TERMINOS DE REFERENCIA INCORPORACIÓN DEL ENFOQUE DE GÉNERO A LA POLÍTICA NACIONAL DE RESARCIMIENTO ACTUALIZADA, Y ELABORACIÓN DE UNA PROPUESTA DE PROGRAMA DE RESARCIMIENTO INTEGRAL PARA LA ATENCIÓN DE MUJERES VÍCTIMAS DE VIOLENCIA SEXUAL EN EL MARCO DE LA POLÍTICA NACIONAL DE RESARCIMIENTO 1. Introducción y Antecedentes El Programa Nacional de Resarcimiento (PNR) en su Misión se reconoce como la entidad de Estado que articula el esfuerzo integral de la política pública de resarcimiento en función de la reconciliación nacional. Su finalidad se centra en la reparación de los daños provocados por violaciones a los derechos humanos cometidos durante el enfrentamiento armado interno, sea a nivel individual y/o colectivo, por lo que en su quehacer aglutina un conjunto de políticas, proyectos y acciones que se realizan con el propósito de reparar, resarcir, restituir, indemnizar, asistir, rehabilitar y dignificar a las víctimas del enfrentamiento armado interno. Según el Acuerdo Gubernativo 539-2013 que prolonga la vigencia del Acuerdo gubernativo 258-2003 y la Política Pública de Resarcimiento el Programa contempla una serie de violaciones a los derechos humanos: Desaparición forzada, Ejecución extrajudicial, Tortura, Desplazamiento forzado, Reclutamiento forzado de menores, violación sexual, Violaciones en contra de la niñez y Masacres. Para implementar la reparación, establece cinco medidas: De restitución material; Indemnización económica; Reparación psicosocial y rehabilitación; Dignificación; Resarcimiento cultural, las cuales se aplican dando prioridad a los grupos de población que, por su condición social y económica afectada principalmente por el enfrentamiento armado interno, se hallan en situación de vulnerabilidad social. El Programa sostiene como principio en cuanto a la población beneficiaria, el paso de la condición de víctima a la comprensión como sobrevivientes, observa el mejoramiento de la calidad de vida desarrollando de manera participativa capacidades para la sostenibilidad de los proyectos que impulsa, retroalimentando el trabajo del personal en cada una de sus sedes, programas, proyectos y acciones específicas en el marco del Plan Estratégico Multianual 2013-2016. Objetivos estratégicos: 1. Fortalecer la capacidad Institucional del Programa Nacional de Resarcimiento, para orientar su quehacer a la obtención de resultados de desarrollo y mejorar así, la calidad de vida de su población beneficiaria. 2. Desarrollar medidas de reparación psicosocial y rehabilitación que promuevan en las víctimas del enfrentamiento armado interno el ejercicio de una ciudadanía plena y productiva para la Reconciliación, la Paz y la Justicia. 3. Implementar medidas y programas de resarcimiento y dignificación integral, que permitan a las víctimas del enfrentamiento armado interno, su inclusión social y desarrollo. 2 El contexto de violencia se matiza en múltiples dimensiones para el caso guatemalteco, si se ubica geográfica e históricamente. De manera oficial, los informes “Memoria del Silencio” de la Comisión para el Esclarecimiento Histórico (CEH) y “Nunca Más” del Proyecto Interdiocesano de Recuperación de Memoria Histórica (REMHI) se constituyen como referenciales para abordar los hechos ocurridos entre 1960 a 1996, si bien hacen mención a manera general de las formas específicas de violencia que afectaron a las mujeres, no lograron la profundización necesaria que diera cuenta de los delitos cometidos, o bien, focalizar la atención con mujeres sobrevivientes. Si bien, la violación a los derechos humanos de las mujeres queda implícita y se valida en la acción testimonial, ha sido de manera paulatina su profundización. Las dimensiones de la violencia y violación sexual en mujeres fueron observadas desde las fuentes oficiales como estrategias de intervención militar para el rompimiento del espacio comunitario, en la reproducción de la razón patriarcal que anula la existencia de las mujeres por el hecho de serlo pero además, como forma de eliminación de la reproducción cultural. Si bien la violación sexual ha sido poco más vista –al mismo tiempo limitada- en cuanto al derecho a reparación, la violencia se amplía cuando se entiende la diferencia de género. El Programa Nacional de Resarcimiento en la Política Pública (2002) especifica estas violencias y violación sexual como parte de la política contrainsurgente que provocó “secuelas físicas y emocionales en las víctimas sobrevivientes y en sus comunidades de origen (…) Algunas de [ellas] están relacionadas con afecciones físicas, como embarazos no deseados, abortos espontáneos, hijos no deseados entre otros. También ha habido afecciones mentales, como trastornos de la memoria, resistencia a recordar, negación del hecho, tensión nerviosa profunda, desconfianza, inseguridad, pérdida del deseo de vivir, [en las mujeres mayas sobrevivientes, en cuanto a la integración en sus comunidades], limitando sus expectativas de vida. Por el estigma que la violencia sexual conlleva, estas víctimas no han tenido la capacidad de reconocerse y visibilizarse, ni de buscar apoyo psicológico o de salud física, acentuando el sufrimiento y las afecciones emocionales. Muchas víctimas al contar sobre sus experiencias, fueron estigmatizadas, aisladas e incluso rechazadas por sus familias o comunidades, lo cual no solamente tuvo graves impactos psicosociales, sino también económicos. Por lo anterior, es necesario facilitar procesos tendientes a afrontar estas violaciones para buscar la superación de traumas.1 La profundidad de la ruptura de vínculos sociales en estos casos, también están vinculados a la comprensión de lo que la comunidad tiene del problema2. Es por ello, que la condición económica y social les es desfavorable, ligada al estigma, en algunos casos las mujeres sobrevivientes expresan el apoyo recibido por las iglesias locales como espacios que les ha permitido recuperar sentido de pertenencia y aceptación comunitaria. En cuanto al registro de información, la CEH señala el período entre 1980-1983 como temporalidad en la que ocurren la mayoría de estos hechos. Por la forma de abordaje tanto en lo familiarcomunitario como por la institucionalidad pública, resulta evidente que el subregistro sobre violencias y violación sexual a mujeres en el contexto del EAI es alto, precisamente porque las herramientas metodológicas y los procesos de interpretación de la memoria, acceso a justicia y reparación han sido escasos o mal entendidos. La violencia y violación sexual en su mayoría premeditadas aparecen como prácticas comunes y como acción continuada del Estado luego de la colocación de destacamentos militares, de la articulación de las Patrullas de Autodefensa Civil (PAC), previo a masacres o de ejecutar los planes de “tierra arrasada”. Del total de casos registrados por violación sexual, la CEH ubica un 89.39% en mujeres mayas y cerca del 10.02% en mujeres ladinas. En función de la edad, especifica lo vivido en una población de mujeres adultas entre 18 y 60 años (62%) y de niñas entre 0-17 años (35%), ancianas (3%). La Comisión Interamericana de Derechos Humanos reconoce que la violencia sexual 1 2 Incisos 112-113 págs. 32-33. ECAP (2009) Mujeres rompiendo el silencio. 3 puede constituir una forma de tortura, además de constituir un crimen de lesa humanidad, si se puede demostrar que la violencia sexual fue cometida de forma sistemática. Las tres características más importantes para mostrar tal patrón son la extensión geográfica, la reiteración de la práctica, y la omisión de investigación y sanción.3 La obligatoriedad del Estado hacia una reparación integral en términos de género debe reflejarse en la reforma de aquellos instrumentos jurídicos o políticos que obstaculizan la aplicabilidad de las medidas de resarcimiento. El alcance de éstas visto desde la integralidad, procura acciones de reparación tangibles como intangibles; desde el resarcimiento material hasta el campo de lo simbólico, en la elevación de autoestima, en la construcción de memoria, la recuperación y sanación del cuerpo, procurando sea sujeta activa de su propio proceso. La Política Pública (2002) establece, asimismo, que: “El PNR dará una atención especial a las víctimas de violencia sexual que así lo soliciten y de acuerdo a sus necesidades particulares. Asimismo, coordinará con otras instancias gubernamentales y de la sociedad civil, la promoción de políticas públicas orientadas a la atención permanente de las víctimas de violencia sexual. La importancia de la interpretación y adecuado tratamiento en la reparación de estos hechos parte de validar en el aspecto psicosocial el testimonio de las mujeres, el cual está sujeto a contemplar vacíos de memoria o errores en el cómo se recuerda lo vivido. Con el fin de dar cumplimiento con la Política, es necesario crear una propuesta de programa de atención específica a mujeres víctimas y/o sobrevivientes de violencia y violación sexual durante el enfrentamiento armado interno, que aborda de forma integral los daños sufridos y que permita su empoderamiento, participación activa y por cuanto la sostenibilidad en los proyectos y acciones específicas a impulsar. Esta atención debe tener como objetivo el evitar la re victimización de las sobrevivientes, al usar mecanismos que permiten que las víctimas no necesiten repetir sus testimonios innecesariamente, que sean atendidas por personal especializado y capacitado, preferiblemente femenino, y que reciban acompañamiento psicosocial en todo el proceso. La incorporación del enfoque de género en las acciones desde la institucionalidad, supone entre otros: 1. Revisar y modificar el diseño e implementación de cada una de las cinco medidas de resarcimiento para asegurar que: 1.1 Se está tomando en cuenta las perspectivas y necesidades específicas de las mujeres víctimas, a través de procesos participativos de consulta; 1.2 Se está tomando en cuenta las condiciones particulares de las mujeres, que pueden representar obstáculos para el acceso a la reparación, como son la falta de recursos para la movilización, la falta de dominio del español, la falta de documentos de identidad, etc. 1.3 Se está evitando, en el diseño e implementación de las medidas, prácticas que reproduzcan desigualdades de género, 1.4 Se contribuye mediante la implementación de las medidas de resarcimiento a la transformación de las causas estructurales subyacentes a las violaciones sufridas por las 3 Siguiendo a PCS (2007) “Acompañamiento psicosocial y justicia integral para mujeres víctimas de violencia sexual en conflictos armados” En: Impunity Watch (s/a) “Violencia contra mujeres durante el conflicto armado interno en Guatemala” Resultado de un estudio de literatura, pp.19. 4 mujeres en el enfrentamiento armado interno en Guatemala, incluyendo la desigualdad de género; 1.5 Se contribuye mediante la implementación de las medidas de resarcimiento a la transformación de las causas estructurales subyacentes a las violaciones sufridas por las mujeres en el enfrentamiento armado interno en Guatemala, incluyendo la desigualdad de género, 2. Analizar si efectivamente se están reparando las violaciones particulares sufridas por las mujeres, más allá de la violencia sexual; 3. Orientar los resultados en función del desarrollo inclusivo, al empoderamiento social, económico-productivo y político de las mujeres lo que contribuya a solventar la división patriarcal de lo público y lo privado; 4. Revisar los criterios jurídicos vertidos para el proceso de documentación; 5. Revisar en la planificación y la organización presupuestaria; 6. Establecimiento de indicadores de género que permitan dar seguimiento y evaluar cualitativa y cuantitativamente los esfuerzos institucionales; 7. Asegurar que el PNR cuente con suficiente personal femenino, traductores y psicólogos/as para acompañar a mujeres víctimas, 8. Vincular la perspectiva de género en enlaces con otras dependencias del Estado, a través de cada una de las medidas implementadas orientadas a conseguir la igualdad en derechos, a su vez, el respeto y promoción de la identidad étnica, 9. A nivel institucional, al fortalecimiento de capacidades de quienes integran los equipos de trabajo en las quince sedes de PNR, en la construcción del Plan Operativo Anual con perspectiva de género, 2. Objetivos generales y específicos de la Consultoría General: Fortalecer los proyectos, programas y acciones específicas del Programa Nacional de Resarcimiento en la atención vinculada a mujeres víctimas y/o sobrevivientes del enfrentamiento armado interno, orientando a través de la perspectiva de género la integralidad de la reparación. Específicos: Incorporar el enfoque de género a la Política Pública de Resarcimiento y en las cinco medidas de resarcimiento implementadas por el PNR para lograr una adecuada reparación de las mujeres víctimas del enfrentamiento armado interno así como contribuir a la transformación de las desigualdades subyacentes de género que limitan la apropiación y promoción de los derechos humanos de las mujeres tanto a nivel institucional como en los grupos o personas beneficiarias. 5 3. Crear una propuesta de programa de atención específica a mujeres víctimas y/o sobrevivientes de violencia y violación sexual durante el enfrentamiento armado interno, que permita su empoderamiento, participación activa y por cuanto la sostenibilidad en los proyectos y acciones específicas a impulsar. Actividades 1. Investigación documental: a) Revisión y síntesis de los estándares y principios aplicables a la reparación de víctimas de graves violaciones a los derechos humanos con enfoque de género; b) De estudios e informes de investigaciones sobre violaciones a los derechos humanos sufridas por las mujeres en el enfrentamiento armado interno en Guatemala, y su impacto; c) De estudios, informes y evaluaciones del PNR en lo relativo al enfoque de género, 2. Revisión participativa a través de grupos de discusión con participación equitativa y significativa de hombres y mujeres, y entrevistas a informantes clave de la Política Nacional de Resarcimiento; la naturaleza de las cinco medidas de resarcimiento prevista en el PNR y su forma de implementación, sus contenidos, nudos problemáticos a transformar en función del enfoque de género. 3. Elaboración de las siguientes propuestas como “propuestas iniciales”: a) Propuesta de criterios y recomendaciones para la incorporación del enfoque de género en la Política Nacional de Resarcimiento. b) Propuesta de Programa de Resarcimiento Integral para mujeres víctimas de violencia sexual. Debe incluir objetivos, metas e indicadores, y abarcar aspectos económicos, socioculturales, familiar-interpersonales, legales, políticos y psicológicos en el marco de la Polìtica Nacional de Resarcimiento. 4. Realización de talleres de socialización y retroalimentación de las propuestas, al personal de las sedes regionales de PNR y a grupos de mujeres víctimas, ubicando informantes clave por región: a) b) c) d) e) f) Guatemala Petén Huehuetenango: Nentón, Barillas y Huehuetenango Quiché: Nebaj, Ixcán y Santa Cruz Cobán: Cobán, Rabinal y Chiquimula Sololá: San Marcos, Mazatenango, Sololá y Chimaltenango 5. Realización de talleres de socialización y retroalimentación de las propuestas con organizaciones de la sociedad civil, específicamente organizaciones de víctimas y organizaciones de mujeres. 6. Tomando en cuenta los insumos recibidos en los talleres, la formulación de propuestas finales para presentación a la Comisión Nacional de Resarcimiento para su aprobación. 6 7. Facilitación de un Encuentro Nacional para la socialización de los Programas, una vez aprobados por la CNR, dirigido a representantes de organizaciones de víctimas, coordinaciones y equipos de psicólogas/os del PNR. 4. Productos Esperados 1. Metodología, plan de trabajo y cronograma para el logro de los objetivos de la consultoría. 2. Documento síntesis de la revisión documental, (extensión 12 páginas máximo) 3. Documentos en borrador: a) Propuesta de criterios y recomendaciones para la incorporación del enfoque de género en la Política Nacional de Resarcimiento. b) Propuesta de Programa de Resarcimiento Integral para mujeres víctimas de violencia sexual. 4. Metodologías para talleres de socialización y validación de las propuestas (3ª y 3b) dirigido al personal de las quince sedes del Programa y a grupos focales de organizaciones de víctimas, y organizaciones de mujeres. 5. Memorias de los talleres de socialización. 6. Documentos finales: a) Propuesta de criterios y recomendaciones para la incorporación del enfoque de género en la Política Nacional de Resarcimiento. b) Propuesta de Programa de Resarcimiento Integral para mujeres víctimas de violencia sexual. 5. Insumos a ser provistos por el Programa Nacional de Resarcimiento El Programa Nacional de Resarcimiento pondrá a disposición del/la Consultor/a toda la información necesaria para la realización de su trabajo, incluyendo los Acuerdos Gubernativos, políticas, protocolos, manuales, criterios, bases de datos y otras herramientas o información que sea necesaria. Así mismo, de un espacio físico en las oficinas del Programa en sede central, mobiliario y equipo necesario para el efecto. 6. Ubicación La Consultoría abarca el ámbito geográfico que atiende cada una de las Sedes del Programa, por lo que cada una se constituye como espacio referencial. 7. Línea de coordinación Dirección con quien coordina: Dirección de Aplicación de Medidas Dirección a quien reporta: Dirección de Planificación Estratégica. 8. Duración El plazo establecido para la realización de la Consultoría son 4 meses a partir de la firma del contrato. 7 9. Perfil de la Consultora o Equipo Consultor: Los requerimientos sujetos a ponderación son: Formación: Preferiblemente de Maestría en Ciencias Sociales (antropología, sociología, economía, ciencias políticas, jurídicas), con Estudios de género y/o feminismos. Experiencia comprobada en temas de Justicia Transicional, Políticas Públicas y Género. Experiencia comprobada en la elaboración de Sistemas de Planificación, Monitoreo y Evaluación a través de sistemas de indicadores con enfoque de Género. 10. Costo de la consultoría y forma de pago La Consultora o Equipo Consultor hará una propuesta técnica y económica, considerando los gastos por honorarios y aquellos que se requiera para alcanzar los resultados esperados. Debe incluir el pago de impuestos. 14. Aplicaciones Las personas interesadas deberán presentar la siguiente papelería: Carta de interés y disponibilidad, con una descripción breve sobre el interés por el cual opta a la consultoría. CV Personal/Hoja de vida, indicando la experiencia de trabajo en proyectos similares, así como los datos de contacto (correo electrónico y número de teléfono); Indicar por lo menos tres (3) referencias profesionales; Se recibirán expedientes hasta el día Viernes 21 de febrero de 2014 en las oficinas del Programa Nacional de Resarcimiento sede Central, ubicada en la 7ª avenida 3-67 zona 2, ciudad capital. En horario de 8:30 a 16:30 horas. Presentar documentación en sobre manila sellado, con atención a Dirección de Recursos Humanos, indicando en el Asunto: “Aplicación a convocatoria de consultoría para Incorporación de la perspectiva de género a la Política Pública de Resarcimiento y Elaboración de Propuesta de Programa de Atención Específica a Mujeres Víctimas de Violencia y Violación Sexual en el EAI”.