034 TDOC REMI DEST UBIC TITL Memorandum Dirección de Consultoría Jurídica /sin destinatario/ Ministerio Público MP N° DCJ-12-021-2002 DCJ FECHA:20020117 Los organismos jurisdiccionales a los que se les atribuya competencias municipales o estadales pertenecen al poder judicial que en Venezuela es único y tiene carácter nacional. FRAGMENTO “Me dirijo a usted, en la oportunidad de acusar recibo de su ´Memo´ Rápido N° DVFGR-1773-2001, de fecha 3 de septiembre de 2001, mediante el cual remite anexo el oficio N° 0431, de fecha 29 de agosto del presente año, suscrito por el ciudadano Luis Alberto Camacho Kairuz, General de División (GN), Viceministro del Interior y Justicia, funcionario éste que a través de tal comunicación remite copia del oficio que le dirigió el ciudadano Rafael Veliz, Vicepresidente de la Cámara Municipal del Municipio Sucre del Estado Aragua. El ciudadano Rafael Veliz propone ´la municipalización de la justicia Penal, es decir, establecer el fuero criminal en los Municipios del país´, y señala como fundamento de su proposición lo dispuesto por el artículo 269 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el cual establece que: ´…La ley regulará la organización de circuitos judiciales, así como la creación y competencias de tribunales y cortes regionales a fin de promover la descentralización administrativa y jurisdiccional del Poder Judicial´ El funcionario municipal expresa asimismo, que en su proyecto se ´vislumbra que tanto los Fiscales, Representantes de la Vindicta Pública (Ministerio Público) sean electos, mediante el sufragio, así como los jueces. En consecuencia tanto Alcaldes como Concejales serían los ductores del Fuero Criminal y velarían por la interactuación de todos los entes involucrados, y así el fuero criminal municipal, debidamente estructurado bajo este aspecto, estaría ajustado a un nuevo orden legal, que permitiría la eficacia, eficiencia y celeridad de la justicia penal´. Por lo que respecta al proyecto presentado por el ciudadano Rafael Veliz, expresado únicamente a través de un organigrama, debe observarse en primer lugar, que más allá de la previsión que allí se contempla respecto al establecimiento de órganos jurisdiccionales y fiscalías a nivel municipal, posibilidad que como se verá es inconstitucional, no se indica su ámbito material, es decir, no se señala cuáles serían las categorías de delitos o faltas en la esfera de competencias del ´fuero criminal municipal´. (…) De esta manera, cuando la norma constitucional invocada como fundamento se refiere claramente al ´Poder Judicial´, el cual será descentralizado administrativa y jurisdiccionalmente con la creación de tribunales y cortes regionales, se entiende que se hace alusión a una de las ramas del Poder Público Nacional, pues dicha disposición se ubica precisamente en el capítulo III del Título V de la Carta Magna, ´De la Organización del Poder Público Nacional´. (…) Con relación al Ministerio Público, se reitera, también puede afirmarse que se trata de un organismo nacional, integrante de una de las ramas del Poder Público Nacional, como lo es el Poder Ciudadano. Por ser un órgano nacional, estará bajo la dirección y responsabilidad del Fiscal General de la República. Ahora bien, para el Ministerio Público está prevista también la necesidad de descentralizar su funcionamiento, sin perjuicio, por supuesto, de la unidad institucional, en el sentido de que sólo existe un Ministerio Público, aunque este esté integrado por dependencias descentralizadas o, más propiamente dicho, desconcentradas. Así, el artículo 286 de la Constitución establece que ´La ley determinará lo relativo a la organización y funcionamiento del Ministerio Público en el ámbito municipal, estadal y nacional´, es decir, que la misma institución tendrá tres ámbitos de organización y funcionamiento. Con relación al Poder Judicial, es preciso señalar que sus descentralización, en los términos concebidos en la Constitución, no implica la transferencia de competencias judiciales a las autoridades municipales, pues éstas pertenecen a las ramas legislativa y ejecutiva del Poder Público en su nivel municipal y no pueden, por lo tanto, ejercer ningún tipo de función jurisdiccional, las cuales, en consecuencia, no pueden serles transferidas. En efecto, el régimen de transferencia de atribuciones opera en el caso de competencias concurrentes como la salud, la educación, la seguridad, etc., y por tal motivo, opera en la práctica en cuanto a funciones ejecutivas. Tal transferencia no es posible en respecto a las atribuciones exclusivas y excluyentes de las distintas ramas del Poder Público. Por ejemplo, no podría transferirse a los municipios atribuciones para legislar sobre materias de alcance nacional, ni en relación con la Fuerza Armada Nacional o en cuanto a las relaciones exteriores de la República, entre otras. (…) Por otra parte, conforme a tales apreciaciones debe rechazarse también la propuesta de que ´tanto Alcaldes como Concejales serían los ductores del Fuero Criminal y velarían por la interactuación de los entes involucrados´ (Negrillas añadidas), pues esta pretensión atenta frontalmente contra la autonomía e independencia tanto del Poder Judicial como del Ministerio Público. (…) En efecto, aún en el supuesto negado de la posibilidad de que existiere un ´Poder Judicial Municipal´, todo órgano jurisdiccional debe ser autónomo e independiente de los demás Poderes Públicos. En todo caso, lo que sí pueden y deben hacer los representantes del Poder Municipal, es colaborar con los demás órganos del Poder Público en el ejercicio de sus funciones. Es asimismo improcedente que se establezca el carácter electivo de los jueces y de los representantes del Ministerio Público. En tal sentido, el artículo 255 del texto constitucional, referido a la carrera judicial y a la selección de los jueces, dispone que la misma se realizará a través del concurso público de oposición. La propia Constitución contempla sólo una excepción que como tal, no es extensible a otros casos, respecto a la elección popular de los jueces de paz. Estas apreciaciones son igualmente válidas en cuanto a los fiscales del Ministerio Público, para los cuales se establece el sistema de carrera y por lo tanto para ser designados deberán aprobar previamente el respectivo concurso de oposición realizado en forma pública, tal como lo prevé el artículo 146, párrafo segundo, de la Carta Magna, en concordancia con el artículo 286 ejusdem, referido a la carrera de los fiscales del Ministerio Público. (…) Ahora bien, es necesario reiterar que la organización del Ministerio Público que se propone, aparentemente vinculada al establecimiento de instituciones con carácter municipal, es inadmisible, porque el Ministerio Público, como ya se expresó, es un organismo nacional. En este sentido, así como no existe un Poder Judicial al nivel municipal, salvo lo que respecta a la justicia de paz, tampoco tiene base constitucional la existencia de un Ministerio Público Municipal, porque no está prevista la figura del Poder Ciudadano Municipal. (…) En primer lugar, tomando en cuenta que se prevén fiscales ordinarios y fiscales con competencia en materias tales como salvaguarda del patrimonio público y de niños, adolescentes y familia, los cuales se encuentran en un nivel similar al de los jueces de ejecución, de control, de juicio y correccionales, cabe preguntarse cuáles serían las atribuciones que corresponderían al fiscal distrital o municipal, ubicado en el plano horizontal en el mismo nivel del Juzgado Criminal Municipal, siendo que este ultimo pareciera ser una categoría intermedia entre la Corte Municipal Criminal Municipal y aquellos juzgados, que no ejercerá las funciones de control, de juicio o correccionales. Se plantean las siguientes interrogantes: ¿Cuáles funciones le corresponden al Juzgado Criminal Municipal? ¿Se constituirá como órgano de alzada? ¿La última instancia judicial sería la Corte Municipal Criminal? Cualquiera sean las respuestas a estas interrogantes, debe reiterarse lo ya indicado en cuanto a la inexistencia de un Poder Judicial Municipal, y asimismo sería inadmisible en todo caso que se desconociere el carácter del Tribunal Supremo de Justicia, como el organismo que se encuentra en la cúspide de la organización judicial del Estado. (…) De igual modo, se presenta inconveniente la existencia de tres instancias, como pareciera ser la intención del proyecto que se estudia, porque ello es contrario a los principios de economía y celeridad procesal. De esta manera queda emitido el informe requerido, sobre cuya base se podrá contestar al ciudadano Viceministro del Interior y Justicia, en caso de que ese superior Despacho comparta la opinión aquí contenida, tomando en consideración que será ese funcionario el llamado a responder a la inquietud planteada por el Presidente de la Cámara Municipal del Municipio Sucre del Estado Aragua”. Disposiciones legales contenidas en el documento: CRBV art:146-prf-s CRBV art:255 CRBV art:258 CRBV art:269 CRBV art:279 CRBV art:286 DESC DESC DESC DESC DESC DESC DESC CONCEJOS MUNICIPALES DESCENTRALIZACION ADMINISTRATIVA FISCALES DEL MINISTERIO PUBLICO JUECES MINISTERIO PUBLICO MUNICIPIOS PODER JUDICIAL FUEN FUEN Venezuela Ministerio Público Informe FGR, 2002, pp.349-351.