DERECHO LOCAL EDE 2012/240438 ¿Debe ser un funcionario el instructor en un procedimiento sancionador? Fecha de la consulta: 22/11/2012 Planteamiento El instructor en un procedimiento sancionador, ¿debe ser un funcionario, o puede ser un Concejal de la Corporación diferente del Alcalde? Respuesta El art. 9 de la Ley 7/2007, de 12 de abril, por la que se aprueba el Estatuto Básico del Empleado Público -EBEP-, establece que "en todo caso, el ejercicio de las funciones que impliquen la participación directa o indirecta en el ejercicio de las potestades públicas o en la salvaguardia de los intereses generales del Estado y de las Administraciones Públicas corresponden exclusivamente a los funcionarios públicos, en los términos que en la Ley de desarrollo de cada Administración Pública se establezca". La Disp. Adic. 2ª EBEP en su apartado 1.1 añade que en las Entidades Locales"son funciones públicas, cuyo cumplimiento queda reservado exclusivamente a funcionarios, las que impliquen ejercicio de autoridad, las de fe pública y asesoramiento legal preceptivo, las de control y fiscalización interna de la gestión económico-financiera y presupuestaria, las de contabilidad y tesorería". No puede ponerse en duda que las funciones que corresponden al instructor de un expediente sancionador suponen una participación directa en el ejercicio de las potestades públicas, ya que la potestad sancionadora es una de las típicas atribuidas a las Administraciones Públicas. Además los principios de imparcialidad y objetividad que han de presidir todo procedimiento administrativo aconsejan que tales funciones se desempeñen por quien ostente la condición de funcionario. En este sentido, el TSJ Canarias en Sentencia de 1 de diciembre de 2011 entiende que entre las garantías de ineludible cumplimiento se encuentra la idoneidad del instructor del expediente, no sólo por razones teóricas en torno a la aplicación de las garantías contenidas en el art. 6 del Convenio de Roma de 1950, sino simplemente por razones prácticas de formación del instructor para la correcta aplicación, tanto de los principios punitivos aplicables al procedimiento sancionador como, en general, del resto del Ordenamiento Jurídico, cuya incidencia en la resolución final del procedimiento es palmaria. En consultas anteriores, como las tituladas "¿Quién puede ser órgano instructor en un expediente administrativo?" y "Nombramiento como instructor de expedientes sancionadores", nos hemos referido a la necesidad de separar las fases de instrucción y sanción dentro de un mismo procedimiento, y a que el instructor en la fase de instrucción sea un funcionario. En ese sentido, ya concluimos en su momento que el Juzgado de lo ContenciosoAdministrativo nº 12 de Sevilla, en Sentencia de 17 de enero de 2011, afirmaba rotundamente que las tareas propias del ejercicio de la potestad sancionadora, que incluye no solo el resolver, sino también el de incoar expediente administrativo, dar audiencia, admitir y practicar pruebas, son funciones administrativas que han de reservarse a funcionarios públicos al ser preciso garantías de imparcialidad, objetividad e independencia.