LA ORACIÓN SUBORDINACIÓN COMPUESTA. COORDINACIÓN Y 1. LA ORACIÓN COMPUESTA: SUS CARACTERÍSTICAS Definición de oración. Se han ofrecido a lo largo de la larga historia gramatical numerosas definiciones: logicistas (la expresión de un juicio u operación mental porque afirmamos algo de una cosa), formales (unidad lingüística dotada de significación que no pertenece a unidad lingüística superior), tradicional (la oración es una unión de palabras que representan un sentido completo)... Oración: unidad lingüística dotada de significación que no pertenece a una unidad lingüística superior. Características: a) presencia de un verbo como centro funcional. b) relación formal- en número y persona- entre el sujeto y el verbo: concordancia. Sin embargo, estos dos rasgos también los hallamos en secuencias como: "La mesa que está rayada" o "Cuando vosotros decís la verdad...". Pero a estas secuencias les falta un rasgo distintivo de oración: c) autonomía en el plano semántico, sintáctico y fónico. - Autonomía semántica: sentido completo. - Autonomía sintáctica: oración frente a proposición. Es proposición la secuencia que cumple las dos primeras características, pero no la tercera. Ej.: "que está rayada" de "la mesa que está rayada" es una proposición porque posee un verbo en forma personal y existe relación de concordancia entre el sujeto la mesa y dicho verbo está. - Autonomía fónica: autonomía entonativa. La oración posee una línea melódica especial. En la lengua escrita es la puntuación la marca gráfica de la autonomía oracional. El punto o el punto y coma, otras veces la coma, serán la señal del límite de la oración. Oraciones independientes, oraciones subordinadas y oraciones principales. El término oración independiente no parece adecuado, pues el rasgo "independiente" es lo que distingue la unidad oración. Los términos oración principal y oración subordinada no son apropiados. Conviene señalar que la subordinada, por carecer de independencia sintáctica, no tiene categoría de oración. Es preferible llamar proposición a la subordinada. Así, en "Aquella tarde que viniste hacía frío" hay una sola oración en cuyo interior existe una proposición en función adjetival, "que viniste a verme". No obstante, en el caso de la coordinación sí cabe hablar de oraciones: "Tomamos una copa en el bar de la esquina y entramos en calor". Puesto que las oraciones coordinadas no pierden autonomía, podemos decir que en el ejemplo hay dos oraciones: "tomamos una copa en el bar de la esquina" y "entramos en calor". Frase. No debe confundirse con el concepto de oración. Frase es equivalente a grupo sintáctico o sintagma, esto es, una agrupación de palabras en torno a un núcleo. Así, podemos hablar de sintagma, grupo o frase nominal, sintagma, grupo o frase adverbial, etc. Definición: se dice que una oración es compuesta cuando alguno de los elementos que cumplen una función oracional está constituido por una proposición o bien cuando dentro de un elemento oracional, aparece como adyacente una proposición. Ej.: - Dijo que vendría a vernos-> que vendría a vernos: C. directo. 1 - Vimos a esa chica que vive frente a tu casa -> que vive frente a tu casa: adyacente de chica. Se dice que las secuencias citadas están subordinadas o son elementos subordinados. Un sinónimo habitual de subordinación es hipotaxis. La existencia de subordinación convierte una oración simple en oración compuesta. Coordinación de oraciones: unión de elementos de igual categoría. Se hablan, en este caso, no de oración compuesta sino de oración compleja. Ej.: Íbamos despacio, hablábamos lentamente y el campo olía a romero. Yuxtaposición. Se habla de yuxtaposición de oraciones cuando no existe nexo de unión entre varias oraciones. Ejemplos: María es simpática, su hermano lo es también; La eternidad no existe. Donde hay eternidad no puede haber vida. Un mismo mensaje puede transmitirse con una estructura coordinada, subordinada o yuxtapuesta. Ej.: Tú lo dices y yo me lo creo Si tú lo dices, yo me lo creo; Los campos están preciosos. Esta primavera ha llovido mucho Esta primavera ha llovido mucho y los campos están preciosos Los campos están preciosos porque esta primavera ha llovido mucho. 2. LA COORDINACIÓN Definición: fusión mediante un conector de dos o más elementos equifuncionales para constituir una unidad mayor que funciona del mismo modo que sus componentes. Pueden coordinarse cualquier tipo de elementos gramaticales, con tal de que realicen la misma función, equifuncionales. En consecuencia, habrá coordinación dentro del marco del sintagma, de la oración y del enunciado. 2.1. Coordinación dentro de un sintagma Entre adjetivos (La mesa blanca y negra es mía); entre sintagmas preposicionales, adyacentes de un mismo nombre (Tiene unos pendientes de oro y de plata); entre adjetivos adyacentes del nombre y sintagmas preposicionales adyacentes del mismo nombre (Quiero una chaqueta blanca, pero de algodón); entre proposiciones relativas y entre estas y otros adyacentes del nombre: Estas gentes que hablan mucho y que dicen poco son pesadas; Nos dedicamos a tareas difíciles y que nadie valora; entre adverbios en un sintagma adverbial: ¿Está bien o mal colocado? 2.2. Coordinación dentro del marco de la oración Entre sintagmas que desempeñan la misma función oracional. Así, entre sintagmas nominales que desempeñan la función de sujeto, que concuerdan con el verbo en plural: Tu padre y tu madre van de vacaciones. Igualmente dos sintagmas o dos proposiciones que tengan cualquier función complementaria: Quiero la revista y que traigas una cerveza; Se acordó de su novia y de los días pasados juntos; Trabajamos concienzuda y detenidamente. Incluso puede darse coordinación entre preposiciones o locuciones prepositivas que introducen un elemento común: Lo hicieron por y para todos nosotros; Esto sucede dentro y fuera de España. 2.3. Coordinación de verbos Puesto que el verbo es el núcleo de la oración, más que de coordinación entre verbos debe hablarse de coordinación oracional. Ej.: La chica comió y vino a visitarnos. No obstante, cuando todos los elementos oracionales son comunes a los dos verbos, podría igualmente considerarse que hay una sola oración y que la coordinación se establece en el marco del verbo y no de la oración: Todos los días los estudiantes entran y salen de aquí a toda prisa. 2 2.4. Coordinación dentro del marco del enunciado Entre oraciones que gozan de autonomía. Ej.: Yo quiero ir de viaje pero mis padres no me dejan. 3. CLASES DE COORDINACIÓN ORACIONAL Clasificación. Es característico de la coordinación la presencia de unos conectores o coordinadores. Los rasgos fundamentales de estos elementos son: a) Posición. Estos elementos van situados entre las unidades coordinadas. Así, adverbios y locuciones como además, sin embargo, por tanto y otros, que pueden desplazarse a diferentes lugares, no son, por tanto, coordinadores. Además, estos adverbios y locuciones admiten ir precedidos de un coordinador, lo que muestra que no desempeñan idéntica función: Se enfadaron y, además, se insultaron. Ya no llueve y, por tanto, saldré. b) Imperativo. Pueden preceder a oraciones con verbo en imperativo, lo que nunca sucede con los transpositores o subordinantes. Ej.: Ponte lo que quieras, pero sal pronto. c) Nexos. No desempeñan ninguna función sintáctica dentro de las oraciones en las que se insertan, salvo la de enlaces o nexos. Según el tipo de conector (o conjunción coordinativa), se clasifican en: copulativas, disyuntivas y adversativas. 3.1. Oraciones coordinadas copulativas Significado: suma o adición. En el caso de ni, se añade, además, un significado de negación. Conectores: y, e, ni. Los elementos coordinados pueden ser dos o más de dos. El conector puede aparecer entre cada oración o más frecuente, entre el penúltimo y el último de la serie. Ej.: Mañana iremos a Madrid, vosotros vendréis al hotel, iremos al cine y nos divertiremos mucho. Conjunción e: variante fonética de y, cuando la palabra que sigue comienza por i- o hi-. Ej.: El chico es simpático e incluso es atractivo. Pero si la i- que sigue al conector forma parte de un diptongo- por tanto, una semiconsonante- no se usa el conector e. Ej.: En invierno aquí nieva y hiela a menudo. Además, si la conjunción es tónica, no cambia a e. Ej.: ¿Y Inés? Conjunción ni. La coordinación se establece entre oraciones negativas. Ej.: No han trabajado nada ni se ha divertido. Si los elementos coordinados en la serie preceden al verbo, ha de repetirse ni: No debéis mentir, ni tenéis que ocultar la verdad, ni es necesario que la disfracéis; Ni Pedro ni María han venido (*Pedro ni María). Igualmente puede emplearse y no en los mismos contextos que ni: No debéis mentir y no tenéis que ocultar la verdad. Valor enfático de las formas y, ni. En ocasiones, ni e y no tienen valor coordinante sino que son meros refuerzos expresivos: Ni te lo pienses; ¡Y tú has aprobado! Es frecuente este fenómeno cuando dichas conjunciones encabezan enunciados, posición en la que no es posible ningún tipo de enlace, pero también aparecen con este valor dentro del enunciado. El valor enfático de ni es frecuente con la palabra nada en enunciados de entonación exclamativa, donde la negación se convierte en una afirmación de valor superlativo. Ej.: ¡No es listo ni nada! 3 Otros elementos. No son conectores, pero funcionan de modo similar: que, como unido a también, tampoco, tanto...como, etc. Ej.: Estaba llora que te llora; No se lo dije a Juan como tampoco a su hijo; Me hicieron regalos tanto mi padre como mi madre. Se utiliza no solo... sino también para coordinar oraciones cuya relación es copulativa pero expresada de forma intensiva: No solo ha dicho una mentira, sino que también ha insultado a los presentes. 3.2. Oraciones coordinadas disyuntivas Significado: alternativa entre las oraciones que se coordinan, es decir, indica la incompatibilidad de simultanear en el tiempo dichas opciones, que pueden ser, como en el caso de las copulativas, dos o más. Ej.: ¿Estudias o trabajas?; O nieva en enero o llueve en abril o los estanques estarán secos. Conector u. Variante fonética de o y se usa cuando la palabra siguiente comienza por o- o por ho-. Ej.: siete u ocho; latón u hojalata. Repetición de o. Cuando se repite delante de cada componente de la coordinación, lo que expresa es que la no realización del primero supone forzosamente la realización del segundo (disyunción excluyente). Ej.: O vienes o te quedas. Disyunción distributiva. Lo enunciado por las oraciones coordinadas se realiza o cumple alternativamente. La conjunción o puede estar acompañada por el adverbio bien formando con él una locución conjuntiva disyuntiva: o bien. Es frecuente que esta locución aparezca acompañada de la conjunción o, o de otra locución o bien. Ej.: O (bien) comemos en mi casa, o bien vamos a un restaurante. También se expresa la disyunción distributiva mediante unidades correlativas, como bien ... bien..., ya... ya..., tan pronto... como: Tan pronto (bien, ya) está eufórico como (bien, ya) se queda abatido. Valor explicativo. Cuando el conector o une sintagmas u oraciones puede tener valor explicativo. Ej.: Los hombres o animales racionales. Otras veces, se refuerza con la forma sea: Esta oración tiene CD, o sea, es transitiva. 3.3. Oraciones coordinadas adversativas Significado: contrapone dos oraciones. Enlaza solamente dos elementos. Pero, empero, mas y aunque indican restricción o corrección (coordinadas adversativas restrictivas), mientras que sino expresa exclusión (coordinadas adversativas excluyentes). Conectores: pero y sus variantes (mas y empero), y sino. El origen de pero es una locución latina causal ("per hoc") y el de sino la conjunción condicional negativa "si no". Conector pero. Une dos oraciones que se oponen, pero que no se excluyen: Esta sortija es bonita, pero no es de gran valor. En ocasiones pero se emplea como refuerzo expresivo, bien sola, bien unida a las conjunciones que y si: ¡Pero no se lo creas!; Esa chica toca el piano pero que muy bien. Conector sino. Tiene una variante sino que. Une dos magnitudes no solo contraponiéndolas sino excluyéndolas. La primera debe ser negativa. Ej.: No hemos estudiado esta semana sino que hemos ido al museo. - Sino y si no. Conviene no confundir sino con si no, pues esta es si condicional junto a la negación no. a) Conjunción adversativa. Palabra átona y se usa normalmente unida a la conjunción que, cuando el segundo elemento es una oración con verbo en forma personal. Ej.: No lo hice yo sino mi padre; No quise ir al cine sino que preferí quedarme en casa. 4 También puede ser un sinónimo de excepto y de más que. Ej.: Nadie sino Juan puede haberlo hecho; No quiero sino que me creas; No pretende otra cosa sino que esto se acabe de una vez. b) Conjunción condicional o conjunción de interrogativa indirecta si y la negación no. Ej.: Si no vienes, no te doy el regalo; No sé si no habrá sido Juan quien lo hizo. Otros elementos. Sin embargo y no obstante no son conjunciones sino adverbios, dado que son compatibles con las conjunciones adversativas y puede ocupar posiciones diversas en la oración. Ej.: Pero yo creo, sin embargo, que...-> Pero, sin embargo... Excepto, salvo y menos presentan valor conjuntivo con valor adversativo, aunque frente las auténticas conjunciones, pueden encabezar un enunciado. Ej.: Vinieron todos excepto Juan -> pero no Juan. 4. TIPOS DE SUBORDINACIÓN Tipos: Una proposición subordinada es equivalente en su función a un elemento oracional al que sustituye. Puesto que solo el verbo, el sustantivo, el adjetivo y el adverbio pueden desempeñar, como núcleos de sintagma, funciones sintácticas, serán las funciones del sustantivo, del adjetivo y del adverbio las que puede realizar una subordinada, ya que el verbo no puede ser sustituido en su función predicativa. Por ello, los tipos de subordinadas son: a) Subordinadas sustantivas: Quiero que olvidéis ( vuestro olvido); Me tranquiliza la seguridad de que vendréis ( de vuestra venida). b) Subordinadas adjetivas: Me gustan los hombres que dicen la verdad ( sinceros). c) Subordinadas adverbiales: Iremos cuando nos lo pidan ( entonces). 5 LA SUBORDINACIÓN SUSTANTIVA Y ADJETIVA 1. LAS PROPOSICIONES SUBORDINADAS SUSTANTIVAS Conceptos: - Subordinación: una función oracional o una función sintagmática es desempeñada por una proposición. - Proposición: frente a la oración carece de autonomía lingüística, pero como la oración se realiza también la relación predicativa sujeto-predicado. Una proposición puede funcionar como un adjetivo, un sustantivo o un adverbio, de ahí la tipología proposiciones adjetivas, sustantivas o adverbiales. Las proposiciones sustantivas son, por tanto, aquellas que funcionan de modo equivalente a un S.N. o G.N. En tanto que sustantivas, estas oraciones siempre deben poderse sustituir por un pronombre. Ej.: Quiero que vengas -> Quiero eso. 1.1. Funciones oracionales Sujeto: Me gusta que digas la verdad -> que digas la verdad tu sinceridad; La cuestión es si Juan va a venir; Es decisivo que el envío llegue a tiempo. Para comprobar que la proposición sustantiva es de sujeto, conviene transformarla en un pronombre como eso, y sustituir este pronombre por el grupo nominal esas cosas. Si, al proceder de esta manera, el verbo de la oración cambia de número, es que tanto el pronombre eso y el grupo nominal esas cosas como la oración a la que sustituyen son sujetos. Ej.: Me gusta que digas la verdad -> Me gusta eso -> Me gustan esas cosas frente a Deseo que llueva mañana -> Deseo eso -> Deseo esas cosas. En el segundo caso, el verbo no ha cambiado, luego la oración sustantiva no es de sujeto. - Posición. Las proposiciones sustantivas de sujeto suelen posponerse al predicado. Posibilidades: a) posposición obligatoria: verbos de suceso (suceder, acaecer, ocurrir...). Ej.: Sucedió que no había nadie (* que no había nadie sucedió). b) anteposición obligada: verbos como significar, suponer, equivaler, etc. Ej.: Que te haya aprobado no significa que ya no tengas que venir a clase. c) posible la anteposición y la posposición: verbos de afección psíquica. Ej.: Le avergüenza que lo vean o Que lo vean le avergüenza. d) verbo ser y atributo: normalmente, posposición; la anteposición es rara. Ej.: Es evidente que tienes razón o Que tienes razón es evidente. Complemento directo: Los políticos suponen que acaba la crisis económica -> que acaba la crisis económica el fin de la crisis económica. Siempre se sustituyen por lo, aunque no deben confundirse con las subordinadas en función de atributo. Ej.: Te aseguro que no es cierto -> Te lo aseguro. Con verbos de voluntad, ruego, opinión, sentimiento y otros es posible omitir la conjunción que sin que la oración sea agramatical: Quería se supiese la verdad. 6 Complemento de Régimen Preposicional: Mis hijos se han olvidado de que hoy es mi cumpleaños -> de que hoy es mi cumpleaños de la fecha de mi cumpleaños. Atributo: Juanita está que no cabe en sí de satisfacción -> que no cabe en sí de satisfacción satisfecha. No hay proposiciones en función de C. indirecto, porque a que y para que forman proposiciones adverbiales de valor final, de finalidad. 1.2. Funciones sintagmáticas Adyacente: a) de un nombre: Tengo necesidad de que me expliques este asunto -> que me expliques este asunto una explicación de este asunto b) de un adjetivo: Su madre estaba orgullosa de que hubiera triunfado -> que hubiera triunfado de su triunfo. 1.3. Proposiciones de infinitivo El infinitivo puede ser núcleo de una subordinada sustantiva. Ej.: Me disgusta gritar a los niños (Sujeto); Quiero pasear por la Calle Mayor (C. directo); Se acordó de presentar la instancia (C. régimen preposicional); Hablar en ese tono es cometer una estupidez (Atributo); Tengo ganas de acabar el trabajo (c. adnominal). Debe evitarse la confusión de la proposición subordinada de infinitivo con las perífrasis de infinitivo. Las perífrasis forman una unidad funcional, es decir, integran el núcleo del predicado y equivalen funcionalmente a una forma simple. Ej.: Mañana /leeré (voy a leer)/ este libro en casa. A diferencia de las proposiciones subordinadas de infinitivo no pueden conmutarse por un pronombre complemento. Ej.: ¿Puedes ir a casa? -> * No, no lo puedo / Crees tener razón -> Sí, lo creo. Verbos como soler, poder, etc. a las que siguen infinitivos forman siempre perífrasis. En otros verbos, como ir, venir, tener, deber, etc., pueden constituir perífrasis o cuando van seguidos de infinitivo, proposiciones subordinadas. Ej.: Ahora vamos a cantar una canción (perífrasis) / Ahora vamos a casa a cantar una canción (proposición) // Cada año venimos a recolectar unos 200 kilos de peras (perífrasis) / Cada año venimos a esta tierra a recolectar peras (proposición). 1.4. Elementos subordinantes de las proposiciones sustantivas 1.4.1. Transpositor que. Elemento subordinante fundamental. Lleva preposición en dos casos: a) C. régimen preposicional. Se refirió a que le hacían falta más empleados; Se acordó de que Juan había prometido visitarle. b) Adyacente de un sustantivo o un adjetivo. La causa de que no se lea ese libro es su alto precio; Luis está deseoso de que le entreguen el coche. Delante del transpositor que puede aparece el ARTÍCULO EL, solo esta forma. No son posibles las otras formas del artículo: la, los, lo,... Ej.: Que tú lo digas me parece preocupante o El que tú lo digas me parece preocupante. - Dequeísmo: Uso incorrecto de la preposición de con complementos directos o sujetos. Ej.: * Creo de que vendrá pronto; * Pienso de que este problema es serio; * Me consta de que había más gente; * Resulta de que nadie lo sabía. 7 - Queísmo. Supresión inapropiada de una preposición regida por el verbo o sustantivo. Ej.: * Me acordé que aquel día llegaba el director; * Me di cuenta que era demasiado tarde. 1.4.2. Otros elementos subordinadores: 1. Verbos que significan 'decir o pensar'. Dos formas: a) estilo directo. La subordinada reproduce literalmente lo dicho o pensado. Ej.: Sebastián dijo a su hermana: "Cuando llegue tu marido, marcharemos a la playa" (c. directo). b) estilo indirecto. La proposición subordinada reproduce lo dicho con cambios gramaticales, especialmente el tiempo verbal. Ej.: Sebastián dijo a su hermana que cuando llegara su marido marcharían a la playa. Son incompatibles la conjunción subordinante que y el estilo directo, a pesar de que ello es relativamente frecuente en el lenguaje periodístico. Ej.: * El presidente dijo que "hoy hemos tenido problemas" (...dijo: "Hoy hemos tenido problemas"). 2. Con verbos que significan 'desconocimiento o duda de un hecho' puede aparecer la conjunción si. Ej.: No sé/ Me preguntó si iré de vacaciones (c. directo). No se deben confundir las oraciones sustantivas introducidas por si con las subordinadas condicionales introducidas por la misma conjunción. Se trata de construcciones diferentes: la interrogativa desempeña una función sustantiva y, por expresar duda o desconocimiento, admite la coordinación disyuntiva con forma negativa de esa misma subordinada (Dime si vas a venir conmigo o no [vas a venir]); la condicional no desempeña una función sustantiva y no admite la construcción disyuntiva (* Te lo daré si vienes conmigo o no). También los interrogativos qué, quién, cuál, cuánto, cómo, dónde, cuándo, por qué, para qué, etc. introducen una proposición sustantiva con estos verbos. Además de marcar la subordinación como que o si, forman parte de la proposición que encabezan y, en consecuencia, desempeñan alguna función dentro de ella. Ej.: Dígame quién ha venido (proposición: c. directo; quién: sujeto de la proposición); Le preguntaron dónde vivía el médico del pueblo (proposición: c. directo; dónde: c. circunstancial de lugar de la proposición). También en estilo directo: Le preguntaron: ¿Dónde vive el médico del pueblo? Estas proposiciones, llamadas interrogativas, pueden emplearse en estilo directo, interrogativas directas, (Preguntó: ¿Quién ha muerto?) o pueden emplearse en estilo indirecto, interrogativas indirectas (Preguntó quién había muerto). No deben confundirse las proposiciones con los adverbios relativos átonos cuando, donde o como, que introducen proposiciones subordinadas de relativo, con las que llevan los interrogativos tónicos cuándo, dónde y cómo, que introducen proposiciones sustantivas. 2. LAS PROPOSICIONES SUBORDINADAS ADJETIVAS Concepto. Se denominan subordinadas adjetivas por desempeñar en el sintagma o grupo nominal la función de adyacente adjetivo. También se les llama proposiciones de relativo porque el elemento que realiza la transformación de proposiciones en meros adyacentes de un sintagma nominal es el pronombre relativo. Ej.: Una chica madrileña (de Madrid, que nació en Madrid) ha llegado hoy. Los elementos madrileña, de Madrid, que nació en Madrid son elementos funcionalmente equivalentes, esto es, son adyacentes de un núcleo nominal. Antecedente y función del relativo. El núcleo del sintagma nominal, chica, es el antecedente del relativo que, forma invariable. Existen otros relativos, como cual, que tienen variaciones de género y número (el cual, la cual, los cuales y las cuales), en los que se produce obligatoriamente la concordancia del relativo con el antecedente. Ej.: Me presentaron a los hijos del director, los cuales me saludaron. Entregué a Juan dos entradas para el teatro Príncipe, las cuales me habían costado mil pesetas. 8 La función oracional del antecedente puede no ser la misma del pronombre relativo. Ej.: Esta cuartilla que tú me has dado está rota. El segmento Esta cuartilla que tú me has dado funciona como sujeto del predicado está rota. Sin embargo, que en la proposición subordinada que tú me has dado funciona como c. directo. - Si la función del relativo en la subordinada es un complemento que necesita ir introducido por una preposición, esta se coloca ante el relativo. Ej.: Las camas en que dormimos son duras. 2.1. Tipos de proposiciones adjetivas Tipología: a) especificativas: restringen o delimitan la extensión significativa o referencial del sustantivo. Forman un solo grupo fónico con el sustantivo antecedente. Ej.: La emisora que escucho todos los días me distrae. b) explicativas: explican una cualidad implícita, intrínseca del nombre. Pueden eliminarse sin que se resienta el significado o la referencia total de este. Existe en estas una pausa breve (comas en la escritura) entre el antecedente y el relativo, además de un cambio de entonación. Ej.: Esa chica, que se llama Ana, fue la primera del curso. Los relativos quien(es) y el cual (y sus variantes) aparecen siempre en proposiciones explicativas, salvo cuando van precedidos de preposición. Ej.: Me vendieron un coche, el cual tenía más de 100.000 km; Saludé a tu padre, quien me recibió con simpatía. Sin embargo, con preposición: Esta es la chica con quien (la cual) salgo. Cuando el antecedente es nombre propio o pronombre personal tónico, solo son posibles las explicativas. Ej.: Ana, que es una alumna ejemplar, será premiada; Vosotros, que estáis cansados, sentaos aquí. Una misma oración puede ser interpretada como explicativa o especificativa: 1. Los españoles que aman la tolerancia son inteligentes. 2. Los españoles, que aman la tolerancia, son inteligentes. En la oración 1) se predica que los españoles demócratas, y solo estos, son inteligentes; en cambio, en la oración 2) se afirma de todos los españoles. 2.2. Partículas subordinantes en las proposiciones adjetivas Relatores: pronombres y adjetivos relativos (que, cual, quien y cuyo) y adverbios relativos ( donde, cuando, cuanto y como). - Pronombres relativos. Que es el más usado y puede ir precedido de artículo (el que, la que, los que, las que). Su antecedente puede ser persona o cosa. Para cual es obligatoria la anteposición del artículo (el cual, la cual, los cuales, las cuales). Varía en género y número. Son incorrectas las formas *cuala, *cualas. El antecedente puede ser, como en el caso de que, persona o cosa. Quien, que varía solo en número quienes, refiere exclusivamente a personas. Cuyo es un adjetivo relativo, equivalente a del cual, del que, etc. Ej.: El sacerdote cuya madre murió ayer es tío mío. El desuso de cuyo produce la incorrección que + su o "quesuismo". Ej.: * Me encontré con una chica que su padre es poeta. Cuanto varía en género y número. Tiene valor cuantitativo, es menos usual y suele aparecer sin antecedente expreso. Ej. Gasta cuanto gana. - Adverbios relativos. Desempeñan como los pronombres relativos doble función: transpositores o nexos y complemento circunstancial en la subordinada. 9 Ej.: En esa ciudad donde nació tenía muchos familiares; Sucedió en aquellos años cuando vivíamos en Málaga; No me gusta la manera como me trata. Las proposiciones introducidas por un adverbio relativo y sin antecedente son adverbiales, pues se sustituyen por adverbios. Ej.: Se vive mejor donde hay espacios libres- > Se vive mejor allí. 2.3. Proposiciones de relativo sin antecedente expreso En ocasiones NO HAY ANTECEDENTE EXPRESO en las proposiciones: Quien bien te quiere te hará llorar; Dáselo a quienes lo necesiten; Escucha lo que me han contado; Dame el que me enseñaste ayer. Van introducidas por los relativos que, por quien y cuanto, y sus variantes. Los relativos cuyo y el cual- y sus variantes- siempre se presentan con antecedente expreso. Aunque existen dos posibilidades básicas de analizar este tipo de proposiciones, en nuestro caso consideraremos que se trata de proposiciones de relativo o adjetivas sustantivadas, esto es, asumen la función del antecedente nominal si estuviera expreso. Así, en Quien bien te quiere te hará llorar la proposición Quien bien te quiere diremos que es una proposición de relativo o adjetiva sustantivada que funciona como sujeto. Las formas lo que y lo cual tienen, a veces, como antecedente una oración entera. Ej.: Mi hijo ha aprobado, lo que (cual) me hace muy feliz. Se trata de un conjunto oracional por subordinación, muy próximo a la coordinación: Mi hijo ha aprobado y esto me hace muy feliz. 2.4. El gerundio y el infinitivo en función adjetiva Gerundio e infinitivo en función adjetival. Con verbos de percepción funcionan como adyacentes de un sintagma nominal. Ej.: Vimos en el patio a un niño llorando que lloraba; Oímos al tenor cantar una romanza que cantaba una romanza; No tengo dinero que gastar. Una prueba que puede efectuarse es realizar la conmutación por un pronombre personal complemento. Ej.: Lo vimos en el patio (lo al niño llorando); Lo oímos (lo al tenor que cantaba una romanza). 10 LAS PROPOSICIONES CIRCUNSTANCIALES SUBORDINADAS ADVERBIALES Y 1. LAS PROPOSICIONES SUBORDINADAS ADVERBIALES Definición. Se llama proposiciones subordinadas adverbiales a aquellas que cumplen las mismas funciones que un adverbio respecto a la proposición principal y, por tanto, se pueden sustituir por ellos. Ej.: Fui donde estaba tu hijo -> Fui allí; He pintado la casa como me dijiste-> He pintado la casa así; Iré a la mili cuando sea mayor-> Iré a la mili entonces. Las proposiciones de este tipo desempeñan la función más característica del adverbio, la de complemento circunstancial, y son subordinadas del verbo de la proposición principal. Tipos. Tiempo, lugar y modo. 1.1. Proposiciones subordinadas adverbiales de tiempo Concepto. Todas aquellas oraciones que se pueden sustituir por un adverbio temporal o expresión nominal con valor temporal son subordinadas de complemento circunstancial dentro de una oración compleja. Ej.: Iré cuando sean las tres -> Iré entonces. Significado. Indican si la acción principal y la subordinada son simultáneas (Según pasa el tiempo, se va encontrando mejor), o bien anteriores (Apenas terminó la fiesta, regresamos a casa) o posteriores (Cuando lo anunciaron, yo ya lo sabía) en el tiempo. Nexos. Adverbios, conjunciones y locuciones conjuntivas: apenas, antes (de) que, mientras que, entretanto, tan pronto, conforme, después (de) que, no bien, siempre que, cuando (adverbio relativo). Ej.: Cuando termine el examen, nos tomaremos un café; Siempre que estoy en la ducha, me llama por teléfono... 1. El nexo cuando Las oraciones con cuando son adjetivas siempre que el antecedente esté en el contexto de forma explícita. Ej.: Ese fue el momento cuando te conocí. Hay que distinguir estas oraciones adverbiales de las sustantivas con cuándo, que son interrogativas indirectas. Ej.: No sé cuándo llegará -> No lo sé -> No sé eso. Formas verbales: a) De indicativo: si el tiempo del evento verbal es pasado o presente. Ej.: Siempre que estoy en la ducha, me llama por teléfono. b) De subjuntivo: si el tiempo del evento verbal es futuro. Ej.: Cuando termine el examen, nos tomaremos un café. c) Infinitivo precedido del artículo al. En su mayoría, significan anterioridad inmediata. Ej.: Al buscar las llaves, descubría el robo. También poseen valor temporal de anterioridad inmediata oraciones de infinitivo precedidas de las locuciones nada más y al poco de. Ej.: Nada más comer, salimos a dar un paseo. d) Gerundio. Unas veces indica anterioridad y otras, lo más frecuente, simultaneidad dentro de un proceso durativo. La anterioridad aparece con gerundios compuestos y, en menos ocasiones, con gerundios simples. Ej.: Simultaneidad: Se ducha por las mañanas cantando zarzuelas. Anterioridad: Habiendo heredado de su abuela, tiró la casa por la ventana. 11 Si el gerundio aparece precedido de la preposición en, el significado es el de anterioridad inmediata. Ej.: En llegando a mi casa, descansaré. e) Participio. Siempre expresa anterioridad inmediata. Ej.: Terminado el riego municipal, cortaron el agua. A veces, la proposición temporal de participio se refuerza sintáctica y semánticamente con un adverbio o locución adverbial. Ej.: Apenas terminado el partido, cogieron el autobús; Una vez terminado el partido, cogieron el autobús. 1.2. Proposiciones subordinadas adverbiales de lugar Significado. Indican una circunstancia de lugar relacionada con la proposición principal. Por ello, pueden sustituirse por adverbios locativos. Ej.: Fui donde estaba tu hijo -> Fui allí. Nexos. Siempre llevan el adverbio relativo (donde), solo o acompañado de preposiciones (por donde, de donde, hacia donde, a donde, hasta donde). No deben confundirse estas oraciones que complementan a un verbo, con las adjetivas con donde. Esta, como ya se ha visto, siempre llevan un sustantivo antecedente del adverbio relativo al que complementan. Ej.: Esta es la casa donde vivo. También deben distinguirse las oraciones adverbiales de lugar de las interrogativas indirectas con dónde (adónde), que son una clase de sustantivas. Ej.: Ignoro por dónde caminan -> Lo ignoro -> Ignoro eso. Tiempos verbales: a) de indicativo: si el tiempo verbal es pasado o presente. Ej.: Sal inmediatamente de donde estás metido. b) de subjuntivo: si el tiempo verbal es futuro. Ej.: Caminaremos hasta donde nos cansemos. 1.3. Proposiciones subordinadas adverbiales de modo Significado. Indican la manera de realizar la acción expresada por la proposición principal. Como todas las adverbiales, se puede sustituir por un adverbio. Ej.: He pintado la casa como me dijisteis -> La he pintado así. Nexos. Adverbios transpositores - según, conforme-, las locuciones adverbiales según que y tal y como, y el adverbio relativo como. Ej.: Todo está sucediendo (tal y) como nos lo esperábamos; Según me han contado, se produjo una situación insoportable. 1. El nexo según No es preposición cuando se combina con verbos o cuando acompaña a pronombres tónicos. Ej.: Según mis noticias, en Polonia hace frío ( según: preposición); Según vayan viniendo, que se presenten; Según tú ( según: adverbio). Deben distinguirse estas oraciones que complementa a un verbo, de aquellas en que el adverbio relativo como se relaciona con un sustantivo antecedente, al que complementan. Ej.: No he visto el modo como lo pintó. Tampoco deben confundirse con las interrogativas indirectas con cómo, que son sustantivas. Ej.: Dime cómo te ha ido -> Dímelo -> Dime eso. Formas no personales. El gerundio puede formar una subordinada adverbial de modo. Ej.: Te veo a menudo cantando por la calle. 12 2. LAS PROPOSICIONES SUBORDINADAS ADVERBIALES IMPROPIAS Concepto. Se denominan "adverbiales impropias" porque no existen en el sistema de la lengua adverbios de causa, de condición o de finalidad, etc. con los que pueda establecerse una relación de equivalencia funcional. Tipos. Clasificación semántica, según la circunstancia que expresan con respecto a la principal: a) causales b) consecutivas c) condicionales d) finales e) concesivas f) comparativas 2.1. Proposiciones subordinadas causales Significado. Indican la causa eficiente de lo expresado en la proposición principal, lo que supone que la principal expone la consecuencia o efecto de lo expresado por la subordinada causal. Nexos. Transpositores: porque, que, puesto que, ya que, pues, como, a fuerza de, debido a (que), dado que, en vista de que, etc. Ej.: Límpiate estas uñas, que las llevas negras; Te quedas sin vacaciones porque tú quieres, Como te dormiste, no escuchaste la noticia; No te puedo responder, pues casi no te he atendido. Todas ellas son sustituibles por la genérica porque. Tiempo verbal. Las subordinadas causales introducidas por porque solo admiten indicativo. Admite subjuntivo en algunos casos: a) con valor concesivo y negación en la proposición principal. Ej.: Porque él venga no voy a irme yo. b) Cuando se niega que la proposición principal introducida por porque sea la causa de la principal. Ej.: No porque sea mi hija le voy a dar sobresaliente. c) Cuando equivale a una subordinada final con para que. Ej.: Me lo tomé porque no se disgustara. 2.2. Proposiciones subordinadas consecutivas Significado. Expresan la consecuencia de que acontezca la acción principal, lo que implica que la principal expone la causa de lo expresado por la subordinada. Nexos. Transpositores: por lo tanto, pues, conque, de manera que, por consiguiente, luego, de ahí que, en consecuencia, así es que, etc. Todas ellas son sustituibles por la genérica por lo tanto. Ej.: Pienso, luego existo; Estamos todos presentes, conque firmemos el contrato; Hay calefacción; pues han traído el butano. Tiempo verbal. Las subordinadas consecutivas suelen adoptar el indicativo. Sin embargo, de ahí que se construye, a menudo, con subjuntivo. Ej.: Está harto, de ahí que no te admita una sola petición. Consecutivas ponderativas Expresan que la acción se produce como consecuencia de la intensidad de la acción principal; intensidad que va marcada por la presencia de un adverbio, adjetivo o pronombre que significa cantidad: tanto, tal, en la principal, y por la conjunción que en la subordinada. Ej.: Comieron tanto que les entró sueño, Le dio tal patada a Maradona que le partió un tobillo, Vinieron tantos que no se cabía. Al aparecer la negación, es obligatorio el subjuntivo en la subordinada: No le aprecia hasta el punto de que le tolere las impertinencias. 13 Deben distinguirse estas oraciones consecutivas de aquellas adjetivas, cuyo relativo lleva como antecedente las palabras manera, modo, forma, suerte, pero sin intensificador. Ej.: Explica de manera que todos lo entendamos (oración de relativo) / Explica de tal manera que todos lo entendamos. 2.3. Proposiciones subordinadas condicionales Significado. Expresan la condición necesaria o deseable para que pueda realizarse la acción principal, lo que implica una causa hipotética, es decir, una causa supuesta, posible, imaginaria, de lo que ocurre en la principal, la cual expresa la consecuencia deseada, también potencial. Nexos. Transpositores: si, como, (en el) caso de que, siempre que, a menos que, a condición de que, cuando, etc. Todas ellas son sustituibles por la genérica si. Deben distinguirse las oraciones subordinadas temporales con cuando de las condicionales con ese mismo nexo. Ej.: Cuando trabaja, es que ya está bien (condicional) / Cuando trabaja, me encuentro más tranquilo (temporal). También hay que distinguir distintos tipos de oraciones subordinadas con el nexo como. Ej.: Como no trabajes, no te subo el sueldo (condicional) / Como no trabajas, no te subo el sueldo (causal). Por último, no debe olvidarse que el nexo si también introduce interrogativas indirectas: Dime si estás conforme (prop. sub. sustantiva en función de CD). Prótasis y apódosis. La proposición subordinada condicional recibe también los nombres de condicionante y prótasis, y la proposición principal los de condicionada y apódosis. Formas no personales: a) INFINITIVO: de + infinitivo. De seguir así, acabamos mal. a + no + infinitivo. A no mejorar, te nos mueres. a condición de + infinitivo. A condición de seguir así, aprobarás. b) GERUNDIO. Siguiendo así, acabaremos en la cuneta. c) PARTICIPIO. Este trabajo, analizado con detalle, no tiene desperdicio. 2.4. Proposiciones subordinadas finales Significado. Expresan la finalidad o causa intencional ('motivo proyectado hacia el futuro que justifica una acción'), lo que equivale a la consecuencia deseada de lo que expresa la principal, que, a su vez, es la causa real de lo que se pretende en la subordinada. Nexos. Transpositores: para que, a que, a fin de que, con el objeto de que y las preposiciones a, para + infinitivo. Todas son sustituibles por la genérica para. Ej.: Se puso a hacer guiños y muecas a fin de que se fijara en ella; Corre a que te den una explicación. Tiempos verbales. Las subordinadas finales se construyen siempre en subjuntivo, mientras que la proposición principal se formula en indicativo o imperativo. Con el verbo principal en imperativo, la conjunción que, sin preposición que la preceda, puede actuar de nexo de oraciones finales. Ej.: Vuélvete, que te veamos. Si la subordinada coincide en el sujeto con la principal, el verbo va en infinitivo, y desaparece la conjunción que. Ej.: Dejo todo en orden, con el objeto de ocultar el registro; He vuelto a devolverle el rosario de tu madre. No obstante, se dan casos que no siguen esta regla. Ej.: Dame (tú) la mano para cruzar (yo) la calle. 14 2.5. Proposiciones subordinadas concesivas Significado. Expresan la causa ineficiente ('causa de la que se espera un resultado distinto del que efectivamente se ha producido') o una dificultad que se opone u obstaculiza la realización de la principal, la cual, pese a todo, se lleva a cabo, es decir, se implica la negación de lo expresado en la principal- la consecuencia- con respecto a su causa lógica, la indicada en la subordinada concesiva. Nexos. Transpositores: a pesar de que, por más que, aunque, aun cuando, si bien, bien que, etc. También existen fórmulas fijas con significado concesivo: sea como sea, pase lo que pase, así y todo, aun con eso, con todo... Todas son sustituibles por la genérica aunque. Ej.: Aunque se lo explique dos veces, no lo entiende; Por más que se lo explico, no lo entiende; A pesar de que se lo explique, no lo entenderá; Aun cuando se lo explicase, no lo entendería. Las subordinadas concesivas pueden situarse antes o después de la principal, sin que se altere el significado de la oración compleja. Formas no personales: a) INFINITIVO: con... + infinitivo. Con ser tan guapa, no es feliz. b) GERUNDIO: Aun + gerundio. Aun sabiéndolo todo, sigue pensando en ella obsesivamente. c) PARTICIPIO: si bien + participio. Esos dos, si bien zanjado el enfrentamiento, no se hablan. 2.6. Proposiciones subordinadas comparativas Concepto. Estas proposiciones son elementos de una estructura con dos términos: primer término y segundo término de la comparación, la proposición subordinada. El primer término de la comparación puede ser un adjetivo, un adverbio o un nombre. Ej.: Este vino es tan bueno como tú decías. En este ejemplo el primer término es el adjetivo bueno al que precede el adyacente tan, un adverbio. El segundo término es la proposición subordinada comparativa como tú decías. El verbo del segundo término de la comparación, la proposición subordinada, puede estar omitido, especialmente si su significado es el mismo de la oración principal. Ej.: Joaquín es más amigo mío que Jaime (es); De mayor quiero ser lo mismo que tú (eres). La relación comparativa entre la principal y la subordinada se establece en una dirección única: a___Rcomp____b. El cambio de orden de los términos supone la alteración total del significado. Ej.: María es más lista que José (a___Rcomp____b) -> (b___Rcomp____a) José es más listo que María. Las proposiciones comparativas tiene valor intensificador en ciertas expresiones metafóricas, de uso coloquial: Eres más agarrado que un chotis, Gasta menos que un submarino debajo de un grifo, Es más chulo que un ocho, etc. Nexos. Según el cuantificador que aparece en el primer término de la comparación, distinguimos tres clases de proposiciones comparativas: a) de igualdad. Tanto...cuanto; tanto...como; tal...cual; cuanto más...más; cuanto menos...menos; tanto más...cuanto más. Igual que y lo mismo que encabezan la subordinada. Ej.: Tu indumentaria era tal/cual (o como) me la esperaba; Resulta tanto más desagradable cuanto más se le trata; No es tan fiero el león como lo pintan; Cuanto más lo miro, más me atrae. 15 b) de superioridad. Más...que(o de). O bien un adjetivo en grado comparativo en el primer elemento de la comparación: mejor, mayor, superior, etc. Ej.: Eso es más de lo que soy capaz de soportar; Tu trabajo resulta mejor que el mío; Vuestro encanto es superior al de los demás. c) de inferioridad. Menos...que(o de). A veces con un adjetivo en grado comparativo en el primer elemento de la comparación: menor, peor, inferior, etc. Ej.: Las chicas de ahora son menos infelices que las de antes; Estas notas son peores que las de la otra evaluación. El segundo término de la comparación va introducido por: a) la conjunción subordinante que, b) las preposiciones de y a, c) el adverbio comparativo como, o d) diversas locuciones De superioridad: Tu trabajo está mejor preparado que el mío, Es más fuerte de lo que puedo soportar, Su encanto es superior al de los demás. De inferioridad: Esas notas son peores que las del mes pasado, Es menos tímido de lo que tú crees, Tengo un presupuesto inferior a + el que tú disfrutas. De igualdad: Vienes ataviada tal como (cual) me lo esperaba, No es tan fiero el león como lo pintan, Me ha gustado tanto la película como me auguraste, Es igual de buena que lo era su madre. 16