INFORME TÉCNICO-PROFESIONAL SOBRE LA NECESIDAD DE LA PRESENCIA DEL PSICÓLOGO/GA EN EL DESARROLLO DE LA LEY DE LA DEPENDENCIA. El Col.legi Oficial de Psicòlegs de la Comunitat Valenciana, una vez analizada la actual situación relacionada con el funcionamiento de los servicios de atención a las personas en situación de dependencia y el desarrollo del sistema de valoración y los programas de intervención en la Comunidad Valenciana, debe manifestar su preocupación por la ausencia del psicólogo/psicóloga en todo el proceso de implantación del sistema. Por tal motivo, el presente documento tiene como objetivo el poner de manifiesto la necesidad de la presencia del profesional de la psicología en el desarrollo del Sistema de Atención a la Personas Dependientes. Y a la vez de realizar propuestas para su presencia en el actual implementación del sistema en la Comunidad Valenciana. 1) ANTECEDENTES HISTÓRICOS DE LA APORTACIÓN DE LA PSICOLOGÍA Y DE LOS PROFESIONALES DE LA PSICOLOGÍA: La Psicología, desde sus diferentes especialidades, orientaciones y marcos conceptuales, busca permanentemente un nivel adecuado de conciliación entre la persona a la que se atiende y su entorno que le permita gestionar su vida con mayor autonomía, no sólo para manejarse desde el punto de vista funcional, mecánico o instrumental, sino para manejarse también desde lo percibido, desde el sentir, desde la capacidad relacional, tanto con otras personas como con su entorno en general. La intervención de profesionales de la Psicología en la atención a las personas con necesidades especiales, personas en situación de dependencia, ya fue un hecho en los servicios creados en la década de los setenta, década en la que se iniciaron las reformas que darían lugar a la Ley general de la seguridad social en 1974 y que conllevaría la creación de varios servicios de atención a minusválidos, a menores y a personas mayores, y que posteriormente configurarían los Servicios Sociales Especializados en las Leyes de Servicios Sociales de las Comunidades Autónomas. La Psicología y los profesionales que la desarrollan, han estado y van a seguir estando cerca de esos parámetros vitales que puedan conducir a una sociedad saludable desde todos los puntos de vista, orientando su intervención a que las personas adquieran un mayor dominio y control de sus vidas. El desarrollo de la Psicología aplicada va ligada a la evolución de los servicios sociales. Las aportaciones en la atención a las personas hoy consideradas en situación de dependencia han sido evidentes: Personas Mayores: En todos los niveles de las administraciones públicas, pero también en el mismo sector privado y el movimiento asociativo de familiares, se reconoce el protagonismo de la Psicología en la nueva visión del envejecimiento como una etapa evolutiva especialmente importante que debe afrontarse como un reto adaptativo y desde una perspectiva orienta a la calidad de vida. Es incuestionable la importancia del profesional de la Psicología en diferentes niveles: prevención, atención directa (a las propias personas mayores pero también a sus familias y a los equipos interdisciplinares), dirección de servicios y centros, programación y evaluación de los mismos, supervisión, dirección de departamentos, y otros. Personas con discapacidad: En la atención a las personas con discapacidad, la participación e implicación de la Psicología tiene mayor historia. Las tareas llevadas a cabo por los profesionales de la Psicología se han centrado en la valoración, evaluación y diagnóstico, tanto para el reconocimiento de la condición de minusválido, como para la prescripción de programas de rehabilitación y orientación personal, en el desarrollo de programas de intervención y atención directa a las personas con discapacidad y sus familias, sin olvidar la búsqueda de la integración en el entorno familiar. Personas con enfermedades mentales: Desde la década de los ochenta se vienen realizando reformas en los servicios de atención a la salud mental, reformas en las que el/la psicólogo/a es considerado como profesional imprescindible en el trabajo de asistencia psicoterapéutica. Personas menores. 0-3 años: Los profesionales de la Psicología vienen colaborando desde hace tiempo en los equipos de intervención temprana. Los/as psicólogos/as hemos dispuesto de una gran oportunidad, la oportunidad de aprender a trabajar en equipo, de establecer los límites de la intervención, de participar activamente en la creación de organizaciones prestadoras de servicios. El sistema de servicios sociales, en suma, ha sido, está siendo, para los psicólogos/as y también para otros profesionales de ayuda, un campo de desarrollo humano, profesional y relacional sumamente trascendental. 2) EL PSICÓLOGO EN EL SISTEMA DE ATENCIÓN A LA DEPENDENCIA Y DESARROLLO DE LA AUTONOMÍA PERSONAL. La mejor manera de reivindicar y posicionar el papel de la Psicología ante el Sistema de Atención a la Dependencia y Desarrollo de la Autonomía Personal es empezando a reconocer públicamente la complejidad que implica el mismo. Un sistema que entraña tal nivel de complejidad, con las consiguientes repercusiones, debe dotarse de una estructura profesional altamente cualificada. Se requieren profesionales de la Psicología, provistos de conocimientos, aptitudes y actitudes, así como de metodologías, técnicas e instrumentos científicos para hacerse cargo, junto con otros profesionales, de las exigencias y requerimientos que implica el sistema de la dependencia. Reconocer necesidades humanas, identificarlas, diagnosticarlas, adaptar los recursos a esas necesidades y fijar procesos de intervención es un ámbito propio de la disciplina psicológica. Supone un trabajo a largo plazo y sostenido en el tiempo. Trabajar en procesos psicosociales de largo recorrido que comprometen a trayectorias vitales y a ciclos completos de vida familiar. En Servicios Sociales resulta clásico que nos tengamos que hacer cargo, de por vida, de determinadas situaciones personales y familiares. A diferencia de otros sistemas, en Servicios Sociales hay puerta de entrada, pero no de salida. El Psicólogo ha demostrado suficiente experiencia y credenciales profesionales para manejarse en estas situaciones, de ahí su cualificación técnica para saber mantener la continuidad en la cadena de actuaciones que debe establecerse en contextos profesionalizados donde intervienen diversas disciplinas. el Psicólogo ofrece garantías para ser el profesional de referencia en esas trayectorias vitales de largo recorrido y concebidas desde la dimensión dinámica y evolutiva, pero también de permanente ajuste a los componentes sociales del entorno. 3) NECESIDAD DEL CARÁCTER INTEGRAL, INTERDISCIPLINAR Y TRANSVERSAL DE LA ATENCIÓN A LAS PERSONAS CON DEPENDENCIA. La Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia, regula las condiciones básicas de promoción de la autonomía personal y de atención a las personas en situación de dependencia mediante la creación de un Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia y la Autonomía Personal es (SAADAP), con la colaboración y participación de todas las Administraciones Públicas. Configura un derecho subjetivo que se fundamenta en los principios de universalidad, equidad y accesibilidad, desarrollando un modelo de atención integral al ciudadano. Tanto en sus principios, en su objeto, y en su definición de la dependencia, contempla la atención a las personas en situación de dependencia de forma integral e integrada, teniendo en cuenta la transversalidad de las políticas de atención a las personas en situación de dependencia. La definición de Dependencia reafirma la necesidad de la intervención de la interdisciplinar y la presencia del profesional de la psicología. Dependencia: el estado de carácter permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, y ligadas a la falta o a la pérdida de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, precisan de la atención de otra u otras personas o ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria o, en el caso de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental, de otros apoyos para su autonomía personal. Esta definición encaja perfectamente con un concepto acorde con una visión biopsicosocial de la misma, un concepto que tiene en cuenta los tres aspectos fundamentales de la vida de las personas: el biológico, el psicológico y el social, y que evita en lo posible dejar fuera del sistema de protección a un conjunto de personas en situación de dependencia. 4) COLABORACIÓN EN LOS PLANES FORMACIÓN El Col.legi Oficial de Psicòlegs de la Comunitat Valenciana podrá disponer de planes de formación dirigidos todos los agentes implicados en la promoción y atención a las personas en situación de dependencia. La propia Ley especifica que con el objetivo de garantizar la calidad del Sistema, se fomentará la colaboración entre las distintas Administraciones Públicas competentes en materia educativa, sanitaria, laboral y de asuntos sociales, así como de éstas con las universidades, sociedades científicas y organizaciones profesionales y sindicales, patronales y del tercer sector. 5) PRESENCIA DEL PSICÓLOGO EN TODOS LOS NIVELES PREVENCIÓN, VALORACIÓN I INTERVENCIÓN: Consideramos que los psicólogos/as deberían estar presentes: • • • • • • • • En las actuaciones para la prevención de las situaciones de dependencia. Se deberán diseñar estrategias preventivas dirigidas a la población general, y más en concreto a los diferentes colectivos de personas en situación de dependencia, así como a sus cuidadores profesionales y no profesionales. Valoración de la situación de dependencia. En los órganos de valoración de la dependencia para evaluar las principales dimensiones y procesos psicológicos involucrados en las situaciones de dependencia, especialmente en colectivos como las personas con enfermedad mental crónica, las personas con Alzheimer y otras demencias o las personas con discapacidad intelectual. En la elaboración del PIA, Programa Individual de Atención. en el que se determinarán las modalidades de intervención más adecuadas, y sus reajustes. En la configuración de los servicios incluidos en la cartera de servicios. En la formación y profesionalización de los equipos de intervención. En la formación y en el desarrollo de programas de cuidado a cuidadores. En el desarrollo de sistemas de acreditación, establecimiento de estándares y parámetros que verifiquen la calidad tanto de los servicios como de los procesos. En los programas de Investigación y Desarrollo vinculados a la Dependencia. • CONCLUSIONES: Con todo lo expuesto deja de tener sentido que tanto en el proceso de valoración del grado de la dependencia, la elaboración del informe del entorno como en la realización del Programa d’Atención Individualizada no se contemple la figura profesional del psicólogo/psicóloga. Actualmente la presencia del psicólogo es una realidad en todos los servicios de atención a la dependencia y en el sistema de servicios sociales, es impensable la ausencia del profesional de la Psicología en todo el proceso de valoración, elaboración del informe y del Programa Individual de Atención de la personas con situación de dependencia. La presencia del psicólogo es necesaria para garantizar la calidad de la implantación del sistema. Una visión reduccionista y/o con falta de rigor profesional no va acorde con las necesidades de la correcta valoración y atención a la personas dependientes. El Psicólogo, bajo ningún concepto, puede quedar desvinculado de un sistema que se sustenta en el reconocimiento de necesidades y derechos. Se debe hacer constancia que la ley de la dependencia no crea nuevos servicios sociales, sino que reconoce el derecho subjetivo a los mismos, introduciendo procedimientos y mecanismos con mayor fundamentación y garantía jurídica. Ahí, los Psicólogos de la Intervención Social tenemos una acreditada trayectoria y experiencia profesional de compromiso en la creación, extensión y desarrollo del sistema público de Servicios Sociales. Si eso ha sido así y está institucionalmente reconocido, en buena lógica se tendrá que contar con la Psicología para el desarrollo del nuevo sistema de la dependencia. Máxime si tenemos en cuenta que, hoy por hoy, la mayor producción de ideas, reflexiones y planteamientos sobre las orientaciones organizativas que debe adoptar el nuevo sistema provienen de los Servicios Sociales Generales y del ámbito local. El SADPA puede sustentarse en la red pública de servicios sociales generales y especializados. Eso sí, se deben adecuar las estructuras de personal de servicios sociales municipales a las exigencias de la nueva ley. Por la cercanía entre reconocimiento necesidades/derechos y la provisión de servicios que contempla el SADPAP, el ámbito local se resuelve como el escenario privilegiado para su máximo desarrollo, de ahí que el Psicólogo también desempeñe su particular papel para dotar a este sistema de los adecuados atributos para hacerlo valer como un verdadero y eficiente instrumento de desarrollo local y cohesión social. PROPUESTAS: - El informe psicosocial, ha de cambiar el nombre por el de informe o informe técnico. Los Servicios Municipales de atención a la dependencia pueden conformarse como un modelo como los SEAFIS, servicio d’especializado dentro de los equipos de base de los ayuntamientos, donde esté compuestos por un psicólogo, trabajador social o educador social. Estos equipos realizaran las valoraciones i informes pertinentes y las orientaciones para el PIA. El modelo actual es semejante al de los SEAFIS, mediante convocatorias de ayudas a los ayuntamientos. - La acreditación de los diferentes profesionales de los servicios sociales especializados en la aplicación de las medidas de atención a la persona dependiente. Garantizar en que en todos los niveles y en las diferentes entidades(públicas o privadas) requieran profesionales de la psicología no Tècnicos Superiores para la realización i coordinación de los PIA. Garantizar la formación especializada de todos los profesionales que trabajan en el SADPAP. El Col.legi Oficial de Psicòlegs de la Comunitat Valenciana como miembro del Consejo Autonómico de Bienestar Social ha de considerarse institución colaboradora y de asesoramiento con la administración en un tema tan importante para todos como es el desarrollo de la Ley de la Dependencia. Y más específicamente aspectos como la formación de los profesionales y cuidadores, investigación, evaluación de programas etc. Valencia, 28 mayo 2008