8 LA VANGUARDIA I N T E R N A C I O N A L DOMINGO, 3 SEPTIEMBRE 2006 ENTREVISTA x JAVIER SOLANA, alto representante para Política Exterior y Seguridad de la UE “El proyecto iraní de fabricar el arma nuclear debe preocuparnos a todos” FERNANDO GARCÍA Lappeenranta (Finlandia). Enviado especial a negativa de Teherán a suspender sus sospechosas actividades de enriquecimiento de uranio trae de cabeza a la comunidad internacional. La UE mantiene una línea moderada y moderadora frente a la pretensión de Washington de replicar con sanciones a Irán. Javier Solana intentará en unos días reconducir el conflicto hacia la vía del diálogo. El jefe de la diplomacia europea explica en esta entrevista las perspectivas de la UE respecto a la explosiva situación en la zona. –La próxima semana usted se reunirá con el negociador iraní en materia nuclear, Ali Larijani, en un último intento de retomar la vía negociadora tras la negativa de Teherán a suspender el enriquecimiento de uranio. ¿Qué le planteará? –He tenido ya varias conversaciones telefónicas con el doctor Larijani, a quien antes del verano entregué la propuesta de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania y la UE (incentivos y advertencias para arrancar la suspensión del programa nuclear). Hemos quedado para vernos la semana que viene. Lo que pretendo de ese encuentro es clarificar el documento de 22 páginas que Teherán nos presentó en agosto como respuesta al que nosotros les formulamos en junio. En esa respuesta hay muchos elementos que requieren discusión y clarificación. –¿Cuáles son los puntos clave por aclarar? –Hay temas estrictamente vinculados a los aspectos nucleares, como la posición sobre el enriquecimiento de uranio, y otros que tienen que ver con el papel de Irán en la región y en sus estructuras de seguridad. Piense que en esa zona prácticamente cada diez años se produce un gran conflicto. Estructurar un mecanismo de seguridad en la región interesa a todos: a los países del área y a los vecinos. La Unión Europea no sólo tiene allí intereses estratégicos sino también de vecindad. La Europa ampliada se acerca más y más a las fronteras de Oriente Medio. –La reacción de Washington tras la negativa iraní a renunciar a su programa nuclear fue que esto debe traer “consecuencias”, aunque Bush ha dado margen a la UE para intentar la negociación. ¿Cuál es la postura europea ante la amenaza estadounidense? ¿Será posible mantener la unidad internacional teniendo en cuenta las reticencias de Pekín y Moscú a las represalias? –La postura de la UE es la misma que hemos ido manteniendo conjuntamente con EE.UU., Rusia y China. Una postura sólida que ya se manifestó en una resolución del Consejo de Seguridad a cuyo vencimiento (el 31 de agosto) Irán no dio respuesta satisfactoria; lo que Teherán ofrece es el compromiso de ese contacto conmigo, que veremos qué da de sí. Mientras el doctor Larijani y yo estemos hablando no habrá movimientos en el Consejo. Y si de esas reuniones no sale ninguna posibilidad de avanzar, habrá que plantearse cómo se sigue el proceso en la ONU. –En tal caso, ¿apoyará la UE las sanciones? –No quisiera hablar ahora de lo que va a pasar después. Estoy comprometido en unas conversaciones con Irán cuyo objetivo es precisa- L KIMMO MANTYLA / REUTERS Solana defiende el desarme también en Israel: “Defiendo que las armas nucleares no aumenten sino que disminuyan. En todas partes” mente evitar que el Consejo de Seguridad tenga que actuar. Mi obligación es intentar que esas conversaciones no fracasen... No tengo la certeza de que vayan a salir bien, pero prefiero poner todas las energías en que así sea. –Usted suele tender al optimismo, pero esta vez no parece hacerse muchas ilusiones... –Tiendo a ser optimista; lo que no soy es ingenuo. Conozco las muchas dificultades de esta negociación. Las posiciones están muy distantes y las declaraciones que hemos escuchado de los dirigentes de Irán no son propicias al acuerdo. Con todo, no pierdo la esperanza en que las conversaciones que vamos a tener puedan abrir un camino hacia una solución negociada en el que constituye uno de los asuntos más complicados que hemos afrontado en los últimos años. –¿Hasta qué punto hay que temer las amenazas de Teherán, como la de forzar una considerable subida en los precios del petróleo? –Irán es un país importante que hay que respetar. Ha sido el corazón del imperio persa. Un país con historia, con cultura. Con muy distintas capas sociales ligadas a un pasado también complejo. Su papel en la región siempre ha sido fundamental. Lo que Irán quiere ahora, que es tener el arma nuclear, tiene que preocuparnos a todos. El hecho de que en esa región tan convulsa haya un nuevo país con armas nucleares no puede conducir a nada bueno. Bastantes problemas existen en esa región como para complicarlos más con un paso que además podría desencadenar una carrera armamentista en otros países de la zona. Es vital dar garantías para que todo DESARME DE TODA LA ZONA “Siempre estaré entre los que piden el desarme nuclear de toda la zona” RESPUESTA DESMESURADA “La desproporción en la réplica de Israel cambió la percepción de lo ocurrido” RIESGO DE AISLAMIENTO “Irán puede integrarse en el mundo, que es lo que le interesa, o quedar aislado” REFORZAR A SINIORA “Es vital seguir reforzando al Gobierno libanés y al presidente Siniora” Un plazo corto para que Teherán se explique El último intento europeo para que Irán se siente a negociar seriamente en torno a su programa nuclear quedará zanjado en muy pocas reuniones entre Solana y el representante del régimen islámico, Ali Larijani. De momento sólo hay una sesión programada, aunque no se descarta alguna más. No hay una fecha límite para completar las consultas, pero el plazo es corto porque ahora sólo se trata de que Teherán clarifique determinados puntos “oscu- ros, ambiguos o contradictorios” de su reciente respuesta escrita a la oferta de incentivos que la comunidad internacional le hizo bajo la condición de que suspendiera sus sospechosas actividades de enriquecimiento de uranio (cosa que no ha hecho). Tal como explicaron ayer los ministros de Exteriores y diplomáticos reunidos ayer en Lappeenranta (Finlandia), si el régimen iraní confirma la lectura más bien poco alentadora que de su documen- to (confidencial) están haciendo los representantes permanentes en el Consejo de Seguridad más Alemania y China, lo más seguro es que el asunto vuelva a la mesa de dicha instancia de la ONU. Empezaría entonces el debate sobre las sanciones económicas y comerciales que Washington quiere imponer a Irán para presionar al régimen. Tal debate, que puede salir de la ONU por falta de consenso en su seno, puede dividir a la comunidad interna- cional, dado el rechazo de Pekín y Moscú, y abrir una brecha dentro de la UE, como empiezan a barruntar en Bruselas. Los jefes de las cancillerías de los Veinticinco se dieron ayer dos semanas para evaluar el resultado de los contactos entre Solana y Larijani. El plazo responde simplemente a que el 15 de setiembre los ministros celebran su próxima reunión regular. Los titulares de Exteriores se limitaron ayer a expresar toda su confianza en Solana. el mundo se sienta seguro allí; para que ningún país recurra a un ataque con armas nucleares. De momento, lo que habría que conseguir es que Irán se incorpore con toda seriedad a la estructura internacional y pueda hacer notar su peso en las instituciones en que las relaciones de poder están organizadas en el mundo. Teherán puede integrarse plenamente en la comunidad internacional o correrá el riesgo de aislarse. Lo primero es mejor que lo segundo para Irán. –Siempre ha habido voces, y las sigue habiendo, a favor de un desarme nuclear integral en toda la zona, incluyendo a Israel. –Entre esas voces siempre estará la mía. –¿Defiende usted que Israel se desarme de ese tipo de arsenal? –Yo defiendo que las armas nucleares no aumenten sino que disminuyan. En todas partes. –Un desarme general permitiría apaciguar los ánimos en la región, ¿no? –Lo que pasa es que eso es muy difícil. No es un deseo que vaya a realizarse en veinticuatro horas. Es complicado y requiere mucho tiempo, pero sí que me gustaría ver que las armas nucleares van disminuyendo en el mundo. Ha habido una revisión del tratado de No Proliferación que lamentablemente no ha dado los frutos que muchos esperábamos, pero no dejo de confiar en que la revisión del acuerdo cada cinco años permita racionalizar la presencia de esas armas. –¿Cómo juzga los actos de Israel en Líbano? –Hay que recordar cómo empezó todo: con el secuestro de unos ciudadanos israelíes en Israel por parte de Hezbollah. Fue un acto ilegal, como denunció el Gobierno de Líbano. La percepción de ese acto cambió radicalmente por la respuesta desproporcionada, a mi juicio, de Israel. Afortunadamente, una resolución del Consejo de Seguridad ha logrado un alto el fuego que deseamos sea permanente mediante el despliegue de una fuerza internacional. Lo que importa en este momento es seguir apoyando y reforzando al Gobierno legítimo del país y a su presidente, Siniora. No olvidemos que hace 18 meses el primer ministro Hariri fue asesinado y que hubo una resolución de las Naciones Unidas ordenando esclarecer el magnicidio y obligando a las fuerzas de seguridad e inteligencia de Siria a abandonar Líbano. Hay que ayudar a que el país, que estaba en vías de dar un salto hacia delante y al que lo ocurrido ha hecho retroceder varios años, recupere todo su potencial, que es mucho. –¿Y qué opina del papel de Estados Unidos, que durante tantos días dejó hacer a Israel? –El debate de la resolución que al final aproContinúa en la página siguiente I N T E R N A C I O N A L DOMINGO, 3 SEPTIEMBRE 2006 ENTREVISTA x JAVIER SOLANA Viene de la página anterior bó el Consejo de Seguridad, la 1701, fue muy difícil. Y, en mi opinión, excesivamente largo. Lo esencial es que al final la decisión aprobada fue buena y reflejaba los siete puntos presentados por Siniora previamente en Roma. –¿Y Europa? Tal vez hizo lo que pudo, pero no pudo mucho... –¿En qué sentido lo dice? –En el de acelerar la resolución del conflicto. –Europa no forma parte del Consejo de Seguridad; hay miembros que están ahí, pero no la UE como tal, por lo tanto no se le pueden pedir responsabilidades. Nuestro deseo fue siempre que el alto el fuego fuera inmediato. –Cuando todo empezó, dio la impresión de que Irán quería distraer la atención respecto al asunto nuclear y por eso pudo alentar la ofensiva de Hezbollah. ¿Son Irán y sus ansias hegemónicas en la zona los responsables de todo? –No puedo contestarle con un sí o un no. Que hay relación entre Irán y Hezbollah es sabido. Que Irán ayuda económicamente a Hezbollah, también; como lo es que está implicado en esa ayuda con motivo de la reconstrucción en Líbano. ¿Estuvo implicado antes? No puedo contestar. Irán dice que no. No tengo pruebas para sostener lo contrario, pero sí para señalar que hay una relación muy estrecha que viene de muy atrás: de la fundación de la organización chií. –En España hay un fuerte debate sobre la aportación nacional a la fuerza de la ONU en Líbano. ¿Cuál es su argumentación a favor y su ecuación entre riesgos y responsabilidades? –Llevamos mucho tiempo diciendo que Europa y España tienen que desempeñar un papel más activo en la solución del problema en Oriente Medio. Por razones estratégicas, de proximidad, de lo mucho que compartimos y del interés en la estabilidad de la zona. Cuando se tiene la oportunidad de ejercer un papel crucial –pues la aplicación de esa resolución sólo puede realizarse si hay una fuerza con una componente europea seria–, sería una falta a nuestra propia lógica el no asumir esa responsabilidad. Estamos ya en Gaza, acompañando a los palestinos en la única frontera (Rafah) que tienen para comunicarse con el exterior. Estamos en territorio palestino para formar policías. Ahora se nos requiere GENEROSIDAD EN LÍBANO “Tanto la aportación de la UE en general como la de España son generosas” BUEN PAPEL ESPAÑOL “España está haciendo mucho bien en muchos sitios con su presencia” PALESTINA ES LA CLAVE “No hay solución parcial que valga sin resolver el problema palestino” para que ayudemos a un país, Líbano, con el que la UE tiene una relación especial mediante un acuerdo de asociación. Así que, insisto: si ahora les dijéramos: “Allá se las arreglen ustedes”, incurriríamos en una ruptura completa de la lógica que hemos mantenido a petición de los ciudadanos y sus gobiernos. Yo no lo entendería. –¿Ve adecuada la aportación española? –De la aportación europea, en general, prefiero que utilice la calificación que ha hecho el secretario general de las Naciones Unidas: generosa, magnífica, y todos los elogios posibles. Ésa es la valoración que importa, pues la fuerza estará bajo responsabilidad de la ONU. La oferta de España es generosa, máxime teniendo en cuenta el número de misiones en que ya está comprometida. No olvidemos lo que ha hecho, por ejemplo, en Congo y con qué profesionalidad. Estamos haciendo mucho bien en muchos sitios. –Cuando hablamos de Oriente Medio, al final siempre hay que mirar a los territorios ocupados como fuente de todos los conflictos. ¿Ve posibilidades de avance a corto plazo en Palestina? –Me está hablando del tema que tengo en el centro de mi reflexión y de mi acción incluso en este preciso momento (acabo de conversar con el presidente Abbas). Lo que digo a los ministros europeos es casi lo mismo que ha dicho usted: si no resolvemos el problema central, que es el conflicto israelo-palestino, tal vez solucionemos aspectos colaterales; podemos poner parches aquí y allá, pero no estaremos afrontando de manera definitiva la cuestión de Oriente Medio. El origen es la ocupación de Palestina, iniciada en 1967, y mientras no se encuentre solución a eso lo demás nunca podrá arreglarse del todo. Claro que hay que atender las demás pistas, como Líbano o Siria, pero ése es el corazón de todo. Por eso es mi objetivo y mi obsesión. –El objetivo de dos estados conviviendo uno al lado del otro parece más alejado que hace meses. –No lo creo. Hace unos pocos años sólo unos pocos creíamos en la perspectiva de la coexistencia de dos Estados. Hoy nadie la pone en duda. Lo que tenemos que conseguir es que el Estado palestino sea viable, y para ello tenemos que trabajar en sus fronteras y en el asunto de los asentamientos. Hay que retomar las negociaciones con la máxima energía y determinación. Y lo que yo y la UE podamos hacer, lo haremos.c LA VANGUARDIA 9 Annan no cree que las sanciones vayan a resolver el problema iraní TEHERÁN. (Ap y Efe.) – El secretario general de la ONU, Kofi Annan, viajó ayer a Teherán para intentar llegar a un acuerdo con las autoridades iraníes sobre los dos temas que copan la agenda política: el fin del apoyo militar a Hezbollah en Líbano y el fin del programa nuclear. A la espera de la reunión prevista para hoy con el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, Annan logró extraer del ministro de Exteriores, Manuchehr Mottaki, un compromiso de cooperación en la aplicación de la resolución de la ONU sobre la tregua entre Israel y Hezbollah. Annan también calificó de “muy útil y constructiva” la primera conversación mantenida sobre el tema nuclear con Ali Lariyani, el negociador jefe iraní. Lariyani, que se entrevista esta próxima semana con Solana, dijo a su vez que ambas partes estaban de acuerdo en que sólo a través de la negociación podrían llegar a una solución. Poco antes de viajar a Irán, el secretario general de la ONU declaró a la prensa que no creía que las sanciones sean “la solución a todos los problemas”, en referencia a la amenaza de Estados Unidos de pedirlas si Irán continúa con su programa nuclear. “Hay momentos cuando un poco de paciencia logra mucho efecto –añadió Kofi Annan–. Creo que es una cualidad que debemos ejercitar más a menudo”. Mottaki, por su parte, expresó el apoyo al cese el fuego en Líbano auspiciado por la ONU. Mottaki, sin embargo, no hizo referencia explícita al tema de la entrega de armas a Hezbollah, que prohíbe la resolución de la ONU, y que les afecta directamente puesto que es el Gobierno iraní quien las ha suministrado últimamente por mar a la guerrilla islamista.c