MÚNICH (Película de Steven Spielberg, 2005) El atentado La película trata del atentado terrorista que sufrió la delegación olímpica judía el 5 de septiembre de 1972, durante la celebración de los juegos olímpicos de ese año en la ciudad alemana de Munich, y de las represalias organizadas por el gobierno y por los servicios secretos israelíes. El comando palestino (perteneciente a la organización Septiembre Negro) pretendió tomar al equipo israelita como rehén para un canje de prisioneros. Los 8 miembros del comando atravesaron la verja de 2 metros de la residencia de la delegación israelí, haciéndose pasar por deportistas (por tales les tomaron 4 deportistas de la delegación estadounidense, que también saltaron con ellos). 8 miembros de la delegación lograron escapar; dos deportistas fueron asesinados a tiros al oponer resistencia, los 9 restantes fueron llevados en dos helicópteros al aeropuerto, donde un avión les estaría esperando. Sin embargo, la policía alemana les tendió una trampa: no había pilotos en el avión y francotiradores de la policía alemana dispararon sobre los terroristas árabes, una vez fue iluminada la pista. Fueron abatidos 5 de los 8 terroristas, pero les dio tiempo de asesinar a los 9 miembros de la delegación judía secuestrados (que estaban atados por los brazos a los techos de sendos helicópteros), mediante una granada que estalló en uno de los helicópteros (asesinando a 4 judíos) y ametrallando el interior del otro (asesinando a los otros 5). En la refriega murió un policía instalado en la torre de control. Los 3 supervivientes fueron encarcelados. Sin embargo, el 29 de octubre un avión de la Lufthansa fue secuestrado, exigiendo los terroristas la liberación de los 3 supervivientes del atentado; petición que fue atendida por las autoridades alemanas. El edificio residencial de la delegación olímpica israelí en Múnich La respuesta La primera ministra israelí Golda Meir asumió la responsabilidad de las represalias: Bombardeo de los campos de refugiados palestinos en Siria y Líbano. Preparación por el Mossad (servicio secreto israelí) de la Operación Cólera de Dios, para asesinar a los supuestos 11 responsables del atentado, todos ellos dirigentes de organizaciones vinculadas a la OLP y de la propia organización terrorista Septiembre Negro. En los años siguientes los responsables anotados irían cayendo uno a uno (el 22 de enero de 1979, tras varios intentos fallidos, Alí Hasan Salameh, 1 máximo dirigente de Septiembre Negro); todo ello dentro de una espiral de acción – reacción. El último superviviente de los atentados, Mohamed Daoud Oudeh, sobrevivió a un tiroteo organizado contra él en Varsovia, en julio de 1981. ASPECTOS A TRATAR Venganza La pregunta esencial es: ¿Cómo responder al terrorismo criminal? O mejor: ¿Está legitimada la venganza en casos de terrorismo? El contraterrorismo israelí, organizado por sus servicios secretos y por el ejército israelí, siempre ha tenido muy claro que la venganza es justa. La Biblia defiende la ley del talión como una ley que quiere Dios. Se trata de la correspondencia entre el castigo y el daño causado, para que no haya impunidad ni escaladas de violencia. La venganza es una manera de reparar el daño causado y sirve de advertencia a los criminales. ¿Ha funcionado en el caso del conflicto árabe-israelí? Realmente ha conducido a una escalada de violencia que todavía no ha terminado. Los líderes asesinados son reemplazados por otros nuevos (a menudo más radicales aún que los abatidos). Dados los resultados, se podría dudar de la eficiencia de los métodos contraterroristas. Sin embargo, la inoperancia o la rendición ante el chantaje terrorista son soluciones infinitamente peores. La contundencia en la aplicación de la ley, la eficacia de las fuerzas de seguridad del Estado y un endurecimiento de las penas parecen objetivos irrenunciables en esta lucha contra el crimen terrorista, una lucha que ha de ganar la civilización y el Estado de Derecho. En la película queda claro que la justicia terrorista sólo genera destrucción y nuevas represalias, en una escalada interminable. Sin embargo, los servicios de inteligencia de un país, que siempre 2 funcionan al margen de la ley, paradójicamente, lo que intentan es servir a la legalidad: la protección de la legalidad desde la ilegalidad; ese es el lema de los servicios de seguridad del Estado Agentes contraterroristas ¿Los agentes del Mossad que aparecen en la película eran unos asesinos? ¿Una acción de represalia se puede conceptuar como un crimen? ¿Asesinar a asesinos es cometer un crimen? ¿Los justicieros se colocan a la misma altura que los criminales? Son preguntas que parecen admitir una respuesta políticamente correcta, que no guarda relación con las represalias que aparecen en la película. Sin embargo, la película se posiciona en una empatía clara hacia los 5 miembros, que son los protagonistas de la película. Ellos tienen una humanidad, no son criminales, son soldados en una guerra nueva: una guerra contra el terrorismo que, desgraciadamente, es muy peligrosa y puede provocar numerosos daños colaterales. Los protagonistas de la película tienen personalidades muy diferentes: -Avner es el jefe del comando. Es una persona decidida, pero sabe sentir, ama a los suyos y, como todo ser humano, tiene sus dudas (sobre el valor moral de sus acciones) y sus debilidades (termina asaltado por la paranoia). Su afición a la cocina y su mirada, por la que parece asomarse siempre un punto de miedo, humaniza y suaviza su figura. Termina anteponiendo a todo su amor a su mujer y a su hija. -Steve es el que borra las pruebas. Parece flemático, sin embargo es capaz de dar salida a la cólera cuando se duda de su integridad. Esa misma integridad le lleva a dudar de si los objetivos del comando son realmente culpables y hasta qué punto; duda que también acabará asaltando a Avner. -Hans es aparentemente el más tranquilo y su función es facilitar el paso de fronteras, preparando documentaciones falsas para todos. Su determinación es, a veces, imprevisible. Igualmente, puede ser cruel (remata a la chica holandesa e impide que sea cubierta su desnudez), para arrepentirse más tarde. -Carl es el más explosivo del grupo. Tiene muy a gala su condición de judío y odia a los enemigos de su pueblo. Tiene un punto de arrogancia y otro punto de humor. -Robert es el fabricante de explosivos. Parece el menos resuelto y más inseguro del grupo. Él cree que las acciones en las que participa son justas y queridas por Dios. El ser judío es inseparable de ser justo. El mundo terrorista: un mundo muy peligroso Avner tiene un contacto en Alemania: Andreas. Es un miembro del grupo terrorista alemán Baader Meinhof (Rote Armee Fraktion: Fracción del Ejército Rojo), que a través de su novia consigue un contacto que le proporcionará su primer objetivo y un nuevo contacto, éste en París (Louis), que terminará siendo su contacto principal1. Su padre es el capo del negocio de información. ¿Pero es un servicio fiable para el comando judío? La película deja claro que ellos no se casan con nadie: Existen terrorismos entrelazados y el punto de información que ellos gestionan es un punto convergente. Se mueven en un mundo en el que nadie puede fiarse de nadie. El padre de Louis, que parece estimar realmente a Avner, juega limpio diciéndole la verdad. Posiblemente la muerte de miembros de su grupo haya sido consecuencia de la información suministrada por Louis. En correspondencia con la limpieza de juego del grupo de París, o tal vez por miedo, Avner no revelará su contacto al Mossad. En todo caso, del comando liderado por él, morirán 3 miembros y él mismo quedará tocado por la paranoia, tal vez para siempre: Llama al padre de Louis y pide al jefe del Mossad que comparta el pan con él, invitándole a cenar en su casa, invitación que éste declina. La CIA, que podría sentir simpatía por la causa judía (dado el importante lobby judío de Estados Unidos), interfiere en la operación del comando contra Salameh, salvando su vida, ya que éste había prometido respetar los intereses estadounidenses. 1 Su objeción a servir a gobiernos es un poco absurda: ¿De dónde procede la mayor parte del terrorismo y, sobre todo, del contraterrorismo sino de los Estados o, en todo caso, desde el apoyo y auspicio de algún Estado simpatizante con la causa de los grupos terroristas correspondientes? 3 Se trata de un mundo oscuro y enloquecedor, donde obtener información resulta muy caro en todos los sentidos2. Un hogar judío y un hogar palestino Avner, el protagonista, está comprometido con la causa de su nación y de su Estado. Su madre, que lo entregó a un kibutz (comuna agrícola judía en Israel), está orgullosa de cómo él defiende a su pueblo, empleando los métodos que sean necesarios, porque el fin justificaría los medios empleados. Pero esa misma determinación existe entre los líderes palestinos, que defienden el derecho de los palestinos a estar allí y tener su propio Estado3. Comida y cocina Lo más chocante de la película es la omnipresencia de la comida (Hay comida para alimentar a toda Bangladesh). Avner es un gran cocinero. El padre de Louis también. Ambos miman sus cocinas y convierten cocinar en un arte. Sin duda es uno de los motivos del afecto que parece nacer entre ellos. En nuestra opinión, las más grandes antítesis de la muerte son los placeres de la vida, entre los que se encuentra comer. La comida y comer como antítesis de la muerte. El sexo y el amor es otra gran antítesis de la muerte: La holandesa es asesinada en su yate semidesnuda (¿Por qué desperdiciar tanto talento?, dice antes de ser abatida a tiros y mientras descubre su desnudez). Ese hecho desata el conflicto vida – muerte en las conciencias de los miembros del comando con más fuerza que nunca (especialmente en Hans). Convivir tanto con la muerte les lleva a añorar las señas de identidad de la vida. Los miembros del comando judío del Mossad, según la película de Spielberg. 2 El comando israelí gastó dos millones de dólares de aquella época para abatir a 8 de los 11 terroristas árabes de la lista confeccionada por el Mossad. 3 Como sabe la Historia, la posibilidad de un Estado árabe en la zona estaba contemplada en una resolución de la ONU. Sin embargo, el mundo árabe (incluidos los árabes palestinos) jugaron desde el primer momento la baza de la guerra, dando como resultado una expansión del Estado de Israel y una escalada de violencia que todavía parece lejos de solucionarse, y que ha salpicado a occidente con actos terroristas y crímenes a granel por parte de grupos terroristas islamistas (vinculados al grupo principal Al Qaeda). 4