Misión Internacional de Investigación: Violencia contra la Mujer en México, Honduras y Guatemala Una misión de investigación de diez días a México, Honduras y Guatemala comprobó que la violencia contra la mujer ha alcanzado proporciones de crisis en los citados países. La delegación de mujeres compuesta por activistas de derechos humanos, periodistas y expertas en política exterior, dirigida por las ganadoras del Premio Nobel de la Paz Jody Williams y Rigoberta Menchú Tum, y Asociadas por lo Justo (JASS), viajó a la región del 21 al 31 de enero y escuchó más de doscientos testimonios de mujeres sobrevivientes y organizadoras de base, periodistas y defensoras de los derechos humanos; así como se reunió con los presidentes Porfirio Lobo y Otto Perez Molina, la Fiscal General de México Marisela Morales, y otros funcionarios de alto nivel. La delegación documentó numerosos casos de femicidios, desapariciones, violaciones, ataques contra las defensoras de derechos humanos, violaciones de los derechos humanos de las mujeres y persecución en los tres países. Las mujeres declararon que los ataques provienen de la delincuencia organizada y de las fuerzas de seguridad gubernamentales encargadas de la lucha contra la delincuencia y la proteccion de los ciudadanos. Una de las conclusions más preocupantes fue que los gobiernos, si bien reconocen formalmente el problema, en la práctica están haciendo muy poco para disminuir la violencia, particularmente en los casos en que las fuerzas gubernamentales están involucradas. En algunos casos, los gobiernos están directamente implicados en la violencia. La intensificación de los delitos de extrema violencia y la represión dirigida contra las mujeres quedan en gran medida sin investigar, ni resolver y sin castigo, debido a las instituciones estatales frágiles, deficiencias graves en los sistemas políticos y judiciales de estos países y a la falta de voluntad política para reformar las políticas e instituciones que implícitamente los toleran. El aumento de la militarización y la represión policial con el argumento de la guerra contra las drogas ha generado más violencia en general y ataques más frecuentes contra las mujeres, quienes dirigen sus esfuerzos para proteger sus comunidades contra las amenazas a sus tierras y recursos naturales, y protestan de los abusos militares y policiales. Durante la misión de investigación, las mujeres en los tres países instaron repetidamente al gobierno de Estados Unidos a que cese el financiamiento de las abusivas fuerzas de seguridad, y a canalizar la ayuda a los programas sociales que fortalezcan los derechos humanos fundamentales y la democracia. Un aumento alarmante de femicidios, mientras se incrementa el gasto militar: • En promedio, una mujer es asesinada cada día en Honduras. Honduras tiene ahora la tasa de homicidios per cápita más alta del mundo. Los femicidios aumentaron a 257 por ciento entre 2002 y 2010. Durante el mismo período, la ayuda militar y policial de EE. UU. a Honduras casi se duplicó y, más recientemente, la ayuda militar y policial de EE. UU. se triplicó. • Durante el régimen golpista, a partir de junio de 2009 y el régimen post golpista encabezado por Porfirio Lobo, ha habido un incremento en femicidios, a menudo con la complicidad o el involucramiento de funcionarios de gobierno y fuerzas de seguridad estatales. Poco después del asesinato de civiles durante una redada de drogas patrocinada por la DEA en Honduras el mes pasado –en la cual murieron dos mujeres embarazadas– el presidente Porfirio Lobo pidió más ayuda militar para Honduras. • En México, los femicidios han aumentado en un 40 por ciento desde 2006 en el contexto de la guerra contra las drogas, la cual ha dejado más de 50.000 muertes, 250.000 desplazados y miles por desaparición forzada. La ayuda militar y policial de EE. UU. a México fue más de 500 millones de dólares en 2010, en comparación con los 20 millones de dólares en 2000 –esto representa un aumento de 2400 por ciento. • El estado fronterizo mexicano de Chihuahua tiene una tasa de homicidios de mujeres de 34,73 por 100.000 —15 veces más alta que la tasa mundial. Los femicidios en Chihuahua (donde el femicidio sistemático se detectó en Ciudad Juarez en 1993) aumentó 1.000 por ciento entre 2007 y 2010 –el período cuando la Operación Chihuahua, una ofensiva de guerra contra las drogas respaldada por el gobierno de Estados Unidos, se puso en marcha. • 685 mujeres fueron asesinadas en Guatemala en 2010, en comparación con 213 en 2000. La ayuda militar y policial de EE. UU. a Guatemala en 2010 es tres veces más alta de lo que era en 2000. Ausencia de Justicia: • Más del 95 por ciento de delitos nunca son castigados en los tres países visitados. La mayoría ni siquiera son investigados por las autoridades. Los tribunales discriminan a las mujeres rutinariamente y con frecuencia acosan a las mujeres que interponen denuncias o peticiones para que se haga justicia. La falta de acceso a la justicia para las mujeres indígenas y las descendientes de África es dramática. • El uso de falsas acusaciones penales contra las activistas se ha convertido en una táctica común para asustar a las activistas de derechos humanos y parar sus actividades. • 200.000 personas fueron asesinadas y 100.000 mujeres violadas durante el genocidio en Guatemala en la década de los años 80; cientos de miembros de la oposición política fueron asesinados o desaparecidos durante la guerra sucia mexicana de las misma época; y cientos de personas han sido asesinados durante y después del golpe de Estado en Honduras en 2009. Incluso, muy pocos de estos casos se han llevado ante los tribunales. Las Defensoras de Derechos Humanos Están Expuestas a Agresiones • En 2010 y 2011, 24 defensoras de derechos humanos fueron asesinadas en la región (14 en México, 2 en Guatemala y 8 en Honduras). • Las defensoras de derechos humanos son a menudo objeto de detenciones ilegales, persecuciones, malos tratos crueles e inhumanos, violaciones, robos, intimidaciones, asesinatos, amenazas contra ellas y sus familias, y allanamiento de morada. • Cada día, en promedio, hay por lo menos un ataque contra defensores de derechos humanos en Guatemala. El ochenta y tres por ciento de los ataques van dirigidos a activistas que trabajan para proteger sus tierras y recursos naturales. Para obtener mayor información: Rachel Vincent, Iniciativa de las Mujeres Premio Nobel (Nobel Women’s Initiative) rvincent@nobelwomensinitiative.org 613-569-8400, ext. 113 Lisa VeneKlasen, Asociadas por lo Justo (JASS) Lisa.veneklasen@justassociates.org 202-232-1211