LA HACIENDA MUNICIPAL Vásquez Miguel Ángel La hacienda pública es el conjunto de bienes del Estado con su debida administración, y es la encargada de velar por los intereses y bienes de cada estado o municipio, a través de la planificación, dirección y control de las actividades conexas e inherentes a la misma. Es por ello que la selección de servidores públicos que en ella presten sus servicios deben ser aquellos que no solo tengan capacidad y vocación de trabajo, sino también por su mística, formados con una inquebrantable estructura de valores tanto éticos como morales; para así poder llevar a cabo el objetivo principal de la hacienda municipal, que no es otra que el de lograr la mejor programación de todos aquellos planes, así como centralizar y ejercer las políticas tanto económicas como financieras del municipio, a fin de transformar a este conjunto de acciones en el mayor y mejor beneficio para la colectividad que hace vida en este De manera que la estructura conformada para llevar a cabo todo lo relacionado con la administración de los recursos públicos del municipio, siempre enmarcados dentro de funciones bien delimitadas, como el de cumplir y hacer cumplir todas las ordenanzas y reglamentos sobre hacienda y tributos municipales, así como las normas presupuestarias, el cumplir con los principios básicos de las ciencias administrativas, tales como la planificación, supervisión, dirección, coordinación y control para todas las operaciones y funcionamiento de cada una de las unidades de trabajo, que tengan a su cargo alguna responsabilidad , y en fin cualquiera de las funciones particulares que constituyen el constante que hacer laboral diario logrando el objetivo trazado por un liderazgo municipal. Pero ¿Que bienes y recursos conforman nuestra llamada Hacienda Municipal? Pues todos aquellos recursos o ingresos tanto ordinarios como extraordinarios pertenecientes al municipio, caracterizándose los ingresos ordinarios por ser recibidos periódicamente, siendo más comunes y habituales. Mientras que los ingresos extraordinarios son aquellos esporádicos, no regulares y quizás percibibles una sola vez. De allí que podemos clasificar los diferentes recursos que ingresan al municipio. Entre los que se pueden mencionar, los impuestos tazas municipales, los intereses producidos por cualquier clase de crédito del fisco municipal, el producto de la administración de los diferentes bienes y servicios pertenecientes al municipio, todos aquellos eventos que satisfagan al municipio, los institutos autónomos, empresas privadas, fundaciones, asociaciones civiles y otros organismos descentralizados, aquellos frutos obtenidos en función de otros ingresos públicos o de los bienes municipales, así como también los intereses devenidos por las cantidades de dinero consignadas en calidad de deposito en cualquier banco o instituto de crédito, o también a todas aquellas contribuciones especiales previstas en la ley, o aquellos montos provenientes de la venta de bienes y demás inmuebles municipales, o aquellas donaciones o aportes especiales que aporten a su favor particulares u organismos gubernamentales nacionales o estadales. En fin toda una gama de ingresos que podría recibir la Hacienda Municipal clasificados según su periocidad, y que administrados con la mayor eficiencia servirán de plataforma para cumplir con los objetivos planteados. Sin embargo la administración eficiente no solo se limita a los bienes y recursos, ya que el balance de la hacienda municipal también presenta en su estructura pasivos que deben ser tratados con los mejores criterios de eficiencia y credibilidad entre los que se podrían nombrar a todas aquellas obligaciones legalmente contraídas por el municipio o el distrito y derivadas de la ejecución del presupuesto de gastos; así como las deudas provenientes validamente de la ejecución de presupuestos fenecidos, o todas aquellas obligaciones producto de la deuda municipal o distrital; y así podríamos particularizar un sin número de otras obligaciones que conforman la estructura contable de nuestra hacienda municipal. Debido a la importancia que reviste estos elementos antes tratados, es que la Hacienda Municipal cuenta en su estructura con una dirección de hacienda municipal, quien es el ente encargado de la administración financiera, sometidos al régimen de responsabilidades civiles, penales, administrativas y disciplinarias que fije la ley. Es por ello que los controles tanto legales como el tan promovido nuevo Control Ciudadano que cuenta con la participación directa de la comunidad tienen su espacio legal en la actual constitución de la República Bolivariana de Venezuela. Esta Dirección de Hacienda Municipal quien es el brazo ejecutor de toda la política fiscal del municipio, se ha previsto de herramientas efectivas para lograr el mejor desempeño de sus funciones y objetivos entre los que necesariamente tendríamos que mencionar como principal el cobro de impuestos y tasas municipales así como otras que no son menos importantes. A fines de optimizar la aplicación de los impuestos, se creo la oficina de Atención al Contribuyente y al Inversionista (OACI). Dicha oficina que estará adscrita a la Dirección de Hacienda Municipal ; tendrá por objeto orientar a los contribuyentes y personas en general en la aplicación de las disposiciones contempladas en la presente ordenanza municipal , así como el de otras actividades no menos importantes como coordinar los procedimientos referidos a la tramitación y obtención de licencias de funcionamientos, goce de beneficios fiscales contempladas en la ordenanza municipal; también el recibir y procesar denuncias y quejas de contribuyentes y ciudadanos en general acerca del cumplimiento de la ordenanza, el informar a las dependencias respectivas sobre los retardos y omisiones en el cumplimiento de las obligaciones de los funcionarios. Para todo esto la OACI contará con el apoyo y colaboración de las dependencias municipales competentes en materia de control urbano, prevención de incendios y seguridad ambiental. Así mismo la dirección de Hacienda Municipal cuenta con un nuevo aliado en materia de aplicación de todo lo concerniente a la legislación tributaria del municipio Iribarren como es el Servicio Municipal de Administración Tributaria (SEMAT). Quien viene a sustituir al organismo privado encargado de efectuar las mismas funciones, es decir de ejecutar todo lo relativo a las ordenanzas de la hacienda pública municipal, así como el ejercicio gestión y desarrollo de las competencias relativas a la ejecución de la política tributaria del municipio Iribarren. El SEMAT surge como respuesta a una nueva visión de la política municipal por ello "Este definirá desarrollará política y planes tributarios que permitan asumir el proceso de recaudación de los ingresos municipales y fortalecen la capacidad fiscal del municipio y la eficiencia de los programas de administración de los impuestos, tasas y contribuciones; con la finalidad de mejorar la gestión y el autofinanciamiento". Esta respuesta de la Dirección de hacienda Municipal al usuario, representa excelentes beneficios, y sin duda el ahorro valioso del tiempo se enumera entre los principales, ya que los procesos de pago son ahora más eficientes. Además de integrar un equipo de personal especializado, una sistematización total de los procesos de recaudación, acceso inmediato a la información sobre materia impositiva, oportuna y veraz, a través de la OACI y otros. En fin una serie de cambios que se traducen en beneficios al usuario y contribuyente, liberalizados por la nueva atención personalizada, y la sinergia entre el proceso de fiscalización y recaudación . es por ello que con esta nueva visión de la Hacienda municipal se pueden coordinar junto al SEMAT una serie de beneficios fiscales , ofrecer aquellos usuarios por el cumplimiento del propio deber fiscal, así como por las características del mismo (negocio, empresa o industria) y que irán c desde exoneraciones ya sean parciales, progresivas o totales, hasta rebajas sobre obligaciones fiscales con el municipio.