La Sección de nuestros expertos Algunas novedades de la nueva Ley de Auditoría Frederic Borràs Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales MORERA ASESORES & AUDITORES El pasado 13 de febrero el Consejo de Ministros aprobó la remisión a las Cortes del Proyecto de Ley de Auditoría de Cuentas (PLAC) con el objetivo de adaptar la normativa española a la comunitaria antes de que finalice la presente legislatura y de mejorar la confianza de los usuarios de la información financiera que se audita. La crisis financiera acaecida en los últimos años ha llevado a cuestionar la adecuación y suficiencia del marco normativo, acometiéndose un debate sobre cómo la actividad de auditoría podría contribuir a la estabilidad financiera. Con esta nueva ley se pretende introducir las mejoras que se han determinado como necesarias para intentar mejorar el papel del auditor, de la misma manera que se ha intentado mejorar el papel de las agencias de “rating” y el sistema financiero. Hay que anticipar que este proyecto puede sufrir modificaciones considerables en su tramitación parlamentaria debido, entre otros motivos, a las críticas que las corporaciones de auditores están haciendo a algunos de sus contenidos. Uno de los aspectos más significativos del PLAC es la especial consideración que da a las Entidades de Interés Público (EIP), que comprenden las entidades financieras, las cotizadas en bolsa (incluidas las del MAB) etc. ya que tienen una regulación específica, como es la limitación del periodo en que pueden tener el mismo auditor, y que no puede exceder de diez años. No obstante contempla que se podrá prorrogar hasta un máximo de cuatro años, siempre que se haya contratado de forma simultánea al mismo auditor junto a otro para actuar conjuntamente (coauditoría) en el período adicional. Otro aspecto referido a las EIP que contempla el PLAC es el de reforzar las funciones atribuidas a las comisiones de auditoría con objeto de fortalecer su independencia y capacidad técnica. Las empresas que no cumplen los requisitos para ser consideradas EIP continúan con los mismos términos en cuanto a que los nombramientos de auditor iniciales pueden ser para un periodo mínimo de tres años y un máximo de nueve, pero estos nombramientos pueden ser renovados a su vencimiento. La limitación del periodo de relación profesional con el auditor es una de las medidas con las que la normativa pretende reforzar la independencia y objetividad de los auditores en el ejercicio de su actividad, y a este efecto incorpora una lista de servicios prohibidos, es decir que el auditor no puede prestar a las empresas que audita. No entramos en el detalle de estos servicios ni otros aspectos de PLAC que pueden cambiar en su tramitación parlamentaria y en todo caso nos emplazamos con el lector para ir informándole a medida que se vayan conociendo nuevos cambios o sobre aspectos que puedan considerarse definitivos.