EL SOCIALISMO Omar Fernández Russo, 1988 Como sistema económico tiene una corta existencia desde el punto de vista de su funcionamiento. Sin embargo, las tesis o postulados teóricos datan desde el Renacimiento con los aportes efectuados por Thomas More en su libro Utopía. Pero a pesar de que los planteamientos teóricos tienen ya bastante tiempo, la mayoría de las personas identifican el modelo socialista con los puntos básicos de la teoría marxista. Y es el hecho, trascendente, que es a partir de Carlos Marx (1818-1883) cuando las tesis socialistas comienzan a ser estudiadas, perseguidas y defendidas, lo cual le proporciona cierto grado de paternidad a este pensador por la totalidad del pensamiento socialista. Sin embargo, el desarrollo del llamado mundo socialista ha sido, en este siglo, muy desigual y la adopción de los postulados de Marx se ha hecho, en algunos casos, de una manera extremadamente rigurosa mientras que, en otros ejemplos, la interpretación de dicho enfoque se ha realizado de forma muy liberal. De esta manera encontramos, en líneas generales, varias formas o modelos socialistas en el mundo de hoy, los cuales tiene entre sí puntos de coincidencia y muchos pun- tos opuestos. Así llamaremos —sólo con fInes didácticos y para diferenciarlos— al socialismo implantado en la Unión Soviética, China, Cuba y Europa Oriental (con excepción de Yugoslavia) socialismo soviético. Denominaremos al socialismo existente en Suecia, Norue- ga, Finlandia, Dinamarca y Holanda como un socialismo en democracia. Para comprender las diferencias fundamentales entre ambos modelos, así como sus elementos coincidentes, es preciso partir de la idea original, es decir, de Marx, y luego descender hasta la aplicación práctica de dichas ideas. 4.1 El Socialismo de Marx En primer lugar es saludable decir que Marx se ocupó muy poco de explicar y de estudiar el modelo socialista. Su preocupación central estuvo en el examen de las sociedades capitalistas y su inevitable destrucción. Pero, a pesar de esto, se han extraído los postulados fundamentales de la nueva sociedad, los cuales podemos resumir de la siguiente manera: la propiedad social sobre los medios de producción, lo cual significa que es la sociedad, por entero, quien debe ser la poseedora de los medios que se utilizan para producir los bienes y servicios que se requieran para satisfacer necesidades humanas. Esto señala una diferencia sustancial con los anteriores sistemas económicos donde, de una u otra forma, se establecía la propiedad privada sobre las tierras, minas, bosques, fábricas, etc.; el Estado como administrador de la propiedad social, nos indica que corresponde al Estado ser en la sociedad socialista, el que administre, en nombre y representación de la comunidad, la propiedad y proteja la distribución de los beneficios que el proceso productivo genere; sistema de planificación centralizado, es otra de las características básicas de la sociedad socialista, pues corresponde al Estado como administrador de la propiedad, de acuerdo al interés de la comunidad, planificar la 1 utilización de los recursos en función de los bienes y servicios que se han de producir así como las expectativas para lograr el crecimiento y el progreso económico de la nación. El plan general del sistema es la normativa general para todas las unidades económicas y ellas deben ceñirse a dicho plan; Ios precios de los factores productivos y de los bienes de consu- mo son establecidos por el sistema de planificación central y no están sujetos al libre juego de los agentes económicos como en la sociedad capitalista, el marco político del sistema socialista debe ser, de acuerdo con lo afIrmado por Engels, el sistema democrático, donde se ejercerá "directa o indirectamente, la dominación política del proletariado" Sin embargo, en el Manifiesto Comunista se establece otra referencia en torno al marco político de la sociedad socialista lo cual reafirma y amplía la cita de Engels. Esta referencia nos dice: El poder político, hablando propiamente, es la violencia organizada de una clase para la opresión. Si en la lucha contra la burguesía el proletariado se constituye indefectiblemente en clase; si mediante la revolución se convierte en clase dominante y, en cuanto clase dominante, suprime por la fuerza las viejas relaciones de producción, suprime, al mismo tiempo que estas relaciones de producción, las condiciones para la existencia del antagonismo de clase y de las clases en general, y, por tanto su propia dominación como clase. En sustitución de la antigua sociedad burguesa, con sus clases y sus antagonismos de clase, surgirá una asociación en que el libre desenvolvimiento de cada uno será la condición del libre desenvolvimiento de todos. el sistema socialista posee también, como característica importante la centralización de todas las decisiones de orden económico que deban ser tomadas, en determinados momentos. Es el sistema de planificación central el encargado de realizar tales decisiones. Las características anotadas con anterioridad no totalizan a los socialismos existentes en el mundo que vivimos hoy. Ellas son expresión, en general, de las ideas de Marx llevada a la práctica por la sociedad soviética. Sin embargo, es bueno señalar que la propia organización económica de la Unión Soviética, debido a los diferentes escollos y obstáculos observados en los últimos años, se vio obligada a introducir reformas de cierta importancia al modelo "clásico". También los chinos en la reunión del Comité Central del Partido Comunista de China, celebrada en diciembre de 1978, acordaron modificaciones que en el pasado, habrían significado el ahondamiento de sus diferencias con el sistema soviético por considerar ellos que dichas reformas no eran sino un retoceso hacia el capitalismo. Estas transformaciones adelantadas aún tímidamente por algunos países con modelo socialista soviético, pueden sintetizarse en: liberalización del sistema de planificación central, permitiendo, por este medio, una mayor actuación de las unidades productoras en la elaboración de sus propios planes de desarrollo y expansión. Comenzó así una política encaminada hacia los principios autogestionarios de la economía yugoslava. liberación de los niveles de decisión económica y política, lo cual está indisolublemente unido a los pasos que en materia económica se habían comenzado a dar y los cuales fueron ya señalados. A pesar de la estrecha conexión entre la materia económica y política, los adelantos en materia de democratización del sistema político, en los países en referencia, no han marchado con la celeridad que la situación amerita y, en muchos (la propia Unión Soviética), han sido detenidos, 2 ocasionando agudas consecuencias para el funcionamiento de la organización económica. 4.2 El socialismo en democracia o socialismo parcial O bien socialismo democrático, envuelve un conjunto de bases que forman hoy parte de un sistema que agrupa a varios países europeos, tales como Noruega, Finlandia, Suecia y, en menor grado, Inglaterra. Los dirigentes del modelo en referencia han sido hasta el presente los diferentes partidos socialista y socialdemócratas de Europa, quienes distinguiéndose de los postulados programáticos del Marxismo y de los partidos comunistas, han orientado la sociedad tomando del capitalismo elementos muy importantes, tales como la propiedad privada, la democracia parlamentaria, el sector empresarial asume un nivel importante de decisiones fundamentales. etc., e introduciendo aspectos típicos del sistema que discutirnos. existencia de un sistema de planificación nacional; ampliación del sistema de controles económicos; estatización de industrias consideradas comunicaciones, transporte y gas); como básicas (acero, carbón, incremento en la participación de los sindicatos en los distintos niveles de decisión de las industrias Este modelo ha venido desarrollándose con éxito en los países en donde ha sido aplicado y esto ha originado que algunos partidos latinoamericanos, dentro de la esfera de la izquierda política, hayan decidido el examen con mayor detenimiento, de las sociedades que estudiamos y teniendo cuidado de hacer dicho estudio fuera de la influencia de la ortodoxia soviética, la cual considera a estos sistemas nada diferentes del sistema capitalista. [...] 7. Socialistas Las posiciones o tesis socialistas, se producen como consecuencia del avance y progreso de la sociedad capitalista, el surgimiento de la clase obrera y los efectos del sistema sobre los trabajadores. El origen de la doctrina socialista debe buscarse en la escuela clásica, es decir, en Adam Smith y David Ricardo, ya que el socialismo insurge contra las conclusiones clásicas, pero toda la armazón conceptual de este sistema nace en el pensamiento clásico. Los pensadores socialistas, entre ellos Saint-Simon, Robert Owen, Fourier, Sismondi, Proudhon y también Bray, Gray, Hodgskin y Thompson, adelantaron los postulados y conclusiones ricardianas sobre el estudio del valor, la lucha de clases, los salarios, la plusvalía, la estructura y funcionamiento capitalista y la historia de los sistemas económicos. Según nos dice Eric-Roll, los escritos de estos pensadores socialistas presentan una característica común: “Todos arrancan de la formulación que dio Ricardo a la teoría-trabajo del valor". Todos los autores socialistas referidos son antecesores de Marx, quien está considerado como el representante más importante del pensamiento socialista, hasta el punto de haber establecido toda una corriente o escuela del pensamiento económico, conocida como la escuela marxista. Esta razón nos induce a estudiar a Marx como exponente del pensamiento socialista. 3 7.1 Carlos Marx ( 1818-1883). Marx, al igual que los demás pensadores socialistas, es discípulo de Ricardo y levantó sobre la estructura teórica ricardiana un conjunto de ideas que van a representar una insurgencia crítica contra el capitaliSlno, así como un estudio pormenorizado de la estructura de dicho sistema. Resumir el pensamiento de Marx es extremadamente delicado y arduo. En tal sentido se tratará de hacer resaltar aquellos aspectos que identifiquen mejor al autor en referencia. De esta forna apuntamos los conceptos más notables de Marx, en torno a: a) El trabajo. El trabajo es inherente al metabolismo del hombre, forma parte de su condición natural y es independiente de los hechos históricos o sociales. El hecho del trabajo crea bienes que van a satisfacer necesidades humanas, esto es, crear valores: valores de uso y valores de cambio. Concuerda Marx en este punto con los pensadores anteriores, repitiendo lo que Petty, Smith y Ricardo afirmaban. Existe un valor de uso y un valor de cambio. El valor de uso está representado por las cualidades del objeto en tanto que satisface una necesidad. El valor de cambio, por su parte expresa una relación que mide proporciones, cantidades, las cuales conducen a establecer el intercambio entre los objetos, entre las mercancías. Así, el trabajo del hombre producirá mercancías con valor de uso y bienes con valor de cambio. Al trabajo que genera las primeras, Marx lo llama trabajo concreto y el trabajo que produce las otras, trabajo abstracto. b) El Valor. Marx identifica el valor de cambio como objeto de la economía política. Las mercancías deben ser estudiadas en tanto que son portadoras de valor. La fuente del valor se encuentra en el trabajo del hombre; la medida del valor no es sino una fracción del trabajo social que fue necesario para producir dicho valor. c) La Plusvalía. La determinación específica en torno a conocer la razón sobre la inferioridad de los salarios con respecto al valor, llevó a Marx a enunciar sus tesis del excedente o plusvalía, la cual es considerada por muchos, lo más importante en la concepción marxista. Sin embargo, sabemos que la plusvalía no es un concepto nuevo ni fue descubierto por Marx. Desde Adam Smith, quien ejerció notable influencia en Marx, se manejó este criterio, sin mayores variaciones. Por supuesto, la plusvalía adquiere en Marx relevancia especial, por cuanto que esta tesis reafirmaba la teoría de la explotación y acentuaba la crítica socialista al capitalismo. Como se delineó anteriormente, Marx parte de una concepción de Smith que afirma que el ingreso se divide en dos partes: una está formada por los ingresos del trabajador y es destinada a satisfacer sus necesidades, y la otra parte representa la “deducción”, del valor generado por el trabajo, la cual es apropiada por el dueño del capital. A partir de este punto, Marx se preguntó por qué el salario del trabajador es menor que el valor del producto que él genera. La respuesta a esta interrogante está en que una parte del valor creado por medio del trabajo del hombre es “descontado” por el dueño del capital, constituyendo, esa parte que le es arrebatada al trabajador, la ganancia del capitalista. Si sólo el trabajo crea valor, la retribución debe ser completa al trabajo; cuando la remuneración es repartida, asignando la mayor parte al capital, nos encontramos con un traslado de la riqueza que ha sido generada por el trabajo del hombre. Esta situación conforma la teoría de la explotación, la cual Marx profundizó como columna vertebral de la crítica a la sociedad capitalista. 4