Dr. Barri Soldevila: "Revertir la ablación supone una gran dosis de autoestima en la relación social de las mujeres" En todo el mundo, según UNICEF, más de 125 millones de mujeres han sido mutiladas y otros 30 millones pueden serlo en la próxima década, por ello el Dr. Barri ha resaltado la importancia de la prevención, "nuestra responsabilidad como profesionales de la salud ?ha dichoes detectar a niñas en riesgo y dar toda la información a los padres de las secuelas a largo plazo" para que no las sometan a esta práctica. Madrid, febrero 2015 La Fundación Red de Colegios Médicos Solidarios de la Organización Médica Colegial (FRCOMS) se suma a esta reivindicación, en la conmoración de este Día Internacional, resaltando la labor del colectivo médico de evitar esta práctica y su lucha por acabar con ella para mejorar las condiciones de vida de quienes están expuestas a sufrirla. El Dr. Pere N. Barri Soldevila es Coordinador de la Sección Quirúrgica del Instituto Universitario Dexeus en Barcelona e impulsa un programa de cirugía de reparación de la mutilación genital que ha permitido intervenir de manera gratuita a 52 mujeres víctimas de la ablación, la mayoría de las cuales africanas. Según ha informado en la entrevista el Dr. Barri, con motivo de la celebración hoy del Día Mundial contra la Mutilación Genital Femenina, esta cirugía ¿En qué momento entra en contacto con la realidad de la mutilación genital femenina? En 2005, coincidiendo con una estancia de formación quirúrgica en París, entro en contacto con un equipo que realiza las reconstrucciones. En el año 2007, puso en marcha, a través de la Fundación Dexeus - Salud de la Mujer, el programa de Reconstrucción genital post ablación ¿Qué le lleva a poner en marcha este programa? La realidad de que las mujeres mutiladas que residen en nuestro país se sienten peor que en África en cuanto son conscientes de ser diferentes. Sentimos la necesidad de ofrecer esta técnica y de forma gratuita. Cuéntenos, ¿en qué consiste esta intervención?, ¿qué porcentaje de éxito tiene? Se trata de localizar lo que quede del clítoris, anclarlo en su lugar natural y lo más externo posible. Es una técnica con más de 15 años de antigüedad. Se consigue una restauración anatómica en el 90% de los casos (pasa desapercibida a un profano) y una mejoría objetiva de la función sexual en más del 70%. Con nuestro programa no solo ofrecemos la Foto: UN Photo Kay Muldoon Día Internacional Tolerancia Cero Mutilación Genital Femenina reconstructiva del clítoris permite "restituir anatómicamente los órganos genitales afectados en un 90% de los casos y en un 75% de las pacientes, la restitución también es funcional". FotoUN Photo Eskinder Debebe reconstrucción, sino que evaluamos la situación psicológica y función sexual antes y después de la intervención. ¿Qué tipo de secuelas físicas y/o psicológicas son más frecuentes tras una ablación? La mayor parte de secuelas físicas graves se producen en el país de origen al poco tiempo de la mutilación. Ya no las solemos ver aquí. En nuestro entorno el mayor problema es en la esfera sexual y sobretodo psicológica. Ellas manifiestan rabia a incomprensión al descubrir que son diferentes a una mujer normal. ¿Cuál es el perfil de sus pacientes?, ¿pueden permitirse una operación de estas características? En general son mujeres de entre 20 y 30 años, muy adaptadas a la "cultura occidental". Dar el paso de revertir la mutilación les supone una gran dosis de autoestima que repercute muy positivamente en su capacidad de relación social y laboral. ¿Cuál es su opinión con respecto a la medida de Sanidad, de exigir a las familias extranjeras procedentes de países en los que se practica la ablación, principalmente de África subsahariana, que se comprometan por escrito a no someter a sus hijas a esta mutilación cuando viajen a sus lugares de origen? Me parece bien que en nuestro país adoptemos medidas para frenar estas prácticas. Nuestra responsabilidad como profesionales de la salud es detectar a niñas en riesgo y dar toda la información a los padres. Me cuesta creer que después de compartir con los padres los riesgos de la mutilación y las secuelas a largo plazo haya alguno que quiera seguir adelante con la mutilación. Si hacemos bien la prevención, difícilmente hará falta que caiga sobre ellos el peso de la ley. ¿Qué papel ejercen los médicos a la hora de denunciar esta práctica? Cada vez más profesionales ejercen esa responsabilidad de informar a las familias de riesgo. Pero seguro que podemos mejorar. Muchos de los médicos, enfermeras y asistentes sociales no son capaces de reconocer una mutilación. Desde nuestra fundación también trabajamos en formarles y transmitir esta inquietud. ¿Y los médicos cooperantes en estos países donde es habitual la ablación? Es difícil actuar en los países de origen cuando más del 90% de las mujeres están mutiladas. La reconstrucción es algo que se debe ofrecer a las mujeres que lo soliciten de forma voluntaria. En África, ser una mujer mutilada es lo normal, y no sienten la necesidad de reconstruirse ni la valentía de ir en contra de su cultura. No hemos realizado ninguna reconstrucción en los viajes que realizamos a África. ¿La fundación Dexeus tiene alguna guía de recomendaciones para detectar este tipo de casos? En Dexeus recibimos pacientes derivadas de ONG"s, asistentes sociales, Centros de Atención Primaria y mujeres que acuden por voluntad propia. No tenemos acceso a la población global de africanas que residen en nuestro país. Sí que trabajamos en labores de divulgación y formación relativas a la mutilación. Incluso nuestras sesiones de cirugía son siempre en abierto y es habitual la asistencia de algún cirujano observador. Entrevista: Fundación Red de Colegios Médicos Solidarios – Prensa Cgcom