Clasificación de las articulaciones según su movilidad y ejes de movimiento. Amplitud articular. Concepto. Desplazamiento en grados de cada movimiento articular. Movilidad articular. Concepto. Factores que limitan la movilidad articular. Contracción muscular: Propiedades de los músculos. Trofismo muscular: Concepto. Atrofia e hipertrofia: Conceptos. Causas de la atrofia Tipos de contracciones musculares: Efectos. Indicaciones. Características. Amplitud del trabajo muscular: Acción conjunta de los músculos (agonistas, antagonistas, fijadores y sinergistas). Movilidad articular. Tipos de contracciones musculares y acción conjunta de los músculos. El esqueleto de los vertebrados está constituido por piezas óseas resistentes, que se unen articuladas entre sí. Esta unión de dos o más huesos se denomina articulación. La articulación es el punto de apoyo sobre el que se mueven los huesos bajo la acción de los músculos. La función articular está íntimamente relacionada con la orientación y formas de las superficies articulares así como la solidez y disposición de los ligamentos correspondientes, según expresa la ley general biológica del movimiento. Estos hechos interesan no sólo al morfólogo, sino también al fisiólogo, ortopédico, fisiatra y kinesiólogo, dado el importante papel que juegan las articulaciones en la biomecánica. Al igual que en los movimientos de las máquinas, la realización satisfactoria del movimiento articular necesita la integridad del juego articular y la seguridad en la ejecución de sus movimientos. Estas dos características, integridad y seguridad, aseguran la movilidad del organismo, representada por sus articulaciones. La integridad necesaria para realizar el movimiento articular, está en función de: Un contacto íntimo entre las superficies articulares. Las superficies de los cartílagos articulares deben estar bien lisas. La articulación debe tener una lubricación correcta y suficiente; de ello se encarga la sinovia. La seguridad o solidez de la articulación depende de: La cápsula articular, que forma un manguito fibroso inextensible. Los ligamentos extraarticulares. Los ligamentos intraarticulares. Los músculos y tendones musculares (tendones activos). La presión atmosférica De los componentes de la articulación, merece especial consideración el cartílago articular. Las articulaciones según su función respectiva, las podemos clasificar en tres grandes grupos: 1) Sinartrosis, articulaciones llamadas inmóviles, las que podemos encontrar en la unión de los huesos del cráneo entre sí. Estas articulaciones se conocen también como articulaciones fibrosas atendiendo al tipo de tejido. Otro ejemplo sería el de las articulaciones tibioperonea distal. 2) Anfiartrosis, semimóviles, cuyo tipo se encuentra a nivel de los cuerpos vertebrales o también a nivel de las articulaciones sacroilíacas y en las sínfisis púbica. Según el tipo de tejido se clasifican como cartilaginosas. 3) Otras por fin son móviles, con diversos grados: son estas las Diartrosis, que se encuentran especialmente a nivel de los miembros (articulaciones de los diferentes segmentos entre sí, del miembro superior y del inferior), o bien a nivel del arco posterior de la columna vertebral (articulaciones de las apófisis vertebrales entre sí, de las articulaciones temporo-maxilares o de las articulaciones del cráneo con la parte superior de la columna vertebral cervical). Estas diartrosis pertenecen al eje raquídeo, a los miembros o a las cinturas (a las que estas últimas están unidas) son las que interesan esencialmente a la vida de relación, es decir, movilidad. Según el tipo de tejido, se clasifican como sinoviales. Cuando ocurre alguna lesión en alguna de ellas o sobre varias a la vez, determinan invalidez la cual es siempre importante y variable según su grado, su unicidad o pluralidad y su asiento. Estas diartrosis, que hemos mencionado se subdividen en: a) Enartrosis, (articulación del hombro y cadera que representan el tipo más perfecto de las diartrosis; son las más móviles cuyas superficies articulares están formadas, de un lado por una cabeza y del otro por una cavidad. b) Articulaciones condileas o condilartrosis, (articulación húmero-radial) sus superficies articulares están representadas, de un lado por una cabeza más o menos elongada y del otro por una cavidad glenoidea. Se parecen a las enartrosis y tienen casi sus movimientos. c) Articulación por encaje recíproco (articulación Trapecio Metacarpiana del Pulgar). Sus superficies articulares son inversamente convexas y cóncavas en dos planos, orientados perpendicularmente entre sí. d) Articulaciones trocleares o trocleoartrosis, (articulación Húmero-Cubital). Sus superficies articulares están representadas de un lado por una polea llamada troclea y del otro por dos pequeñas cavidades articulares, un poco deprimidas o separadas por una cresta que corresponde a la garganta de la polea. Los movimientos son esencialmente los de flexión y extensión. e) Articulaciones trocoides, (Radio-Cubital anterior). Las superficies articulares están constituidas por un cilindro óseo girando sobre su eje. La rotación es el único movimiento posible. f) Artroideas, (huesos del Carpo o del Tarso anterior). Son las menos móviles de las diartrosis; las superficies articulares son planas. Según el desplazamiento en los ejes: Las articulaciones se pueden clasificar en: Uniaxiales: son las articulaciones que tienen la posibilidad de realizar su movimiento en una dirección, ejecutándose la acción sobre un plano y un eje. Biaxiales: Son las articulaciones que tienen la posibilidad de realizar el movimiento en dos direcciones diferentes, por lo que su acción se ejecuta sobre dos planos y dos ejes. Poliaxiales: Son aquellas articulaciones que realizan sus movimientos sobre diferentes planos y varios ejes, por lo que su acción es muy amplia. En el primer caso podemos señalar las articulaciones interfalángicas. En el segundo caso, podemos citar las articulaciones de las muñecas. En el tercer caso, podemos mencionar las articulaciones de las caderas y los hombros. AMPLITUD DEL MOVIMIENTO ARTICULAR: Como amplitud del movimiento articular, distinguimos el desplazamiento de una articulación a través del arco articular. Este desplazamiento es medible en grados y cuando la amplitud articular es completa, el movimiento se realiza en todo el recorrido del arco articular, pero esta amplitud puede ser limitada por diversos motivos, en este caso, estamos en presencia de una amplitud articular reducida. Desde el punto de vista funcional, una articulación se considera en toda su amplitud, cuando cumple el o los recorridos normales de los arcos articulares para los que ha sido creada. La articulación del codo por ejemplo, se puede considerar desde el punto de vista funcional, cuando cumple el recorrido articular en los movimientos de flexión y extensión en todo sus arcos, pero para considerar funcional la articulación del hombro, debemos valorar todos los movimientos que la misma puede realizar, es decir, que debemos valorar los movimientos en los ejes que la misma los ejecuta. DESPLAZAMIENTO EN GRADOS DE CADA MOVIMIENTO ARTICULAR. Articulación Hombro Codo Antebrazo Muñeca Cadera Rodilla Tobillo Pie Movimiento Grados de movimiento Flexión Extensión Aducción Abducción Rotación interna Rotación externa Flexión Pronación Supinación Flexión Extensión Abducción Aducción Flexión Extensión Abducción Aducción Rotación interna Rotación externa Flexión Flexión Extensión Inversión Eversión 180 45 40 180 90 90 145 80 80 80 70 20 45 125 10 45 30 45 45 140 45 20 40 20 FACTORES QUE LIMITAN LA MOVILIDAD ARTICULAR 1) Alteraciones de elementos cápsulo-ligamentosos de la articulación donde se está produciendo el movimiento. Ejemplo: capsulitis retráctil. También es muy importante la presencia de adherencias articulares que aparecen cuando hay una inmovilización prolongada. 2) Alteraciones del músculo agonista: músculos cuya actividad realiza el movimiento. Cualquier lesión limita la movilidad bien sea: - Atrofias musculares. - Roturas musculares. - Contracturas. - Cualquier alteración de la capacidad contráctil del músculo. 3) Alteraciones de los músculos antagonistas: realizan la reacción contraria a la que estudiamos. Cualquier alteración que limite la capacidad de estiramiento del músculo antagonista limita la amplitud del movimiento. 4) Aparición de dolor (B.A.) a lo largo de la realización del balance articular. La aparición de dolor da lugar a movilizaciones defensivas: - Maniobras suaves y cómodas. - Muchos y diversos motivos. 5) Topes óseos: contacto entre los huesos antes del final del movimiento. Puede suceder por dos motivos: - De forma congénita o de nacimiento por la aparición de alguna malformación ósea. - Por un traumatismo directo y la aparición de callos exuberantes que hace que choque con otros huesos. En ocasiones se pueden encontrar fragmentos sueltos por el desprendimiento óseo del hueso subcontral o cartílago articular. 6) Contacto entre partes blandas: - Zonas musculadas: se produce en gente con la musculatura muy pronunciada (más en hombres que mujeres). - Zonas con exceso de tejido adiposo: cuanto más obeso más limitado está el movimiento. 7) Presencia de desviaciones axiales: relacionado con los topes óseos. Pérdida de la alineación correcta de los distintos elementos óseos que forman esa articulación. Puede ser de dos formas: congénita o patológica (degenerativo). Ejemplo: artrosis. 8) Control de posibles compensaciones: siempre que hay una falta de movimiento el cuerpo lo intenta compensar con otro movimiento. Hay que evitarlas para que el balance articular esté bien hecho. 9) Cicatrices en pliegues articulares: los pliegues articulares son líneas que señalan que debajo hay una articulación móvil. Una cicatriz en esa zona limita el movimiento. 10) Derrames e inflamaciones de tipo articular: los derrames son exceso de líquido y se miden en grados. Los de grado 2+ ó 3, es decir, grandes derrames que afectan a la movilidad. 11) Diferencias entre sexos: las mujeres tienen casi siempre mayor laxitud articular (mayor flexibilidad). Suelen tener más grados articulares. 12) Edad: durante el proceso de envejecimiento se van perdiendo paulatinamente grados de amplitud en las articulaciones. CONTRACCIÓN MUSCULAR. El músculo es el principal protagonista del movimiento. La importancia de la contracción muscular radica en que todo lo que hace el hombre conlleva a la ejecución de movimiento y para ello el único medio posible es a través de la contracción muscular. Según Paillard, la actividad contráctil de la musculatura estriada condiciona tres grandes manifestaciones: El estado de consistencia y tensión de los músculos, (el tono muscular). Posiciones respectivas de las piezas esqueléticas y el mantenimiento de estas posiciones, (la postura). Variaciones de estas posiciones (el movimiento). Para que la realización de la actividad muscular conduzca al movimiento deseado es preciso que la misma sea eficaz y coordinada y para ello requiere de la acción combinada de: Un Sistema Nervioso intacto. La tracción muscular. La utilización adecuada de las palancas óseas. El sistema Nervioso proporciona la orden voluntaria para que el músculo realice la contracción. Esta necesita para producirse que el músculo se encuentre en condiciones idóneas y que actúe sobre un sistema óseo-articular capaz de solidarizarse con el movimiento deseado. Las propiedades fundamentales del músculo son tres: elasticidad, contractilidad y tono. Todos los músculos tienen estas propiedades, pero no en la misma proporción y esta diferencia es la que condiciona la adaptación del músculo a su función. Podemos considerar dos categorías de músculos, según el predominio de la función elasticidad-contractilidad o de la función tono. En líneas generales, estas dos clases de músculos son los del movimiento y los músculos del sostén. Los músculos del movimiento son los que están más adaptados para ejecutar una actividad rápida de gran amplitud, pequeña intensidad y corta duración. Los de sostén sirven mejor para los movimientos lentos, de pequeña amplitud, gran intensidad y larga duración. En resumen, los músculos de movimiento se caracterizan además por: Poco tono, muy contráctiles, muy elásticos, coloración rojo pálida, cronaxia débil, largos y delgados, poco resistentes a la fatiga. Y los músculos de Sostén: Mucho tono, poco contráctiles, poco elásticos, color rojo fuerte, cronaxia fuerte, cortos y gruesos y muy resistentes a la fatiga. Tipos de contracciones musculares: La contracción muscular se inicia por estímulos del Sistema Nervioso Central, lo que supone un aumento de la tensión intramuscular. La misma puede manifestarse de dos formas: Isométrica: En este tipo de contracción se aumenta la tensión intramuscular, pero sin ninguna variación en la longitud del músculo. (Ejemplo: Contracción Isométrica de los Cuadriceps). Isotónica: Consiste en un aumento de la tensión intramuscular, acompañada del acortamiento de las fibras del músculo. Ejemplo: Contracción Isotónica del Cuadriceps. Trabajo muscular. Los tipos de trabajo muscular que regulan y mueven las palancas del cuerpo humano son de tres clases: 1) Trabajo muscular estático: La longitud del músculo permanece invariable todo el tiempo de la contracción y no se produce movimiento. Las fibras musculares se contraen isométricamente para equilibrar fuerzas opuestas y mantener la estabilidad ante la acción de estas dos fuerzas antagónicas. Por ejemplo: La contracción estática de los músculos flexores y extensores de la columna para mantener el equilibrio. 2) Trabajo muscular concéntrico: Las fibras musculares se contraen isotónicamente en un acortamiento de la longitud del músculo para producir un movimiento. Ambas inserciones del músculo se aproximan (concéntrico hacia el centro). El paciente que realiza un trabajo muscular concéntrico ejecuta un movimiento que vence la acción de la gravedad. Ejemplo: La flexión del codo (ambos extremos de inserción del Bíceps se acortan y se acercan). 3) Trabajo muscular excéntrico: Los músculos que trabajan excéntricamente se alargan y adelgazan, ya que de esta forma permite que se separen sus inserciones por la fuerza que produce el movimiento y aquí los favorece la acción de la gravedad. En esta forma de trabajo muscular, los músculos pasan de la forma de contracción completa a la posición de máxima extensión (la extensión del codo por el trabajo excéntrico del Bíceps). Amplitud del trabajo muscular: La amplitud del trabajo muscular, es la extensión de la contracción muscular que produce un movimiento articular. Amplitud Total: La articulación se mueve desde la posición en que los músculos se hallan completamente estirados hasta de totalmente contraídos o viceversa. En condiciones normales los músculos nunca trabajan en su total amplitud, es decir, en las actividades esenciales de la vida diaria el hombre jamás realiza un movimiento en toda la amplitud del trabajo muscular, ya que la acción no lo requiere. En terapéutica los ejercicios activos de amplitud total se usan para mantener la movilidad articular, mejorar la circulación y para garantizar la reserva de potencia y amplitud articular. Amplitud Interna: El músculo trabaja a partir de una posición en que se halla parcialmente contraído (aproximadamente a mitad de camino entre los límites de amplitud completa), hasta una posición de contracción total, o viceversa si trabaja excéntricamente. El ejercicio de amplitud interna se usa para aumentar o mantener el movimiento de una articulación en la dirección de la tracción muscular y para ejercitar algunos músculos extensores, necesarios para la estabilización de las articulaciones. Amplitud Externa: Los músculos trabajan concéntricamente desde una posición en que se hallan completamente estirados hasta en la que se encuentran parcialmente (la mitad) contraídos o viceversa si trabajan excéntricamente. La amplitud externa del trabajo muscular se aplica extensamente en la reeducación muscular, ya que la contracción se inicia más fácilmente cuando los músculos están totalmente estirados, debido a la importancia de los estímulos propioceptivos provenientes de la información de los órganos sensitivos del propio músculo. Amplitud Media: Los músculos no se hallan nunca completamente estirados ni completamente contraídos. Esta es la amplitud utilizada por los músculos en todos los actos de la vida, y en la cual, en términos generales, son más eficaces. Los ejercicios en esta amplitud, mantienen el tono muscular y la potencia normal, pero nunca se consigue el movimiento articular completo. Acción conjunta de los Músculos: Los músculos no trabajan aisladamente, sino en conjunto en correspondencia con la acción que realizan y del trabajo armónico de varios grupos se produce el movimiento coordinado. 1) Los agonistas o principales, son los grupos de músculos que por su contracción conjunta inician el movimiento. 2) Los antagonistas: Constituyen el o los grupos opuestos y se alargan y relajan progresivamente, de forma que regulan el movimiento, pero no lo impiden. 3) Los sinergistas: Estos actúan para modificar la acción de los agonistas y alteran la dirección en que se desarrolla la potencia o fijan en la posición más ventajosa una articulación que no sea necesaria para el movimiento fundamental. (Ayudantes). 4) Fijadores: Son los que estabilizan las articulaciones proximales, podríamos decir que su misión es asegurar los huesos donde se insertan los músculos agonistas y los sinergistas. Aclararemos los conceptos anteriores con un ejemplo. El movimiento de flexión de los dedos para cerrar el puño, requiere del trabajo agonista de los músculos flexores de los dedos; se relajan progresivamente los músculos extensores de los dedos que constituyen los antagonistas; los extensores de la muñeca obran como sinergistas, para que los flexores de los dedos no flexionen también la articulación de la muñeca y esta no se desvíe, y a su vez, los músculos de la cintura escapular actúan como fijadores para asegurar los puntos de inserción de los agonistas, lo que conduce a una mayor eficacia del movimiento. Como vemos, para que los movimientos puedan realizarse con precisión y suavidad, se requiere una correlación entre los músculos que intervienen en el movimiento. A esto se le denomina coordinación del trabajo muscular y que sólo se puede lograr a través del trabajo activo de los centros nerviosos de integración. Para concluir nuestro estudio sobre el trabajo muscular, debemos explicar las leyes que lo rigen y a pesar de que la Ley de la Contracción lo explica todo, es conveniente, respecto a las acciones musculares operativas, la puntualidad de dos leyes: 1) Ley de Aproximación: Cuando un músculo se contrae, tienden a aproximarse lo más posible su origen y su inserción. 2) Ley de la Detorsión: Todo músculo al contraerse tiende a colocar su origen e inserción en un mismo plano, aboliendo o disminuyendo cualquier torsión o espiral a lo largo del conjunto de sus fibras. Trofismo muscular. Cuando hablamos de trofismo muscular, nos estamos refiriendo al estado nutricional del o de los músculos, es decir, si el trofismo es bueno, se infiere que estamos dejando establecido que la nutrición de la musculatura es buena. La atrofia muscular tiene un significado muy importante, porque estamos dejando sentado que el músculo ha perdido peso por existir un defecto en la nutrición del mismo. El músculo atrofiado presenta una disminución del volumen por pérdida de sus fibras que conllevan también la disminución de la fuerza. Como causas de la atrofia muscular podemos mencionar: la atrofia por desuso, la atrofia por problemas o parálisis neurológicas y la atrofia por trastornos metabólicos. Estas son las causas más comunes. Hipertrofia muscular: es el desarrollo exagerado de los elementos anatómicos de éste, sin alteración de la estructura, dando por resultado el aumento de peso y volumen.