Objetivo 7 - Naciones Unidas

Anuncio
CUMBRE DE LAS NACIONES UNIDAS
20-22 septiembre 2010, Nueva York
Reunión plenaria de alto nivel de la Asamblea General
OBJETIVO 7
HOJA DE DATOS
Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente
METAS
1. Incorporar los principios del desarrollo sostenible en las políticas y los programas nacionales y reducir la pérdida
de recursos del medio ambiente.
2. Haber reducido y haber ralentizado considerablemente la pérdida de diversidad biológica para el año 2010.
3. Reducir a la mitad, para 2015, la proporción de personas sin acceso sostenible al agua potable y a servicios básicos
de saneamiento.
4. Haber mejorado considerablemente, para el año 2020, la vida de al menos 100 millones de habitantes de barrios marginales.
Datos rápidos
* Aproximadamente 1.700 millones de personas han obtenido acceso al agua potable desde 1990. Sin embargo, todavía
hay en el mundo 884 millones de personas que no tienen acceso a un agua potable y segura, y 2.600 millones carecen de
acceso a servicios de saneamiento, como inodoros o letrinas.
• El mundo no ha cumplido la meta de conservación de la biodiversidad prevista para 2010. Si continúa la tendencia actual,
seguiremos perdiendo especies durante este siglo.
• Las mejoras en las barriadas marginales no se producen al ritmo necesario para dar respuesta al aumento de pobres en las
ciudades. El número absoluto de habitantes de las barriadas sigue subiendo —828 millones actualmente— a pesar de que la
proporción de población urbana que habita en ellas está en declive.
¿EN QUÉ PUNTO NOS ENCONTRAMOS?
El mundo cumplirá o incluso superará la meta de agua potable
antes de 2015 si continúa la tendencia actual. En esa fecha
se calcula que el 86 por ciento de la población de las regiones
en desarrollo habrá obtenido acceso a fuentes mejoradas de
agua potable, comparado con el 71 por ciento en 1990. Cuatro
regiones, norte de África, América Latina y el Caribe, Asia
oriental y Asia suroriental, ya han alcanzado la meta.
Si bien el progreso se ha dado principalmente en las zonas
rurales, éstas siguen estando en desventaja. A nivel mundial,
ocho de cada 10 personas sin acceso a una fuente mejorada
de agua potable habita en áreas rurales.
La mitad de la población en las regiones en desarrollo carece
de servicios básicos de saneamiento, por lo que la meta
de 2015 parece estar fuera del alcance. Al ritmo actual de
progreso, el mundo no logrará la meta de reducir a la mitad
la proporción de personas sin acceso a servicios básicos
de saneamiento, como inodoros o letrinas. Se calcula que
en 2008 había en el mundo 2.600 millones de personas sin
acceso a servicios de saneamiento mejorados. De continuar
la tendencia actual, esa cifra será de 2.700 millones en 2015.
Además, la disparidad entre regiones es muy grande, y el África
subsahariana y Asia meridional siguen quedando rezagadas.
Nuevos datos muestran que el 69 por ciento y el 64 por ciento,
respectivamente, de la población de estas regiones todavía no
tiene acceso a dichos servicios. Asimismo, la brecha entre las
áreas urbanas y las rurales sigue siendo enorme, especialmente
en Asia meridional, el África subsahariana y Oceanía.
El mundo no ha alcanzado la meta fijada para 2010 de reducir
el ritmo de pérdida de la biodiversidad. Actualmente, hay casi
17.000 especies de plantas y animales en peligro de desaparecer,
y el número de especies amenazadas por la extinción no deja de
crecer. A pesar del aumento de las inversiones, las principales
causas de pérdida de la biodiversidad, como los altos niveles
de consumo, la destrucción de los hábitats, la invasión por
otras especies, la contaminación y el cambio climático, siguen
sin atacarse de forma suficiente. La biodiversidad tiene una
importancia vital; miles de millones de personas dependen
directamente de diversas especies para sus modos de vida y,
frecuentemente, para su supervivencia.
Si bien el ritmo de deforestación se ha reducido, sigue siendo
muy alto en algunas de las regiones del mundo que más riqueza
biológica contienen. En algunas regiones, los programas de
plantación de árboles, combinados con la expansión natural de
los bosques, han añadido más de siete millones de hectáreas de
nuevo bosque al año. Como consecuencia de esto, la pérdida
neta de masa forestal en el periodo 2000-2010 disminuyó
hasta los 5,2 millones de hectáreas anuales, comparado con
los 8,3 millones del periodo 1990-2000. Sudamérica y África
siguen sufriendo las mayores pérdidas netas de bosques.
La meta de mejorar las vidas de, al menos, 100 millones de
personas que viven en las barriadas pobres ha sido lograda
por duplicado. En los últimos 10 años, más de 200 millones de
habitantes de las barriadas marginales han obtenido acceso a una
agua mejorada, a saneamiento y a viviendas duraderas y menos
atestadas, ampliando significativamente sus probabilidades de
escapar de la pobreza, las enfermedades y el analfabetismo.
Sin embargo, estos avances siguen siendo insuficientes para
satisfacer las necesidades del creciente número de pobres que
habitan en las ciudades. Aunque el porcentaje de la población
que vive en barrios marginales bajó del 39 al 33 por ciento en
la última década, la cifra absoluta de habitantes de las favelas
en el mundo en desarrollo sigue aumentando y lo seguirá
haciendo en el futuro más próximo. Se calcula que el número
de habitantes urbanos que viven en condiciones marginales
en los países en desarrollo es actualmente de 828 millones,
comparado con 657 millones en 1999 y 767 millones en 2000.
La meta establecida en 2000 era demasiado baja, estando basada
en estimaciones insuficientes del número de personas que vivían
en condiciones inadecuadas. Para que los gobiernos puedan
marcarse objetivos representativos y específicos para sus propios
países, adoptar compromisos serios y hacerse responsables del
avance continuado, será necesario redefinir la meta, por ejemplo
de la siguiente manera: “Reducir a la mitad la proporción de
habitantes de las barriadas marginales de aquí a 2020”.
¿QUÉ HA FUNCIONADO?
• La reducción de las sustancias que agotan la capa de ozono:
El Protocolo de Montreal de 1987 resultó en la eliminación
progresiva del 98 por ciento de las sustancias que dañan la
capa de ozono para el año 2008. Muchas de las sustancias
que dañan la capa de ozono, según el Protocolo, son también
potentes gases invernadero que contribuyen al cambio
climático. Para 2007, casi todos los gobiernos se habían
comprometido a ir eliminando los hidroclorofluorocarbonos
(HCFC), en estos momentos la sustancia más empleada de
las que agotan la capa de ozono.
• La instalación de sistemas de agua en Brasil, Burkina Faso
y Sri Lanka: Brasil cuenta desde 2002 con el programa Un
Millón de Cisternas Rurales, dirigido a llevar agua limpia a 36
millones de personas que habitan en el semiárido noreste
del país. En Burkina Faso se instalaron en 2006 una torre
de agua y un sistema de cañerías que benefició a 1.300
habitantes de las aldeas. La iniciativa hace que cada hogar
pueda disponer a un precio asequible de 20 litros de agua
limpia al día. Y en Sri Lanka, la introducción de cisternas
para la recolección de agua de lluvia ha permitido que las
familias puedan ahorrarse cada mes una media de US$31.
• La expansión de buenas prácticas de saneamiento en
Kirguistán: En este país se puso en marcha un proyecto
comunitario dirigido a promover las buenas prácticas
de saneamiento e higiene en el norte rural, donde casi la
tercera parte de los niños estaban infectados con uno o
más parásitos intestinales. La mejora en el suministro de
agua a las escuelas y en la educación higiénica contribuyó
a reducir en un 76 por ciento la incidencia de lambliasis en
las aldeas cubiertas por el proyecto.
¿QUÉ ESTÁ HACIENDO LA ONU?
• En Tanzania, una iniciativa liderada por el Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y el Fondo para
el Medio Ambiente Mundial (GEF), proporcionaron sistemas
de energía solar a 8.400 hogares en la región septentrional
de Mwanza, lo que para finales de 2009 había generado,
colectivamente, una reducción anual de 0,93 toneladas
métricas de emisiones de dióxido de carbono.
• El Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), ayuda a
los gobiernos y a sus aliados a poner en práctica sistemas
comunitarios de vigilancia de la calidad del agua a fin de
detectar la presencia de contaminantes, como excrementos
humanos, arsénico, flúor y nitratos. UNICEF también
promueve diversas instalaciones apropiadas, de bajo coste,
de saneamiento, agua y lavado de manos y ayuda a mejorar
el saneamiento y la higiene en las escuelas, fomentando por
ejemplo el lavarse las manos.
• En el mundo árabe, la Comisión Económica y Social de las
Naciones Unidas para Asia Occidental (ESCWA) recibió el
encargo del Consejo de Ministros del Agua de la Liga de
Estados Árabes de dirigir la creación de un instrumento
regional para el seguimiento, en los países árabes, de las
metas de suministro de agua y de saneamiento, así como
de otros indicadores relacionados.
• La Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa
(UNECE) ha asistido a la Federación Rusa en el desarrollo
de Planes de Acción Regionales de Biomasa para ayudar
al sector privado y a los gobiernos regionales a integrar el
sector de la biomasa con los sectores forestal, agrícola y de
manufactura maderera, así como con el de la electricidad, el
de la calefacción municipal, el de residuos y el de reciclaje.
• La Comisión Económica y Social para Asia y el Pacífico
(ESCAP) colabora con una ONG para ayudar a los países
en desarrollo a transformar la basura en dinero. Lanzado
en Bangladesh pero ampliado a toda la región, el objetivo
de este proyecto es capacitar a las ciudades de Asia y el
Pacífico para desarrollar e implementar estrategias de
gestión de residuos sólidos que sean descentralizadas, que
beneficien a los pobres, que emitan poco carbono y que se
autofinancien a través de la venta bonos de carbono.
• La Organización de las Naciones Unidas para la Educación,
la Ciencia y la Cultura (UNESCO) lidera el Decenio de las
Naciones Unidas de la Educación para un Desarrollo
Sostenible, cuyo objetivo es integrar los principios, valores
y prácticas de desarrollo sostenible en todos los aspectos
de la educación y el aprendizaje.
Fuentes: Informe sobre los objetivos de desarrollo del Milenio
2010, Naciones Unidas; Base de Datos de las Naciones Unidas
sobre los ODM (mdgs.un.org); Sitio web para el seguimiento de los
ODM (www.mdgmonitor.org), Programa de las Naciones Unidas
para el Desarrollo (PNUD); ¿Qué se necesita para alcanzar los
Objetivos de Desarrollo del Milenio? — Evaluación internacional
2010, PNUD; MDG Good Practices 2010, Grupo de las Naciones
Unidas para el Desarrollo; One Million Rural Cisterns (Un Millón
de Cisternas Rurales) — The SEED Initiative (www.seedinit.org);
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la
Ciencia y la Cultura (UNESCO); Fondo de la ONU para la Infancia
(UNICEF); Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo
(PNUD); Comisiones Regionales de la ONU, Oficina de Nueva York.
Para más información, por favor ponerse en contacto con mediainfo@un.org o visitar www.un.org/millenniumgoals.
Publicado por el Departamento de Información Pública de las Naciones Unidas – DPI/2517 G – Septiembre de 2010
Descargar