El error de refracción es un factor pronóstico potente de estrabismo en la infancia. Autor: Joe Barber Jr., PhD Los investigadores han identificado una fuerte interrelación dependiente de la gravedad entre el error de refracción y la prevalencia de estrabismo en la infancia, según los hallazgos de un estudio transversal demográfico. Los hallazgos, comunicados por la Dra. Susan A. Cotter, OD, MS, de la Keck School of Medicine en la University of Southern California, en Los Angeles, California, y sus colaboradores, fueron publicados en el número de noviembre de Ophthalmology. Después del ajuste con respecto a una serie de variables, entre ellas, género sexual, raza, edad materna, escolaridad del cuidador e ingresos, seguros de salud y de la vista, tabaquismo y consumo de alcohol durante el embarazo, lactación natural y antecedente familiar de estrabismo, así como ambliopía, los investigadores determinaron que los niños con hipermetropía de +5,00 o más tenían 122 tantos más posibilidades de presentar esotropia que aquellos con hipermetropía entre +0,00 y +1,00. Los autores hacen notar que si bien está bien establecida la relación entre el error de refracción y determinadas formas de estrabismo, se desconoce la relación entre diferentes grados de error de refracción y estrabismo. Los autores señalan: «Es importante definir estas relaciones por cuanto sirven de guía a los oftalmólogos para tratar el error de la refracción en la infancia, ayudan a informar sobre los umbrales de error de refracción que deben detectarse a quienes fabrican instrumentos para la detección basada en errores de refracción, así como a influir en las autoridades de salud pública con respecto a los umbrales de remisión para la detección basada en errores de refracción». En el estudio actual participaron 9970 niños negros, hispanoamericanos y blancos no hispanoamericanos de 6 a 72 meses de edad que se incorporaron en el Estudio Multiétnico de Enfermedades Oculares Pediátricas (MEPEDS) en el Sur de California o el Estudio de Baltimore de Enfermedades Oculares Pediátricas (BPEDS) en Baltimore, Maryland y sus alrededores. Los participantes con datos incompletos fueron excluidos del análisis de datos. La hipermetropía se asoció de una manera dependiente de la gravedad a la prevalencia de esotropia (p < 0,0001), con oportunidades relativas (OR) ajustadas que fluctuaban desde 1,81 (intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,75 a 4,62) para la hipermetropía de +1,00 hasta <+2,00, a 122,44 (IC del 95%: 49,86 a 299,70) para la hipermetropía mayor de +5,00. El astigmatismo se relacionó de una manera dependiente de la gravedad con la prevalencia de exotropia (p < 0,0001), con OR que fluctuaron desde 0,85 (IC del 95%: 0,48 a 1,41) para el astigmatismo de menos de 0,50 hasta 5,88 (IC del 95%: 2,75 a 12,54) para el astigmatismo de más de 2,50. En el análisis de regresión logarítmica multifactorial, la prematuridad (OR, 4,43; IC del 95%: 2,14 a 9,19), el tabaquismo materno durante el embarazo (OR: 2,04; IC del 95%: 1,17 a 3,56), la edad de 48 a 72 meses (OR ≥ 7,94; IC del 95%: 2,20 a 40,10) y la anisometropía de 1,00 o más (OR: 2,03; IC del 95%: 1,10 a 3,73) se relacionaron de manera independiente con esotropia. Así mismo, el tabaquismo materno durante el embarazo (OR, 2,88; IC del 95%: 1,78 a 4,64), la prematuridad (OR: 2,48; IC del 95%: 1,17 a 5,25), el género sexual femenino (OR, 1,62; IC del 95: 1,08 a 2,42), la anisometropía de 0,25 a < 0,50 (OR: 2,10; IC del 95%: 1,25 a 3,22) y la anisometropía de ≥ 0,50 (OR: 2,63; IC del 95%: 1,26 a 5,49) se relacionaron de manera independiente con exotropia. Los autores hacen notar que sus hallazgos podrían ser útiles para el tratamiento de error de refracción, Escriben en su artículo: «Puesto que los errores refractarios pueden abordarse mediante intervención temprana, los datos que se presentan aquí proporcionan información útil que ayuda a guiar al personal sanitario y a las familias de los pacientes para tomar decisiones informadas en torno al tratamiento del error de refracción temprano». «Sin embargo, se necesita un estudio longitudinal para confirmar el valor diagnóstico de error de refracción no corregido y valorar la repercusión potencial del tratamiento en etapa temprana.