Al momento de su captura, llevaba consigo cartas de

Al momento de su captura,
llevaba consigo cartas
de recomendación del
Rey que lo salvaron de
ser objeto de severos
castigos, pero también
fueron la razón para que
sus captores pensaran que
era una persona de gran
importancia, por lo que
cobraron una elevada suma
de dinero por su liberación.
Cinco años debieron pasar
antes de que sus parientes
reunieran la cantidad para
pagar el rescate. Fue de
esta manera que Miguel
regresó a casa.
Su familia estaba en la ruina, por lo que la
responsabilidad de sostener el hogar recayó
sobre él. Optó por seguir trabajando, aunque
su brazo no le servía de nada y su sueldo en
la milicia no era suficiente para mantener a su
familia.
En 1587 fungió como comisario de abastos
de la Armada, pero los proveedores eran
muy deshonestos y fue encarcelado debido
a falsas acusaciones. Fue en estos momentos
cuando su vida dio un giro que la humanidad
le agradecería, ya que durante uno de sus
periodos de cautiverio nació la inmortal
novela cervantina Don Quijote de La Mancha.
Aunque no se tiene certeza
si allí empezó a escribirla o
sólo creó la idea, fue a partir
de ese periodo que cambió
la historia de la literatura,
pese a que Cervantes ya
había escrito La Galatea,
varios dramas y obras
teatrales.
En El Quijote, cada aventura
sobrepasa a la anterior en
sus más de mil páginas,
en las que el verdadero
significado de la novela
se crea e interpreta
dependiendo del lector.
Algunos dicen que se trata
de uno de los libros más
graciosos jamás escritos, en el cual se percibe
al humor burlesco como una parodia de las
novelas de caballería.
La obra relata la historia de un noble caballero
español en el pueblo de La Mancha, Alonso
Quijano, quien después de perder el juicio
tras leer día y noche novelas de caballería,
anhela convertirse en uno de esos héroes y
se proclama a sí mismo como Don Quijote de
La Mancha, un idealista que quiere enderezar
los males del mundo. En la obra, la gente del
pueblo se ríe de este noble soñador, el cual
también dedica su vida a perseguir su amor
platónico por Dulcinea del Toboso.