ÁMBITO FARMACÉUTICO Documento descargado de http://www.elsevier.es el 17/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. SALUD PÚBLICA Los nuevos brotes de Legionella SANDRA TORRADES Bióloga. Durante la última década han aparecido numerosos brotes de legionelosis, también conocida como la «enfermedad de los legionarios». Pero, ¿qué sabemos sobre ésta enfermedad y el agente etiológico que la provoca? ¿Existe un control real epidemiológico? ¿Se han estandarizado medidas de prevención? Los aspectos clínicos, epidemiológicos y terapéuticos de esta enfermedad, así como las características del agente infeccioso responsable de esta patología, la bacteria Legionella, no son desconocidos, pero los recursos que se destinan al control y la prevención de ésta parece que son insuficientes. a enfermedad de la legionelosis L fue descubierta en 1976, cuando en el transcurso de una conven- ción de la Legión Americana en Filadelfia (Pennsylvania) se produjo un brote que afectó alrededor de unas 200 personas, 49 de las cuales murieron. A este cuadro clínico desconocido hasta entonces se le llamó «enfermedad de los legionarios». En 1977, en el Centro de Control de Enfermedades Infecciosas de Atlanta, se logró aislar la bacteria causante de la enfermedad y la denominaron Legionella pneumophila. Durante los últimos 12 años se han identificado un total de 54 brotes en España, al margen de los ca96 OFFARM sos esporádicos, con una tasa de infectados de entre 3 y 4 personas al año y por cada millón de habitantes. El primer brote importante se registró en Benidorm en 1980; 3 años más tarde se registraron varias epidemias en Valencia, Guipúzcoa y Zaragoza; en noviembre de 2000 se diagnosticaron en Barcelona 49 casos; otros brotes se produjeron en Vigo y Alcoy. Aunque la incidencia de esta enfermedad es cada vez mayor, las investigaciones sobre los brotes epidémicos son escasas y la publicación de éstas en boletines epidemiológicos o revistas especializadas es también muy baja. Todo ello impide realizar un estudio global de las fuentes de infección más frecuentes y consecuentemente las medidas de control y prevención son escasas. Origen de la Legionella La Legionella puede ser el origen de determinadas neumonías graves. Se presenta esporádicamente o en forma de brotes epidémicos. Son gérmenes que pueden sobrevivir en condiciones físicas, químicas y biológicas muy variadas. El género Legionella pertenece a la familia de las Legionellaceae, que incluye 39 especies con un total de 59 serotipos. El 90% de las inVOL 21 NÚM 3 MARZO 2002 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 17/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. SALUD PÚBLICA Se trata de una afección generalmente grave producida en la mayoría de los casos por la L. pneumophilia serogrupo 1. Tras un período de incubación de 2-10 días, aparece un cuadro inespecífico con fiebre alta (39-41 ºC), escalofríos, cefaleas, tos, mialgias y malestar general. Rápidamente se producen los infiltrados celulares, explicados anteriormente, afectando a los alvéolos pulmonares. En algunas ocasiones las afecciones pulmonares pueden ir acompañadas de diarrea, hiponatremia y alteraciones del estado mental, como confusión, desorientación y letargia. Infecciones extrapulmonares Suelen aparecer como consecuencia de la neumonía. Se han descrito casos de pielonefritis, infección de hemecanismos microbicidas. Dentro ridas y abscesos cutáneos entre otras. del fagosoma la bacteria se multiplica hasta destruir el propio macrófago y entonces se libera la pro- Diagnóstico genie bacteriana. Los daños hísticos se pueden atribuir tanto a los pro- La Legionella no es una afección ductos tóxicos liberados por las pro- fácil de determinar, puesto que es pias bacterias como a las sustancias difícil distinguir en una radiograliberadas por los propios leucoci- fía de tórax la neumonía que protos. voca de la causada por otros microorganismos patógenos. Para realizar un diagnóstico adeManifestaciones clínicas cuado se requieren pruebas específicas de laboratorio que se realizan El espectro de infecciones por Le- a partir de una muestra del tracto gionella es muy variado y com- respiratorio, de la orina, la sangre, prende los siguientes grupos de los líquidos corporales o heridas. enfermedades que pasamos a coEl diagnóstico microbiológico se mentar a continuación. puede realizar mediante métodos directos; para ello, se requiere aisInfecciones subclínicas lar el microorganismo a partir de Se detecta por la presencia de anti- las muestras obtenidas del paciencuerpos frente a Legionella sp., pero te y posteriormente confirmar el no presenta manifestaciones clíni- diagnóstico por métodos serológicas. cos, genéticos o cromatografía de gases. Por otro lado también se Fiebre de Pontiac puede realizar la detección directa Es una enfermedad gripal aguda de antígenos por inmunofluoresno asociada a la neumonía. Los cencia, mediante el uso de antisíntomas se manifiestan de manera cuerpos monoclonales específicos brusca tras 5-6 horas de incuba- de especie, o la detección directa ción. Las manifestaciones más fre- de los ácidos nucleicos de la bactecuentes son fiebre, escalofríos, ce- ria, por técnicas de reacción en cafaleas y mialgias localizadas. dena de la polimerasa (PCR) utiliLos pacientes se reestablecen es- zando sondas específicas de génepontáneamente en un término de 2 ro. a 5 días. Los métodos indirectos, como la detección serológica de anticuerNeumonía o enfermedad de los legio- pos, tienen más utilidad para los narios estudios epidemiológicos que para Ciclo replicativo de la Legionella en el interior de un macrófago. fecciones por Legionella en humanos son debidas a L. pneumophilia y el 80% de éstas pertenecen al serogrupo 1. La especificidad de serogrupo está determinada por un antígeno soluble termolábil que se encuentra en la superficie celular. Los miembros de la familia Legionellaceae son bacilos gramnegativos, no esporulados, sin cápsula y dotados de flagelos y fimbrias. Su tamaño oscila entre 2-3 µm de longitud por 0,5-0,7 µm de ancho. Puesto que no se tiñen bien con la tinción de Gram, se requieren tinciones especiales para visualizarlos al microscopio. ¿Cómo se contrae la enfermedad? L. pneumophilia, causante de la mayoría de las infecciones por Legionella en humanos, es un patógeno intracelular facultativo principalmente de los monócitos y macrófagos alveolares. El patógeno penetra por inhalación en el pulmón afectando principalmente a los alvéolos y bronquíolos terminales, dónde son fagocitados por los macrófagos alveolares y son «introducidos» en unas vesículas o organelas especializadas, los fagosomas. Éstos no se fusionan con los lisosomas (organelas encargadas de eliminar determinadas partículas «tóxicas» en el macrófago) eludiendo así los VOL 21 NÚM 3 MARZO 2002 OFFARM 97 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 17/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. SALUD PÚBLICA realizar un diagnóstico inmediato. Los métodos indirectos pueden llevarse a cabo mediante técnicas de inmunofluorescencia indirecta, ELISA o microaglutinación. De las pruebas disponibles, parece que la más específica es el aislamiento en el cultivo de las especies de Legionella de cualquier muestra del tracto respiratorio. Aun así, ninguna de las pruebas de laboratorio tiene un 100% de sensibilidad, por lo que es aconse- Radiografía que muestra el tórax jable realizar varias pruebas para de un niño con neumonía. que el diagnóstico sea adecuado. transmisión parece ser la inhalación de pequeñas partículas o aerosoles Forma de propagación suspendidas en el aire y generadas por los aparatos de aire acondicioLas Legionellas son microorganis- nado, humificadores y equipos de mos ubicuos que se pueden encon- terapia respiratoria. Con todo, no trar en distintos nichos ambientales existen evidencias de la contaminacomo lagos, ríos, estanques y suelos ción de persona a persona. pantanosos, que actúan como reservorio ambiental. De los ambientes acuáticos naturales pueden ac- Grupos de riesgo ceder a la red de abastecimiento y distribución de aguas e incorporar- El riesgo de una persona de adquise a las instalaciones de refrigera- rir legionelosis por la exposición a ción y depósitos de los edificios. la bacteria depende de distintos En lugares como duchas, grifos, factores, como la patogenicidad del calderas de vapor, termopermuta- agente etiológico, el tipo de exposidores y otras fuentes conductoras ción y el estado de salud de la perde agua, las bacterias pueden per- sona. manecer en estado latente, pero si La susceptibilidad del huésped es se dan las condiciones ambientales un factor clave en el desarrollo de esadecuadas puede proliferar. ta patología. Tienen más riesgo de Para ello requieren temperaturas contraer la enfermedad aquellos paentre 20 y 45 ºC y la presencia de cientes con inmunodepresión severa, sedimentos y materias orgánicas especialmente a causa de terapias pueden servir como fuente de nu- con corticoides, o enfermedades trientes. Además, las tuberías con crónicas como discrasias sanguínepoca o ninguna agua, o aquéllas as, enfermedades renales en estado que contienen restos de lodo y su- tardío, o enfermos de sida de estaciedad, constituyen también un dios también tardíos. medio ideal para el crecimiento y desarrollo de la L. pneumophilia. Parece ser que las algas, amebas y otras bacterias que se encuentran comúnmente en los sistemas de agua sirven como fuente adicional para el crecimiento de esta bacteria contribuyendo a aumentar la virulencia de la cepa. Cuando se produce esa proliferación bacteriana, la nebulización de gotitas que pueden diseminarse en el medio ambiente posibilita la entrada de la bacteria en las vías respiratorias del hombre, con el Una bacteria de L. pneumophila consiguiente riesgo de infección. interaccionando con la célula huésped El mecanismo más frecuente de (macrófago). 98 OFFARM Otro grupo de riesgo más bajo son los fumadores, los que padecen enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y los individuos de edades avanzadas. Tratamiento Es importante iniciar una terapia específica lo antes posible, sobre todo en los casos graves de neumonía adquirida en la comunidad, puesto que el retardo de un tratamiento apropiado contra la neumonía por Legionella contribuye a incrementar de manera significativa la mortalidad. El tratamiento es a base de antibióticos. Tradicionalmente se usaba la eritromicina, pero ésta ha sido desplazada por otros antibióticos debido a las intolerancias gastrointestinales y la ototoxicidad provocada por dosis de hasta 4 g. Los macrólidos como la azitromicina parecen ser la mejor opción, puesto que son más eficaces a la hora de penetrar en el tejido pulmonar. El tratamiento suele durar entre 10 y 14 días, aunque en individuos inmunodeprimidos se puede alargar hasta los 21 días. Conocer la dosis adecuada y el tiempo necesario para un tratamiento eficaz es fundamental para evitar problemas futuros de resistencia microbiana. ¿Problema de salud pública? Los brotes de legionelosis en hoteles, cruceros y edificios públicos acaparan la atención de los medios de comunicación, pero parece que los técnicos en salud pública no lo consideran un problema como tal. En las políticas de acción de los organismos sanitarios no se considera un problema prioritario. Tal vez, en los próximos años, tengan que reconsiderar su posición ante la legionelosis, ya que se trata de una enfermedad emergente, es decir, su incidencia en humanos ha aumentado en la última década y amenaza con aumentar en los próximos años. En España, según los datos de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica, se diagnostican unos 100 casos más de legionelosis caVOL 21 NÚM 3 MARZO 2002 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 17/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. SALUD PÚBLICA Macrófago alveolar infectado por L. pneumophila. da año. Son muchos los factores que favorecen el riesgo de que se convierta en un problema importante en las próximas décadas, como el aumento de la densidad poblacional que implica la concentración de edificios grandes como centros comerciales, oficinas, grandes comunidades que exigen un sistema de refrigeración y depósitos de agua, factores ideales para el hábitat de esta bacteria. Por otro lado, los cambios de conducta humana, como los viajes o la necesidad de un medio ambiente agradable también contribuyen al incremento de éstos brotes, e incluso la mejora de las prácticas médicas que tienden a alargar la esperanza de vida propician el aumento de una población más susceptible a padecer la enfermedad. Entonces, ¿por qué un problema que no es considerado prioritario por las autoridades sanitarias se puede convertir en el mayor problema de una zona geográfica concreta? Los doctores Aboal-Viñas y Farjas-Abadía, de la Dirección General de Salud Pública de la Conselleria de Sanidad y Servicios Sociales de la Xunta de Galicia, apuntaron algunas ideas en un reciente artículo. El primer problema es que la sociedad actual no se plantea que utilizar o disfrutar de la tecnología lleva asociado un riego para la salud, aunque en general inferior al beneficio que produce. Pero no podemos olvidar que existe este pequeño porcentaje de riesgo. Tampoco se acepta la incertidumbre científica. La sociedad no 100 OFFARM entiende que los técnicos y los científicos no den respuestas inmediatas a los problemas de salud pública y las exigen, aunque se trate de información sesgada e influenciada, muchas veces, por los medios de comunicación. Por otro lado, también existe la problemática de desprestigio de las administraciones públicas, ocasionando problemas de credibilidad de las actuaciones de los servicios de la salud pública y añadiendo a todo esto la descoordinación de varias administraciones y sectores como la industria, el turismo, la sanidad y el medio ambiente. Se genera así un ambiente de confusión y alarma en la población. Finalmente, destacan las propias características de los brotes comunitarios de la enfermedad, puesto que la detección del brote es mucho más tardía que el período de exposición. Encontrar el origen o la fuente de infección es dificultoso, y la obtención de datos ambientales requiere mucho tiempo. Lo que proponen estos autores es la coordinación desde el primer momento de los equipos de vigilancia epidemiológica, los de inspección de salud pública y los técnicos de sanidad ambiental para obtener la información necesaria, publicar las investigaciones epidemiológicas en revistas especializadas y adoptar las medidas de control precisas para prevenir la aparición de nuevos brotes. ■ Bibliografía general Aboal-Viñas JL, Farjas-Abadía P. Legionella: un problema de salud pública y un problema para la salud pública. Gc Sanit 2001;15(2):91-4. Benenson A, editor. Manual para el control de las enfermedades trasmisibles. Washington: OPS, 1997. De Mateo S, Con R. Legionella: un problema para la administración pública. Gac Sanit 2001;15(5):473-4. Fotos de Legionella pneumophila [consultadas el 19-1-2001]. Disponible en: http://cweb.middlebury.edu/s99/bi33 0a/projects/Cocchiaro/index.htm. García-Rodríguez JA, Picazo JJ. Compendio de microbiología médica. Madrid: Harcout, 2000. Ling-Ling H, Yanh C. Legionella bacteria in office buildings. Enviros: the Healthy Building Newsletter 1992;2(3). Stout JE, Yu VL. Legionellosis. The New England Journal Medicine 1997;337(10): 682-7.