¿qué es el factoring?

¿QUÉ ES EL FACTORING?
Básicamente es una operación de cesión de créditos entre un cliente y una
firma especializada en operaciones de este tipo.
En toda compraventa tenemos a un vendedor y un comprador. El vendedor
entrega las mercancías o servicios y debe esperar a que, el comprador que ya
tiene las mercancías o servicios en su poder o incluso puede tenerlas vendidas,
le pague.
Desde que el cliente se compromete a realizar la compra, el vendedor ya
empieza a asumir riesgos como el de un retraso en el pago o el posible
impago, por tanto, debería analizar si ese potencial cliente es merecedor de
crédito.
Por tanto el vendedor debe poner todo su empeño en conseguir un buen final
para sus ventas y buscar todas las garantías de éxito posibles.
La insolvencia de los compradores así como su cobertura de estos riesgos
están consideradas como el eje central del factoring. Esta es una herramienta
de gestión que permite a la empresa la oportunidad de trasladar todos los
riesgos comerciales, al desaparecer la incertidumbre del cobro de sus créditos
gracias al factoring.
El siguiente gráfico presenta una perspectiva de las operaciones básicas que
se producen en una operación de factoring.
A
VENDEDOR
COMPRADOR
B
3
4
1
5
2
FACTOR
(A) Operaciones comerciales
(B) Notificación al comprador de que se produce la cesión de créditos a la
firma del factoring.
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Solicitud de propuesta de análisis de los créditos
Firma el contrato
Envío de las remesas de las facturas
Prestación de los servicios de factoring (financiación, gestión de cobro,
etc.)
5) Pago del comprador al factor
EL FACTORING
El factoring clásico proporciona los siguientes servicios:
1) Cobertura del riesgo de crédito al 100% de las deudas (previo estudio de
las mismas).
2) Gestión del cobro y administración de las deudas.
3) Financiación de hasta el 80-85% de las deudas.
No obstante el factoring puede admitir diversas modalidades según las
necesidades del cliente.
I. Factoring “con recurso”. Si las deudas por la solvencia del cliente, están
suficientemente garantizadas, no será necesario pagar primas especiales por
la cesión de las deudas “sin recurso”.
II. Factoring sin financiación. Si la empresa tiene suficiente tesorería, puede
resultar interesante esta modalidad.
COSTE DEL FACTORING
Inicialmente se le pide al cliente todos los documentos relacionados con los
créditos cedidos al factor (pedido, albarán, factura, etc.), aquí se puede
aprovechar las ventajas que nos proporciona la informática.
En el momento de la cesión, se generan unos gastos para el cliente derivados
de la comisión del factoring y calculados sobre el importe de los créditos
cedidos, se sitúan en torno al 1,50%.
Aunque no hay regla al respecto y más bien parece que se trata de la
seguridad que merece al factor su cliente, se procederá a anticipar los créditos
cedidos en el entorno del 90% de los mismos.
La financiación conlleva unos intereses referenciados al tipo de mercado
interbancario de Madrid (MIBOR).
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En estudios realizados en algunas empresas se ha llegado a cifrar el ahorro de
costes que supone contratar los servicios de un factoring en un 2% de la cifra
de las ventas.
EL PAPEL DE FACTOR
El factor es una empresa especializada a la que se ceden los créditos
originados por la gestión comercial y es el factor el que asume el riesgo de
insolvencia garantizando el buen resultado de la operación.
El factor analizará la capacidad financiera de cada deudor y podrá mostrar su
conformidad o desacuerdo con la cobertura total del riesgo, bien de las facturas
presentadas, bien de la línea de crédito fijada.
El factor también tiene la posibilidad de adquirir en bloque todos los créditos de
los derechos de cobro de unos determinados clientes de forma que la empresa
factorizada quedará obligada a ceder todos los créditos que se originen en las
ventas realizadas a unos determinados clientes.
El artículo 347 del Código de Comercio formaliza y perfecciona mediante el
mero consentimiento de la empresa factorizada y el factor sin mediar
consentimiento del deudor la cesión de sus créditos. El deudor será informado
de la transferencia de su deuda a través de una notificación.
La notificación que la debe realizar el vendedor, deberá constar en la factura
que se envía al comprador, quedando obligado el comprador a liquidar su
deuda a la compañía de factoring como acreedor subrogado y único acreedor.
Si tras vencido el plazo de cobro las facturas resultan impagadas, la empresa
de factoring deberán pagar a su cliente su importe e iniciará las gestiones
oportunas correspondientes al contencioso.
ALGUNAS OBJECIONES
Desde hace unos pocos años el papel que han jugado las nuevas tecnologías
ha modificado ciertos hábitos de pago, como sustituir los recibos y letras por las
transferencia, es el llamado uso de pago por reposición.
En la mayoría de las cuentas a cobrar no existe documento de cobro de
soporte, ya que se cobran por reposición, razón por la que las entidades
financieras no anticipan los créditos mediante el descuento.
Las empresas con dificultades financieras son detectadas por las entidades de
factoring que analizan su situación actual y sus expectativas de futuro. De esta
forma, el cliente obtiene una calificación que servirá para aceptar o denegar la
aceptación de sus facturas para su descuento.
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Pero el principal inconveniente que tiene factoring es su elevado coste. Un
coste que según las entidades de factoring es aparente ya que se debe valorar
el servicio analizando otras prestaciones y ventajas que ofrece el factoring.
En el fondo hay poderosas razones como la confidencialidad de las
operaciones comerciales. Se trata del corazón de la empresa, de los clientes.
Es un aspecto muy sensible como para ser gestionado exteriormente.
FACTORING, VENTAJAS PARA LA EMPRESA
El factoring es un producto ideal para aquellas empresas que concedan
créditos comerciales a sus clientes y éstos tengan un carácter repetitivo.
El factoring ofrece como principales ventajas:
I. La posibilidad de financiación acorde a sus necesidades ya que puede
determinar el volumen o número de facturas que cederá al factor.
Lógicamente la operación devengará intereses, pero tendrá la posibilidad de
pagar intereses a un mes vencido y no al descuento con el efecto tirón que
ello implica.
II. Las tareas administrativas relacionadas con la gestión de cobro de los
créditos comerciales la realiza el factor. Este hecho es uno de los objetivos
más perseguidos por las empresas, el externalizar determinadas tareas con
el consiguiente ahorro económico y funcional que ello supone.
III. Cualquier empresa que venda a crédito necesita disponer de un
departamento de riesgos que analice la solvencia y el nivel de riesgo en el
que puede incurrir con sus clientes. Gracias al factoring las empresas podrán
disponer de ese departamento sin coste alguno.
IV. Es conveniente para empresas que venden a Organismos Públicos que
pagan con retrasos muy notables o con total incertidumbre en cuanto a la
fecha de pago.
V. Para empresas que vendan o quieran vender al exterior.
VI. Empresas que deseen reducir los saldos de cliente al objeto de mejorar los
ratios de sus balances. Son operaciones de maquillaje de balances ya que
una vez obtenido el anticipo, éste no es considerado como un
endeudamiento, sino como cobro anticipado de las deudas.
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