Ahora sí, el TLC parece casi a punto de firmarse http://www.portafolio.com.co/port_secc_online/porta_econ_online/2006-0126/ARTICULO-WEB-NOTA_INTERIOR_PORTA-2712287.html Edilma Pereira / Envíada Especial Muchos lo atribuyen al cansancio y otros a la presión que puso Perú al adelantarse en concluir la negociación del tratado con Estados Unidos. La eliminación de aranceles para los productos colombianos del agro que buscan ingresar al mercado de Estados Unidos es un asunto fundamental en la negociación del Tratado de Libre Comercio. Pero los empresarios colombianos aseguran que esto no es suficiente para garantizar el acceso real al principal mercado del continente. Esta preocupación ha motivado a los negociadores del TLC a buscar que en la mesa de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias se busque garantizar el acceso real al mercado estadounidense a partir del diseño de mecanismos que de manera ágil permitan solucionar los problemas que se presenten en el ámbito bilateral. La negociación de este tema ha sido bastante complicada desde un comienzo pues mientras E.U. quiere un texto con la menor cantidad de compromisos para garantizar el acceso real de los productos andinos, los colombianos esperan que de una vez por todas exista un marco confiable en el que se puedan resolver las diferencias y se garantice el ingreso de productos agropecuarios a ese mercado. Las expectativas se concentran en el desarrollo que tendrá este tema a partir de este viernes, cuando se surta oficialmente la reunión de la mesa. Previamente, los negociadores han concertado entrevistas y reuniones informales con directivos de los principales organismos encargados de control de alimentos y drogas (FDA), de control de plagas (Afix) y de otras entidades que manejan las normas sanitarias y fitosanitarias en Estados Unidos. Según el jefe negociador, Hernando José Gómez, el objetivo de estas reuniones es crear relaciones de confianza para lograr entendimientos que puedan reflejarse en una buena negociación. Gómez coincide con gremios y empresarios del agro que aseguran que el país necesita un texto en medidas sanitarias que vaya más allá de lo que logró Perú. La negociación en esta mesa apunta a conseguir que aparte del comité o grupo de trabajo que está contemplado en el texto estándar de la negociación, se adopte un sistema de planes específicos de trabajo. Esto implica que técnicos de los dos países trabajen de manera conjunta en el desarrollo de planes de trabajo para frutas, aftosa y los distintos problemas sanitarios que se presenten y en los que la normatividad esté generando cuellos de botella o barreras infranqueables de tipo comercial. Estos compromisos quedarían consignados en cartas adjuntas, que estarían acompañadas de memorandos de entendimiento entre las entidades que en cada país desarrollan estas labores de control sanitario. Aumenta el temor por mala negociación Los gremios del sector agropecuario reforzaron sus llamados de alerta ante los resultados de la negociación del TLC con E.U. y los efectos que pueda tener un mal acuerdo y le pidieron al Gobierno no seguir flexibilizando las aspiraciones colombianas. Para el presidente de Fedepalma, Jens Mesa, el equipo negociador por la presión de cerrar un tratado comercial podría olvidar las advertencias sobre la sensibilidad del sector y ceder herramientas de protección. Los avicultores también se unieron a esta alerta ante una posible "entrega" del sector. Según el presidente de Fenavi, Jorge Enrique Bedoya, hacer concesiones en el tema de los trozos de pollo dejaría tres grandes perdedores: "el país, la industria y el consumidor". En una carta envíada por el dirigente gremial al presidente Uribe, el sector "no puede aceptar que el acuerdo con Estados Unidos tenga como modelo otros tratados como el TLC que acaba de ser suscrito con Perú, sólo porque los americanos quieren evitar precedentes supuestamente negativos para negociaciones posteriores". El daño podría ser irreparable si se permite el ingreso de trozos de pollo americano, "porque el problema no es de competitividad sino que se origina en la distorsión del consumo en E.U., donde para el consumidor los trozos de pollo son un desecho", explicó Bedoya. La incertidumbre no es sólo de estos dos gremios. Ayer se reunieron en la SAC todos los afiliados para analizar la situación y las consecuencias de una mala negociación en el sector agropecuario que implicaría básicamente la falta de un acceso real al mercado de E.U., la desprotección de los sectores hipersensibles y la gradualidad de la apertura, lo que dejaría más perdedores que ganadores. El Gobierno, a la espera de que Estados Unidos sincere la negociación Luego de varias sesiones de ‘chequeo de realidad’ con los sectores productivos del país, que se cumplieron en las últimas dos semanas, los negociadores colombianos iniciaron ayer las reuniones de la que oficialmente se ha presentado como la última ronda para lograr el acuerdo comercial con Estados Unidos. Tras 20 meses de conversaciones, se espera que en esta oportunidad se ‘sinceren’ las posiciones de cada país y se logre por fin un acuerdo, lo que implica que los negociadores colombianos tendrán que hacer concesiones a cambio de obtener las ventajas que quieren. Para algunos sectores productivos, sólo ahora conocen en realidad qué es lo que el Gobierno buscará defender en la mesa. Para los negociadores, ya es hora de dejar las posiciones maximalistas y las peticiones alejadas de la realidad, porque de lo contrario se estaría arriesgando un acuerdo comercial de alcances importantes para el país. Entre los temas de mayor controversia están los de propiedad intelectual en medicamentos y de agricultura. En propiedad intelectual, los negociadores colombianos están en general conformes con el texto que ya firmó Perú pero buscará ir más allá peleando en la mesa tres asuntos que consideran fundamentales: aclarar el proceso de linkage -quién debe suministrar la información sobre patentes que se quieran sacar al mercado-; a partir de qué plazo se podrán conceder compensaciones por demoras en la oficina de patentes y agotamiento en la protección de datos de prueba Los productores de genéricos aseguran que estos temas son importantes pero que no se estarían dejando por fuera otros que, de no defenderse, podrían terminar afectando la salud pública y el acceso a los medicamentos. Los principales reparos que hacen es que en la definición de materia patentable que acordó Perú se dejan muchos vacíos que podrían permitir el patentamiento de segundos usos, la protección de datos de prueba va más allá de lo que Estados Unidos ha obtenido en cualquier tratado comercial. Washington