r e v i s t a s t u r í s t i c a s acaguia@arnet.com.ar r e v i s t a s t u r í s t i c a s acaguia@arnet.com.ar Valle de Punilla Sector turístico por excelencia, el valle de Punilla abarca la región delimitada entre las sierras Chicas al Este y las Grandes al Oeste. Al Norte limita con las ciudades de la Cuenca del Sol y al Sur por el camino de las Altas Cumbres. Surcado por innumerables ríos y paisajes serranos, el valle en su conjunto constituye el principal centro turístico provincial absorbiendo la mitad de la actividad turística de Córdoba. Asiento de importantes centros urbanos, buenos caminos y excelentes servicios, el sector Sur presenta el escenario principal y que mayor interés despierta en las corrientes turísticas. Tributario de los ríos San Antonio al Sur, Cosquín al Norte y los arroyos los Chorillos y las Mojarras al Oeste, en torno al embalse a cuya vera se alza Villa Carlos Paz, y a los ríos antes mencionados, se encuentran villas turísticas como San Antonio, Bialet Masse y Villa Bustos. Otros puntos relevantes lo conforman las ciudades de Cosquín, sede del famoso Festival Nacional del Folclore, La Falda, La Cumbre con su tradicional campo de golf y Capilla del Monte, enclavada a los pies del cerro Uritorco, localidades todas unidas por la Ruta Nacional Nº 38. Accesible desde cualquier punto, los circuitos turísticos y atractivos del valle de Punilla se sitúan en torno o cercanos a la Ruta Nacional Nº 38, y se pueden recorrerlos facilmente en automóvil. El extremo Sur se toma como referencia por ser la puerta de entrada desde la ciudad de Córdoba. Desde Tanti, un camino de tierra conduce a una pampa de altura con vista panorámica hacia el Oeste del cerro Los Gigantes de 2.374 m.s.n.m. En este trayecto se deja atrás el hotel El Alto (restaurante, bar) y la estancia turística Cerro Blanco (turismo de aventura). Más allá, la ruta continúa hacia Traslasierra y la Estancia Jesuítica de La Candelaria. Cerca de Cosquín el valle se aprecia en todo su esplendor, destacándose el cordón de la sierra Chica y el cerro Pan de Azúcar (1.260 m.s.n.m.). A continuación un conjunto de hermosas localidades se alinean sucesivamente. Molinari con acceso al singular conjunto de cascadas de Olaen. La Falda acceso a circuitos de aventura para todos los gustos. Huerta Grande, Villa Giardino, el jardín de Punilla, y La Cumbre sede del tradicional club de golf, el mirador de Cuchi Corral, los campeonatos de parapente, aladelta y una excelente oferta turística, son otras alternativas que tiene el turista. Este paraje turístico antiguamente estaba reservado sólo para las familias más tradicionales y pudientes del país. Entre Villa Giardino y la Cumbre y entre esta última localidad y Los Cocos, por camino paralelo a la Ruta Nacional 38, primero de tierra, se recorre el camino de los Artesanos. Asfaltado a partir de La Cumbre el singular marco serrano de Cruz Chica y Cruz Grande, sembrado de atractivas residencias engarzadas en las laderas, da lugar al camino de Los Pintores. Los Cocos dotado de un magnifico microclima, la serrana San Esteban, Dolores y la localidad de Capilla del Monte, asentada a los pies del cerro Uritorco, deslumbran el final de este circuito que conduce a San Marcos Sierra, las grutas de Ongamira y Los Terrones. Especialmente concurrido durante los meses de verano, diciembre - marzo, si bien enero es el mes más álgido de la temporada, durante el mes de febrero, el valle de Punilla alcanza su mayor esplendor paisajístico, luciendo sus tonos más verdes. Mes en el cual el viajero deberá tener muy cuenta la disponibilidad hotelera, especialmente durante los fines de semana, en vista que a las corrientes turísticas del interior del país, se suma la masiva concurrencia de cordobeses, principalmente residentes de la ciudad de Córdoba. Hábito repetido año tras año, en el cual el turismo concurre al ritmo del sol a las distintas playas del circuito que se extienden principalmente entre Villa Carlos Paz y Cuesta Blanca. Convirtiendo las costas de los ríos en disímiles escenarios donde se desarrollan variados hábitos y costumbres que delinean la fisonomía más fresca del verano. Aunque en rigor la diversidad de programas permite el desarrollo de numerosas actividades diurnas y nocturnas, tanto para los más jóvenes y seguidores de la diversión, como para los amantes de los deportes o las actividades al aire libre, entre ellas el trekking, las cabalgatas, etc. Con estilo distinguido Situadas en posición cardinal Oeste y Este, los cordones de las sierras Grandes y las sierras Chicas delimitan una tierra sembrada de arroyos, embalses, elevaciones de roca rojiza, antiguas cuevas aborígenes y un puñado de pequeñas ciudades turísticas con servicios hoteleros y gastronómicos para todo presupuesto y estilo. Es allí, en el sector Norte del valle de Punilla, donde la leyenda, la magia, la bohemia, la distinción y la vocación artística de localidades y parajes tan disímiles y atractivos como Ongamira, Capilla del Monte, San Marcos Sierra, La Cumbre, Villa Giardino y Huerta Grande seducen al visitante. Elegida antiguamente por la aristocracia argentina, morada de presidentes y escritores, La Cumbre es igualmente conocida por su Golf Club y su mag- Villa Carlos Paz Foto: Mauro Leone Informes turísticos: Liniers 50. Tel. (03541) 421801/810. Línea de atención al turista: 0810 888 2729. Web. www.villacarlospaz.gov.ar nífica cancha de 18 hoyos, su cercanía al mirador de Cuchi Corral (uno de los principales centros de práctica del parapente y el aladeltismo), el bello entorno que la rodea, sus plantaciones de lavanda y destilería, el dique San Jerónimo, y su bosquecito de pinos y la antigua y siempre vigente Estancia El Rosario, establecimiento en el cual se elabora uno de los mejores alfajores regionales del país. En tanto, las casas de té y repostería rivalizan por conquistar el paladar del turista: a la tradicional Gran Aldea o el bar del golf club se le han sumado nuevas propuestas que invitan, pasada la tarde, a la charla informal a la espera de la ya tradicional vida nocturna de la Cumbre. Cherry Farm, añade al rubro servicios una plantación de cerezas y la especialidad en fondue, que también cultiva el Hostal de la Luna. Todo artesanal y casero Desde sus orígenes La Cumbre se distinguió por sus casonas estilo británico, calidad de servicios su cancha de golf y habitantes ilustres como Manuel Mujica Laínez, todos factores que dejaron su huella en el paraje. Ciudad del buen gusto y las artesanías refinadas. El camino que separa la localidad de la vecina Villa Giardino, conformada por tan solo la decena de kilómetros, está jalonado de talleres y locales con decenas de productos artesanales de primera calidad, casas de té y de comida, en la cual la norma es la elaboración casera. Los Cocos y San Esteban, son también habitadas por artistas. Existe un circuito que posibilita a los visitantes conectarse con los pintores y sus obras, en sus respectivos lugares de trabajo. La ruta de los artesanos. La oferta es vasta y va desde pequeñas obras hechas en plata, alpaca, madera, cuero o lana, a puestos donde un hospitalario anfitrión ofrece un dulce o un pan casero, fiambre regional, repostería, licor, dulces, carnes asadas, hierbas, miel, productos orgánicos, cestería, joyas confeccionadas con piedras semipreciosas, etc. Parapente, Vuelos de Bautismo Programa ineludible ubicado a poca distancia de La Cumbre, el valle del río Pintos y su mirador Cuchi Corral, es el sitio predilecto de lanzamiento de los parapentistas. Imprescindible averiguar con anterioridad, por los prestadores autorizados en la oficina de turismo. Desde el mirador, cuya vista panorámica permite observar todo el valle del río Pintos, es posible realizar vuelos de bautismo, con instructor, y probar la sensación al planear muy cerca del sol. Más allá del mirador, y de regreso de Cuchi Corral, un sinuoso camino de montaña recorre varios vados y arroyos hasta alcanzar el pintoresco río Pintos, con sus playas de arena blanca y aguas translúcidas. Desde aquí, consultas en secretaría, se accede por sendero bordeado por espinillos, hierbas y algarrobos, a la quebrada de Las Cascadas, donde las aguas se despeñan entre helechos generosos por varios saltos y rápidos. Principal centro turístico provincial y uno de los más importantes del país. Su cercanía a la ciudad capital, la temprana construcción del embalse en 1902 y las vías de comunicación que la vinculan con otros destinos, la han convertido desde siempre en un punto vacacional de importancia, ideal para el desarrollo de deportes náuticos. Fundada sobre las tierras de la estancia Santa Leocadia, perteneciente a Rudesindo Paz, la historia de la villa esta signada por la construcción de la represa en 1892 que dio origen al lago en 1902. El casco original del establecimiento rural fue trastalado a la actual Villa Bustos, cuyo nombre recuerda al héroe del ejercito libertador del general San Martín, fue también caudillo y gobernador cordobés, don Juan Bautista Bustos. En julio de 1913 se aprueban los planos del entonces pueblo de San Roque, génesis de la villa y en 1915 comienzan a llegar numerosas familias atraídas por el paraje. Aunque la página principal de la villa comenzó a escribirse hacia el año 1923, cuando se inaugura el Hotel Carlos Paz; poco después se erigieron los hoteles Yolanda, Carena y en 1932 el club náutico, iniciándose siete años más tarde el nuevo y definitivo dique San Roque. Estratégicamente ubicada, la ciudad situada en torno al lago San Roque y el río San Antonio, permite organizar un sinnúmero de paseos, hacia el Norte al valle de Punilla, al Oeste a los Gigantes y al Sur, a los grandes embalses y el pintoresco Valle de Calamuchita. Con respecto a su infraestructura turística, un completo listado de servicios, prestadores, clubes, salas de teatro, centros de entretenimiento, restaurantes y más de 350 establecimientos hoteleros recrean día a día un febril ritmo de actividades diurnas y nocturnas durante los meses de verano. Desde Córdoba se puede acceder de forma rápida por la autopista Allende Posse, o por la pintoresca ruta que pasa por la localidad de La Calera. Este último trayecto enmarcado por un pintoresco paisaje serrano alcanza el río Primero, llamado Suquia por los aborígenes, luego el paredón del dique San Roque, y el camino de las 100 curvas hasta ingresar a la villa por el Norte. Apta para todo presupuesto, Villa Carlos Paz cuenta con una variada oferta de hoteles, cabañas, camping y casas de alquiler. Muy concurrida durante la temporada estival, en vacaciones de invierno, Pascuas y fines de semana largos, esta revista turística TURIS-TUR aconseja al visitante, que llegue a la villa en alguna de esas fechas sin previa reserva, acercarse a las oficinas municipales de información turística, donde le darán información sobre categorías, precios y disponibilidad de cada establecimiento. Respecto a los balnearios, son numerosas las posibilidades que encuentra el