TECNOLOGÍA de la Reserva Energética del Suelo (RES) Orlando Zúñiga Escobar. Físico. Magíster en Geofísica y en Tecnología y Desarrollo. Doctor en Física de Suelos. Docente y director del laboratorio de Física Ambiental, Universidad del Valle. Director del Grupo de investigación en Ciencias Ambientales y de la Tierra – ILAMA. orlando.zuniga@correounivalle.edu.co Para realizar descubrimientos científicos, proponer ideas innovadoras y encontrar resultados a problemas de investigación no existen fórmulas exactas ni un modelo único por seguir. No obstante, sabemos que a lo largo de la historia los grandes descubrimientos han sido hechos por personas que, además de conocer las teorías, podían conectar sus conocimientos con sucesos y objetos cotidianos en sus vidas, que les permitían tomar ideas de su alrededor. Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) Sucede con frecuencia que muchos estudiantes no logran utilizar sus conocimientos teóricos para resolver problemas en sus rutinas diarias; esa es una capacidad que requiere ser estimulada, así como los métodos pedagógicos integrales, según piensa el profesor e investigador de la Universidad del Valle, Orlando Zúñiga Escobar, creador de la Tecnología de Reserva Energética del Suelo (RES). El profesor Zúñiga es el director del Grupo de Investigación en Ciencias Ambientales y de la Tierra (ILAMA), que se caracteriza por ser interdisciplinario, pues incluye disciplinas como la física, la ingeniería, la economía ambiental, la química y la salud, y cuenta con expertos en distintos temas o líneas de investigación, como física ambiental, agricultura de precisión y seguridad alimentaria. El profesor Zúñiga promueve un tipo de pedagogía acorde con ese pensamiento interdisciplinar, por eso se ha encargado de promover el estudio de la ciencia como un conjunto de muchos elementos y prácticas, en las que se deben tener en cuenta diversas disciplinas y los contextos en que se producen los fenómenos, además de comprender que todos los “misterios” de la ciencia hacen parte de la vida como un solo fenómeno integral. En sus años de trabajo ha concluido que los estudiantes necesitan utilizar el ingenio y valerse de la creatividad para juntar fenómenos que al parecer no tienen conexión, como el caso de la materia en el suelo y la energía, que aparentemente no tenían ninguna relación. Este tipo de pedagogía permite que, aunque no se tengan grandes recursos para investigar, se pueda llegar a resultados innovadores por medio de la sensibilidad, la creatividad y la imaginación. El papel del docente, según la mirada del profesor Zúñiga, debe provocar y seducir al estudiante para que sea él mismo quien explore sus riquezas, ampliando los conocimientos que ya tiene y relacionándolos con los saberes que adquiere en la universidad. 2 Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) ¿CÓMO SE DESCUBRE LA TECNOLOGÍA DE LA RESERVA ENERGÉTICA DEL SUELO (RES)? Un día el profesor Orlando Zúñiga se encontraba dictando el laboratorio de física a estudiantes de ingenierías Eléctrica, Sanitaria y Agrícola. Realizaban un experimento llamado el Efecto Joule, que consiste en llenar un recipiente de agua, calentarlo y medir el calor específico o la cantidad de energía (calor) necesaria para que el agua incremente su temperatura. Lo miden utilizando un termómetro, un recipiente metálico y una resistencia eléctrica para calentar el agua. De repente se les ocurrió hacer una prueba cambiando el agua por una muestra de suelo, y realizando el procedimiento del Efecto Joule similar al del agua descubrieron que con este experimento sencillo se puede medir el calor específico del suelo. También probaron con distintos tipos de café, unos provenientes de huertas orgánicas y otros de cultivos sembrados con agroquímicos, lo cual les permitió apreciar que existen diferencias entre ellos; mientras que uno es cultivado con agricultura de uso intensivo de insumos químicos, el otro (el café orgánico) es cultivado con manejos agroecológicos. El suelo es un cristal que crece distinto según el ambiente, explica el profesor Zúñiga. Generalmente, al medir la fertilidad del suelo con análisis químicos de la materia se observa si hay carbono, fósforo, nitrógeno o potasio, entre otros nutrientes; sin embargo, no se miden los canales de energía. Debido a que el suelo es un ente vivo, tiene energía: energía electrotérmica; por ello que surgió la idea de desarrollar una metodología y una tecnología que no solamente permita medir la parte química del suelo sino también su energía, con la cual las plantas toman sus nutrientes. Este descubrimiento demuestra que no es cierto que si se les adicionan muchos agroquímicos a los suelos las plantas los tomarán en su totalidad; realmente no los toman porque estén dispuestos en abundancia, sino por la existencia de diferentes canales de energía. Por lo tanto, lo que se busca es medir la energía del suelo con una técnica que permita determinar la Reserva Energética del SueloI (RES), mediante elementos analíticos y sintéticos, como la sonda electrotérmica (ver figura 1) y la sonda geoeléctrica (ver figuras 3 Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) 2 y 3); luego se complementan estos elementos sintéticos con elementos analíticos convencionales como las variables físicas y químicas del suelo. “Todo debe juntarse, peras con manzanas, algo contrario a lo que nos enseñan comúnmente los profesores en el bachillerato; con estas mediciones se complementan unidades para ver lo invisible de los fenómenos científicos, lo que no se puede medir con normas de unidades tradicionales. La realidad es un todo indivisible que no se puede fraccionar ni etiquetar con unidades: energía, calor y luz son un solo fenómenoII ”. Cuando se toman los datos del suelo para analizar su estado químico y sus canales de energía, no se puede usar la estadística basada en métodos lineales, sino que se deben usar métodos no lineales provenientes de la Teoría de sistemas dinámicos, que se maneja a través de herramientas como la lógica difusa, redes neuronales difusas, técnicas de Wavelet y matrices de densidad, por medio de las cuales se determina un indicador para caracterizar la Reserva Energética del Suelo. Este indicador permite inferir, por ejemplo, que un suelo cultivado en caña de azúcar, en el departamento del Valle del Cauca, no es homogéneo. Sin embargo, tradicionalmente un agrónomo o un agricultor asumen que determinado suelo es homogéneo, desconociendo que existen zonas con más energía y otras con menos. Teniendo en cuenta este hecho, es recomendable que las zonas con más energía se traten con menos fertilizantes, mientras que las zonas de menor energía requerirán no solo más fertilizantes sino también otras prácticas de manejo y recuperación de suelos. De esta forma se logra la exactitud y la optimización de los recursos; a esto se le conoce como agricultura de precisión (ver figura 4). Una de las características de la Reserva Energética del Suelo es que permite, por medio de mapas, conocer el estado energético del suelo mediante colores. En las zonas donde la RES es baja se utiliza el color rojo, y en las zonas con altos niveles de RES se utiliza el color verde (ver figura 5). La RES no solo se aplica al cultivo de caña de azúcar sino también a frutales, hortalizas y otros cultivos. Esta tecnología ya ha sido implementada con pequeños, medianos y grandes agricultores, y constituye una herramienta importante que puede ser utilizada por el agricultor o el agrónomo para aplicar un plan de manejo adecuado que involucre actividades de labranza, riego y fertilización diferenciadas. Esta metodología descarta el 4 Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) manejo convencional de suelos y cultivos, que empleaba la receta o la regla de tres. La tecnología de la Reserva Energética del Suelo permite inferir con mayor precisión la sostenibilidad, la eficiencia y la productividad de los suelos a mediano y largo plazo, La tecnología cuenta con dos solicitudes de patente, una en Colombia, ante la Superintendencia de Industria y Comercio, y otra en la Oficina Internacional de Patentes. El potencial de la Reserva Energética del Suelo, comparado con otras tecnologías, radica en que las metodologías tradicionales de análisis no explican los fenómenos energéticos involucrados en los procesos productivos agrícolas. Otras deficiencias son la incertidumbre y el menor contraste en los resultados, que requieren mayor inversión en el proceso de toma y análisis de los datos de campo. LA TECNOLOGÍA COLOMBIANO RES EN EL CONTEXTO En Colombia, los estudios y los planes estratégicos que se realizan en el ámbito regional y nacional dedican un espacio importante a la agricultura, dado que este es un país biodiverso, cuyas condiciones climáticas y composición topográfica lo hacen idóneo para la agricultura tropical. Sin embargo, la producción de bienes sin ningún valor agregado no genera grandes riquezas para el país, y es ahí donde la agricultura de precisión, con su sistema de limitar el uso de agroquímicos, adquiere un valor agregado, pues va a la par de la tendencia de producción agroecológica. Numerosos estudios en el mundo han advertido los riesgos que causan a la salud humana los productos tratados con químicos, es por ello que muchos países, como Alemania, Reino Unido, Italia, Francia, Estados Unidos y Japón, ya están solicitando productos alimenticios que no sean tratados con los métodos tradicionales de cultivo, sino que privilegian la producción limpia e incluso están en condiciones de pagar un mayor valor por ellos, hasta un 40% más de lo que pagan por productos que no son orgánicos. 5 Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) Esta tecnología puede ser implementada para disminuir los niveles de elementos químicos utilizados en los cultivos, como fertilizantes, plaguicidas y fungicidas. La agricultura ecológica fue considerada como “la oportunidad comercial del futuro” por más de cien empresarios que se reunieron en el Encuentro Bio200III, y tiene características que la diferencian de otras formas de producción. La agricultura moderna, particularmente la de tipo intensivo, requiere del uso de grandes cantidades de fertilizantes, que se aportan de forma mineral y orgánica. Existe un gran vacío en el conocimiento sobre la eficacia y el destino de grandes excedentes de fertilizantes minerales, lo cual podría estar llevando a un deterioro ambiental progresivo del suelo, el agua, el aire y las plantas, que a la larga tendrá efectos irreversibles que perjudican la vida humana. La utilización de métodos físico-energéticos para el desarrollo de cultivos permite no solo reforzar la competitividad, sino también la sostenibilidad del sistema de producción, por cuanto la aplicación de la técnica de Reserva Energética del Suelo permite elaborar planes de fertilización diferenciada que contribuyen a reducir costos debido a las menores dosis de fertilizantes aplicadas. Además genera un impacto ambiental positivo, por la menor contaminación sobre los recursos naturales, el suelo, las aguas subterráneas, la biodiversidad y la salud de los operarios de campo. Esta tecnología posibilita construir un modelo de aplicación de técnicas más limpias y de mínimo impacto ambiental en la producción de cultivos que han perdido su competitividad por problemas de degradación de los suelos, como la compactación y salinidad, que resultan de prácticas inadecuadas en el manejo de los suelos. Por tanto, este modelo productivo amigable con el ambiente se caracteriza por la aplicación de técnicas y prácticas encaminadas a conservar y mejorar las características originales de los suelos, contribuyendo así a la sostenibilidad de los recursos naturales y por consiguiente de los ecosistemas de producción. La tecnología RES fue llevada a la Universidad de Wisconsin, que ocupa el puesto once en el mundo en física del suelo, y allí la 6 Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) tecnología funcionó satisfactoriamente. Actualmente la tecnología ha sido refinada, y ahora se cuenta con una mayor capacidad de procesamiento de muestras y metodologías complejas para una mejor caracterización de la RES. Aunque esta tecnología ha sido mejorada con recursos más avanzados de carácter internacional, es fruto de la creatividad y el ingenio de estudiantes y profesores de una universidad colombiana, la Universidad del Valle, que pretende contribuir a la mayor eficiencia de las prácticas agrícolas mediante la investigación e innovación en agricultura de precisión con un enfoque de producción más limpia. VENTAJAS FRENTE A OTRAS TECNOLOGÍAS Además de optimizar las labores de labranza y riego —actividades importantes en el manejo de suelos y cultivos—, esta tecnología permite lograr una reducción (de entre el 10 y el 30%) en los costos de fertilización, 20 % de ahorro en agua y 20 % de ahorro en labores de labranza. La tecnología RES presenta las siguientes ventajas: Identificación de zonas productivas dentro del cultivo Mayor productividad en las cosechas Mayor rentabilidad de los cultivos Reducción de efectos residuales (huellas ambientales) Reducción de costos en fertilización, manejo de agua y manejo de labores de labranza. www.propiedadpublica.com.co 7 Galería de fotos 1 Sonda electrotérmica. Imagen del investigador. 2 Equipo de geoeléctrica. Imagen del investigador. 3 4 8 Visión energética del suelo. Imagen del investigador. Sensor geoeléctrico (Electrosonda). Imagen del investigador. 5 Mapa de la Reserva Energética del Suelo. Imagen del investigador. Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) REFERENCIAS Rojas Palomino, Adriana; Morales Madero, Edgar; Ramírez Náder, Luis Miguel; Zúñiga Escobar, Orlando (2009), “Índice de potencial productivo del suelo aplicado a tres fincas ganaderas de ladera en el Valle del Cauca, Colombia”, Acta Agronómica, Palmira, Vol. 58, Nº 2, pp. 85-90. Rojas Palomino, Adriana; Zúñiga Escobar, Orlando; Sánchez de Praguer, Marina; Pérez, Jesús; Gascó, José María (2007), “Conductividad térmica del suelo, materia orgánica, actividad y biomasa microbianas en sistemas de cultivo de maracuyá en Toro, Valle del Cauca”, Acta Agronómica, Palmira, Vol. 56 (1), pp. 17-21. Zúñiga Escobar, Orlando; Norman, M. Jhon; Roa, Aicardo; Reyes, Aldemar; Cuerdo, Ramiro (2007), “Evaluación de la compactación de suelos a partir de la medición de la conductividad térmica en la estación experimental de Arlington, University of Wisconsin-Madison”, Suelos ecuatoriales, Revista de la Sociedad Colombiana de la Ciencia del Suelo (SCCS), Vol. 37, Nº 1, pp. 24-28. Zúñiga Escobar, Orlando; Osorio S., Juan Carlos; Cuero Guependoe, Ramiro; Peña Ospina, Julián Andrés (2001), “Evaluación de tecnologías para la recuperación de suelos degradados por salinidad”, Revista Facultad Nacional de Agronomía, Medellín, Vol. 64, Nº 1, pp. 5769-5779. 9 Tecnología de la Reserva Energética del Suelo (RES) NOTAS I Sonda Electrotérmica: Patente de invención Europea # 20030228. Zúñiga, O.; Reyes, A. y Universidad del Valle (2007). Equipo para determinar conductividad térmica del suelo. Sonda Geoeléctrica: Patente de Invención Europea # 9600407. Zúñiga, O y Gascó, J. M. (1999). “Electrosonda para medir el contenido de humedad del suelo y la compactación del mismo, método de medida correspondiente y utilización de dicha electrosonda” II Frase de Orlando Zúñiga Escobar III http://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-533060 10