Estimados Papás: Observar a sus hijos y las conductas comunicativas que presentan es primordial para sospechar o reconocer alguna dificultad en el adecuado desarrollo comunicativolingüístico. Es por ello, que sugerimos estar atento a las siguientes conductas. Si su hijo o hija tiene entre 12 y 24 meses y… • Rara vez mira a quien le habla, parece estar atento/a a cualquier cosa menos a quien le llama o habla. • Prefiere jugar solo/a antes de jugar con un adulto u otros niños de su edad. • Juega en silencio, sin realizar vocalizaciones mientras juega. • No es capaz de indicar con su mano objetos para pedir o mostrar algo. • Parece no comprender lo que se le dice o no logra reconocer objetos familiares (como su ropa, partes del cuerpo, animales conocidos, etc.). • Parece no interesarse por lo que hace el otro, no imita gestos ni presta atención a su nombre. • No se comunica mediante palabras o sílabas repetidas (como “mamá”, “tata”, tato”, etc.) sino que tiende a refunfuñar y llorar para pedir las cosas. Si su hijo o hija tiene 2 años o más y… • • • • • • No Habla. Sólo le entienden las personas que viven con él/ella. Conoce y usa muy pocas palabras. Acorta las palabras frecuentemente (Ej. “aa” por “agua”). Dice solo los finales de las palabras (Ej. “ato” por “zapato”). Parece no comprender todo lo que le dicen. Si respondió SÍ a alguno de estos indicadores, su hijo o hija puede presentar un retraso de lenguaje, por lo que es necesario que sea evaluado/a por un Fonoaudiólogo/a lo más pronto posible. Área de Fonoaudiología