Sinopsis Pablo es un chico de 12 años. Todo el mundo lo conoce como "El Bola", porque siempre lleva entre sus manos una bola que dice que le da suerte. Él y sus amigos pasaban el tiempo libre jugando peligrosamente en las vías del tren. Pero todo esto cambia cuando conoce a Alfredo, un nuevo compañero del colegio. Alfredo le introduce en un fascinante mundo completamente distinto del suyo, que le permitirá olvidarse del terrible secreto que esconde: la violencia física y psíquica que recibe constantemente "a manos" de su padre. En casa de El Bola se respira una atmósfera angustiosa y sórdida. Una abuela demasiado vieja, el pesado recuerdo de la muerte de su hermano y los azotes de su padre hacen que El Bola tenga necesidad de escapar de ese mundo aprisionador. La familia de Alfredo es totalmente diferente. Viven en un piso grande y confortable, su padre se gana la vida como tatuador, y su madre se encarga del pequeño y divertido Juan, el hermano de Alfredo. Una tarde Jesús ordena a Alfredo que se quite el jersey. Le hace un tatuaje en la espalda, marcándole así para toda la vida el recuerdo de su padre. El Bola tiene otro tipo de marcas, cicatrices y moratones, que se borrarán con el tiempo, pero cuyo recuerdo durará toda la vida. En "El Bola" no sólo existe un retrato de la infancia, sino también de la dura madurez. Dos familias aparentemente opuestas, pero que ambas han tenido que aprender a sobrevivir a las circunstancias a las que los ha llevado la vida. La pérdida de un hijo, o la pérdida de un amigo enfermo de SIDA, son obstáculos que la gente mayor tiene que saber superar sin poder ya recurrir a la inocencia y la ingenuidad de la infancia. Referencias Primera película dirigida por el también actor Achero Mañas, quien consiguió un Goya en 1998 con el cortometraje Cazadores. Sus otro dos cortos, Paraísos artificiales y Metro, también recibieron numerosos premios. Está protagonizada por el joven de 12 años Juan José Ballesta, proveniente de la televisión y Pablo Galán, de 13 años, que fue seleccionado de entre más de 1.600 niños. También intervienen Alberto Jiménez (Todas hieren), Manuel Morón (Plenilunio, Yoyes, Todo sobre mi madre), Gloria Muñoz (Año Mariano) y Ana Wagener (Plenilunio). Se presentó en la Sección Zabaltegi del Festival de Cine de San Sebastián 2000. Entrevista a Achero Mañas ¿Cómo ha resultado el acercamiento hacia la historia de los personajes y el trasfondo del maltrato? Surgió como resultado de las experiencias de mis anteriores trabajos. Maduré la historia después de tratar con chavales de la calle, afectados por situaciones extremas de violencia. Hasta entonces quería abordar el mundo de la infancia, pero no sabia de que manera. La cinta parece más una obra de madurez. ¿Es usted consciente? No, siento muchas dudad sobre la película y algunos de sus elementos. No tengo la capacidad objetiva de analizar qué es lo que he hecho. Por eso, me parece atrevido pensar que he hecho una obra madura. ¿Cuáles son los aspectos con los que no se siente tan satisfecho? Siempre intento jugar al límite con la interpretación y frenar en el momento de caer en lo grotesco. Así se consiguen caracteres muy veraces, sobre todo en situaciones dramáticas. Pero intentar jugar al límite provoca que uno nunca sepa exactamente si se ha quedado corto. El final de la historia es algo que también me ha provocado interrogantes. De hecho, escribí cinco finales distintos. ¿Le ha resultado complejo retratar ese entorno de violencia sorda? No creo en el mal por el mal, pienso que muy poca gente hace le mal con premeditación y alevosía. La violencia esconde situaciones psicológicas concretas y cualquier persona puede llegar a ejercerla en algún momento extremo. Pero no quería justificar la violencia, sino situarla en su contexto y evidenciar que ciertas situaciones pueden ser incontrolables. ¿La escritura le motiva? Siempre digo que no soy un director vocacional. La dirección fue el resultado de una propuesta que surgió en un momento, como resultado de las historias que tenia escritas. Me interesan el factor humano y las situaciones de conflicto. En realidad, soy un contado de historias. ¿Se considera un cineasta comprometido? Intento seguir una línea consecuente con lo que pienso y no traicionarme a mi mismo. Eso es lo que me propongo a la hora de escribir. Como actor ya me he traicionado y he hecho suficientes películas para poder comer. ¿Cree que el estado de salud de las nuevas generaciones es bueno? El cine y el arte pasan por un momento concreto, que cada vez resulta más difícil de ubicar en un espacio y tiempo correctos. Ya no hay movimientos. Salvo el Dogma, que se entiende como un intento por crear una escena que luche contra esa excesiva individualidad y la dinámica por la que las cosas se comen y se tiran a la basura. Pero el cine español vive momentos de saltos continuos. Entre todo el cine que se está haciendo, saldrá gente que sea constante y que esté interesada en contar historias Ficha Técnica Dirección y guión Producción Ejecutiva Producciór Asociado Fotografía Diseño de producción Dirección artística Montaje Música Maquillaje Vestuario Género País Duración Achero Mañas. José Antonio Félez. Francisco Lázaro Juan Carlos Gómez. Goldstein & Steinberg. Satur Idarreta. Nacho Ruiz Capillas. Eduardo Arbide. Susana Sánchez. Mar Bardavio Drama Social España 2000 88 min. Breve Crítica No puedo dedicar a Achero nada más que alabanzas por este pedazo de mundo que nos ha puesto delante de los ojos. Mañas nos dice: “¡Eh! Gente. Esto es lo que hay. No apartéis la cara porque sabéis que es verdad”. Nos presenta la realidad como es, con sus verdades y sus vergüenzas. No nos oculta nada pero no pretende escandalizar. La belleza debe ser bella, la violencia, violenta. Lo que es, es. Achero Mañas no se implica en la historia como hacen muchos directores, se limita a mostrar la realidad cruda y hermosa como en un aterrador escaparate. No hay frialdad pero sí una tremenda invisibilidad del autor que no nos maneja, no nos provoca, sólo advierte. Mañas nos sube a una figurada montaña rusa de sensaciones. Otra sabia amiga mía saltaba de la butaca a mi lado cuando el Bola cruzaba peligrosamente las vías del tren y lloraba cuando el padre descargaba brutalmente su ira contra su hijo. La misma amiga sonreía y la sonrisa se tornaba en amargura en cuestión de segundos. Lo confieso, a mi me ocurría lo mismo. Y el culpable es Achero. Son bocados de vida que no están tan lejos de nosotros.Y son los desconocidos actores los que acaban de dar forma a esta película. Los niños están geniales todos y sus palabras parece que no vienen de una pantalla sino que las hemos oído en la calle. No son actores, son niños. Y los niños se expresan, aunque no lo sepan, por la mirada; y la de Juan José Ballesta en el papel de El Bola no puede ser más expresiva. El no encontrar caras conocidas hace que nos olvidemos de que son actores y es por eso por lo que lo que vemos en la pantalla es a ese vecino que vive arriba y tiene la mano un tanto larga, a esa abuela cansada de vivir o a ese niño que cruza la calle solo todos los días. 'El Bola' es una película sólida, firme, emocionante, real. Una película recomendada y para recomendar. No se preocupen si les cuesta encontrar un cine donde la proyecten. Sólo resígnense porque los niños no venden en las grandes salas salvo que vean muertos o manejen sables láser. La decisión es suya. Gracias Achero. Cineclub@salleurl.edu Reparto Juan José Ballesta Pablo Galán Alberto Jiménez Manuel Morón Ana Wagener Nieves de Medina Gloria Muñoz Javier Lago Omar Muñoz Soledad Osorio Pablo “El Bola” Alfredo José, padre de Alfredo Mariano, padre de “El bola” Laura, asistente social Marisa Aurora, madre de “el Bola” Alfonso, amigo de José Juan Abuela de “El bola”