La fábula de las abejas; Bernard Mandeville

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Universidad Diego Portales
Facultad de Economía y Empresa
Carrera de Ingeniería Comercial
Cátedra: Economía y Sociedad
Análisis de La Fábula de Las Abejas
Mandeville
La fábula de las abejas
Bernard Mandeville
Mandeville dentro de su obra destaca conceptos de gran importancia, uno de ellos es que sostiene que los
sentimientos que hacen moral al hombre se basan en el egoísmo del mismo, no existiendo en términos de
moralidad reglas de conductas universalmente reconocidas.
En primer lugar, habla de la virtud, y dice que no hay acción virtuosa si esta inspirada en un sentimiento
egoísta, ya que considera todo sentimiento espontáneo, egoísta.
En segundo lugar, la definición de virtud afirma que no hay acción meritoria, a menos que este inspirada por
un motivo racional. Así por lo tanto todos los actos humanos son viciosos.
Los actos naturales del hombre se basan en el egoísmo y cuando el hombre es educado pasa igualmente, todo
depende de la adulación o del temor, del deseo de adulación o del temor a la culpabilidad.
Aunque Mandeville no niega los impulsos altruistas, ni acusa a la humanidad de hipocresía premeditada,
explica el primero como el conocimiento de uno mismo que en última instancia nace del egoísmo.
Según Mandeville el recurso principal al que recurre el humano para ocultar su innato egoísmo bajo una
mascara de aparente intrusismo ocultando así al observador, es la pasión del orgullo. Para satisfacer esta
preocupación el hombre esta dispuesto a soportar las mayores privaciones y como una savia formación de la
sociedad a ordenado que se recompensen con la gloria o se castiguen con la vergüenza las acciones echas para
bien o mal. El orgullo es el baluarte de la molaridad y en apariencia contraria el interés y el instinto del
ejecutante.
Es un antinacionalista, los hombres son criaturas de pasión y no de razón, y todos los móviles humanos son,
amor propio.
El hombre no obra por principios de razón si no que obedece a los deseos de su corazón. La razón en las
acciones de los hombres no son factor determinante, el raciocinio mas esmerado y desinteresado no es mas
que una racionalización y justificación de las exigencias de las emociones, y todos nuestros actos son, debidos
a alguna variedad o intervención del egoísmo.
Al no poder llevar a la práctica su definición de virtud, Mandeville se ve obligado a concluir que el mundo es
completamente vicioso.
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Uno de los sentimientos que mueve al hombre a ser moral es la fama, el honor, la sed de fama, que en ultimo
termino se basa en el amor propio el reverso de este sentimiento es la vergüenza, una pasión que tiene
síntomas propios, el reverso de la vergüenza seria el orgullo. El orgullo junto con el lujo es necesario para el
avance y enriquecimiento de la sociedad. Del orgullo nace la forma de vestir con ropas elegantes y de esta se
deriva un provechoso comercio y un progreso en la sociedad. En conclusión los sentimientos que hacen moral
al hombre dependen en último del orgullo, y del amor propio.
La ética de Mandeville es una combinación de anarquismo en la teoría y utilitarismo en la práctica. Utilitarista
en la práctica y esto lo entiende como el ideal de satisfacer los diferentes deseos y necesidades del mundo
Como hemos visto el egoísmo es el motor principal de la acción social y moral. El hombre es un mecanismo
de pasiones en interacción esas pasiones están compuestas bajo el influjo de la sociedad, su aparente discordia
se armoniza para lograr el bien público.
Mandeville otorga al poder político el status de inventor de la virtud dado el honor y además también de la
sociedad. Fueron inventos de legisladores y sabios que deliberadamente impusieron el orgullo, la adulación y
la vergüenza sobre el hombre.
Lo que llamamos mal, es el gran principio que nos hace seres sociables y es la base sólida de todos los oficios
y profesiones, así el bien, la sociedad esta basada en el mal.
El poder político que impulso a la abnegación por medio de alagar el orgullo humano, debe guiar a los
hombres en pro del beneficio público. Además quien desee civilizar a los hombres y organizarlos e un cuerpo
político, tendrá que tener un profundo conocimiento de todas las pasiones y apetitos, las fortalezas y flaquezas
de su constitución y saber utilizar sus mayores debilidades en provecho publico.
Mandeville señalo en el desarrollo de la sociedad tres principales etapas: la asociación forzada de los hombres
para protegerse a sí mismo de los animales, la asociación de los hombres para protegerse el uno del otro y la
invención de la escritura.
Otras causas de evolución son, la división del trabajo, el desarrollo del lenguaje, la invención de las
herramientas y la del dinero. En consecuencia cuando se ha constituido el estado la guerra se ve remplazada
por las formas de competencia que representan las bases del progreso humano: el hombre ya no combate para
matar si no para ser apreciado y envidiado. Para conseguirlo se transformara en culto, rico y refinado y así
dará trabajo a los pobres y ayudara al bienestar económico de toda la nación.
En sociedad lo normal es la conveniencia y la compañía, siempre que sea en compañía de hombres de bien,
pero no existiendo buena compañía la soledad es buen remedio. Mandeville sostendrá que la aparente amistad
y amor por la compañía del hombre no es más que tratar de fortalecer nuestros intereses y se centra en el amor
propio.
Lo que mas le gusta al hombre que vive en sociedad es que los demás hablen de el, cuestiona que le
proporciona intima satisfacción. Así podemos ver que son las causas mas odiosas y malas las que dotan al
hombre para ser el ser mas sociable de la naturaleza y solamente nace la sociabilidad humana de la
multiplicación de sus deseos y la constante ocupación con la que tropieza para satisfacerlos.
Para Mandeville, en referencia a la sociedad, existe la necesidad del lujo para el sostenimiento de un estado
fuerte y que en absoluto aumenta la avaricia, además postula el avance de la sociedad haciendo ver al lector
que los pobres tienen elementos que en otros tiempos eran considerados lujosos y ahora se ven de uso
corriente, en cuanto pasan las modas los elementos, antes lujosos, pueden pertenecer al grueso de la sociedad,
haciendo patente el principio de oferta y demanda. El lujo depende tanto de la avaricia como de la
prodigalidad, ya que ambos son elementos constitutivos de la sociedad.
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El interés del estado es el que prima y el que se relaciona con el desarrollo del comercio. La protección de esta
actividad llego a ser el principal fin de la teoría económica, pero aunque el resultado de estos intereses fue el
fomento del desarrollo de la producción y el comercio y por ende la difusión del lujo, la opinión popular
denuncio el lujo como malo en sí mismo y corruptor. Mandeville demuestra que el lujo es inherente a los
estados florecientes, demostrando la paradoja vicios privados, beneficios públicos. Apoyando esta paradoja
presenta la necesidad de determinados oficios inmorales que benefician el crecimiento del estado.
Para Mandeville el bienestar egoísta del individuo (vicios privados) es normalmente el bien del estado
(beneficios públicos), dejando constancia del individualismo en el comercio de la propiedad y de la necesidad
que tiene el gobierno de proteger al individuo en su propio beneficio.
Así, el fin de la sociedad según Mandeville, es el existir los más fuerte y poderosa que pueda sobre la base de
la teoría de la armonía espontánea de los intereses individuales y de la opresión de los numerosos miembros
de las clases trabajadoras.
Desarrollo de preguntas:
• ¿Cuáles son las críticas que realiza Mandeville a la sociedad de su tiempo?
Mandeville atacó de frente la hipocresía de la sociedad disfrazada con el nombre de moral. Manifestaba cómo
las costumbres sedicentes morales no son más que una máscara hipócrita; cómo las pasiones que se cree
dominarlas con el código de la moral vigente toman, por el contrario, una dirección tanto más perniciosa
cuanto mayor son las restricciones de este mismo código.
• ¿Quienes son los principales opositores de Mandeville y por qué?
Los principales oponentes en su época fueron Hutcheson y Lord Shaftesbury. En el caso de Hutcheson el
principal problema era que los Británicos no tenían filósofos Morales, y el había sido profesor de Filosofía
Moral en la universidad de Glaslow. En el caso de Shaftesbury, la razón era la misma, en el caso de este la
rivalidad con Mandeville o el odio era aun mayor, llegando incluso a Un año después de la muerte de
Shaftesbury, Bernard Mandeville le rindió un involuntario tributo lanzando el más serio y sistemático ataque
contra su filosofía. La Fábula de las Abejas se publicó en 1714, su subtítulo era Vicios Privados, Beneficios
Públicos, y era un manifiesto contra Shaftesbury.
La sociedad, alega Mandeville, no se basa ni en las cualidades amistosas y los benévolos afectos de la
naturaleza humana ni en sus facultades de razón y auto−negación sino más bien en lo que llamamos maldad
en este mundo moral así como natural. La maldad es el gran principio que nos hace criaturas sociales, la
sólida base de todos los empleos y oficios sin excepción. Con un fino sentido de imparcialidad, Mandeville
aplicó esta biliosa concepción de la naturaleza humana a los pobres y ricos por igual. Pero era particularmente
pertinente para los pobres porque eran ellos los que mostraban tan extraordinaria proclividad a la vagancia y
el placer y nunca trabajarían a no ser que se vieran forzados por una inmediata necesidad.
• ¿Cuál es el sentido para Mandeville de escribir mediante fábula?
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