Indicaciones en la utilización del microscopio quirúrgico en la cirugía raquídea. INTRODUCCIÓN La Microneurocirugía Raquídea fue introducida hacia la segunda mitad de la década de 1970 por Caspar y Yasargil y actualmente incluye un conjunto de técnicas de importancia capital en el tratamiento de pacientes con enfermedades raquídeas. En algunas patologías resulta imprescindible como es el caso de los tumores intradurales; en otras, como en la hernia de disco lumbar, representa la técnica de preferencia y constituye el patrón contra el cual deben ser comparadas las demás técnicas. El microscopio quirúrgico no puede ser considerado como un instrumento más en el inventario de las herramientas utilizadas en la cirugía del raquis humano. Por el contrario, la incorporación del Microscopio implica la introducción de un amplio conjunto de elementos y técnicas que definen a la Microneurocirugía Raquídea. ¿Qué es, entonces, la Microneurocirugía Raquídea? Es un conjunto de técnicas, instrumental, abordajes y conceptos que tienen por objetivo mejorar el resultado global del tratamiento de los pacientes con enfermedades raquídeas. Dicho de otra manera, no se puede reducir a la simple incorporación del microscopio en las técnicas convencionales. Esta última circunstancia ha sido definida como pseudo-microcirugía. INDICACIONES DE LOS PROCEDIMIENTOS MICROQUIRÚRGICOS EN LA PATOLOGÍA RAQUIMEDULAR Las indicaciones de las técnicas microquirúrgicas aplicadas a la cirugía raquimedular son tan amplias que podrían ser definidas con mayor brevedad enumerando los procedimientos o patologías en las cuales no está indicada. La microcirugía no está indicada en las técnicas percutáneas y probablemente en la cirugía de la deformidad. El otro extremo lo constituyen los tumores intramedulares donde hoy en día no pueden ser aceptados otros procedimientos que no sean los microquirúrgicos. Es opinión de los autores que la introducción de técnicas microquirúrgicas mejora múltiples aspectos del resultado obtenido tras el tratamiento, aunque esto último no significa dejar de reconocer que muchos cirujanos raquídeos no lo utilizan en absoluto y que muchos pacientes se han beneficiado y se siguen beneficiando de este tipo de cirugía. Hay por lo tanto un amplio grupo de patologías en las que excelentes resultados pueden ser conseguidos con y sin técnicas microquirúrgicas, por ejemplo en la espondilosis lumbar. En nuestra práctica, utilizamos la técnica microquirúrgica en todos los procedimientos cervicales por vía anterolateral, y en todos los procedimientos cervicales, dorsales o lumbares que requieran descompresión de estructuras neurológicas. Como neurocirujanos, consideramos que la aportación más trascendental de nuestra especialidad al campo de la cirugía raquimedular es la introducción de la microcirugía. PRINCIPIOS GENERALES DE LA MICROCIRUGÍA RAQUÍDEA En nuestra opinión, la Microneurocirugía Raquídea debe respetar tres principios principales que, por otra parte, son los mismos considerados para otras áreas de la Neurocirugía. Independientemente de la patología de que se trata, desde la cirugía de la espondilosis en la tercera edad, hasta la cirugía neoplásica, se debe intentar que los porcedimientos sean sencillos, rápidos y que respeten las estructuras anatómicas y la función sin perder la eficacia, eficiencia y efectividad. El principio de sencillez no es -como ninguno de los restantes- absoluto ni dogmático. Significa que se debe intentar privilegiar las soluciones sencillas frente a las complejas. En diversos procesos, y muy particularmente, aquellos que interesan a la patología raquídea existe más de un camino, más de una técnica, más de un abordaje para alcanzar los objetivos en el plan de tratamiento del paciente. El concepto de sencillez debe ayudar a decantarnos por uno de ellos. La rápidez no significa apresuramiento ni premura sino más bien economía del tiempo. No tiene tanto que ver con la necesidad de realizar más procedimientos en menos jornadas sino con la mejora de los resultados globales de todos los procedimientos. Tampoco es un concepto aislado por lo que se puede aplicar el siguiente silogismo: el procedimiento debe ser tan breve como posible y tan prolongado como necesario. El elemento central no es el cronómetro sino la economía del tiempo y la economía del tiempo no se basa en la habilidad o brillantez del cirujano sino en la planificación de la cirugía y en la definición precisa de sus objetivos. La planificación de los procedimientos quirúrgicos, especialmente los complejos o los infrecuentes, es la parte más importante de la cirugía. La planificación debe partir de las manifestaciones clínicas del paciente, posteriormente se deben indicar e interpretar los métodos complementarios de diagnóstico, se deben definir con claridad los objetivos y considerar los medios quirúrgicos y no quirúrgicos para alcanzarlos, finalmente, se debe integrar esta información durante la planificación. Por último, la cirugía raquimedular debe intentar respetar al máximo las estructuras anatómicas. Otro silogismo puede explicar aquí el concepto: los abordajes deben ser tan limitados como posibles y tan amplios como necesario. La forma de ceñirse a este principio es específica de cada procedimiento. CONCLUSIONES La Microneurocirugía raquídea es la aportación más trascendental que ha hecho la Neurocirugía al tratamiento quirúrgico de las patologías de raquis humano. BIBLIOGRAFÍA Yasargil MG. Microsurgical operation for herniated disc, in Wullenweber R, Brock M, Hammer J, Klinger M, Spoerri O editores: Advances in Neurosurgery. Berlin Springer-Verlag, 1977:81-85. Caspar W. A microsurgical procedure for lumbar disc herniation causing less tissue damage througt a microsurgical approach, in Wullenweber R, Brock M, Hammer J, Klinger M, Spoerri O editores: Advances in Neurosurgery. Berlin Springer-Verlag, 1977: 74-77.