| la información salva vidas | Qué hacer en caso de CRISIS NERVIOSA POR Edith González DOCTOR EN CASA D ificultad para respirar, sudoración, sensación de mareo o náuseas, dolor en el pecho y palpitaciones son algunos síntomas que se presentan durante una crisis nerviosa. Según los expertos el desencadenamiento de este tipo de crisis se debe a la acumulación de estrés en el área laboral, sentimental o afectiva. Cuando hay demasiadas tensiones acumuladas, un suceso trágico o hasta una simple discusión pueden desencadenar este tipo de reacciones en el cuerpo humano. Por lo general los episodios de crisis nerviosa tienen una duración de 10 minutos a media hora y se presentan con mayor frecuencia en las mujeres. Para ayudar a quienes sufren crisis nerviosas los expertos recomiendan primero que nada diferenciar la crisis de la depresión. La primera se caracteriza por la inquietud que la persona muestra a través del llanto, risas e ira excesiva. Las personas afectadas puedes estar gritando, llorando o arrancándose el cabello a la misma vez. La depresión por el contrario puede presentar un comportamiento más pasivo. Jorge Luis Juárez, subcomandante de Cruz Roja, Torreón, comentó que lo que no se debe hacer nunca ante una situación de crisis nerviosa es ponerse a gritar con la persona afectada, pues por el estado emocional en la que se encuentra, no va a reaccionar. Lo que Juárez sí recomendó es alejar a la afectada del lugar en el que se encuentra, so- DOCTOR EN CASA | 16 | mayo 2009 bre todo si el motivo de la crisis está ahí. Posteriormente, entablar una plática en la que se logre establecer empatía con la afectada, pues en esos momentos lo que más quiere es sentirse comprendida. Juárez recomendó que si el paciente o la paciente padecen de alguna enfermedad cuyo estado de salud pueda ser afectado por las alteraciones, se traslade a alguna institución de Salud para que se le aplique un calmante. El subcomandante dijo que algunos casos como lo son las muertes inesperadas, algunas personas no se dejan ayudar cuando sufren la crisis nerviosas. En estos casos, si la crisis no afecta al estado de salud, es conveniente que se deje que la persona libere sus sentimientos para que la crisis desaparezca, en cambio si se presenta algún cambio en la salud se lleve con algún especialista. En lo que respecta a la persona que sufre la crisis, ésta debe tomar conciencia de que la situación no es peligrosa y que es una reacción del organismo fruto del estrés. Debe tratar de respirar profundamente de forma lenta y enfocar su atención en otra cosa que no sea el motivo de la crisis. Cuando los episodios de crisis nerviosa son frecuentes es recomendable que se visite a un sicólogo o un siquiatra para que se dé el tratamiento adecuado. Los expertos consideran indispensable que se combine el buen estado de salud físico con el emocional y espiritual, pues esto ayuda al equilibro y óptimo funcionamiento de cada uno de nuestros órganos vitales y evita cualquier tipo de enfermedad física y emocional.