fama del Béisbol Latino, con una oficina @ YanksMagazine I @Yankees_Beisbol no muy lejos del muelle, con vista al río Chavón y al Mar Caribe. El Salón de la Fama del Béisbol Latino es una creación de Roberto A. Weill, un generoso y encantador hombre de bigote, apasionado por este deporte, que hablaba de su tema favorito en Casa Grande. “El béisbol no es solamente un deporte contemplativo, es un deporte participativo”, comentó. “Cada fanático es un dirigente”. Weill nació en Cuba, hijo de un médico cubano que atendía a los jugadores de béisbol profesional de todo el país. En 1946, su padre lo llevó a La Habana para ver a Ted Williams y los Medias Rojas de Boston en una exhibición contra los Senadores de Washington. Weill tenía solo 8 años, pero la imagen y la sensación se le quedaron grabadas a fuego. Los dos continuaron viendo todo el béisbol que el tiempo les permitía, y la liga invernal de Cuba estaba repleta de talentos, incluido un joven Miñoso, de quien Weill se haría amigo años más tarde. Cuando su padre falleció, Weill tenía 9 años y se aferró a su amor por este deporte. Y no es un secreto cuál es su equipo favorito de las ligas mayores. “Cuando Castro comenzó a decir: ‘Cuba, sí; Yanquis, no’, yo pensé que era mejor que me largara de allí”, suele contar Weill, generalmente seguido de una carcajada Un PUente entre Dos MUnDos LA COMENTARISTA DE ESPN CAROLINA GUILLÉN Y WEILL contagiosa. “Dejé mi país cuando comenzaron a meterse con los Yankees”. Weill estudió en Estados Unidos: Georgia Tech y Harvard Business School. Durante la década de los setenta, fue asesor del presidente de Venezuela Carlos Andrés Pérez, y fue en esa época cuando comenzó a hacer del béisbol su negocio. En 1971, trató de formar una liga profesional. Luego, volvió a intentarlo en 1978, y la liga realmente comenzó a crecer, pero se vio interrumpida por el cambio de gobierno en Venezuela. Al mismo tiempo, Weill comenzó a visitar la República Dominicana para otros proyectos. Su esposa se enamoró de Casa de Campo porque, visualmente, le recordaba a Cuba. A fines de la década de los setenta, construyeron su primer hogar en Casa de Campo. Luego de que la esposa de Weill falleciera en 2002, Alfonso Fanjul lo alentó para que se quedara en Casa de Campo y trabajara como asesor. Una vez más, Weill se abocó al béisbol, y la idea del Salón de la Fama del Béisbol Latino, inspirado en Cooperstown, comenzó a tomar forma. Hizo sus deberes, arregló sus asuntos y se reunió con personas que él considera “gurús del béisbol”. “Tuve una reunión con Tommy Lasorda, una persona muy inteligente”, afirmó. “Me reuní con Felipe Rojas Alou. Estoy hablando de gente que comprende el mundo del béisbol en Estados Unidos. Rob Manfred de las Grandes Ligas (Major League Baseball, MLB). Lou Meléndez, a cargo de MLB en América Latina. Personas muy importantes de MLB”. Weill se reunió con la comunidad beisbolera de la República Dominicana. Creó comités. Escuchó a las personas. “La opinión general fue la siguiente: Si puedes hacer que los Yankees de Nueva York crean en este proyecto, podrás manejar el resto del mundo del béisbol”. Fanjul se impresionó con el trabajo de Weill, y el proyecto siguió creciendo. Cuando Weill volvió a casarse en 2004, su esposa, Gini, también se hizo cargo de algunas iniciativas. Los representantes de los Yankees han asistido a las ceremonias de exaltación 64 YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L I DESDE LA IZQUIERDA, EL DIRECTOR DE ASUNTOS INTERNACIONALES DE LA POLICÍA NACIONAL, EMBAJADOR ROBERTO VALENTÍN, EL VICEPRESIDENTE EJECUTIVO/DIRECTOR EJECUTIVO INTERNACIONAL DE LOS YANKEES, FÉLIX M. LÓPEZ, JR., Y WEILL @ YanksMagazine I @Yankees_Beisbol WILLIAMS PEÑA WEILL [IZQ.] Y EL PRESIDENTE DEL SALÓN NACIONAL DE LA FAMA Y MUSEO DE BÉISBOL, EN COOPERSTOWN, NUEVA YORK, JEFF IDELSON @ YanksMagazine I @Yankees_Beisbol I YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L 65 Un PUente entre Dos MUnDos UNA NOCHE EN CASA GRANDE desde su inauguración, en el año 2010. En 2011, George M. Steinbrenner fue condecorado póstumamente por su trabajo e influencia en la comunidad latina. Robinson Canó y Alex Rodríguez, para mencionar algunos nombres destacados, han hecho acto de presencia. “No puedo expresar con palabras cuán importantes han sido los Yankees, desde el punto de vista del valor espiritual, del valor organizativo y del éxito que hemos logrado”, comentó Weill. W eill se reunió con el presidente de la República Dominicana, Danilo Medina, en Santo Domingo. Weill había trabajado con el expresidente Leonel Fernández, que dejó su cargo en 2012. Le concedieron a Weill entre cinco y siete minutos para presentar al nuevo mandatario el estado del Salón de la Fama del Béisbol Latino. Una vez transcurridos los siete minutos, el presidente Medina hizo una pausa. “Roberto”, le dijo. “Tengo que confesarte algo”. “¿Qué, señor Presidente?” “Soy muy fanático del béisbol”, confesó. “¿Sabes cuál es mi equipo favorito?” “¿Cuál, señor Presidente?” El rostro de Weill se iluminó cuando el presidente Medina dijo que era fanático de los Yankees. “Miré lo que tengo aquí”, dijo Weill. Tomó el Anuario oficial de 2012 de los Yankees de Nueva York y buscó el artículo de ocho páginas dedicado al Salón de la Fama del Béisbol Latino. La reunión finalmente duró unos 20 minutos. El Presidente asimiló la información sobre los Yankees y tomó el teléfono. Llamó al Ministro de Turismo. Llamó al Ministro de Exportaciones e Inversiones. La directriz fue que ayudaran a Weill en todo lo que estuviera a su alcance. Weill se quedó sin su copia del anuario y prometió enviar más a varios ministros del gobierno de la República Dominicana y a presidentes de otros países de América Latina. “Este es un asunto de interés nacional”, declaró el Presidente dominicano. Se llamó a sesión en el Congreso y se aprobó una resolución. La Cámara de LAS SOCIAS GENERALES/VICEPRESIDENTAS DE LA JUNTA DE LOS YANKEES, JESSICA STEINBRENNER [IZQ.] Y JENNIFER STEINBRENNER SWINDAL 66 YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L I @ YanksMagazine I @Yankees_Beisbol Un PUente entre Dos MUnDos Representantes hizo eco de la declaración del presidente Medina, y todos los jugadores dominicanos elegidos al Salón de la Fama del Béisbol Latino también serán nombrados representantes honoríficos del país. A ltos de Chavón es un pequeño pueblo al este del centro turístico, erigido en lo alto del agitado río Chavón. La construcción comenzó en 1976 con la dirección del arquitecto dominicano José Antonio Caro, y el diseñador y cinematógrafo italiano Roberto Coppa. Las calles se pavimentaron con piedras cortadas a mano; y los marcos de las puertas y los detalles en hierro forjado también se hicieron a mano. El pueblo se inspiró en la arquitectura mediterránea del siglo XVI y, seis años más tarde, en 1982, Altos de 68 YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L I Chavón se inauguró con un concierto de Frank Sinatra en el anfiteatro para 5,000 personas. La noche del evento principal del Salón de la Fama del Béisbol Latino (la ceremonia de exaltación), los homenajeados anteriores, los premiados de esa ocasión y los simpatizantes clave de la comunidad desfilaron por la alfombra roja y descendieron por los grandes escalones de piedra del anfiteatro. Los Yankees llegaron muy bien representados: Jennifer Steinbrenner Swindal, socia general/vicepresidenta de la Junta, y su hijo Stephen Swindal, Jr.; Jessica Steinbrenner, socia general/vicepresidenta de la Junta, y su esposo Félix M. López, Jr., vicepresidente ejecutivo/director ejecutivo internacional; y demás miembros de la administración. @ YanksMagazine I @Yankees_Beisbol “Todos los años, me sorprende la calidad de esta majestuosa función”, dijo Jennifer Steinbrenner Swindal. “Los Yankees tienen una enorme instalación en la República Dominicana, y tenemos muchos jugadores de América Latina en el equipo. Es muy importante para los Yankees estar presentes mientras los atletas actuales y del pasado reciben un reconocimiento por sus caminos recorridos”. Comenzó a oírse un ritmo rápido desde el escenario, música latina ardiente para animar a la multitud. Bernie Williams se dirigió a su asiento, junto a otros grandes del béisbol. Cerca de Williams estaba Jeff Idelson, presidente del Salón Nacional de la Fama y Museo de Béisbol en Cooperstown, Nueva York, que asistía a la ceremonia por Un PUente entre Dos MUnDos primera vez. Weill había estado cortejando a Idelson desde que comenzó el proyecto. Weill se refiere a Cooperstown como el Vaticano del béisbol, mientras que el Salón de la Fama del Béisbol Latino es una catedral hecha a su imagen y semejanza. La presencia de Idelson este año llenó de energía a Weill. “Para un país en el que el béisbol es tan importante, contar con un salón de la fama es lo más lógico”, afirmó Idelson. “Roberto tiene una visión sólida y cuenta con el apoyo de diversas entidades, que debían hacerlo realidad”. Idelson habló sobre el respeto que Weill había demostrado por Cooperstown, pero Cooperstown hace más de 70 años que trabaja en sus operaciones. El Salón de la Fama del Béisbol Latino está dando sus primeros pasos, por lo que hay que tener paciencia. Al otro lado del pasillo, sentado frente al contingente de los Yankees, estaba Miguel Cabrera, el ganador de la Triple Corona de 2012. Los adolescentes que se encontraban en otra sección del anfiteatro lo llamaban, le gritaban e intentaban obtener su saludo. Cabrera saludó, y los adolescentes volvieron a gritar. Williams, que fue exaltado el año pasado, subió al escenario para presentar a uno de los homenajeados de este año, su compatriota Juan Igor González. Bajó del podio y se quedó de pie detrás de González mientras éste le hablaba a la multitud. Por momentos, Williams dejaba de observar el escenario iluminado y miraba a la audiencia en penumbras. ¿Podía distinguir algún rostro que lo miraba? Las luces de las cámaras fotográficas se disparaban. Durante la velada, volvían a la memoria de Williams aquellos niños que había visto el día anterior jugando al béisbol con palos y una pelota de tenis. “Cuando los vi, me vi a mí mismo y a mis compañeros de equipo”, dijo Williams. “El vínculo está en las ansias, la motivación, el deseo y la voluntad de hacer todo lo que sea necesario para tener éxito”. 70 YA N K E E S M A G A Z I N E E N E S PA Ñ O L I @ YanksMagazine I A LA MANERA YANKEE LAS RENOVACIONES DE LA ACADEMIA EN LA REPÚBLICA DOMINICANA RECIBEN GRANDES ELOGIOS One Yankee Way (A la manera Yankee) es tanto la dirección de la Academia de Béisbol de los Yankees en Boca Chica, República Dominicana, como la declaración de la misión. Aquí se les enseña a los prospectos, de entre 16 y 22 años, a jugar al béisbol de la manera correcta y se les educa para que tomen buenas decisiones fuera del terreno de juego. Para adaptarse a la creciente cantidad de jóvenes que se entrenan en las instalaciones cada año, la academia fue sometida a su primera renovación importante desde su apertura en 2005. Entre las mejoras pueden enumerarse un gran camerino para entrenadores, salas de conferencia y oficinas para el personal, así como una nueva sala de pesas. Se agregó una sección de dos pisos a las oficinas administrativas y, en febrero, se estaba construyendo un complejo de viviendas de dos pisos. Ejecutivos de los Yankees quedan impresionados. El vicepresidente ejecutivo/director ejecutivo internacional de los Yankees, Félix M. López, Jr., supervisó las renovaciones y en febrero llevó a su esposa Jessica Steinbrenner, socia general/vicepresidenta de la Junta de los Yankees, a su primera visita a las instalaciones. “La academia es hermosa”, dijo la Sra. Steinbrenner. “Me encanta. Creo que estamos haciendo un buen trabajo”. Habló muy bien de las habitaciones de los jugadores y, por supuesto, del perfecto estado de los terrenos de juego. “Es un largo recorrido para llegar y las condiciones no son las mejores, pero cuando llegas, es un tesoro”, comentó. “Es como cuando un niño visita Disney World por primera vez. No lo decepciona”. A su llegada, la Sra. Steinbrenner dijo que esperaba que las instalaciones fueran ligeramente inferior a las de desarrollo de jugadores en Tampa, Florida, pero superaron grandemente sus expectativas. Conoció a algunos entrenadores y empleados, y quedó impresionada con su dedicación para ayudar a los prospectos a aprender de la academia, así como de sus pares. “Se abarcan todos los aspectos y estoy muy orgullosa”, dijo. En cualquier momento del año, hay más de 100 prospectos viviendo en la academia, la mayoría de los cuales transita la inestable etapa de la adolescencia, y todos viven en habitacio- @Yankees_Beisbol nes cercanas. Sin embargo, cuando la Sra. Steinbrenner recorrió el complejo, quedó deslumbrada por el alto nivel de madurez de los muchachos. “Fue una grata sorpresa ver los dormitorios de los jóvenes tan ordenados”, comentó. Además de la Sra. Steinbrenner, John Kremer, director de personal de jugadores de los Yankees en Tampa y su esposa, Julie Kremer, directora del campamento temático de los Yankees, recorrieron las instalaciones a fines de febrero. Si bien el Sr. Kremer las había visitado unas cuatro veces en los últimos cinco meses, esta fue la primera visita de la Sra. Kremer. “Apenas entras, te das cuenta de que estás en un lugar de los Yankees”, dijo ella. “El personal estaba de punta en blanco y los terrenos de juego estaban en excelente estado. Realmente me impresionó”. “Los Yankees están en Nueva York y nuestro desarrollo de jugadores está en Tampa, por lo que pensé que la academia iba a ser grandiosa”, dijo. “Pero está claro que aunque estemos a miles de millas de distancia, la tradición y el orgullo también están presentes en la República Dominicana”. —K.D.