INSTITUTO DE ZOONOSIS LUIS PASTEUR: BREVE RESEÑA HISTORICA J.L. Molina El actual Instituto de Zoonosis Luis Pasteur, ubicado en la Avda. Díaz Vélez 4.821 de la Ciudad de Buenos Aires es integrante, junto a otros 31 hospitales, del sub-sistema estatal de salud de la ciudad. Su origen data de septiembre de 1886. En los inicios de la década de 1880, el investigador francés Louis Pasteur (ya conocido por otros logros científicos de importancia) comienza a estudiar la posibilidad de lograr una herramienta eficaz para luchar contra la rabia. Unos años más tarde, entre el 6 y 7 de julio de 1885, Pasteur inocula por primera vez en un ser humano su vacuna antirrábica. El hecho sucede en su laboratorio de París, y el paciente resultó ser un niño de 9 años llamado Joseph Meister quien había sido mordido por un perro rabioso en el trayecto de su casa a la escuela. El rotundo éxito alcanzado por el científico francés es recogido por el Ministro Plenipotenciario de la Argentina en París, Dr. José C. Paz, quien invita a médicos argentinos que estaban trabajando o estudiando en París para discutir acerca de la factibilidad de dotar a la Argentina de este avance científico. Entre los diez médicos que concurrieron a las reuniones, se designó a los Dres. Davel y Reynal O´Connor como los encargados de capacitarse en el tema. Paralelamente a estos sucesos, en Buenos Aires y debido a la muerte de tres niños mordidos por un perro rabioso, un grupo de médicos entre los que se encontraba el cirujano Dr. Ignacio Pirovano, decide impulsar la creación de un Laboratorio e Instituto Antirrábico, siguiendo la metodología pasteuriana. Ambos sucesos logran llegar a un punto en común cuando a mediados de mayo de 1886 llega a Buenos Aires, una carta del Dr. Davel fechada en París el 20 de abril, en la que se da cuenta a las autoridades nacionales de sus avances en la inoculación experimental y conservación del virus rábico, así como de la producción de vacuna. El Dr. Davel inicia por entonces su regreso al país, y en el transcurso del viaje en barco continúa trabajando para llegar con el material vírico en perfecto estado. Llega a Buenos Aires el 12 de agosto de 1886 e inmediatamente, en su propio domicilio de la calle Solís 323, inocula a conejos de su propiedad, siendo éste el inicio de la lucha contra la rabia en la Argentina. Apenas 23 días pasaron desde su llegada, antes de que el Dr. Davel tuviese la oportunidad de probar la eficacia de la vacuna ideada por Pasteur. El 23 de agosto un perro rabioso mordió a dos niños en la Ciudad de Montevideo, los que llegaron a Buenos Aires el 2 de setiembre y dos días más tarde , fueron inoculados con la vacuna antirrábica producida por primera vez en nuestro país. Este suceso del 4 de setiembre de 1886 fue el primero en Argentina y en Latinoamérica y el tercero mundo (luego de la aplicación de la vacuna por el Dr. Pasteur en julio de 1885 y de una aplicación realizada en julio de 1886 en USA). En 1927, se decide la construcción una serie de edificios (similares en los existentes en la ciudad de París) en Avda. Díaz Vélez dentro del predio del Parque Centenario, para que sean la sede definitiva del Laboratorio Pasteur de la Ciudad de Buenos Aires, los que fueron inaugurados el 27 de Julio de 1927; por el Presidente de la República Dr. Marcelo Torcuato de Alvear. Las actuales actividades del Instituto se encuadran dentro del Decreto Nº 5.334/1998 que fijó las misiones y funciones del mismo. Conceptualmente la misión es "....entender en todo lo relacionado con el diagnóstico, prevención y control de las zoonosis urbanas en la ciudad de Buenos Aires, a fin de preservar el buen estado de salud de la población humana y animal de la ciudad...". Las funciones del Instituto se llevan a cabo en el ámbito del Ministerio de Salud del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Los objetivos del Instituto de Zoonosis Luis Pasteur son los de colaborar en evitar la aparición de casos humanos de enfermedades zoonóticas, a través de la prevención y control de las mismas, desarrollando la promoción y protección de la salud. Para cumplir con estos objetivos se realizan actividades tendientes a disminuir las prevalencias de estas enfermedades en los animales domésticos, controlando los mecanismos de transmisión, reduciendo las posibilidades de contagio. Así como evitar las lesiones producidas por animales y disminuir la contaminación del medio, producto de los mismos. Estos objetivos se encuadran dentro de un concepto general, consistente en mejora la calidad de vida de los individuos y por ende la de la comunidad, mediante el logro de conductas adecuadas, y la participación comunitaria en forma organizada, conciente, activa, solidaria y responsable. La meta final es la de consolidar el concepto de propietario responsable de los animales de compañía en la ciudad de Buenos Aires, creando una correcta conciencia higiénico-sanitaria y controlando el crecimiento de las poblaciones animales. Sus actividades se desarrollan en dos departamentos (el de Diagnóstico y Producción de Biológicos y el de Prevención y Control de las Zoonosis) y un área de educación.