zarzales de zarzamoras (Rubus ulmifolius) adquieren gran desarrollo, e igual ocurre con los juncales y praderas higrófilas. En las vegas de los ríos Tiétar y Alagón, sobre sustratos arenoso-silíceos o arcilloso-básicos, respectivamente, los bosques riparios son similares a los que se desarrollan en las zonas de montaña, si bien abundan elementos más termófilos (v.g. Celtis australisy Clematis campaniflord), o que denotan un estío más prolongado (Salix salviifoliá). De nuevo aquí los zarzales adquieren gran importancia como matorral de orla o sustitución. m . 1 . 2 . MATORRALES CLIMÁCICOS En las partes elevadas de las sierras más septentrionales de la provincia de Cáceres los melojares son reemplazados por una formación climácica integrada básicamente por elementos arbustivos. Se trata de los piornales altimontanos de Cytisus balansae subsp. europaeus (Lámina V, 1), que pueden observarse puntualmente por encima de los 1.000 m.s.m. en la Serranía de Gata (Puerto Viejo, La Carbonera, Monte Jálama, etc.) y muy abundantemente por encima de los 1.600 m.s.m. en las pertenecientes a Sierra de Gredos (comarca de Jerte-La Vera). La composición florística de esta formación es relativamente pobre, restringiéndose en las cumbres de Villanueva de La Vera y de Madrigal de La Vera casi con exclusividad a este piorno, que en zonas menos elevadas puede acompañarse también de otros caméfitos, como Echinospartum bamadesii subsp. dorsisericeum en la Sierra de Gata (Lámina IV, 6), o Genista cinerascens, en Villuercas y en Gredos, elemento este último que puede aparecer también en altitudes más bajas. Su mayor valor florístico radica en los terófitos y las herbáceas perennes que integran los pastos que se desarrollan en los claros de matorral, entre las que se cuentan una violeta de hermosas flores amarillas {Viola langeana) y una gramínea cespitosa de rígidas y bastas hojas (Festuca indigesta subsp. aragonensis). Fisionómicamente, estos piornales se caracterizan por el aspecto almohadillado de su elemento más abundante, en clara adaptación al frío y los fuertes vientos, una estrategia de la que participan también otros muchos tipos de matorral que viven en condiciones similares. Los bosques ven aquí dificultado su desarrollo, aunque en zonas no demasiado alejadas del Sistema Central vive de manera natural el pino albar iPinus sylvestris var. ibérica), tal vez ausente en estos lugares por la acción devastadora del hombre a lo largo de siglos con vistas a la explotación maderera y a la búsqueda de pastos aprovechables para el ganado; sólo en algunos lugares, por ejemplo cerca de La Garganta, Cáceres, existen pequeñas repoblaciones de esta especie perfectamente adaptadas. m . 1 . 3 . MATORRALES SERIALES La mayor parte de los bosques extremeños se encuentran en la actualidad en etapas de degradación o recuperación, con un predominio sobre todo de elementos arbustivos de carácter serial, entre los que se cuentan fundamentalmente representantes de las familias Lamiaceae, Fabaceae y Cistaceae, los de