Reconocimiento dd trijo

Anuncio
Núm. 1 3 - 6 octubre 1906
INDUSTRIA E
SUMARIO
Kcconocimiento del trigo para la molinería, por M. de M. — La
utilisación de las aguan del Tilieaca para fuerza motriz. —
Ésealcruspcrfeecionadas (ilustrado, flgs. 21 y 22). — Proeedimiento para endurecer la madera. — Toneles de corcho. — Correas de pelo para Ira^ismisioncs.— KEVISTA DE LA ELECTIÍICIDAD: Nuevo reflector para lámparas eléctricas.—Nuevo
horno eléctrico do inducción do M . Gin. — NOTICIAS VAlilAS : El Fomento del Trabajo Nacional j los tratados de
Comercio. — Las obras del puerto de Barcelona. — Premios
para el empleo del alcohol. — REGISTRO DE PATENTES :
Pagos de anualidades. — Patentes solicitadas. — REGISTRO
DE MARCAS : Marcas solicitadas. — DIBUJOS DE MARCAS SOLICITADAS. — REGISTRO DE NOMBRES COMERCIALES: Nombres comerciales solicitados.— Nombres
comerciales concedidos y denegados.
PRECIOS DE SUSCRIPCIÓN
España y Portugal, un semestre
10
pesetas
Extranjero
»
1°
'''•
Número suelto
. . . . . . • • •
0'50 id.
Los pagos de suscripciones y anuncios se harán por adelantado,
libres de gastos por envió ú giro. — No se admiten reclamaciones después de los tres meses de la publicación de cada número.
Reconocimiento dd trijo
para ia molinería
El matiz del trigo blanco es algo rubio, debiendo ser
"Vivo, claro; cuando está tomado, es señal de alguna
enfermedad sufrida antes ó después de la cosecha. El
trigo blanco degenera con facilidad ; se hiela, es decir,
que el grano queda duro y transparente ; en este caso
contiene menos harina blanca, es difícil de moler y
casi no sirve más que para la confección de fideos, macarrones y demás pastas de esta especie.
En todos los mercados se distinguen tres calidades
de trigo, sea cual fuere su variedad, á saber: superior,
corriente, común ó inferior.
El matiz del trigo rojo de primera calidad es de un
amarillo claro, amarillo de oro, como dicen los molineros. Los trigos de segunda calidad son de un color
más turbio ; en esta clase figuran trigos de buen origen, pero algo helados, y no dan la harina muy blanca. El tercer grupo comprende algunos trigos que
tienen defectos esenciales; su color es generalmente
de un gris apagado.
En los trig'os no es indiferente la forma, aun á igualdad de colores. Los trigos de ñor, ó sean los de preferencia, ni son cortos ni largos, su tamaño ofrece un
término medio; la raya ó surco que divide el grano
en el sentido de su longitud, debe estar bien hecha y
tener sus bordes bien marcados. El molinero es poco
aficionado á granos largos, su película es más gruesa
y su harina más empañada. La forma de los trigos
de marzo, que es más redonda, es también menos estimada ; esos trigos son asimismo más difíciles de
moler; pero su defecto esencial consiste en dar una
barina escasa y que se conserva mal, produciendo un
pan poco sabroso y que se deseca fácilmente.
El peso del trigo es una cualidad esencial; un buen
comprador, al meter la mano en un saco de trigo, debe
saber apreciar con exactitud el peso; mano hay tan
INVENCIONES
Tomo 46 - 129
práctica en esto, que casi no se engaña nunca. El peso
es la señal de la buena calidad; cuanto más pesa un trigo, más estimado es; sin embargo, los trigos algo
helados son generalmente más pesados que los trigos
finos, y éstos, aunque más ligeros, deben ser preferidos cuando reúnen por otra parte todas las demás cualidades. En nuestros buenos años, el trigo de primera
calidad pesa de 19 á 80 kilos por hectolitro ; el de segunda calidad, de 11 á 78, y de 75 á 76 el de tercera.
«Nosotros, dice Mauny, teníamos una pequeña balanza, construida en los talleres de M. Lerebours, ingeniero óptico, situados cerca de Pont Neuf, con la
cual se podía pesar un octavo ó un dieciseisavo de
litro, y mediante una muestra, por pequeña que fuese,
evaluar el término medio de una cantidad de trigo
más ó menos considerable. Esta balanza estaba establecida en virtud del principio de la romana, y excusado es decir cómo nos gobernábamos nosotros para
hallar las diversas proporciones entre la medida y el
peso reales y los que se trataba de conocer. El examen
de la máquina bastará para adquirir este conocimiento,
y recomendamos su adquisición á todos los moliqeros
y negociantes de granos. Los holandeses se sirven
también de pequeñas balanzas de ensayo, cuya construcción está fundada en otro principio; pero nos parecen inferiores á la que acabamos de describir».
El estado de sequedad se reconoce con la mano;
cuando el trigo es seco, la mano y el brazo penetran
en el montón con facilidad; el trigo es fluido, dicen entonces los negociantes. Cuando es húmedo, por el
contrario, la mano penetra difícilmente en el montón;
dícese entonces que el trigo es recio ó áspero; es poco
suave al tacto y no suena en la mano como el trigo
perfectamente seco.
La limpieza del trigo influye también mucho en su
calidad y precio. Para que un trigo sea bien limpip, es
menester que el grano sea casi de igual tamaño, que
no tenga pajas, ni alverja, ni neguilla, ni cizaña, ni
caries. El trigo ennegrecido por la caries es muy difícil de limpiar; esta caries es negra, aceitosa é infecta;
á excepción del lavado, casi no hay nada que pueda
por completo depurar el trigo negro. Hay un aparato
con el que se ha alcanzado del todo el objeto deseado.
Este aparato, inventado por M. de Maupeon, lava el
trigo y lo seca en una corriente de aire calentado, en
menos de quince minutos.
Los trigos adquieren cierto sabor cuando han sido
mal cuidados ó colocados en graneros húmedos. Cuando un negociante ha tenido en la mano un trigo poco
suave, debe tener cuidado de averiguar si tiene sabor,
lo que en términos de molinería quiere decir mal sabor
ó más bien mal olor. Cuanto más pronunciado es este
defecto, más el trigo pierde en valor; la harina resultante conserva este mismo tufo y da mal pan. Los trigos adquieren comúnmente este defecto cuando empiezan los calores, ó bien cuando han permanecido
mucho tiempo dentro los buques. El aparato de M. de
Maupeon quita también al trigo ese mal olor.
Tales son las condiciones con. que un negociante
distingue las calidades del triPó, sin cuyo conocimiento no puede obrar con provecho.
A todo cuanto acabamos de decir, y que debemos al
sabio redactor del Echo des halles et marches, vamos á
añadir lo que hemos podido aipsender por nosotros
mismos, ya en nuestra práctica sobre agricultura, ya
en el examen de los trigos en los graneros.
Es útil al molinero y al negociante de trigo informarse con exactitud del estado de los cultivos en va-
Descargar