EL ROMANTICISMO 1. Contexto histórico-social del Romanticismo. Existen una serie de acontecimientos decisivos a lo largo del siglo XVIII que cambian el signo de la sociedad y de la cultura occidental. Estos cambios se originaron principalmente en Alemania e Inglaterra, pero fueron ayudados también por Francia y Estados Unidos. La declaración de independencia Americana, la Revolución Industrial e Inglaterra o la Revolución Francesa, son parte de los acontecimientos que marcan la sociedad de la época. Además, tras la derrota de Napoleón en 1815 y la restauración de las monarquías absolutas, una serie de países (Austria, Francia, Prusia y Rusia) habían establecido la llamada Santa Alianza, a través de la cual los reyes europeos se comprometían a auxiliarse en caso de revoluciones liberales. De hecho en España, en 1920 la Santa Alianza invadió España para derrocar el régimen liberal que había triunfado en 1820. 1830 es una fecha clave en torno a este movimiento, pues Francia derroca al rey Carlos X e instaura la monarquía liberal y burguesa de Luis Felipe y en España, tras la guerra de la independencia y el posterior reinado de Fernando VII, en 1834 abre las puertas a toda la corriente romántica. En relación al plano cultural, debemos destacar a importantes autores como Rousseau, que defendía la bondad del individuo frente a la maldad de la sociedad. Cabe destacar que la cultura de la época está vinculada al romanticismo en relación a los movimientos políticos de su tiempo que se basaban en el liberalismo, sin embargo, difiere bastante de todos aquellos ideales de la mentalidad capitalista, por lo tanto, el movimiento se distancia de las grandes transformaciones sociales y económicas de su época (R. Industrial, por ejemplo) En relación al movimiento anterior, el prerromanticismo reacciona contra él porque la razón no ha eliminado los problemas de los hombres, de hecho estos no son sólo razonables sino que también poseen sentimientos, emociones, fantasías, ideales,… y tienen derecho a expresarlos. Por este motivo, las obras no pueden hacerse con reglas ni ataduras, sino con libertad, no importa que sean menos “perfectas” si, en cambio, conmueven y emocionan. La libertad en arte pero también en política, será la gran consigna romántica. De todos modos el romanticismo no fue un movimiento homogéneo pues sus seguidores se dividieron en torno a dos actitudes ideológicas: el romanticismo conservador, que pretende restaurar los valores tradicionales, patrióticos y religiosos o el romanticismo liberal, que encarna los valores más progresistas y revolucionarios del momento. 2. El romanticismo en España. Aunque antes de 1814 ya se habían introducido en la península algunos elementos románticos, tenemos que tener en cuenta que los movimientos políticos no facilitan el desarrollo de esta corriente en nuestro país. Así pues tras la guerra de la independencia, que supone un periodo de transición entre el antiguo régimen y la nueva sociedad, se termina el estado absoluto y aparece la primera constitución, la de 1812, la primera de signo liberal y supuso el paso a la soberanía de la nación. Sin embargo el fin de la guerra supone la subida al trono del absolutista Fernando VII y muchos intelectuales, ante la represión, deben exiliarse. De hecho se dice que todos los que tuvieron que salir del país, a la muerte del rey, regresan a España y nos traen todas las ideas del extranjero. Aunque el romanticismo en España dura una década, es la revolución de 1868, la Gloriosa, la que marca el fin de lo romántico y la llegada de las fórmulas del Realismo, y en esta etapa de transición nos encontramos el posromanticismo. 3. Temas del romanticismo - Irracionalismo: la razón no puede explicar por completo la realidad, es más, ya no existen verdades fijas e inmutables. La realidad es cambiante, caótica e incomprensible. Este rechazo de la razón y lo racional explica la preferencia por temas como lo sobrenatural, lo mágico y lo misterioso, de ahí que la literatura fantástica y de terror tenga tanto auge. - Individualismo: el arte y la literatura se convierten en manifestación del yo, de los sentimientos personales. De ahí que el desarrollo de la poesía lírica sea pleno, al igual que sucede con la música. El autor expresa en sus obras su insatisfacción con el mundo circundante, su amor apasionado, su deseo de libertad. - Subjetivismo: relacionado con el apartado anterior, se destaca la importancia de las emociones, sueños o fantasías que permiten bucear en el inconsciente para descubrir allí los impulsos no racionales. - Idealismo: esto llevará a los románticos a la búsqueda de ideales inalcanzables en todos los aspectos, en especial en el amor, lo cual los conducirá inevitablemente al choque entre realidad y desengaño. - El genio creador: el arte expresa el genio que el creador lleva dentro. El artista nace, no se hace. Los románticos mezclaron los géneros: combinaron verso y prosa en muchas obras; dentro de los poemas variaban los metros; y en novelas y dramas, volvieron a reunir lo cómico y lo dramático. - Inseguridad: el mundo ya no es un lugar de certezas absolutas porque han perdido la confianza en la razón, y no sirven las respuestas tradicionales a los interrogantes que ofrece la realidad. Por ello el romántico es alguien inseguro y surge la desazón vital romántica. - Desengaño: el choque entre el yo romántico y la realidad gris que no satisface sus deseos produce en el artista romántico un profundo desengaño y un hastío vitales que lo llevan a enfrentarse con el mundo y a rebelarse contra todas las normas morales, sociales, políticas o religiosas. - Evasión: para escapar de este mundo que no le gusta, el romántico se evade a otras épocas, fundamentalmente la Edad Media o lugares exóticos o lejanos (Oriente, América) e incluso al suicidio. - Soledad: relacionado con lo anterior, el artista huye de la realidad refugiándose en sí mismo. Por ello prefieren lugares solitarios como castillos, cementerios, jardines,… - Naturaleza: la naturaleza va a estar en consonancia con los sentimientos del autor, con preferencia por la ambientación nocturna. - Defensa de la libertad: los románticos consideran el sentimiento como única forma de conducta, lo que los lleva a defender o disculpar el amor adúltero y el suicidio, y en el campo de la literatura rechazan las normas neoclásicas, buscando ante todo la originalidad. - Nacionalismo: se revaloriza ahora lo que es genuino de cada pueblo o nación, sus tradiciones, su historia, … - Espíritu rebelde y juvenil: este movimiento sintoniza más con las inquietudes de la juventud (rebeldía, pasión, idealismo,..) por eso fue un movimiento de gente joven que chocó con los gustos del público de más edad. 4. Poesía Romántica Tal y como citamos anteriormente, la poesía es el género en el que mejor expresa el romántico su actitud ante la vida y sus sentimientos. Las influencias extranjeras más destacadas son la de Goethe o Heine en Alemania. Este último emplea un tono bastante alejado de lo retórico que sirvió de modelo a nuestros posrománticos, Rosalía y Bécquer. En Inglaterra el autor más influyente fue Lord Byron, cuya obra El corsario contribuyó a forjar la figura del héroe romántico, que se rebela ante los convencionalismos de su época. Y en Francia sobresale Víctor Hugo. En España todos ellos sirvieron de modelos para la poesía española característica por los temas relacionados con los sentimientos del poeta, sobre todo en relación al amor, los temas exóticos, las recreaciones de ambientes medievales, la muerte, lo satánico, lo sobrenatural o la libertad. En relación a la forma de esta nueva poesía destacamos la rehabilitación del romance, la alternancia de diferentes estrofas, o el lenguaje culto y grandilocuente, muy retórico. Podemos distinguir dos tendencias: a. Poesía lírica: Dentro de este tipo destacamos dos etapas: la primera caracterizada por un énfasis retórico y el tratamiento de temas patrióticos y sociales. En esta etapa destacamos la Canción del Pirata de Espronceda, donde se exalta la figura del rebelde, del marginado frente a la sociedad organizada. También forma parte de esta etapa El reo de muerte, El verdugo, El mendigo,… La segunda etapa ya se ve libre de la retórica aunque se mantiene la visión pesimista y la concepción del amor como fuente de dolor y desengaño, aunque la ambientación lúgubre se ve sustituida por la melancolía, y la naturaleza unas veces contrasta con el ánimo del yo lírico y otras se identifica con él. En esta etapa destacan Rosalía y Bécquer. b. Poesía narrativa: Desarrolló un tipo de relato vinculado a la épica medieval, al romancero y a las leyendas de transmisión oral. Son frecuentes los elementos misteriosos y sobrenaturales. Las historias se localizan en lugares cargados de tradición artística (Toledo, Salamanca, Sevilla,…) lo que relaciona este tipo de poesía con la novela histórica y su intento de recuperación del pasado. PRINCIPALES AUTORES DE LA POESÍA ROMÁNTICA - JOSÉ DE ESPRONCEDA: Representa el tipo de romántico exaltado, de ideales socialistas y republicanos. Fundó una sociedad de carácter liberal y por ello fue detenido y encarcelado. Se marchó de España y en el extranjero conoció a Teresa Mancha, con quien se casa, más adelante ella lo abandona y se lleva a la hija de ambos. Tiempo después Espronceda descubre que ha muerto y compone el famoso Canto a Teresa, introducido en El diablo mundo. Este autor produjo tanto poesía lírica, como narrativa. Del primer caso encontramos los ejemplos ya mencionados anteriormente (“La canción del pirata”,” El mendigo”,..) y otras relacionadas con sus ideales políticos (“Al dos de mayo" o con la lamentación de la juventud perdida (“A jarifa en una orgía”) Su estilo poético se caracteriza por el empleo de gran variedad de metros, con frecuentes exclamaciones e interrogaciones retóricas, los recursos rítmicos (anáforas) y la antítesis de elementos o contrastes violentos. La musicalidad junto con el remarque de lo visual y de las sensaciones auditivas evocadoras y sugerentes son otros de los elementos característicos. En relación a la poesía narrativa, destacan obras tales como El estudiante de Salamanca, protagonizada por un donjuán, Félix de Montemar, que simboliza la exaltada y rebelde vitalidad romántica. Este hombre seduce y abandona a Elvira, quien muere de dolor. Una noche vislumbra a una dama vestida de blanco que pasea por las calles. La persigue hasta que descubre que es el esqueleto de Elvira. El fantasma lo arrastra a los infiernos en un torbellino. El diablo mundo ofrece una variedad de géneros: hay fragmentos líricos, narrativos, teatrales,… El tono oscila entre lo sublime y lo filosófico y lo grotesco y vulgar. El poema está inacabado pero la intención fundamental es la de demostrar que el hombre es bueno por naturaleza y que es la sociedad la que lo convierte en egoísta y malvado. El protagonista, Adán, es un sabio, que por medios sobrenaturales se convierte un joven con alma infantil, sin ninguna malicia, pero pronto la irá descubriendo pues es aleccionado por un delincuente. Destaca el famoso “Canto a Teresa” que es una elegía en la que Espronceda recuerda las apasionadas relaciones que mantuvo con su amada. - Bécquer De su vida personal podemos destacar que estuvo casado con una mujer que no quería (Casta Esteban) ella no le fue fiel y estuvieron separados durante bastante tiempo. Destacó por sus Rimas y Leyendas pero también se dedicó a trabajos periodísticos. Las Rimas son una serie de poemas que se pueden centrar en torno a cuatro temas fundamentales: La poesía y la inspiración poética El amor positivo e ilusionado El amor desengañado La soledad y la muerte. Es una poesía subjetiva que expresa las vivencias del poeta, su estilo es sencillo pero de una gran perfección formal. Predomina la musicalidad en sus poesías y la rima asonante. Para Bécquer la poesía no debe tratar temas sociales o ideológicos, sino temas íntimos que el lenguaje usual no es capaz de expresar. - Rosalía de Castro En las orillas del Sar, su principal obra poética en castellano, canta al desengaño y la decepción producidos por el paso del tiempo y la proximidad de la muerte. En su poesía sobresalen los temas del dolor y la soledad, tratados desde una visión pesimista de la vida. La muerte significa el fin del sufrimiento, el descanso,… El amor suele traer sufrimiento, ya que es motivo de desconfianza. En su estilo predomina la sobriedad. Se habla de influjos mutuos entre Bécquer y Rosalía, pero no están demostrados. El sevillano es más “puro”, más austero de medios expresivos. Como contrapartica, Rosalía ofrece una riqueza temática muy superior, no olvida el dolor ajeno y es sensible a la naturaleza. 5. Prosa romántica La novela romántica se centra o contextualiza en épocas pasadas, en especial la Edad Media, dado que los románticos consideraban que la sociedad moderna era poco interesante desde el punto de vista estético. El creador de este tipo de novela, la histórica, fue Walter Scott (Ivanhoe) En España apenas proliferó este género, la más destacada es El señor de Bembibre de Enrique Gil y Carrasco, donde se narra una historia de amor ambientada en medio de los conflictos que condujeron a la disolución de los templarios en el siglo XIV. También debemos destacar las Leyendas de Bécquer, donde se crean escenarios medievales en los que se sitúan sus historias. El otro tipo de prosa que se desarrolló en la época era el costumbrismo, donde sí que se recrean los ambientes y costumbres de la época contemporánea al autor. Ante todo este tipo de obras se centran en los cuadros de costumbres, recogen modos de vivir, costumbres populares o tipos representativos. Y también se caracterizan por la alabanza de lo tradicional, lo castizo, frente a los excesos del progreso o las influencias extranjeras. Como ejemplo tenemos las obras de Mesonero Romanos (Escenas matritenses) o Estébanez Calderón (Escenas andaluzas) Mariano José de Larra Hijo de afrancesado, cuando los franceses se retiraron de España tuvieron que emigrar al país vecino y cuando regresó pudo comprobar las grandes diferencias que existían entre ambas sociedades, la moderna francesa y la atrasada española, por causa del absolutismo de Fernando VII. Se expresa durante el régimen liberal con mayor libertad, empleando el seudónimo Fígaro. Como buen romántico, tras sus decepciones políticas y amorosas (su relación con Dolores Armijo, mujer casada no fue del todo bien) lo llevaron a una depresión tal que culmina con sus suicidio. La obra de Larra destaca por sus artículos periodísticos que se clasifican en tres grupos: - Artículos de costumbres: Larra toma el cuadro de costumbres para hacer una crítica social. Describe episodios de la vida cotidiana pero en tono irónico y mordaz. No se basa en la nostalgia del pasado sino en la modernización del país. Larra no pretende transmitir costumbres solamente, sino contribuir a reformarlas, tal y como sucedía en otros países como Francia, sin embargo esto no es incompatible con su patriotismo. - Artículos de crítica política: los carlistas y los gobiernos liberales moderados fueron el blanco de las críticas más agudas de Larra. Para evitar la censura buscó distintas formas: parodias, fantasías literarias, diálogos entre personajes,.. - Artículos de crítica literaria: para Larra la literatura es la expresión de una sociedad y el escritor debe adoptar una postura comprometida, y así se expresa en la mayor parte de estos artículos. Larra es un autor romántico peor como crítico se mantiene neutral entre la polémica entre neoclásicos y románticos. Es común a todos estos artículos un estilo claro, directo e irónico, como lo es también su constante preocupación por el idioma: rechaza neologismos innecesarios y el estilo arcaizante. Su estilo mordaz y sarcástico, la profundidad de sus observaciones y la actualidad de sus temas le convierten en modelo de escritores y periodistas contemporáneos. 6. El drama romántico. En gran medida los elementos formales que caracterizan el teatro romántico responden a la voluntad de romper con la estructura del drama neoclásico, oponiendo a la monocorde unidad de aquel, y a su disciplinada construcción la libertad como principio artístico. El teatro se inaugura en España en 1834 con el estreno de La conjuración de Venecia, de Martínez de la Rosa. Los temas de este teatro son los siguientes: - La fatalidad y el amor apasionado, por encima de las normas e incluso de la muerte. También encontramos la venganza extremada y sangrienta, el poder y la autoridad, vinculados a la crítica de las instituciones que coartaban la libertad individual y el cuestionamiento de la autoridad paterna. Los autores se apartan de las pautas de la época en asuntos como el adulterio, el suicidio y el honor, que ya no depende de los demás sino de la propia conciencia. Suelen aparecer elementos melodramáticos y fantásticos (crímenes, sombras, fantasmas) - Entre los personajes sobresale por encima de todos el héroe, del que destaca su origen desconocido, el misterio que envuelve su persona, su amor a la libertad, su búsqueda dela felicidad y la inevitable desgracia que acaba con sus sueños, porque a menudo acaba siendo víctima de la fatalidad implacable de una sociedad que no lo acepta como igual. De la heroína que lo acompaña destacamos su inocencia y dulzura, condenada al sufrimiento, ama apasionadamente hasta el sacrificio. Alrededor de ellos los demás personajes parecen existir sólo para oponerse al amor de la pareja protagonista o para asistir, impotentes, a la destrucción final. También suelen aparecer personajes marginados (corsarios, bandidos, aventureros) y otros que, de modo intencionado, se sitúan fuera de las normas sociales, como don Juan. - La escenografía es muy importante en este teatro. Tienen predilección por panteones, paisajes abruptos y solitarios, mazmorras, riscos y montañas,… Las abundantes acotaciones nos muestran un espacio que no es un simple marco de acción sino que cumple una función dramática importante. Los escenarios múltiples juegan con luces y recursos ópticos, que contribuyen a la creación de un clima fantasmagórico. Los efectos sonoros sirven para evocar hechos, subrayar situaciones emocionantes o desencadenar acciones. - El drama romántico rechaza todas las reglas: no busca verosimilitud, mezcla lo trágico y lo cómico, el estilo coloquial y el elevado, alterna la prosa y el verso y se tiende a la polimetría. Se rompe con la regla de las tres unidades. - La finalidad es conmover, hacer reír o llorar al espectador. No hay fin didáctico y reivindican la libertad creativa. ÁNGEL SAAVEDRA, DUQUE DE RIVAS. Es uno de los autores más destacados. Además de dedicarse al ejército y a la diplomacia, colaboró con diversas instituciones, como la Real Academia, de la que fue director. El estreno en 1835 de Don Álvaro o la fuerza del sino supone el triunfo del Romanticismo en España, convirtiéndose en el prototipo del drama romántico. El tema principal es la fatalidad que persigue a Don Álvaro hasta destruirle totalmente, la venganza y el honor también son temas presentes en la obra. La obra es una acumulación de casualidades contra las que nada puede hacer la voluntad del protagonista. Don Álvaro responde a todas las características del héroe romántico: valiente, generoso, apasionado, de origen desconocido y querido popularmente. Las muertes sucesivas lo arrastran a una situación cada vez más trágica, que desemboca en el final transgresor del suicidio. Doña Leonor también es la amada dulce y víctima de una familia severa y convencional, que representa a los antagonistas de la obra; doña Leonor se debatirá entre los sentimientos familiares y los que le inspira don Álvaro. La obra no respeta las unidades dramáticas: la acción se desarrolla en Sevilla, Córdoba e Italia; se extiende a lo largo de cinco años, se entremezcla con acciones secundarias de carácter humorístico o costumbrista y mezcla lo trágico y lo cómico. En el estilo se mezcla la prosa con el verso, está presente la polimetría. Los personajes oscilan entre el estilo elevado y serio con le popular y jocoso de las escenas costumbristas que también existen. JOSÉ ZORRILLA Se dio a conocer por un poema recitado durante el entierro de Larra. Destaca por su obra Don Juan Tenorio, que refunde el mito de don Juan de Tirso de Molina. El personaje responde a los gustos románticos: el misterio inicial, duelos y peleas callejeras, la noche, sepulcros, estatuas de piedra, la muerte,.. La salvación de don Juan por amor es lo más característico de esta refundición del mito. Argumento (véase libro)