Unidad 3 Lectura 1 (Fragmento del Capítulo 38: Endocrinología de la reproducción). ANATOMÍA FUNCIONAL DEL EJE REPRODUCTOR Estructuras del sistema nervioso central El hipotálamo mediobasal es, en los primates, el asiento de las neuronas productoras de LHRH y de internueronas aminoacidérgicas que controlan su función En los mamíferos, las neuronas productoras de luteoliberina (hormona liberadora de LH o LHRH) se agrupan en forma laxa, sin conformar núcleos definidos. En los roedores, la distribución es rostral (área hipotalámica anterior-preóptica medial), mientras que en los primates estas neuronas, así como las interneuronas principales que regulan su secreción (glutamatérgicas, GABAérgicas) se encuentran en el hipotálamo mediobasal, para conformar el llamado "generador de pulsos" de LH (concepto que alude a una función que surge de la interacción de diversos grupos neuronales y no de una estructura anatómica con localización precisa). Además, otras neuronas provenientes del hipotálamo y el tronco encefálico hacen sinapsis con las neuronas LHRH, y modulan su secreción (véase Cáp. 35). Las neuronas LHRH envían sus axones hacia la eminencia media, donde vuelcan la LHRH hacia la sangre portal en pulsos circahorarios (alrededor de uno cada 60-90 mm). En roedores se demostró que axones de las neuronas LHRH además se dirigen hacia distintas zonas del cerebro límbico (región septal, órgano subfornical, amígdala). Se postula que estas vías se relacionarían, entre otros procesos, con la conducta de apareamiento. Las interneuronas son mediadoras de los mecanismos de retroalimentación ejercidos por los esteroides sexuales y contribuyen con la generación de los pulsos de LHRH Se acepta que las hormonas sexuales ejercen sus efectos hipotalámicos (feedback negativo y, sobre todo, positivo) por medio de las modificaciones en la función de las interneuronas (glutamatérgicas, GABAérgicas, serotoninérgicas, etc.) ya que no se demostró la presencia de receptores clásicos (intracelulares) para hormonas esteroides en las neuronas LHRH. En cambio, las neuronas que controlan la secreción de las células productoras de LHRH si los presentan y su actividad es modulada, por ejemplo, por cambios en las concentraciones de estradiol. Si bien la pulsatilidad es una propiedad intrínseca de las neuronas LHRH (neuronas LHRH aisladas y puestas en cultivo continúan con su actividad secretoria pulsátil), se necesita su sincronización (dada por la activación de las neuronas glutamatérgicas estimuladoras- y la supresión de las neuronas GABAérgicas -inhibitorias-) para lograr un aumento significativo (pulso secretorio) de los niveles del decapéptido en sangre portal. Estos pulsos son los que impactan en los receptores específicos de las células gonadotrópicas, donde inducen un incremento en la liberación y la síntesis de las gonadotrofinas, sobre todo LH. De acuerdo con el período oscilatorio, la pulsatilidad de los niveles de LHRH puede aumentar (p. ej., durante la fase folicular) o disminuir (durante la fase lútea) la respuesta de las células gonadotrópicas a la luteoliberina, al modificar el número de receptores para LHRH presentes en su superficie Las interneuronas aminoacidérgicas son responsables fundamentales del incremento preovulatorio de la secreción de LHRH Además de controlar la secreción pulsátil de LHRH, el glutamato y el GABA tienen una participación muy importante en la génesis del pico preovulatorio de gonadotrofinas; tanto en roedores como en primates, en experimentos farmacológicos se demostró que la administración de agonistas de los receptores GABA-A, así como de antagonistas de los receptores glutamatérgicos (sobre todo del subtipo NMDA) inhibe el incremento de LH inducido por el aumento de los niveles de estrógenos (mecanismo de retroalimentación o feed-back positivo). En roedores se demostró que estos neurotransmisores arninoacidérgicos medidos en el hipotálamo anterior (asiento de la mayoría de las neuronas productoras de LHRH) presentan fluctuaciones (descenso de los niveles de GABA, aumento de los de glutamato) que se correlacionan en forma temporal con el pico secretorio de LH desencadenado por la administración de estradiol. Así como ocurre con la actividad del "generador de pulsos" de LHRH, otros neurotransmisores y neuromoduladores, como noradrenalina, serotonina, dopamina, 13-endorfina, interleucinas (IL-1, TNF) y CRH también pueden afectar la descarga preovulatoria de gonadotrofinas. Bases Fisiológicas de la Práctica Média Best & Taylor Ed. Médica Panamericana Pág. 660-661 13ª edición Para regresar al texto de la guía cierra esta ventana.