VIVIR LAS ELECCIONES DEL CAPÍTULO Entre Asambleas y Capítulos: nuestros nuevos gobiernos En las Constituciones de la Orden la importancia del concepto de gobierno no es formal sino sustancial. Es el humus que hace concreta la comunión, la corresponsabilidad, la ayuda y la unidad. La nueva Congregación se articula a través de cuatro provincias y de tres delegaciones. Unidas en el anuncio de la misericordia. E n las Constituciones de la Orden Dominica más de la mitad de las páginas están ocupadas por los capítulos y por los números que conciernen al Gobierno. Parece casi absurdo que se le dé mayor importancia, al menos en lo cuantitativo y descriptivo, al modo de gobernar que a los temas que hacen a la consagración a Dios y a la misión hacia los hermanos, que viven los dominicos y las dominicas. Sin embargo debe tenerse en cuenta que el Gobierno, para nosotros, dominicos y dominicas, es el modo en el que se organiza la cotidianidad, es la modalidad de la relación entre los miembros de la comunidad, de la relación de las diversas comunidades entre ellas y con el gobierno central. Es entonces el humus dentro del cual se vive todo nuestro ser para Dios y para los hermanos. El gobierno dominico no es algo agregado a la vida o un aspecto técnico. Es en cambio el modo, típico de la orden, de concretar la comunión, la corresponsabilidad, la ayuda, la unidad. Es, sobre todo, el modo de consagrar toda la vida de las comunidades y de la Orden a la Casa de Ibadan (Nigeria), Asamblea de la Delegación 10 misión. Esa es la razón por la cual en el Capítulo General Especial de Albi se dio tanta importancia al gobierno. Esa es la razón por la cual fue mucho el tiempo que dedicamos a la reflexión sobre las modalidades de gobierno de la Congregación recién nacida. Varias veces hemos vuelto sobre los hipoteticos mapas, derivadas de las hipotesis de gobierno de la nueva Congregación presentadas por los varios grupos de trabajo, y solo el 9 de enero de 2006, es decir, tres dias antes de terminar el Capítulo, hemos votado definitivamente el nuevo mapa de la Congregación. Esta es articulada en: cuatro Provincias: “San José” para las comunidades del Paquistan, “Beata Virgen del Rosario” para las comunidades de Italia, “América Latina” para las comunidades de Argentina, Uruguay, Perú y Brasil, “Guadeloupe” para las comunidades del homonimo país; dos Delegaciones: Francia-España y Nigeria; las comunidades de Uganda, Slovenia, Kabul y Londra, directamente bajo el gobierno de la Priora general. Solamente las dos Provincias de Paquistan y de Italia tenían un nombre al finalizar el Capítulo, porque como no tuvieron cambiamentos, quedaron como estaban conformadas antes de la unión de las dos Congregaciones. Finalizando agosto de 2006, cuando los Capítulos y Asambleas han sido celebrados, tenemos el nombre de las otras Provincias y Delegaciones: Provincia “Nuestra Señora de Guadeloupe” (América El Consejo provincial de Guadeloupe, con la Priora general Latina), Provincia “Maria Reina” (Guadeloupe); Delegación “Madre Gérine” (Francia-España), Delegación “Nuestra Señora Sede de la Sabiduría” (Nigeria). Leyendo las Deliberaciones del Capítulo General y algunas Recomendaciones, todas referidas al gobierno, se percibe cómo éste es un modo de vivir y de organizar la vida de la Familia en función de la misión. En efecto, se advierte en esas la preocupación por la cual ninguna parte de la Congregación quede abandonada a sí misma, que cada parte esté unida en una única y armónica vitalidad con el resto de la Familia, que el Gobierno general se preocupe y se ocupe de cada una de las partes y del conjunto de la Congregación para que todo tienda a su fin misionero. Queda entonces claro el sentido de los viajes que emprendieron tanto la Priora general en particular como también las Asistentes en los meses pasados, para poder estar presentes en los Capítulos Provinciales y en las Asambleas de Delegación, que fueron las citas más significativas de estos meses. Las varias comunidades de las Hijas de Madre Gérine esparcidas por el mundo, insertas en una cultura particular y en concretas situaciones históricas, sociales, religiosas ... viven la única misión de la Familia pero con el color especial que se les pide en el contexto en el que están presentes. Era entonces importante que la Priora general, garante del carisma, junto con sus Asistentes, estuviesen presentes en dichos Capítulos y Asambleas para sostener, ayudar, animar, discernir. La Priora General con su Consejo, en la sesión de marzo, decretó el nacimiento de otra Delegación que abarca algunas de las comunidades que el Capítulo había confiado al directo Gobierno de la Priora General, o sea las comunidades de: Eslovenia, Kabul, Londres; a éstas agregó otras dos comunidades “nacientes”: Tamai y Bari. Esta Delegación por ahora se llama “Delegación de las Fronteras”, nombre significativo en cuanto se refiere a su misión de ser intersección, cruce, puente, terreno común entre las diferentes naciones, entre el este y el oeste, entre religiones y culturas de Europa. Reunir en Delegación estas comunidades quiso significar una atención particular a la misión de las mismas, que hay una Delegada que piensa en ellas y que hace de enlace entre estas comunidades y el Consejo general. Quiso expresar el deseo y la diligencia para que también estas hermanas, con una misión tan delicada e importante, se sientan sostenidas y en comunión. La nueva peculiaridad de la única Congregación que hoy formamos es inequívocamente la unidad. La unidad de las hijas de la misma Madre que finalmente reencontraron el camino de la única casa, la unidad de dos ex-congregaciones que caminaron por senderos diferentes pero que se reconocieron desde siempre como hermanas, la unidad de comunidades internacionales e interculturales que en el regazo del carisma dominico viven el anuncio de misericordia, de compasión, de esperanza, de maternidad de Madre Gérine para un mundo lacerado y sufriente. Para concluir: gobiernos nuevos sí para la nueva Congregación pero que apuntan siempre hacia un único objetivo: anunciar la misericordia que para nosotros hoy es también experiencia viva y concreta de unidad. Hna. M. Elvira Bonacorsi o.p. Participantes al Capítulo Provincial de la América Latina: hermanas y laicos asociados o.p. 11