Kontsumobide, cerca de ti ¿Cómo presentar una reclamación? Conoce la hoja de reclamaciones La hoja de reclamaciones es un formulario bilingüe (euskera y castellano) integrado por un juego unitario de 3 ejemplares autocalcables. El original de color blanco es el ejemplar que se debe presentar en la Administración. La copia rosa es para la empresa reclamada, y la copia verde para la persona reclamante, que le servirá como justificante. S i alguna vez te encuentras ante un conflicto de consumo, ten presente que la hoja de reclamaciones es el método más sencillo para presentar una reclamación por la vía administrativa. Quienes desarrollen cualquier tipo de actividad comercial, profesional o de servicios (comercios, bares, entidades bancarias, hoteles, viajes combinados, bingos, espectáculos, gremios o academias, entre otros) deben disponer de hojas de reclamaciones. Por el contrario, los centros autorizados que imparten enseñanzas regladas están excluidos, así como las personas liberales que realicen una actividad para cuyo ejercicio sea necesaria la colegiación previa en un Colegio Profesional (abogados-as, medicos-as). En estos ámbitos, las reclamaciones tienen su propio régimen de presentación y tramitación. 10 Revista kontsumoBIDE Nº25 A la hora de cumplimentar la hoja de reclamaciones, el establecimiento debe entregársela a la persona reclamante con sus datos de identificación rellenados. Seguidamente, en el propio establecimiento la persona reclamante cumplimentará sus datos, hará una breve descripción de los hechos y especificará de forma clara su pretensión. Hay un apartado específico en el que la empresa reclamada también puede reflejar sus consideraciones. Una vez cumplimentados todos los datos, se debe firmar. El original blanco se debe entregar en las oficinas de Kontsumobide (Servicios Territoriales de Araba/ Álava, Bizkaia y Gipuzkoa) o en la correspondiente oficina municipal de información a la persona consumidora (OMIC). Asimismo, conviene adjuntar una fotocopia de aquellos documentos que puedan servir de prueba: facturas o justificantes de pago, contratos, presupuestos, folletos informativos, garantías, fotografías… Los originales guárdalos siempre.