6 DE LA DÉCADA PERDIDA JAPONESA 1990 - 2001, A LA ESPAÑOLA 2008 - 2018 CRISIS ECONÓMICA ENERO DE 2010 Serie Crisis económica Número especial Crisis Inmobiliaria. “Rico es quien no paga lo que debe” Tito Maccio Plauto Comediógrafo satírico latino. (Sársina, Umbría. 254 a. de C. - Roma.184 a. de C.) ÍNDICE LA DÉCADA PERDIDA JAPONESA. 1990 - 2001 3 LA CRISIS INMOBILIARIA Y FINANCIERA ESPAÑOLA 11 COYUNTURA ECONÓMICA MUNDIAL. 2010: GLOBALIZACIÓN SÍ, PERO CON TRES VELOCIDADES 20 SITUACIÓN DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA Y PREVISIONES PARA 2010 23 MERCADOS Y BOLSAS DE VALORES 24 LA DÉCADA PERDIDA JAPONESA 1990 - 2001 D esde la finalización de la Segunda Guerra Mundial hasta 1990 Japón mantuvo un fuerte ritmo de crecimiento económico. Los últimos 50 años de Japón han estado marcados por dos booms económicos seguidos: el periodo Izanagi1 a finales de 2 los años 70 y el Heisei hasta finales de los años 80, a los que siguió posteriormente una larga crisis durante los años 90. Durante el primer periodo el Izanagi, las exportaciones fueron la base para crecer la economía. En cambio, el boom Heisei se caracterizó además de la continuación de la actividad exportadora, por una focalización de ésta en productos electrónicos y vehículos, y una característica especial cual fue un espectacular incremento del consumo interno consecuencia de los buenos salarios de los japoneses que entraron en una vorágine consumista durante la segunda parte de los años 80, producto de su elevada renta per cápita y la fuerte expansión crediticia a Pymes y a economías domésticas que se produjo en estos años. Los años 70 y 80 fueron además años de liberalización del sector industrial para favorecer la internalización de las empresas y la reducción del sector público buscando la integración en una economía global. El modelo económico adoptado por Japón en las tres décadas 60, 70 y 80 fue un modelo basado en la exportación lo suficientemente diversificado para que no le afectara la crisis petrolífera de los 70. Un modelo que estuvo favorecido por las altas tasas de crecimiento del PIB desde la finalización de la 2ª Guerra Mundial. No ocurrió lo mismo con el sector primario y el de servicios que permanecieron fuertemente protegidos de la competencia exterior y, en consecuencia, se transformaron en muy ineficientes. En el caso de las entidades financieras no se les permitió a las extranjeras tener un peso superior al 10% hasta el año 2002. Con liberalización del sector industrial se generó el primer gran problema estructural de la economía japonesa. Un sector industrial potente, competitivo y desregulado, coexistiendo con unos sectores primario y terciario fuertemente regulados e ineficientes, propio de regímenes totalitarios, que fueron un freno al desarrollo del país. 1 El boom económico Izanagi. Izanagi, según la mitología japonesa, fue el Dios que creó el archipiélago nipón. Corresponde al periodo comprendido entre los Juegos Olímpicos de Tokio de 1964 y la exposición universal japonesa de Osaka de 1970.En estos años el PIB casi se duplicó, con una tasa media de crecimiento del 11,5%, lo que llevó a que Japón se convirtiera el en la 2ª potencia económica del mundo. 2 El periodo de expansión Heisei abarca el espacio temporal desde 1986 a 1991, dentro de la era Heisei que abarca el periodo entre 1972 con la muerte del emperador Hiro-Hito y la coronación del emperador Akihito en 1989.Una de las claves de este boom fue la especialización de la producción en aparatos electrónicos y coches y el crecimiento del crédito a Pymes y particulares. En 1990 la economía japonesa estaba embalada, tenía el PIB per cápita y mas alto del mundo. En Tokio se respiraba la riqueza, se encontraba por encima de ciudades como Paris y New York. A principios de los 80 una cerveza costaba 500 yenes en el centro de Tokio lo mismo que hoy en día pero 20 años antes. Un piso en Tokio en 1990 costaba varios millones de euros. La década perdida japonesa. 1990 - 2001 3 Para entender las peculiaridades del modelo económico japonés desde la posguerra hay que conocer que están ancladas en un universo de valores muy distintos de las sociedades occidentales: cooperación, respeto a la jerarquía, paternalismo, nacionalismo, consenso en la toma de decisiones, valoración de la edad como principio de autoridad, educación como factor diferencial, un perfil singular que adoptó Japón de la herencia religiosa china: confucionismo, taoísmo y budismo (que se concretaron en la lealtad, el servicio incondicional al señor como principio normativo prioritario). Un patrón ético sustancialmente distinto del los valores de competencia e individualismo que están en la base del capitalismo occidental. Estos valores culturales tan diferentes de la sociedad japonesa, significaron en una determinada época una ventaja competitiva de la economía japonesa sobre los de Europa y Estados Unidos4. Por otra parte, el área geográfica donde Japón está ubicada de fuerte crecimiento demográfico y con un input de la mano de obra con un costo muy inferior al de las economías occidentales, lo cual, junto con la proverbial disciplina y laboriosidad oriental, se aprovechó a través de las inversiones financieras japonesas en las economías del sudeste asiático, lo que produjo un círculo virtuoso3 ya que el aprovechamiento de esta mano de obra abundante y barata para conseguir unos inputs productivos a precios muy competitivos que través del reconocimiento mundial del liderazgo en su tecnología de consumo, le permitieron mantener unos precios elevados de sus productos acabados con relación a los citados inputs, lo que produjo una importante acumulación de capital por los importantes márgenes comerciales. Ello junto con la diversificación de sus productos y factores culturales como la elevada tasa de ahorro, permitió financiar el crecimiento económico a través de su transformación en inversión productiva. En cambio, en EE.UU. potencia vencedora al la II Guerra Mundial, los shocks petrolíferos de los setenta provocaron unas tasas de bajo crecimiento durante esa época que duró hasta los años 90, en que comenzó la crisis japonesa4. En los años setenta y ochenta las empresas japoneses con tasas de crecimiento superiores al 5 por ciento consiguieron posiciones de liderazgo mundial y una política sostenida de inversiones directas tanto en países emergentes del sudeste asiático como en economías occidentales de Europa y EE.UU. Este éxito empresarial convirtió a la economía japonesa en el paradigma de la excelencia empresarial y que se cuestionara la existencia de un modelo de crecimiento y de gestión empresarial distinto del japonés. Explicación de la génesis de la burbuja inmobiliaria y bursátil japonesa A finales de los años 80 el enorme potencial de las multinacionales industriales japonesas les posibilitó financiarse en los mercados internacionales de capital. Como consecuencia, los bancos comerciales japoneses perdieron una parte importante de su clientela que sustituyeron por pequeñas y medianas empresas, así como economías domésticas. Los bajos tipos de interés de esta década en Japón en torno al 2,5%, la elevada liquidez por una política económica expansiva y la importante renta per cápita japonesa, provocaron una 3 La década perdida de la economia japonesa. Boletín 2698. ICE. Subdirección General de Estudios del Sector Exterior. 2 de Septiembre de 2001 4 Claudio Aranzadi, Maurici Lucena Betriu. Dos experiencias económicas Japón y Estados Unidos. Economiaz Nº 52.Primer cuatrimestre de 2003. 4 La década perdida japonesa. 1990 - 2001 masiva compra de activos inmobiliarios y de acciones de la bolsa japonesa, disparándose los precios de estos activos de forma exponencial. A principios de los 90 el Banco de Japón para corregir las tensiones inflacionistas subió los tipos de interés tres puntos desde el 2,5% al 5.5%. La consecuencia de la brusca subida de tipos de interés fue el estallido de las burbujas bursátil e inmobiliaria al comienzo de la de la década de los 90. La bolsa nipona cayó un 60% entre 1990 y 1992. El precio de las viviendas y activos inmobiliarios comenzó a caer en 1991 y continuó haciéndolo durante nueve años sucesivos, hasta reducirse a la mitad a finales de la década de los 90. Solo cabo de diecisiete años se ha recuperado el nivel de precios del año 1991. En la llamada década perdida japonesa5 el promedio anual de crecimiento del PIB fue del entorno del 1,5%, un crecimiento débil que se consiguió gracias a unas políticas monetarias expansivas y unas inversiones del Estado en obras públicas financiadas con endeudamiento. Estas inversiones públicas no fueron acompañadas por las empresas privadas y las economías domésticas al estar muy endeudadas, pero evitaron el colapso interno del país. El consumo (promedio) en cambio fue del 1%, un 0´5% inferior al crecimiento. Como contrapartida a la crisis japonesa, en 1991, con la conclusión de la crisis del Golfo, la economía estadounidense que llevaba 17 años de bajo crecimiento inició una etapa de expansión sin precedentes, caracterizada por una marcada aceleración de la productividad y la inversión de la mano de las TIC (teconologías de la información y la comunicación). A principios de los 2000, paradojas del destino, el modelo norteamericano se consideraba el excelente y el japonés caduco, todo lo contrario que diez años antes. La crisis bancaria japonesa Las consecuencias del estallido de la burbuja inmobiliaria y bursátil sobre el sistema bancario japonés no tardaron en notarse, ya que éste tenían fuertes inversiones en préstamos para la adquisición de acciones e inmuebles, por lo que redujeron drásticamente sus créditos ante los problemas de solvencia que vieron sobre las inversiones crediticias realizadas. Esta restricción de crédito tuvo dos consecuencias: por un lado limitó las posibilidades de inversión productiva que pasó de un 8.8 % del P.I.B en 1990 a -1.4% en 2002 y, por otro lado, produjo un efecto negativo sobre el consumo de las economías domésticas. El resultado final fue en un aumento de la tasa de desempleo desde 2.1% sobre la población activa en 1990 al 5.5% en 2003 y una fragilidad del sistema 5 Christian Caryl. Columnista y corresponsal de Newsweek. La década perdida de Japón. La economía japonesa se derumbó en 1990 por una gran burbuja de precios de activos que alcanzó su cenit en 1989. Cuando estalló en 1990 acabó con miles de millones de dólares de riqueza acumulada y los índices de crecimiento del país se volvieron anémicos, la productividad en la década perdida descendió peor no de manera espectacular, lo que si se perdió fue el sentimiento de orgullo y confianza desmedida después de décadas de frenético crecimiento. Sin embargo Japón continúa siendo la 2ª economía mundial. Las compañías japonesas de automóviles totalmente desreguladas e independientes del poder político siguen entre las mas rentables del mundo. Gracias a su estricto control de la producción se han adaptado a la crisis fabricando menos coches, pero no por ello han dejado de investigar en coches mas ecológicos, esa inversión les va a generar una enorme ventaja competitiva en las próximas generaciones de vehículos híbridos. Los fabricantes japoneses de aparatos electrónicos y los de maquinaria se encuentran también entre los mas competitivos pese al aumento de los rivales del sureste asiático. El ejecutivo japonés está seriamente preocupado por el envejecimiento de su población que bajará de 127 millones a 100 en 2050 con un 40% en esa fecha mayores de 65 años. Una solución es la inmigración pero los factores culturales de resistencia a entrada de trabajadores extranjero lo hacen difícil. La década perdida japonesa. 1990 - 2001 5 financiero japonés que quedó seriamente dañado. La caída del valor de los activos bursátiles e inmobiliarios provocó una pérdida del valor de los “colaterales” (valores mobiliarios e inmuebles), que servían de garantía a los préstamos del sector bancario. En la década de los 90 el PIB per cápita de Japón se redujo un 10% con relación a Europa y en un porcentaje superior EE.UU. (fuente FMI 2002). Fuente: La crisis española y la década perdida cara a cara Laura Peralta / Susana Alcelay A partir de 1993 comenzó aplicarse una política monetaria expansiva acompañada de una depreciación del yen para facilitar las exportaciones que impulsó la actividad económica y una bajada de los tipos de interés que llegaron casi a cero y que mantenidos en años sucesivos produjeron la llamada trampa de liquidez6. No obstante, este mayor dinamismo no produjo un aumento de la demanda de crédito de las empresas y particulares ya que éstas se encontraban muy endeudadas, tal como ocurre en el caso español actual. Por otra parte, los bancos comerciales japoneses tuvieron que aceptar una mayor prima de riesgo por los activos que financiaban y vieron, en consecuencia, crecer su coste de financiación, esto previsiblemente también ocurrirá seguramente con las entidades financieras españolas a partir del 2º semestre de 2010. Al estallido de las burbujas inmobiliaria y bursátil de 1990, se añadió en 1997 una ralentización de la actividad económica como resultado de la aparición de la crisis asiática y del aumento de los impuestos indirectos en Japón para contener el déficit público, lo que provocó un mayor deterioro de la solvencia y rentabilidad de los bancos japoneses que tenían fuertes inversiones en el sudeste asiático, dando lugar por primer vez en la década, a la quiebra de algunos grandes bancos japoneses, como el Banco Industrial de Japón y el Banco Hokkaido. 6 La trampa de liquidez. Japón cayó en la llamada trampa de liquidez, a partir del año 1993. Tipos de interés excesivamente bajos, próximos a cero, que hacen que los agentes prefieren mantener su dinero líquido en espera de que los tipos suban o se dediquen a comprar deuda extranjera, como bonos estadounidenses con una rentabilidad de hasta cuatro o cinco puntos superior. 6 La década perdida japonesa. 1990 - 2001 Como conclusión. Las debilidades del sistema financiero japonés como resultado de una asunción excesiva de riesgo en la operaciones crediticias, tanto en empresas como con particulares, debido a una inadecuada supervisión de las autoridad reguladora y por el oscurantismo y la falta de información de los conglomerados financieros e industriales denominados Keiretsu7, no pudo ser evaluado por las autoridades y organismos competentes. Este hecho, junto con los problemas estructurales por las desigualdades entre la regulación de los sectores agrario, industrial y de servicios comentada, por los costes de la ineficiencia del agrario y el de servicios, tuvo una incidencia negativa fundamental en el modelo de crecimiento japonés de principios de los años 90, consecuencia de un problema estructural preexistente que, al producirse una ralentización económica mundial en el periodo 1990-1995, generó una época de una larga crisis, estancamiento y deflación de la economía nipona denominada “la década perdida”, que las autoridades japoneses combatieron con multimillonarias inversiones en infraestructuras y un volumen ingente de de deuda pública, que superó el 120% del PIB del país en solo una década. En 1998 -ocho años después de la explosión de la burbuja inmobiliaria-, el gobierno japonés se decidió a aplicar un plan de saneamiento del sector bancario con una duración de cuatro años. Dicho Plan contemplaba8: Ley para la Reconstrucción Financiera de octubre de 2008. Conjunto de normas para regular el sector y facilitar la intervención del Estado en entidades financieras con dificultades, con el reconocimiento que la banca japonesa se encontraba asfixiada por falta de liquidez. Un Plan similar al FROB español de Julio de 2009, aunque en el caso japonés mas realista y ambicioso. Nacionalización temporal de entidades para evitar las quiebras bancarias, con la posibilidad de la creación de bancos puente de capital público Ayudas públicas a los bancos considerados viables de hasta 520.000 millones de dólares equivalente al 10% del PIB anual. 7 Los Keiretsu son uno de los tres modelos de la sociedad mas utilizados por Japón. Cada grupo, por lo general, tiene en su núcleo: Un banco general y otras corporaciones financieras (bancos fiduciarios, bancos de inversiones, compañías de seguros) que actúan como inversores de las compañías del grupo. Una compañía comercial (sogo sosha) encargada de la mercadotecnia y el comercio nacional e internacional de las compañías del grupo. Una compañía industrial importante, que agrupa a otras tantas industrias. Las empresas agrupadas bajo el paraguas de los keiretsu participan del capital social de unas y otras, participaciones cruzadas que, en general, no superan el 5% del patrimonio social. Algunos ejemplos se Keiretsu son los casos de Mitsubishi, Mitsui, Toyota y Sumimoto. 8 Japón 2010 luces y sombras. Hasta los años 90 las políticas proteccionistas del mercado interior que habían funcionado muy bien prohibiendo la entrada de capitales extranjeros, dejaron de hacerlo. Pero como siempre ocurre, los mercados muy regulados se transforman en ineficientes, hasta el punto en que una manzana de la época costaba en Tokio en estos años 250 yenes. La falta de competencia en el sector de servicios y concretamente en el financiero fue un verdadero talón de Aquiles para la economía japonesa, aspecto que comenzó a cambiar a principios de los años 2000. Una vez saneada la banca durante los años siguientes a 20002 el P.I.B. comenzó a crecer a ritmos de un 2-3%. En la actualidad, la economía japonesa tiene luces y sombras. En Tokio hay 52 empresas de la lista Forbes por delante de París con 27 y New York con 24, hay mas empresas tecnológicas que en el Silicon Valley, pero los sueldos desde 1997 han bajado un 10% la población está envejeciendo a gran velocidad y la deuda del país es de 180% del el P.I.B. Japón continua siendo uno de los principales países acreedores, tiene casi tanta deuda estadounidense como China, una gran ventaja sobre EE.UU. El ejecutivo japonés está seriamente preocupado por el envejecimiento de su población que bajará de 127 millones a 100 en 2050 con un 40% en esa fecha mayores de 65 años. Una solución es la inmigración pero los factores culturales de resistencia a entrada de trabajadores extranjeros lo hacen difícil. Algunos economistas y sociólogos sostienen según Angeles Pelegrín. Universidad de Barcelona que la crisis de los 90 de Japón es por una falta de líder político capaz de identificar los problemas (los principales), explicar la situación a los ciudadanos y diseñar e implementar soluciones a largo plazo. La incertidumbre y ansiedad de la población se explican por esa falta de liderazgo. Esa ausencia de liderazgo ha culminado con la reciente pérdida de las elecciones por el partido liberal, ante la necesidad de un cambio La década perdida japonesa. 1990 - 2001 7 Fusiones entre entidades buscando reducir el exceso de capacidad, incrementar la rentabilidad y potenciar el proceso de capitalización de los bancos en crisis. Política fiscal muy expansiva para combatir la deflación mediante un aumento de la inversión pública en infraestructuras y transportes para impulsar la actividad del sector privado. La financiación de estas medidas provocó un abultado déficit público y un incremento de la deuda pública que de ser prácticamente inexistente en diez años pasó al 120% del PIB. Estas medidas solo funcionaron parcialmente porque los bancos tenían todavía préstamos incobrables en su cartera y solamente a partir del plan del primer ministro japonés Junichiro Koizumi en 2001 seguido del Plan Takenaka en 2002, aparecieron en 2003 los primeros síntomas de recuperación, es decir, casi trece años después. Estas medidas de carácter estructural fueron: Control de los desequilibrios del sector público con una limitación y reducción de las emisiones de deuda pública. Saneamiento de la entidades financieras a través de un Fondo Público Privatización de determinados servicios públicos como postales y de ahorro. Reforzamiento de la competencia a través de la desregulación de la economía japonesa. Elevación del Ratio de solvencia que en 2002 apenas llegaba al 5%, la mitad de lo que consideraba financieramente saludable el Bank for Internacional Settlement. Reducción de la deuda del sector público japonés mediante el límite de la emisiones de deuda pública japonesa. Incremento de privatizaciones. Recorte del gasto público en 30.000 millones de dólares. ACTIVIDAD ECONÓMICA Y DESEMPLEO EN JAPÓN 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 PIB (1) 4,8 4,0 0,9 0,4 1,0 1,6 3,5 1,8 -1,1 0,8 1,7 1,0 1,1 Inversión (1) 8,8 3,0 -2,5 -3,1 -1,4 0,3 6,8 1,0 -4,0 -0,9 1,1 1,1 -1,4 Output gap (2) 2,2 2,8 1,0 -0,7 -1,4 -1,8 0,0 0,4 -2,3 -3,1 -3,0 -3,4 -3,8 Tasa de desempleo (3) 2,1 2,1 2,2 2,5 2,9 3,1 3,4 3,4 4,1 4,7 4,7 4,9 4,8 (p) Previsiones (1) Variación porcentual (2) Desviación del PIB efectivo respecto al PIB potencial en porcentaje del PIB potencial (3)Porcentaje de la población activa Fuente: OCDE, FMI 8 La década perdida japonesa. 1990 - 2001 Explicación de la génesis de la crisis japonesa La vía de propagación de la crisis japonesa fue la falta de confianza de los agentes económicos privados en la recuperación rápida de la actividad, provocando reducciones en el consumo y de la inversión e incrementando el ahorro, como ha ocurrido en el caso español, hasta el momento. Esta desconfianza fue consecuencia de la incertidumbre que generaron tres factores: 1 Fuertes desequilibrios sectoriales: una industria desregulada, competitiva y liberalizada y unos sectores primario y terciario (construcción, distribución comercial, calzado, comercio exterior, muy intervenido que ha generado una importante intervención e incluso corrupción política y, en definitiva, ineficiencias que mermaron la competitividad del sector industrial. 2 Las características del sistema financiero japonés, con la existencia de grandes conglomerados financieroindustriales Kieretsu, en los que participan empresas y bancos provocando una imbricación entre el sector financiero y el industrial, hizo que éstos otorgaran préstamos respaldados por acciones de las compañías de su propio conglomerado, con asunción de grandes riesgos, acciones cuyos precios dependían de la marcha del mercado de valores. Cuando éste cayó en 1990, la falta de transparencia del sistema de regulación sobre las inversiones de los bancos y un sistema de supervisión muy rudimentario, impidieron conocer la solvencia de los bancos, generaron desconfianza entera en el sistema financiero japonés y una falta de provisiones sobre los créditos concedidos. 3 Crecimiento a toda costa. La política de las compañías japonesas desde los años 60 de la época Izanagi, estaba encaminada a ganar cuota de mercado a toda costa, sin un sistema de información contable riguroso. Se primaba el crecimiento despreciando el riesgo. 4 Fuerte intervención política en las decisiones de crédito de la banca. La expansión bancaria vino condicionado por el dirigismo de de Finanzas y del Ministerio de Comercio Internacional e Industria (MITI)9 creado en 1949, generando estructuras muy rígidas y una inadecuada valoración de los riesgos, porque todo estaba supeditado al crecimiento de la industria. 5 Ausencia de criterios ortodoxos en la regulación bancaria. El sistema laxo de regulación, las decisiones políticas en las inversiones crediticias, unido a la falta de información se tradujo en unas provisiones insuficientes y la asunción por las entidades de unos riesgos excesivos. 6 Ineficiencia en los dokken kokka. El doken kokka o triángulo de hierro, formado por políticos, burócratas (más de 70.000), bancos y constructoras para la realización de las multimillonarias obras públicas, dotado de un fondo anual de 45.000 millones de dólares solo para la construcción de autopistas, ha resultado ineficiente y con un elevado grado de corrupción. Es en parte responsable de parte del gran déficit público que arrastra el país y con la absorción de importantes sumas anuales en los presupuestos del Estado ha dejado sin financiación a las pequeñas y medianas empresas donde está empleada la mayoría de la población japonesa. 7 Corrupción urbanística en España y en la adjudicación de contratos de obras públicas en Japón. Existe un paralelismo entre la corrupción urbanística de España y en la adjudicación de los concursos a empresas contructoras en Japón, primero, por el oligopolio que forman en Japón mediante un cártel (dango), para decidir el precio a ofrecer antes que se produzca el concurso; por otra parte, en muchas ocasiones miembros del aparato gubernamental patrocinan este tipo de acuerdos y se conceden favores a determinadas empresas en las que cuando 9 El MITI se crea en 1949 para reconstruir la industria y economía japonesa, interviene en los mercados, protegiendo a los sectores emergentes o con problemas, procurando recursos para los sectores considerados prioritarios, proporcionando recomendaciones y orientaciones a medio y largo plazo para la industria, estableciendo flujos tecnológicos, promoviendo la creación de cárteles industriales en periodos de recesión, proporcionando información nacional e internacional y promoviendo y buscando las exportaciones. La década perdida japonesa. 1990 - 2001 9 finalice el cargo político, tener una salida profesional. La corrupción política ha sido un factor de inestabilidad política en Japón desde el fin de la 2ª Guerra Mundial. En definitiva, el impacto de los factores estructurales e institucionales característicos comentados del modelo japonés, la fuerte depreciación de activos mobiliarios e inmobiliarios con el estallido de la crisis de 1990, la fragilidad del sistema bancario poco transparente y sin una adecuada regulación, las disfunciones y corrupción política, la fuerte restricción crediticia aplicada por la banca japonesa a partir de la burbuja bursátil e inmobiliaria, que provocó una baja en la inversión, caída del consumo, deflación y desempleo, hace que la década de los 90 se considere “la década perdida de Japón” 10 La década perdida japonesa. 1990 - 2001 LA CRISIS INMOBILIARIA Y FINANCIERA ESPAÑOLA E spaña con la entrada del nuevo siglo, de la misma manera que sucedió a Japón en los años 80, ha ido generando una burbuja especulativa inmobiliaria, provocada por con conjugación de una serie de factores: Entrada en el euro. Bajos tipos de interés mantenidos en el tiempo. Mucha liquidez. para la propia economía del país, o quizás temieron una penalización electoral, pero lo cierto es que se dejó volar peligrosamente la cometa dos o tres años más. Aunque el origen de la burbuja inmobiliaria hay que buscarlo en el año 2000, el verdadero daño y la gran sobrevaloración de precios se produjo durante los últimos tres años, en los que unos precios ya elevados, en 2004, se dispararon de forma exponencial. Concentración del crédito bancario en el sector inmobiliario, fuerte apalancamiento con titulaciones hipotecarias10. El problema de la burbuja inmobiliaria adquirió tintes dramáticos cuando entre la segunda mitad de 2007 y principios de 2008 explotó y dejó al descubierto las desnudeces del modelo económico español. Un modelo poco productivo y competitivo, fuertemente dependiente del turismo, la construcción, el turismo y la demanda interna, con poca o nula capacidad de ahorro y fuertemente apalancado desde el exterior. El resultado fueron unos precios inflados en exceso que tardarán muchos años en recuperarse. Los precios de mercado actuales corresponden a los de 2005-2006, vamos camino de 2004, de regreso a los del año 2002. La secuela de nuestra industria nacional son unas “existencias” de inmuebles sin vender que en la actualidad ascienden 1,5 millones, según estimaciones de la sociedad de tasación Tinsa en Diciembre de 2009. Todos estos factores alimentaron una burbuja especulativa que debió frenarse desde el Banco de España en 2005 o a lo sumo en 2006, pero desde el Ministerio de Economía y del Banco de España o bien no se valoraron los riesgos que esta sobrevaloración de activos tenia para el sistema financiero español y Como consecuencia de los excesos cometidos, el stock actual de viviendas en España asciende a más de 25.000.000, con la tasa per cápita más alta del mundo 0,55 viviendas por habitante, equivalente a 1,5 viviendas por unidad familiar. Transcurridos dos años desde el inicio de la crisis los precios oficiales han descendido un 15% y las ventas un 60%. Las Fuerte crecimiento favorecido por una alta tasa de inmigración. Beneficios fiscales a la inversión en la vivienda. Coincidencia con una etapa de fuerte crecimiento mundial. Una cultura de país que considera la vivienda como inversión y un valor seguro. La retención y especulación del suelo y fuerte apreciación del mismo, que ha funcionado como financiamiento de Corporaciones Locales muy endeudadas. La crisis inmobiliaria y financiera española 11 previsiones según el servicio de estudios del BBVA es de que los precios continúen cayendo hasta bien entrado 2011, comenzando una leve recuperación en 201210. Como consecuencia de la caída de las ventas, las empresas promotoras en 2008 y 2009 fuertemente apalancadas, han visto rápidamente consumidos sus recursos financieros y han negociado con las entidades financieras, una reestructuración de la deuda, ventas o daciones en pago, ya que éstas en la mayoría de las ocasiones no han querido ejecutar los préstamos para evitar que se disparase su morosidad11. Por ello, las empresas promotoras españolas continuan siendo ricas, porque recordando a Tito Maccio Plauto “Rico es quien no paga lo que debe”. España según Jonathan Tepper12, se ha convertido hoy en un segundo Japón, puesto que las entidades financieras españolas no reconocen sus verdaderas pérdidas, como antes hicieron los bancos japoneses. El círculo pernicioso lo cierran porque emplean gran parte de su capacidad financiera en promotoras que carecen de viabilidad primaria al no tener ventas. Al no poner sus activos inmobiliarios devaluados en el mercado para evitar que las pérdidas afloren en sus cuentas de resultados, no pueden obtener la liquidez necesaria para financiar a muchas Pymes que si tienen viabilidad, pero que mueren por asfixia financiera. Las Pymes españolas se ven en la actualidad estranguladas por una falta de liquidez y financiación. El devenir de la banca española en 2010 y 2011 estará unido al sector inmobiliario y al desafío de un millón y medio de viviendas sin vender. Por lo anteriormente señalado, estamos entrando en un momento muy peligroso ya que los datos la tasa de morosidad que señala el Banco de España del 5,25%, dista seguramente mucho de la que debe ser en realidad. Lo más preocupante es que nadie sabe a ciencia cierta cual es la tasa de morosidad, pero seguramente tomando como base la de la última crisis de 1993 que llegó al 9%,debemos haberla superado con creces, porque ésta es mucho más profunda. 10 (M.D.I. jueves 7 de Enero de 2010, art. Felipe Menal. Oct.09) 11 En España hay gran cantidad de inmuebles a los que se les concedió un préstamo hipotecario del 80 al 100% del valor de tasación en los años 2006-2008. Dichos activos hoy como mínimo han experimentado una depreciación del 30%. El banco ante un impagado puede ejecutar el préstamo impagado, subastarlo y adjudicárselo en subasta por el 70% o incluso el 50% del valor de tasación, con lo cual debe contabilizar una pérdida importante que puede alcanzar hasta el 50% del principal del préstamo concedido. Para un crédito tipo de 100.000 euros de principal, esto puede suponer unas pérdidas por mora entre 30.000 y 50.000 euros. En lugar de esto, si se lo compra al propietario por el importe de la hipoteca directamente o a través de una sociedad instrumental, no tiene porqué aflorar ninguna pérdida en su balance. Pero esta segunda opción le obliga a retenerlo en la cartera de inmuebles, para evitar que la pérdida luzca en balance, con lo cual no obtiene liquidez y no puede prestar a empresas viables. De facto, algunas entidades financieras españolas se han convertido en auténticos bancos zombies, en lugar de entidades financieras en grandes inmobiliarias, sin ventas y sin viabilidad primaria, que no realizan actividad bancaria porque toda su liquidez está concentrada en mantener una cartera de inmuebles paralizada, a la espera que suceda el milagro de que suban los precios. 12 Jonathan Kepper de Variant Percepticon, una casa de análisis angloestadounidense conservadora, presiente unas turbulencias terribles para España, que los bancos están encubriendo. Según este experto, en vez de admitir que los créditos no son viables, los bancos españoles están ampliando coberturas, y en algunos casos efectuando novaciones ampliando el principal para pagar los intereses. España, según Tepper, es responsable de al menos un 30% de todas las construcciones realizadas en la Unión Europea desde el año 200 aunque solo supone un 10% de la economía de la UE. Como consecuencia tiene tantas viviendas sin vender como Estados Unidos, una economía que supera ocho veces el tamaño de la española. Los préstamos a promotores que ascendieron a 318.000 millones en 2008. La deuda del sector constructor (inmobiliarias), se eleva esa cantidad hasta los 470.000 millones de euros. Según Tepper la mayor parte de los préstamos serán fallidos. 12 La crisis inmobiliaria y financiera española Las técnicas empleadas por las entidades financieras españolas para evitar las pérdidas en sus balances por las provisiones provocadas por la pérdida de valor de los inmuebles son las siguientes: Dación en pago de deuda. La fórmula más utilizada hasta hace poco, consistente en la entrega del activo para cancelar la deuda. Compra de Activo por parte de una sociedad vehicular del banco. Moratoria. Reestructuración o modificación de las condiciones del préstamo para evitar la mora. Según Alastair Ryan analista de UBS los bancos españoles13 reestructuran internamente o modifican unos 5.600 millones de euros al mes, equivalente a 67.200 millones de euros al año. Esto provoca unas ineficiencias en el sistema financiero al perder la brújula orientativa de cualquier entidad financiera, que es prestar dinero a quien tiene capacidad de devolución, y esa fue la causa de la década perdida japonesa y parece ser el comienzo de la década perdida española14. En el entorno español actual al no existir un mercado inmobiliario porque está totalmente paralizado, aparece lo que se conoce como asimetría de la información, que hace casi imposible a los compradores saber el precio justo de los inmuebles, ante lo cual se retrae mas la demanda por desconocimiento y miedo a equivocarse. Con el FROB (Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, R.D. Ley de 26 de Junio de 2009, con una dotación de 9.000 millones de euros ampliable hasta los 90.000 millones de euros), el estado español se ha convertido en Banco de banqueros, con lo que el Estado participa en esta disfunción del sistema financiero al no obligar a las entidades que acudan a él a poner sus activos en venta a precio de mercado actual, haciendo una mala lectura y gestión de la crisis, porque cuando el Estado español necesite endeudarse para apuntalar el sistema financiero español, no podrá hacerlo, por la pérdida de credibilidad de sus finanzas públicas que impedirá la aceptación por los mercados internacionales de nuevas emisiones de deuda para poder cubrir una mora generalizada que se puede producir en el sector financiero consecuencia de la sobreexposición al sector inmobiliario. Existen además otros problemas añadidos ya que el sector financiero español deberá afrontar el fin de las generosas inyecciones de liquidez del BCE a mediados de 2010. La banca española tendrá hasta el mes de Junio para emitir deuda con el aval del Estado. Por otra parte, sigue en Bruselas el debate sobre si aprueba el FROB. Además la cuestión sobre la politización de las Cajas de Ahorro sigue abierta con una resistencia por parte de los poderes autonómicos a perder poder esa injerencia política, perniciosa para un sistema financiero. El actual marco de autonómico español ante la falta de corresponsabilidad fiscal impide conocer cual es la gestión de éstas, por lo que se ha transformado en un modelo de Estado muy ineficiente, que necesita a las cajas de Ahorro autonómicas para financiar la pérdida de ingresos por la crisis. 13 En Europa (Reino Unido 377.000 millones de euros, Alemania 400.000 millones de euros, Portugal 20.000 millones de euros) y en Estados Unidos (700.000 millones de dólares), los Gobiernos se han gastado hasta diez veces mas dinero en términos proporcionales que en España (30.000 millones de euros)para apuntalar al sector bancario y hoy los bancos europeos que partían, en general, de una situación peor, tienen una solvencia mayor que los españoles, porque han aflorado la mayor parte de sus activos tóxicos, mientras que los españoles conservan unos activos no tóxicos, pero si sobrevalorados, entre un 25 y un 50%, lo que dado el volumen de préstamos hipotecarios del sector español de alrededor de 675.000 millones de euros , significa unas pérdidas potenciales de 168.000 millones de euros. Además si sumamos los créditos al consumo, el endeudamiento de los hogares asciende a 917,571 millones de euros.LD Europa Press 18-01-2009. Si bien hay que señalar que es injusto generalizar, no todos los bancos o cajas están en la misma posición como demuestra el rating de las agencias de calificación de deuda. 14 Daniel Villalba/Edward Hugh. Llueve sobre mojado. Macroeconomista, dinero/La vanguardia La crisis inmobiliaria y financiera española 13 En el caso japonés el Gobierno al cabo de ocho años tuvo que forzar el saneamiento de los bancos. Durante estos años fueron auténticos zombies que seguían operando. Existe el peligro que la génesis de la crisis en Japón 1990 y España 2008 sea la misma, una importante burbuja inmobiliaria que se enmascaró en años sucesivos, que acabó en el caso de Japón con nacionalizaciones de bancos, quiebras, procesos de fusiones y un apuntalamiento por parte del Banco de Japón con el coste de una enorme Deuda Pública para sucesivas generaciones. En el caso español, de no tomarse soluciones inmediatas, vamos posiblemente por el mismo camino, con la diferencia de que el Estado Español no podrá endeudarse más para apuntalar al sistema financiero, lo cual amenaza la viabilidad de España como país. Ante esta situación el Banco de España ha comenzado a requerir provisiones del 20% del valor de tasación de los activos inmobiliarios en pago de deuda frente al 10% anterior, requisito que podría subir al 30% en 2010. Pero ello no es suficiente, tiene que obligarse a las entidades que se acojan al FROB a poner en venta sus inmuebles, sin perjuicio de autorizarles a poder diferir en varios años las pérdidas que se produzcan por la enajenación de esos activos. Parálisis crediticia, freno económico Las dificultades que atraviesa la banca española se ha traducido en una intensa contracción del crédito15, problemática fundamental que hay que solventar para que la economía vuelva a funcionar. Después de un quinquenio de cierta heterodoxia16 17 en la concesión de créditos la banca ha vuelto a una estricta vigilancia de la concesión de créditos. Solo se conceden a clientes solventes. El crédito al consumo registra tasas negativas de -1.2% y el inmobiliario un incremento del 0.1%, el menor de la historia. En cambio, el crédito a las Administraciones Públicas aumentó en un 34% anual en 2009, lo que es un síntoma del desapalancamiento del sector privado que va -a la fuerza- con la coyuntura, y de la “barra libre“ para el sector público, que no parece dispuesto a asumir una necesaria disciplina presupuestaria y de control férreo del gasto, como lo ha hecho el sector privado. Por otra parte, España lleva un retraso de mas de un año sobre la actuación de los Estados europeos o de Estados Unidos, en el sentido de clarificar el importe de fallidos del sector financiero, donde los bancos han comenzado a devolver las ayudas, teniendo nuestro 15 Es de destacar que el tejido industrial español es de Pymes, más bien de Py, por su pequeña dimensión, con una infracapitalización que tradicionalmente han financiado con pólizas bancarias a un año que se renovaban casi automáticamente. En estos momentos estas pólizas de funcionamiento o se cancelan o se transforman en préstamos, préstamos que las empresas no pueden devolver en este entorno de crisis. Además de esto no obtienen líneas de descuento que han sido canceladas o reducidas, por lo que no pueden financiar sus ventas. 16 Hace 17 años en 1993 la tasa de morosidad de la banca española llegó al 9% y representaba alrededor de 25.000 millones de euros, hoy dicisiete años después, la banca española ha pasado de unos créditos de 25.000 millones de euros en 1993 a 1,8 billones de euros en 2009, por lo tanto el volumen de crédito de la banca casi se ha multiplicado por siete veces en esos dieciséis años, cuando el PIB solamente lo ha hecho por dos. E. Farrás 24/03/2009. En la actualidad con la tasa oficial de morosidad, asciende a 94.000 millones de euros casi cuatro veces mas que en 1993 y continúa subiendo. Según apunta Credit Suisse, el problema de la morosidad de la banca española está muy lejos de haber tocado fondo, a lo que se suma la incertidumbre sobre el volumen de créditos que aún no han entrado en mora, se están renegociando para evitar el impago, así como todos los inmuebles que la banca ha incorporado a su balance como medida preventiva. La banca se ha consolidado en 2009 como principal agente inmobiliario, después de haber adquirido los inmuebles de los promotores con dificultades para pagar deudas. Para Credit Suisse, la morosidad de la banca española actual estaría infravalorada en 30.000 millones de euros 17 Según el Banco Espíritu Santo la morosidad española empeorará en 2010 llegando al 6,7% desde el 5,3% actual. El año 2010 marcará las diferencias entre entidades que están sorteando la crisis y las que no. Y el año 2011 será decisivo para las Cajas de Ahorro. 14 La crisis inmobiliaria y financiera española país el mayor problema de todas las economías de la OCDE a nivel de exposición al sector inmobiliario. El no poner de manifiesto todas las pérdidas en los balances de los bancos no ocurre solo en España está generalizado en las economías de Europa y EE.UU., si bien en occidente, en general, se ha avanzado más en este sentido. A título de ejemplo, el BCE señala que los bancos de la zona euro sufrirán pérdidas entre 2007 y 2010 de 553.000 millones de euros. En el pasado mes de Noviembre el FMI señaló que el 50% de las pérdidas bancarias aún están ocultas, en mayor proporción en Europa que en Estados Unidos. Comparación entre la crisis japonesa y la española A continuación señalamos las similitudes y diferencias entre la crisis japonesa de los años 90 y la española actual: Estallido de la burbuja inmobiliaria, (Japón 1990 - España 2008), por una expansión crediticia y unos bajos tipos de interés de forma sostenida durante diez años y una relajación en el control crediticio tanto por parte de las entidades financieras como del ente regulador. En ambos países, la génesis de la burbuja comenzó diez años antes. Los precios de los activos inmobiliarios tardaron 17 años en recuperarse en Japón. Otra similitud es la importancia del precio del suelo en ambos países en comparación con el precio final de la vivienda por el fuerte componente especulativo en el suelo. Subida vertiginosa de la bolsa de valores, que se multiplicó por tres veces tanto en el caso español como en el japonés. El Ibex partió de los 5.000 puntos en enero de 1997 hasta casi 15.500 en julio de 2007. El Nikkei alcanzó los 38.000 puntos en febrero de 1990 cayendo hasta los 8000 puntos en marzo de 2003. En la actualidad cotiza a 10.770 puntos. El mercado de valores japonés no se ha recuperado desde 1990. Restricciones crediticias, ocultación de la mora y posterior desplome del sector financiero. Las fuertes inversiones realizadas por los bancos japoneses en el sector inmobiliario y los préstamos concedidos con los garantía de las acciones de las compañías niponas, al estallar la burbuja, se perdió el valor de los colaterales que servían de garantía y se entró en una mora que tardó ocho años en afrontarse (hasta 1997, coincidiendo con la crisis asiática), dado no se reconoció el problema hasta esa fecha. Los bancos japoneses ante la crisis, se vieron obligados a reducir los préstamos de forma notoria para mantener el coeficiente de capital y combatir la morosidad. En España el sector financiero fundamentalmente de algunas cajas de ahorro, está muy afectado en su solvencia por su excesiva exposición al sector inmobiliario. La morosidad está encubierta a través de novaciones en sociedades vehiculares de compra de activos, daciones en pago de deuda, reestructuraciones, etc. El sistema financiero español, en algunas cajas de ahorro, con la pérdida del aval del Estado para las emisiones a partir del segundo semestre de 2010 va a entrar en una falta de liquidez y posiblemente de solvencia. La cantidad del FROB inicialmente prevista de 9.000 millones de euros es irrisoria, ya que los absorberá una sola entidad intervenida oficialmente, Caja Castilla La Mancha (CCM). La economía japonesa solamente se levantó cuando en 2002 realizó una auditoria completa de las entidades financieras y salió toda la mora al descubierto. En el caso de las entidades financieras españolas, se ha producido los dos supuestos de Japón en la década de los 90, restricciones y contracción de los créditos concedidos y ocultación de la mora, el tercer supuesto el desplome del sector financiero dependerá de la rapidez en tomar las medidas de saneamiento necesarias. En caso de no tomar ninguna puede desplomarse como ocurrió en Japón en 1997 con consecuencias imprevisibles para la economía española. La crisis inmobiliaria y financiera española 15 Falta de transparencia en los balances de algunas entidades financieras que impide conocer su situación real. Existe un paralelismo entre la falta de transparencia de las entidades financieras japonesas por las inversiones en los trust financieros e industriales -los Keiretsu-, y los balances de algunas entidades financieras españolas que deben tener una morosidad muy superior por las compras de activos inmobiliarios que no han salido al mercado, por las novaciones o reestructuraciones de la deuda. La gran cantidad de inmuebles en los balances bancarios significa una imbricación entre el sector inmobiliario y el bancario que puede considerarse como los keiretsu españoles. Además debido a la influencia e intervención política en las Cajas de Ahorro. El sector público fundamentalmente autonómico, está absorbiendo el desapalancamiento privado lo cual es otro mal augurio, por emplearse el ahorro en un sector no productivo. La subida del tipo de interés del euro prevista para el próximo año, junto con la pérdida del aval del Estado y el fin de las emisiones a largo plazo del BCE, puede ser el golpe de gracia para algunas entidades financieras. Programas de estímulo fiscal en ambos países18. En Japón entre 1992 y 1999 se lanzaron nueve programas de estímulo fiscal por valor de 130 billones de yenes (25% P.I.B anual), lo que hizo que el saldo presupuestario pasara de +2.9% del PIB en 1990 a -6,8% en 2000. El Plan de estímulo español de 2009 de más de 27.000 millones de euros en 2009, supera el 25% del PIB español. Las políticas expansivas japonesas de demanda fueron ineficaces para luchar contra el estancamiento y la deflación aunque evitaron situaciones más graves. La crisis bancaria japonesa se abordó en 1997 con masivas inyecciones de dinero público para acabar con el mantenimiento de empresas y bancos zombies que trataban de evitar la plena declaración de préstamos incobrables y con la constitución de varios fondos para adquirir los activos deteriorados de los bancos. Pero solo a partir de 2001 con el Plan de reforma económica del Primer Ministro Jumichiro Koizumi y 2002 con el Plan Takenaka que consistió en una auditoria completa de los bancos y en obligarles a cancelar los incobrables, con la nacionalización del Resona Bank y la quiebra o fusión de los más débiles para reducir su tamaño y hacerlos mas competitivos, se recuperó la confianza en el sistema bancario. A partir de 2003, con la recuperación de las exportaciones a China y EE.UU. y tras desvelar la situación de los bancos, la economía japonesa empezó a dar síntomas de recuperación. Deuda Pública disparada. Deflación en Japón y estanflación en España. Existe un paralelismo entre la deuda japonesa disparada en los años 90 y la española a partir de 1998, con una situación de recesión, un sistema financiero dañado y una deflación en Japón. España, aunque de momento también se encuentra en deflación, seguramente se transformará en estanflación (estancamiento con inflación a partir de 2010). El último dato de inflación correspondiente a Diciembre de 2009 es del 0.9%. Incremento del desempleo. En Japón desde el 2% al 5,5% de 1990 a 2001 y en España desde el 8,9% de 2005 al 20% previsto para 2010. El fuerte nivel de desempleo arroja un pronóstico mucho peor para la economía española que para la japonesa. Estancamiento del consumo. El estallido de la burbuja inmobiliaria en Japón y España, ha producido un sentimiento generalizado de pérdida de riqueza, con la caída del consumo interno que ha provocado tensiones deflacionistas. España lleva 5 trimestres consecutivos en deflación. 18 Las medidas de política monetaria. Entre 1992 y 1999 se lanzaron nueve programas de estímulo fiscal con medidas fiscales y monetarias por valor de 130 billones de yenes (25% del PIB anual). En cuanto a la política monetaria se fueron bajando los tipos de interés hasta alcanzar el cero por ciento en 1999. La crisis bancaria de 1997 se abordó con masivas inyecciones de dinero público (1,8 billones de yenes durante el periodo 1989-99, ), con el mantenimiento de unas empresas y bancos “zombies” para evitar la plena declaración de préstamos incobrables. Solamente con el Plan Takenaka de 2002 con una auditoria completa de los bancos se recuperó la confianza en el sistema financiero. Blogspot 13.4.09. 16 La crisis inmobiliaria y financiera española Diferencias en la solvencia de los países. El sector exportador Japón y su superávit comercial ha servido de contrapeso y aval de las emisiones de Deuda Pública japonesa, cuyos compradores han sido ahorradores japoneses. En cambio, España con un sector industrial poco competitivo no existe una solución a través de la exportación por lo que la salida de la crisis española lo mas probable es que será en forma de L, caída sin recuperación y un largo estancamiento, que parece el diagnóstico casi seguro para la economía española. En cuanto a los acreedores, la ingente Deuda Pública española no puede ser absorbida por el ahorro español, que a pesar de haber subido vertiginosamente, no tiene capacidad suficiente para ello, al contrario del caso japonés, por lo que al depender del ahorro internacional va a tener problemas de financiación en un entorno de mucha competencia en emisiones de deuda tanto de Estados como de empresas . Diferencias en el entorno geográfico. España tiene la ventaja de tener unos socios europeos que están saliendo de la crisis y que tirarán de la economía española y seguramente -paradojas del destino-, las primeras alegrías vendrán por las inversiones inmobiliarias en la costa española por las economías del centro de Europa. Por ello, en comparación a otras crisis, los primeras en recuperarse serán las inversiones inmobiliarias en la costa mediterránea antes que los inmuebles en las ciudades, salvo los del centro, en las que existe una gran sobreoferta y dependen de la coyuntura económica interna que es mucho más negativa que la europea. Sistema político disfuncional. Dos economías perjudicadas por un sistema político disfuncional en Japón por las razones comentadas, exceso de regulación, injerencia política en las adjudicaciones de los contratos de las obras públicas, falta de competencia en los sectores primario y terciario y los trust financiero-industriales con información deficiente e inadecuada valoración de los riesgos. Japón perdió una década para limpiar de empresas zombies (compañías en bancarrota que solo existen en teoría). La inacción restó sin duda varios puntos de PIB a Japón y provocó una deuda excesiva del 180% del PIB según medición actual. La decisión del primer ministro Koizumi de obligar a deshacerse a los bancos de préstamos no productivos, a partir de 2001, y el plan Takenaka de saneamiento de 2002, tuvieron unas consecuencias muy positivas para el crecimiento en los años posteriores, desde 2002 hasta la reciente crisis de 2008. En España, esta disfuncionalidad del sistema político se concreta en las enormes ineficiencias del actual marco autonómico, obsoleto, discriminatorio, fuente de dádivas (deudas históricas), agravios comparativos y reclamaciones sin fin. Un modelo de estado que no es sostenible, que debe caminar (para no desaparecer), hacia la corresponsabilidad fiscal, permitiendo a las Comunidades Autónomas establecer y recaudar sus ingresos, competir entre sí y poder medir el grado de eficiencia al comparar unas con otras, y de esta manera comprobar el grado de gestión de cada una de ellas, dejando de ser unas autonomías de puro descentralización del gasto, a otras en que se pueda controlar y valorar la gestión económica que realizan. Déficit público importante en ambos países. Japón 7.8% del PIB en 2009, España 10-11% (previsiones) La lección de la historia japonesa La crisis actual va a ser bastante larga en España y en otros países de Europa periférica (fundamentalmente Irlanda, Portugal, Grecia y España en el área euro) en forma de L, crecimientos entorno al 1%, un crecimiento bajo casi depresivo y en centro Europa en forma de U, no descartándose una salida en W con una nueva recaída en 2010 -posible pero poco probable- de la economía en los países occidentales cuando se retiren los estímulos fiscales. La crisis inmobiliaria y financiera española 17 La experiencia de Japón sugiere que los estímulos fiscales y monetarios pueden ser insuficientes si no se resuelve la crisis bancaria, estos estímulos son condición necesaria pero no suficiente para la recuperación. El saneamiento de la banca es necesario para que fluya el crédito de nuevo hacia empresas y economías domésticas y de esta forma se inicie la recuperación económica. Como señala Adam Posen del Peterson del Institute for Internacional Economics, el paquete de estímulo fiscal aprobado en 1995 en Japón estimuló el crecimiento en 1996 (crecimiento del 3,5%) pero volvió a apagarse por la subida de impuestos indirectos de 1997. Por eso, los estímulos fiscales que puedan aprobarse en 2010, van a ser contrarrestados por la subida de impuestos que entrará en vigor el segundo semestre cuando España deje la Presidencia europea. La economía nipona con el saneamiento bancario se recuperó en 2002 y hasta 2008 tuvo una etapa de crecimiento sano no producto de una locura crediticia como la estadounidense de la década de los 2000. El derrumbe producido en 2008 ha sido consecuencia de que al depender de la exportación ha soportado peor la crisis, pero se recuperará a partir de 2010 con la previsible recuperación mundial. Medidas se deben adoptar para que no ocurra en España lo mismo que en Japón en la década de los 90 Hay que tener presente que una crisis inmobiliaria puede por sí sola desencadenar una crisis económica. Por ello, de no haber existido la crisis financiera mundial, España hubiera entrado por sí misma en recesión. La primera medida y más importante que hay que tomar para evitar lo sucedido en Japón es tratar de acortar el tiempo de ajuste en precios. Del millón y medio de viviendas sin vender se calcula que solo un 6% está 18 La crisis inmobiliaria y financiera española puesto en venta. De esta manera llevamos el camino de la crisis japonesa. En la situación actual los bancos tratarán en primer lugar de financiar la venta de sus inmuebles esperando primero que llegue una recuperación de los precios, luego la de los promotores clientes y en tercer lugar concederán nuevos créditos a empresas y particulares. Una diferencia fundamental entre las dos crisis es que en Japón no había stock de viviendas por pertenecer éstas a empresas y en España, en cambio, pertenecen a particulares. Acortar el tiempo del periodo de crisis, a pesar de que ello implique una fuerte caída de los precios de hasta el 50% como en Japón, nos evitará diez o mas años de espera y una lenta agonía de balances bancarios ligados a inmobiliarias zombies que merecen credibilidad para otorgar confianza a los agentes económicos y liquidez para poder prestar dinero. Entre las distintas tipologías de viviendas en stock se encuentran las usadas y las nuevas, en manos de particulares, de promotoras o de los bancos. Los precios de las usadas son los que mas han bajado entorno al 25%, mientras que las de promotoras e inversionistas solo un 12%. Algunas entidades financieras anuncian importantes descuentos hasta el 30% pero limitada a los peor ubicados. La explicación de porqué no caen los precios más es por la resistencia de los agentes económicos que las poseen y las coberturas que prestan las entidades financieras que no quieren más morosidad. Pero esta resistencia se irá minando a medida que el ciclo recesivo haga mella en las finanzas de entidades financieras, empresas y particulares. ¿Qué ocurriría si las entidades financieras sacaran todos sus inmuebles a la venta con una reducción de precios entre el 30 y el 50%, y se financiera al 80%?. (Ver artículo de Felipe Menal: España: la burbuja explosionó llega el Tsunami. M.D.I. 3 de Enero de 2010)19 En primer lugar, muchas de ellas presentarían abultadas pérdidas, tendrían que ser apuntaladas por el Estado o se produciría un proceso de fusión que podría ser controlado. Ello permitiría separar a las que son viables de las que no lo son. Distinguir entre bancos “buenos” y “malos”, entre viables y sin viabilidad es la primera decisión estratégica para sanear el sistema financiero. Se produciría de inmediato una rebaja de la calificación crediticia de muchas entidades financieras y del Reino de España19. Pero todo esto va a ocurrir de igual forma, solo es problema de tiempo, porque solo va a resistir la debacle de los precios los inmuebles en el centro de las grandes ciudades, los bien situados y a buen precio de la costa por las inversiones extranjeras de los países que van a salir de la crisis. El acortar la agonía evitaría que distorsionaran el mercado promotoras y alguna entidad financiera “zombie”, como ocurrió en Japón desde 1990 a 1998. Al “limpiar” el mercado de préstamos incobrables los bancos y cajas se dedicarían a financiar proyectos viables y dejarían ser, en muchos casos, grandes promotoras sin viabilidad. El Gobierno debería apoyar la compra de las viviendas dándoles los mismos beneficios que a las viviendas de VPO, las cuales por las actuales circunstancias, de momento desaparecerían. Con un programa de apoyo a las entidades financieras no inferior a 200.000 millones de euros a cambio de que éstas otorguen la financiación del 80% del valor de tasación a particulares que necesitan comprar una vivienda, pero que no lo hacen por lo que hemos denominado “asimetría de la información”, particulares que desearían invertir pero a unos precios ventajosos en los que no se sientan atrapados, en tres o cuatro años, se solventaría el problema del stock de viviendas sin vender que tiene paralizado al país. Ante cualquier crisis (Estado, C.A., empresa o economía doméstica) hay actuar, ya que la inacción es una actuación contra uno mismo y cuando mayor es el problema más enérgicamente. En la situación actual el Gobierno se está endeudando sin ningún componente de dirección estratégica y cuando decida adoptar las medidas propuestas no podrá hacerlo, porque habrá superado el límite de deuda que el mercado está dispuesto a absorber. Y entonces, puede plantearse un problema más grave cual es la solvencia del país, como está ocurriendo en la actualidad con el caso de Grecia, un país perteneciente al euro cuyo rating de calificación esta a solo tres pasos de considerarse bonos basura. Con esta actuación solo quedaría pendiente la venta del suelo existente que tendría una salida en un periodo no inferior a cinco años, teniendo que evitarse en un futuro los procedimientos de especulación del suelo auspiciados desde las Corporaciones Locales que eran las primeras interesadas en que subieran los precios ya que se financiaban del denostado ladrillo. Las competencias urbanísticas ante el desastre acontecido deben salir de la órbita de los Ayuntamientos y pasar a las Comunidades Autónomas, sin perjuicio de un marco directorio y de control del Estado. Bibliografía y Documentación: _Boletín del ICE 2648/2001. Subdirección General de Estudios del Sector Exterior. _Christian Caryl, Depende la Década perdida de Japón. FP en español. _Roger Garrison Tiempo y Dinero. La macroeconomía de la estructura de capital.1/12/09 _La crisis actual y la década perdida japonesa, Blogspot.04/2009. _La crisis española y la década perdida cara a cara. Laura Peralta y Susana Alcelay. _Escuela de negocios IESE. Crisis a la japonesa en España. Negocios.com. 2/01/10 _Edward Hugh. Llueve sobre mojado. 27/09/09 _Callen y D. Ostra,2003.Japan´s lost Decade. Washintong D.C., F. M. I. _Dos experiencias económicas Japón y Estados Unidos. Claudio Aranzadi y Maurici Lucena Betriu. _Fondo Monetario internacional (2002) World Economic Outlook. _M. Porter; Takeuchi H. Can Japan Compete?. Perseus. Westney, E. 2001 _Japanese Enterprise Faces the twenty first Century Firm, Ed. Paul Dimaggio, Princeton University Press. 19 M.D.I. jueves 7 de Enero de 2010, art. Felipe Menal. Artículo en M.D.I. artículo de Felipe Menal Oct.09. España: La burbuja inmobiliaria explosióno llega el Tsunami. La crisis inmobiliaria y financiera española 19 COYUNTURA ECONÓMICA MUNDIAL 2010: GLOBALIZACIÓN SÍ, PERO CON TRES VELOCIDADES 20 Coyuntura económica mundial. 2010: Globalización sí, pero con tres velocidades En octubre de 2008 y marzo 2009 se hundieron los mercados. Solo la rápida intervención de los Gobiernos salvó el sistema financiero que estuvo a punto de colapsar con la quiebra de Lehman Brothers. La fuerte deuda pasará factura a las próximas generaciones. En la postcrisis el mundo ya no será igual. El 2010 el empleo todavía no se recuperará. Hay tres velocidades claras en la recuperación: 1ª Países emergentes Asia y Latinoamérica. Demanda creciente. 2ª Economías maduras que han salido de la recesión Japón, Estados Unidos y Europa con tasas positivas gracias a los estímulos y a la recuperación del comercio internacional, pero con peligro de recaída cuando se retiren los estímulos fiscales, sobre todo en EE.UU. y Reino Unido. 3ª Economías maduras de la zona euro que no han salido de la recesión como Irlanda, España, Grecia y en menor medida Portugal. Los países que pertenecen a esta categoría dependen más de la demanda interna que de la exportación, y tendrán una salida en forma de L, caída y estancamiento. Previsiones OCDE 19/11/2009 P.I.B. 2009 2010 2011 OCDE - 3,5% 1,9% 2,5% EEUU - 2,5% 2,5% 2,8% Japón - 5,3% 1,8% 2,0% Zona Euro - 4,0% 0,9% 1,7% Alemania - 4,9% 1,4% 1,9% Francia - 2,3% 1,4% 1,7% España - 3,6% - 0,3% 0,9% Reino Unido - 4,7% 1,2% 2,2% Italia - 4,8% 1,1% 1,5% Portugal -2,8% 0,8% 1,5% Holanda - 4,3% 0,7% 2,0% Brasil 0,0% 4,8% 4,5% China 8,3% 10,2% 9,3% India 6,1% 7,3% 7,6% Rusia 2,0% 4,9% 4,2% Zona Euro Países emergentes Coyuntura económica mundial. 2010: Globalización sí, pero con tres velocidades 21 TIPOS DE INTERÉS 2009 2010 2011 Zona Euro 1,2% 0,8% 1,9% EE.UU. 0,9% 0,3% 1,8% NUESTRAS PREVISIONES Tipos de interés 2009 2010 Zona Euro Euribor 1,0% 1,25/1,5% EEUU 0,5% 0,5/1,0% 1,43 1,40/1,50 10.500 - 11.500 10.500 - 14.000 Oro 1.100 - 1.200 1.300 - 1.500 Petróleo 60-80$/ Barril 80/100$/ Barril Cambio Euro / Dólar Mercados de valores IBEX Otros datos macroeconómicos NUESTRAS PREVISIONES ECONÓMICAS PARA ESPAÑA 2009 Crecimiento PIB Déficit público Número de parados Deuda Pública Inflación 22 Coyuntura económica mundial. 2010: Globalización sí, pero con tres velocidades 2010 - 3,8% -0,50% / - 1% 11% 9 - 10% 4.100.000 4.500.000 54% del PIB 64% del PIB - 0,4% -0,5 / 1,0% SITUACIÓN DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA Y PREVISIONES PARA 2010 ¿Que ocurrirá en España en 2010? Problemas de morosidad que pueden afectar a la liquidez y la solvencia en el sector financiero, fundamentalmente en algunas Cajas de Ahorro, en mayor medida que en los bancos. Contracción del crédito y fuertes restricciones crediticias a empresas y economías domésticas. La banca española debe devolver 83.000 millones de euros en 2.010. Cierre de 175.000 empresas, una cifra algo inferior a 2009. Un millón y medio de casas sin vender y unos precios oficiales con un 15% de bajada, pero que irán descendiendo hasta el 40%-50% desde los niveles máximos de precios durante los próximos años. Concentración de créditos al consumo e inmobiliarios, con una morosidad creciente que superará la de la crisis de 2003 que fue del 9%. 4,5 millones de parados en 2010 y cronificación de la tasa de paro. Rebaja de la calidad de la deuda española y de algunas entidades financieras en 2010 por las agencias de calificación internacionales, hasta el nivel de Italia A+, pero con perspectiva negativa. El motor de la actividad económica será el gasto público, las prestaciones por desempleo y actividad inversora municipal. Lo que demuestra que no se vislumbra de momento futuro a corto plazo para la economía española. Aumento generalizado de impuestos para compensar la caída de ingresos. Dos o tres subidas de impuestos a lo largo del año adicionales. Mantenimiento de un consumo débil y ausencia de inversión privada, por falta de crédito y por la exigencia de las entidades financieras que continúe el desapalancamiento crediticio a sus clientes, por la propia necesidad de desapalancarse. Medidas de contención del gasto público, que se centrará en menor inversión productiva, lo que alargará la recesión y la salida de la crisis. Un mínimo consenso sobre la reforma laboral. Imposibilidad del necesario Pacto de Estado porque ya es demasiado tarde y las posiciones se han enquistado. Problemas de modelo económico y de un Estado Autonómico ineficiente y no sostenible. Subida del Euribor Fin de los préstamos a largo plazo del BCE. Caída del PIB entre el 0,5-1%. Emisión neta + amortizaciones de Deuda Pública Española por valor importe de 130.000 millones de euros, con dificultades en la colocación. De no presentarse un plan de ajuste y de consolidación fiscal creíble ante la U.E., el sistema financiero y las propias finanzas del país pueden llegar a colapsarse en 2010. Situación de la economía española y previsiones para 2010 23 MERCADOS Y BOLSAS DE VALORES E n el año que comienza el consenso alcista es del 100%. Esto en ocasiones no es buen síntoma, porque el contrary market opinion suele funcionar en los mercados financieros. De hecho, vemos que en pocos días hemos pasado de estimaciones de un aumento de las cotizaciones entre el 10-15% a menos de dos dígitos para el año 2010. No nos extrañaría una caída del 10-20% de los niveles actuales. En este ejercicio debemos recordar que EL DINERO ES EL REY, en un contexto generalizado de necesidad de capitales, los tipos de interés van a subir en la segunda mitad del año. Por ello, debemos desapalancarnos en la medida posible, porque las entidades financieras en cualquier momento nos cortarán el crédito, si no lo ha hecho ya. Las empresas muy endeudadas y las que dependan del consumo interno desaparecerán a corto plazo, en menos de tres años. En nuestra opinión será un año de consolidación en Bolsa con poco recorrido, pero también un año de oportunidades de pequeños valores que se han quedado rezagados, pero que tienen mayor riesgo y mayor revalorización. ¿Que hacemos con nuestro dinero? Huir de la Deuda Pública en general, sobre todo de Estados con poca visibilidad de ingresos y muy endeudados. Huir de los Depósitos bancarios a medio y largo, porque los tipos de interés van a subir, y además su rentabilidad es escasa. 24 Mercados y bolsas de valores Fondos de inversión, tampoco, la historia demuestra que ganan mucho menos que el mercado en épocas de alza y pierden mucho mas en épocas de caídas bursátiles. Los fondos garantizados tampoco son alternativa. Deuda soberana y acciones de Compañías de Estados Unidos e Inglaterra no la adquiriremos, porque el dólar y la libra continuarán siendo dos monedas débiles y porque la falta de credibilidad en que EE.UU. supere sus déficits estructurales comercial y de déficit público, va a provocar que de una manera silente en los próximos años se vaya abandonando el dólar como moneda refugio a favor del euro, y en mayor medida en el franco suizo como moneda del país mas seguro y estable, que va a tener problemas para evitar una fuerte apreciación. Por ello apostamos a medio plazo de nuevo por una caída del dólar frente al euro, desde los niveles actuales hasta niveles de 1.40-1.50 euros/dólar. Hasta que se aclare el panorama de la economía mundial, el oro será el valor refugio por excelencia y puede continuar apreciándose hasta 1.300-1.500 $/100 onzas. El petróleo continuará apreciándose los próximos años porque es escaso y los nuevos descubrimientos son mucho mas caros, en cuanto el proceso de extracción que los actuales. Además la importancia de los nuevos 2.500 millones de consumidores de los países emergentes que ya empieza a ser una realidad, va a provocar una nueva subida hasta los 80-100 dólares en 2010-2011, en función de la evolución de la coyuntura económica mundial. Por tanto lo recomendable es invertir una parte en el mercado de futuros del petróleo de manera continua, con un stoploss por debajo de 69$ el barril brent. Esta inversión nos puede generar unas importantes plusvalías en los próximos años. Entender las claves macroeconómicas nos ayudará a acertar en nuestras previsiones. ¿Cuáles son?: El origen de la crisis financiera y económica es el fuerte endeudamiento de las economías occidentales que en diez años se ha multiplicado por 2,5 en relación al PIB (previsión). En cambio en los países emergentes, el endeudamiento ha permanecido estable en estos años, consecuencia de la ortodoxia a que les ha obligado el FMI y el Banco Mundial, para atajar otras crisis anteriores. Una ortodoxia que olvidaron aplicar en las economías occidentales. Es por ello, que tanto Sudamérica, como el Sudeste Asiático e India, han salido antes de la crisis, la han resistido mejor, y tienen mejor pronóstico en su recuperación, por ser una crisis cuya génesis es el endeudamiento, la gran liquidez y el excesivo apalancamiento de la inversiones, que creó una burbuja especulativa que disparó el precio de los activos en los países ricos y provocó pérdidas bancarias multimillonarias. La ingeniería financiera creada en Wall Street, en muchos casos una estafa, con productos financieros extraños, que ahora todo el mundo reconoce que no entendía, contribuyó a agravar el problema, pero no es la génesis, sino una de sus consecuencias. Crecimiento débil en Europa y algo mayor en Estados Unidos, pero poco fiable, muy supeditado en este segundo caso a los estímulos económicos y con un grado importante de incertidumbre cuando se retiren. Por lo tanto, no recomendamos este país por la debilidad de su moneda, consecuencia de los fuertes déficit estructurales -público y comercial-. Estados Unidos está dejando caer su moneda de forma controlada para no provocar el pánico entre sus acreedores, y de esta manera disminuir el déficit comercial y el importe de su deuda que está formalizada en dólares. Preferimos el área fuerte del euro, más estable y ortodoxa: Alemania, Francia y Holanda. La libra esterlina no tiene fundamentos económicos que la mantengan, puede continuar cayendo, incluso tener serios problemas para mantenerse como moneda independiente. Un crecimiento superior a un 5% en los BRIC (Brasil, Rusia, India y China) 2.500 millones de nuevos consumidores. La oportunidad del sistema económico mundial para salir de la recesión. Crecimiento mundial de un 2-3% Crecimiento en España negativo y mucha probabilidad de estanflación (estancamiento con inflación), en los cinco próximos años. Problemas con la posible retirada paulatina de las medidas de estímulo económico de Gobiernos y organismos internacionales, que puede ocasionar recaídas en la economía. Elavada volatilidad de los mercados de renta variable. Fuerte endeudamiento de los Estados en las economías occidentales, y pérdidas bancarias todavía sin aflorar que puede provocar una nueva caída de los valores bursátiles a mitad de año, sobre todo valores financieros y establecimiento de unas normas de capitalización mayores para bancos, lo que podría llevar a un Basilea III. Los países exportadores y menos endeudados, son los que mejor van a afrontar la recuperación. Por eso dentro de las tres velocidades de salida habrá mucha diferencia por áreas económicas y dentro de éstas por países. Esto también es aplicable a empresas. En el ahorro, el desapalancamiento, el control del gasto y en la exportación a través de la competitividad, está la solución a la crisis, tanto para países como empresas. Mercados y bolsas de valores 25 ¿Cómo distribuiremos nuestro dinero? 60% Renta variable. Nos centramos con las empresas líderes mundiales en su segmento, de los sectores de telecomunicaciones, energía, farmacia, petróleo y biotecnología. Vendemos toda nuestra cartera en bancos porque 2010 será muy complicado para las entidades financieras. El centrar y focalizar nuestra inversión en estos líderes de los sectores de telecomunicaciones, energía, petróleo y biotecnología, es para disminuir el riesgo y la volatilidad, porque estas empresas multinacionales al tener unos ingresos recurrentes y diversificados geográficamente son más seguras que los propios Estados donde radican, que, en general, están fuertemente endeudados y con caídas de los ingresos fiscales por la crisis económica. Además la energía y las telecomunicaciones (con una rentabilidad por dividendo entre un 6-8%) son valores muy defensivos que nos protegerán mejor que cualquier depósito de los avatares de los mercados financieros. Compramos valores defensivos de la zona fuerte del euro Alemania, Holanda y Francia con alta rentabilidad por dividendo superior al 6% Energía (Eon), telecomunicaciones (Deutch telekom) y Farmacia (Bayer) en Alemania, Belgacom en Bélgica. En España solamente Telefónica, por su diversificación geográfica y su dividendo, Repsol (por su dividendo y sus descubrimientos que pondrá en valor los próximos años) y Natraceutical, dueña ahora de un 32% de la francesa Naturex, lider mundial en ingredientes naturales para alimentos nutraceúticos. 26 Mercados y bolsas de valores 10% mercado de futuros del oro. Ello nos protegerá de una eventual caída de los mercados financieros en 2010, no descartable. 10% Mercados de futuro del petróleo. 10% Liquidez. 10% Oro y plata físico. La recuperación económica no está del todo clara y si se produce una nueva caída de los mercados, que correspondería a una salida de la recesión en forma de W, poco probable pero no descartable, volvería el pánico a los mercados. En este supuesto, solo el oro físico nos salvaría si se produjera de nuevo este escenario. Porque no debemos olvidar que el oro virtual, el del mercado de futuros, no se corresponde con el oro físico. Veamos cual ha sido la evolución de nuestra cartera de valores 30/05/09 que creamos en Mayo de 2009 y que hacemos con ella. NOMBRE BOLSA COTIZACIÓN PRECIO COMPRA 25/5/09 COTIZACIÓN PRECIO VENTA 30/12/09 DIF. PRECIO % VARIACIÓN PRECIO % INVERSIÓN Almirall. Laboratorios Farmacia Madrid 8,60 € 9,14 € 0,54 € 6,28% 10% Natraceutical. Biotecnología Madrid 0,52 € 0,49 € - 0,03 € - 5,76% 10% Iberdrola renobable. Energía Madrid 3,18 € 3,32 € 0,14 € 4,40% 10% Telefónica. Telecomunicaciones Madrid 15,83 € 19,04 € 3,21 € 20,28% 10% Paris 1,78 € 2,38 € 0,60 € 33,71% 10% Madrid 15,83 € 18,73 € 2,90 € 18,32% 10% Eon. Electricidad. Frankfurt 24,93 € 27,08 € 2,15 € 8,62% 10% Fortis. Aseguradora Bruselas 2,70 € 2,62 € - 0,08 € -2,96% 10% Zurich 38,70 CHF 50,20 CHF 11,50 CHF 29,72% 10% Alcatel - Lucent. Tecnología Repsol YPF. Petróleo y derivados Nestlé. Alimentación. Hemos vendido con fecha 30 de Diciembre toda nuestra cartera de renta variable y obtenido un 13,7% de rentabilidad en siete meses, lo que unido a la rentabilidad por dividendo calculada en términos proporcionales de 3,9% arroja una rentabilidad de 17,6%, que en términos anuales asciende a 30,17%. Nuestra cartera de 2010 está compuesta por los valores descritos al comienzo del artículo: comprados a precio de cierre indicados (con los porcentajes siguientes). Sector telecomunicaciones: Deutch Telekom (10%), Belgacom (10%), Telefónica (10%), Energia EON (30%), Biotecnología natraceutical (10%), futuro oro (10%) y petróleo(10%) entregas Diciembre 2010. Mercados y bolsas de valores 27 AUDIT IBÉRICA Corporate Finance Jorge Perepérez Ventura Socio-Director. Economista miembro del Refor. (*) Las opiniones emitidas y los pronósticos efectuados en este artículo son estimaciones y valoraciones personales y no suponen una garantía de que necesariamente se vayan a cumplir. © Todos los derechos reservados. www.auditiberica.es