Prohibición de explotación minera e hidrocarburíferas en Parques Nacionales y Reservas Dr. Marcelo Fabián Capelluto* Las áreas protegidas surgieron en nuestro país para preservar y regular el uso sustentable de los distintos niveles de la diversidad biológica así como su medio ambiente que forman parte del patrimonio natural de la República Argentina y en algunos casos de toda la humanidad como es la Quebrada de Humahuaca en nuestra Provincia de Jujuy. En ellas se ha restringido actividades mineras e hidrocarburiferas. El sistema nacional de áreas protegidas está regulado por la ley nacional 22.351 estableciendo que “podrán declararse Parque Nacional, Monumento Natural o Reserva Nacional, las áreas del territorio de la República que por sus extraordinarias bellezas o riquezas en flora y fauna autóctona o en razón de un interés científico determinado, deban ser protegidas y conservadas para investigaciones científicas, educación y goce de las presentes y futuras generaciones, con ajuste a los requisitos de Seguridad Nacional. También existe legislación que han creado las reservas naturales estrictas mediante el decreto 2149/1990 y las reservas naturales silvestres y las reservas naturales educativas en el ámbito nacional, mediante el decreto 453/1994. La creación de nuevos Parques Nacionales, Monumentos Naturales o Reservas Nacionales, en territorio de una provincia, sólo podrá disponerse previa cesión de la misma a favor del Estado Nacional, del dominio y jurisdicción sobre el área respectiva. La ley 22.351 define “Parques Nacionales” a las áreas a conservar en su estado natural, que sean representativas de una región fitozoogeográfica y tengan gran atractivo en bellezas escénicas o interés científico, las que serán mantenidas sin otras alteraciones que las necesarias para asegurar su control, la atención del visitante y aquellas que correspondan a medidas de Defensa Nacional adoptadas para satisfacer necesidades de Seguridad Nacional. En ellos está prohibida toda explotación económica con excepción de la vinculada al turismo, que se ejercerá con sujeción a las reglamentaciones que dicte la autoridad de aplicación. El artículo quinto de la ley 22.351 fue modificado por la ley 26.389 promulgada el 24 de Junio de 2008 y reseña las prohibiciones especiales que rigen en los “Parques Nacionales”, entre las que se destacan a saber: a) La enajenación y arrendamiento de tierras del dominio estatal así como las concesiones de uso. b) La exploración y explotación mineras (en ella se incluyen a los hidrocarburos); c) La instalación de industrias; d) La explotación agropecuaria, forestal aprovechamiento de los recursos naturales; y cualquier tipo de e) La pesca comercial; f) La caza y cualquier otro tipo de acción sobre la fauna, salvo que fuere necesaria por razones de orden biológico, técnico o científico que aconsejen la captura o reducción de ejemplares de determinadas especies; g) La introducción, trasplante y propagación de fauna y flora exóticas; h) Los asentamientos humanos i) La introducción de animales domésticos j) Construir edificios o instalaciones, salvo los destinados a la autoridad de aplicación, de vigilancia o seguridad de la Nación y a vivienda propia en las tierras de dominio privado. k) Toda otra acción u omisión que pudiere originar alguna modificación del paisaje o del equilibrio biológico, salvo las derivadas de medidas de defensa esencialmente militares conducentes a la Seguridad Nacional l) La realización de sobrevuelos en aeronaves impulsadas a motor, exceptuados los de las rutas aéreas comerciales, militares y civiles que — dadas las características geográficas, climáticas o proximidad de aeropuertos en la zona— no cuenten con rutas alternativas, así como los destinados a operaciones de búsqueda y rescate, combate de siniestros, investigaciones científicas, relevamientos técnicos y todos aquellos que guarden relación con las tareas inherentes a su cuidado y administración. En relación a los Monumentos Naturales son las áreas, cosas, especies vivas de animales o plantas, de interés estético, valor histórico o científico, a los cuales se les acuerda protección absoluta. Serán inviolables, no pudiendo realizarse en ellos o respecto a ellos actividad alguna, con excepción de las inspecciones oficiales e investigaciones científicas permitidas por la autoridad de aplicación, y la necesaria para su cuidado y atención de los visitantes. En relación a Reservas Nacionales son aquellas áreas que interesan para la conservación de sistemas ecológicos, el mantenimiento de zonas protectoras del Parque Nacional contiguo, o la creación de zonas de conservación independientes, cuando la situación existente no requiera o admita el régimen de un Parque Nacional. La promoción y desarrollo de asentamientos humanos se hará en la medida que resulte compatible con los fines específicos y prioritarios enunciados. En ellas podrán realizarse actividades deportivas, comerciales e industriales, como también explotaciones agropecuarias y de canteras, quedando prohibida cualquier otra explotación minera (incluidas las de hidrocarburos), la pesca comercial (exceptuada pesca deportiva con permiso de la autoridad), la caza (salvo permiso excepcional) y la introducción de especies exóticas. En las reservas naturales silvestres y las reservas naturales educativas quedan expresamente prohibidas; el uso extractivo de sus recursos naturales, ya sea a través de la explotación agropecuaria, forestal, minera, la caza comercial, la pesca comercial o cualquier aprovechamiento de dichos recursos. Incluso expresamente prohíbe la exploración minera, incluida la prospección de hidrocarburos. El artículo 79 inciso “D” de la ley 17.319 dice que “son absolutamente nulos: d) Los permisos y concesiones que se superpongan a otros otorgados con anterioridad o a zonas vedadas a la actividad petrolera”. En el año 2003 en Durban, República de Sudáfrica en el Congreso Mundial de Parques se ratificó la recomendación del Congreso Mundial de la Naturaleza, realizado en Amman en el año 2000 en la cual se estableció la prohibición de las actividades mineras e hidrocarburiferas en áreas protegidas. Nuestra Corte Suprema de Justicia fallo el 09 de Marzo de 2004 en autos “Administración de Parques Nacionales c/Neuquén, Provincia del s/sumario” con el voto de la mayoría Petracchi, Maqueda, Zaffaroni, Belluscio, Boggiano estableciendo que tanto los terrenos comprendidos entre los límites establecidos por la ley 24.302 como el mismo río Limay, pertenecen al dominio público del Estado Nacional, y han sido asignados por la ley 22.351 a la Administración de Parques Nacionales, quedando prohibida cualquier explotación minera. A 106 Km. de San Salvador de Jujuy se encuentra el Parque Nacional Calilegua1 creado en el año 1979 por donación de las tierras de la empresa 1 El parque posee una gran belleza paisajística que puede apreciarse en todo su esplendor al transitar la ruta provincial Nº83 que atraviesa el mismo. A lo largo del camino pueden identificarse tres ambientes bien diferenciados: la selva pedemontana, la selva montana y el bosque montano. Cada uno de ellos presenta una vegetación característica y es posible avistar ciertas especies de aves y mamíferos en particular, lo cual convierte a este sitio como un lugar ideal para la observación de fauna, especialmente aves, ya que se han relevado 270 especies y se estima que podrían habitar el parque unas 230 más, lo cual haría de Calilegua el hogar del 50% de las especies de aves que habitan nuestro país. En cuanto a los mamíferos, debe destacarse la presencia del mayor predador de América, el Yaguareté, también conocido como “el tigre”. Otros felinos como el yaguarundí, el ocelote, gato del pajonal y el puma habitan estas selvas. El tapir es el mayor de los mamíferos de las yungas y es posible observar sus huellas impresas en el lodo de las orillas de ríos y lagunas. La observación de huellas es una forma de comprobar la presencia de la fauna del parque, siendo recomendable la identificación de las mismas con guías del parque. http://www.calilegua.com/ LEDESMA propiedad de la familia Blaquier, para proteger 76.306 hectáreas dedicadas a la conservación de las selvas tropicales de montaña (yungas), uno de los ambientes con mayor biodiversidad de la República Argentina. En este territorio hay un fuerte componente de comunidades campesinas y aborígenes que mantienen una estrecha relación con los recursos naturales. "Desde la creación del Parque hasta el presente, diversas autoridades han tratado, sin éxito, de controlar y regular la actividad hidrocarburífera. La zona ya contaba con una década de explotación hidrocarburífera cuando se la declaró área protegida. YPF era la operadora del lugar conocido como yacimiento Caimancito. En 1992 éste fue adjudicado por 25 años, es decir hasta 2017 (la adjudicataria puede pedir una prórroga), a la UTE conformada por Petróleo Sudamericano y Necon -Grupo Pérez Companc-, pero en 2008 Pluspetrol adquirió los derechos sobre el bloque. En octubre de 2011 se produjo un nuevo cambio de operador: la empresa china JHP International Petroleum Engineering compró la concesión. Con la sanción de la ley corta Nº 26.197 en 2006, al concretarse la transferencia de los yacimientos de la Nación a la provincia, no se contempló esta situación particular: un área protegida de jurisdicción nacional, cuyo subsuelo quedaba a disposición de Jujuy para su concesión y explotación. Si bien el marco regulatorio vigente, tanto de Parques Nacionales como de dicha industria, prohíbe la actividad en un área bajo régimen de conservación, la preexistencia del yacimiento impone su peso como hecho consumado. Incluso si se esgrimiera la idea de "derechos adquiridos" por parte de las operadoras, existe jurisprudencia en el país que resguarda las áreas protegidas, como es el caso de la Reserva Provincial Llancanelo, en Mendoza2". 3 2 El artículo 79 de la Ley de Hidrocarburos Nº 17.319, declara nulas aquellas concesiones que se superpongan con zonas vedadas a actividad petrolera. La Ley de Parques Nacionales Nº 22.351 establece en su artículo 5, inc. b, la prohibición de exploraciones y explotaciones mineras dentro de su jurisdicción. Asimismo en materia de jurisprudencia, el fallo de la Suprema Corte de Del proyecto de Resolución de HCDN 3687-D-2014 presentado por los Diputados Nacionales ZABALZA, JUAN CARLOS; CUCCOVILLO, RICARDO OSCAR; TROIANO, GABRIELA ALEJANDRA y FIAD, MARIO RAYMUNDO se desprende que “atendiendo las demandas de los trabajadores del Parque Nacional Calilegua, la APN creó en 2008 un equipo específico para la fiscalización de la actividad hidrocarburífera, compuesto por dos guardaparques y un biólogo especializado en impacto ambiental. De los estudios realizados por el equipo de fiscalización determinaron que por cada 100 litros de agua vertida, llegan al arroyo Yuto 10 kilogramos de aguas de formación a elevadas temperaturas. Al respecto se alerta que el "efecto ecotóxico es muy grande sobre la biota acuática y terrestre del Parque por la acción misma de la sal y de metales pesados que contiene, además de los gases tóxicos y las elevadas temperaturas con la que surge. Es notable, aguas arriba, en el cauce del arroyo Yuto, se encuentra en mucho mejor estado a la fauna íctica y de insectos bentónicos, que aguas abajo. Se insiste que es una contaminación crónica". En ese sentido el biólogo destacó que "al igual que en el humano [en otras especies] hay una necesidad y acostumbramiento de ingerir sal, y se ve fauna que va a lugares contaminados a lamer barro y agua salada. Esto tiene efectos cancerígenos, abortivos, que a la larga van a afectarlos seriamente. En síntesis, hablan de altos tenores de sal y metales pesados afectando los cauces donde habría una incidencia hacia otras provincias" Justicia de Mendoza ratifica la ilegalidad de la actividad en áreas protegidas. La explotación pretendida por YPF sobre la Reserva Provincial Llancanelo no fue posible debido a la primacía jurídica de la conservación en estas áreas, frente a derechos adquiridos por parte de las operadoras y la emisión de permisos por parte del Ejecutivo provincial. Al igual que el Parque Nacional Calilegua, Llancanelo fue creada con posterioridad al área hidrocarburífera. Ver más información sobre este caso en "Llancanelo: Un plato exquisito en la mesa de YPF". Disponible en: http://wp.me/poMC6-1Yz 3 proyecto de Resolución de HCDN 3687-D-2014 “Un fallo de la Cámara Federal de Apelaciones de Salta puso un freno o por lo menos retrasó las aspiraciones del gobierno jujeño de realizar explotaciones petroleras en el Parque Nacional Calilegua en sociedad con una empresa china. Quedó en claro que se trata de un área protegida: el desarrollo de cualquier explotación minera y de hidrocarburos está prohibido”4. La justicia federal jujeña, a través del Juez Mariano Wenceslao Cardozo, había rechazado de plano la acción de amparo de los legisladores, por lo que éstos apelaron a la Cámara Federal de Salta que resolvió finalmente que la Justicia Federal de Jujuy debe investigar el tema dada la trascendencia del asunto. En la resolución emitida en la causa, los camaristas federales, revocaron el rechazo de la acción de amparo y ordenaron la devolución del expediente al Juzgado Federal de Jujuy para que le dé trámite a la demanda. En la resolución los camaristas señalaron que “la desestimación liminar resuelta por el juez de primera instancia debe ser revocada, pues la naturaleza ambiental de la cuestión y, por ende, su transcendencia, tornan conveniente escuchar a todas las partes interesadas y tomar conocimiento de los argumentos y pruebas que pudiesen contribuir al esclarecimiento de la contaminación denunciada”. 4 Ballatore Laura. “Denuncian una explotación en un Parque Nacional jujeño. Freno a una empresa China por sacar petróleo de la selva” Diario Clarín 30/10/2014 página 14. A fines de 2013, los legisladores promovieron una acción de amparo en contra de los gobiernos nacional y provincial a fin de hacer cesar de inmediato la explotación hidrocarburífera en el Parque Nacional Calilegua, al señalar que esa actividad era ilegal por tratarse de un área protegida. En esa acción, solicitaron que se disponga la remediación de los pasivos ambientales existentes, el cierre y remediación de los pozos petroleros existentes en el mismo parque y en particular, el cierre, con carácter de urgente, del Pozo Caimancito E-3, pasivo ambiental que contamina los arroyos Yuto y Sauzalito. Al mismo tiempo expresaron su temor en el sentido de que los vecinos de Caimancito y áreas cercanas pudieran estar consumiendo agua contaminada. Proponen la ejecución de un programa progresivo y planificado de cese de las actividades petroleras, el correcto sellado de los pozos y recomposición de los demás pasivos ambientales. El profesor Dr. Marcelo López Alfonsín sostiene que “la creación de áreas protegidas es imprescindible para la preservación de la naturaleza, constituyendo por ello el elemento principal de todas las estrategias de protección de la biodiversidad”5 A partir de la reforma constitucional de 1994, se incorporó en nuestra carta magna nacional, en el capitulo segundo llamado “Nuevos Derechos y Garantías” en el artículo 41, el siguiente párrafo: “El daño ambiental generará prioritariamente la obligación de recomponer, según lo establezca la ley”. Mediante la incorporación del derecho de daños al Ambiente en la Constitución Nacional, se lo jerarquizó por encima de otros tipos de daños. El daño ambiental es el único derecho de daños con rango constitucional. La Ley General del Ambiente en el Artículo 27 define daño ambiental como “toda alteración relevante que modifique negativamente el Ambiente, sus recursos, el equilibrio de los ecosistemas, o los bienes o valores colectivos”. El artículo 28 de la ley 25.675 nos dice “el que cause el daño ambiental será objetivamente responsable de su restablecimiento al estado anterior a su producción”. Tal como se lo solicita en la acción de amparo presentada, el Gobierno de Jujuy debería arbitrar los medios y gestiones necesarias para lograr el inmediato cese de las fuentes de contaminación y la correspondiente reversión y remediación de los pasivos ambientales ya existentes. 5 López Alfonsín Marcelo Alberto. “Sistema Nacional de Áreas Protegidas” Revista Gerencia Ambiental páginas 30/41 número 190 septiembre 2012 *Abogado (UBA). Especialista en Derecho de los Recursos Naturales (UBA). Docente universitario en Facultades de Derecho públicas y privadas en la materia “Derecho de los Recursos Naturales y Protección del Medio Ambiente”. Dicto clases en el Consejo de la Magistratura de la CABA.