Geografía de España. 2º de Bachillerato. Elena García Marín 14. LA ACTIVIDAD PESQUERA EN ESPAÑA. Significado de la pesca en España. Regiones pesqueras en España y principales caladeros. La importancia creciente de la acuicultura. La actividad pesquera en España: Significado de la pesca en España España ha sido y es una de las grandes potencias pesqueras mundiales. Así lo indican el tamaño de flota (tonelaje y potencia), el volumen de capturas y el valor de la pesca desembarcada. Su aportación al PIB es hoy del 1%, lo que muestra un declive de la actividad si se compara con los datos de 1970. Esto se debe al agotamiento de los caladeros nacionales, la nueva situación internacional del mar (aguas jurisdiccionales en 200 millas), el ingreso de España en la Unión Europea (cuotas y paros biológicos para evitar la sobrepesca), la subida del precio del combustible por la crisis energética. Evolución de la actividad pesquera en España: La pesca española tiene sus antecedentes en época prehistórica. Alcanzó una dimensión comercial ya en la época antigua con la salazón de pescado (Roma), pero durante la Edad Media predominó un carácter de subsistencia. - Fue a partir del siglo XIX cuando la pesca adquirió una dimensión nueva por efecto de la Revolución Industrial y por la aplicación del vapor a la navegación, lo que favoreció el comercio, las industrias de transformación pesquera y facilitó el transporte por ferrocarril del pescado hacia el interior de la península. - La guerra civil y la postguerra paralizaron la actividad pesquera y será a partir de 1960 cuando se produzcan las transformaciones más espectaculares en la pesca con la incorporación de motores de combustible líquido, modernización de la flota pesquera con los primeros buques congeladores que permitieron realizar pesca de altura y de gran altura en aguas del Sahara, Angola, Mozambique, Atlántico noroccidental, aunque también subsistió la pesca de bajura. - Desde 1970 España alcanza el récord de capturas de pescado, pero pronto empezaron a plantearse los problemas de una flota de bajura anticuada, de unos caladeros sobreexplotados y de otros lejanos de difícil acceso por las nuevas leyes sobre el Derecho del Mar. En la década de los 70 la ONU lanzó el nuevo DERECHO DEL MAR que estableció las aguas jurisdiccionales a las comprendidas entre la línea de costa y 200 millas mar adentro, lo cual impide a la flota española pescar en aguas que hasta entonces había gozado de la condición de aguas internacionales y de libre aprovechamiento pesquero. - En 1986 España ingresa en la Unión Europea y debe someterse a la POLÍTICA PESQUERA COMÚN, “la Europa Azul” con cuatro objetivos: - Política de conservación de recursos: establecen cupos de pesca para conservar los recursos. - Política estructural: Se dan ayudas y subvenciones para mejorar las estructuras pesqueras, las industrias de transformación y los equipamientos portuarios. - Organización Común de Mercados: Se garantizan unas rentas equitativas, justas, a los pescadores y precios razonables a los consumidores. Geografía de España. 2º de Bachillerato. - Elena García Marín Política de acceso a los caladeros exteriores: se realiza mediante convenios pesqueros o acuerdos con terceros países para que los buques de los países comunitarios puedan pescar allí. Regiones pesqueras de España y principales caladeros España tiene un amplio perímetro costero cuyo litoral se reparte entre mares diferentes que dan lugar a diferentes posibilidades pesqueras: - El océano atlántico con aguas de salinidad moderada, aguas de temperaturas frescas, con corrientes marinas que facilitan la distribución del plancton y la oscilación del nivel de las aguas por efecto de las mareas favorecen la variedad de especies marinas, el marisqueo y la instalación de bateas para cultivos marinos. - El mar mediterráneo de aguas más calientes, con gran salinidad, contienen menos fitoplancton y no tiene mareas, por lo que a efectos de pesca es frágil y está sobreexplotado. De las 8 regiones pesqueras españolas (Noroeste, Cantábrica, Tramontana, Levantina, Surmediterránea, Sur-atlántica, Balear y Canaria) cabe destacar la primacía del Noroeste, seguida de Canarias y la Cantábrica. 1. Región pesquera del Noroeste (Galicia) conserva su primacía pesquera en España, pues aporta un tercio de las capturas y casi la mitad del empleo pesquero. Ha seguido una evolución paralela la del resto de España, con una reducción notable de la pesca desembarcada y numerosos conflictos. Participa, junto con la flota cantábrica, de la pesca en aguas adyacentes (sardina, merluza), en los caladeros comunitarios del Atlántico (atún, pez espada) y en aguas muy alejadas (fletán, bacalao, atún), pues dispone de una excelente flota. 2. El litoral mediterráneo presenta una flota anticuada, tradicional y una sobreexplotación de sus aguas preocupante. En Andalucía la pesca de bajura tiene arraigo social pero también se pesca en aguas de Marruecos, Portugal, en caladeros del Atlántico suroriental e incluso en los océanos Índico y Pacífico. La flota se aproxima a los 3000 barcos con un fuerte componente artesanal y un marcado carácter de actividad a tiempo parcial. En conjunto, ha experimentado una trayectoria descendente por la disminución de las capturas en un mar sobreexplotado y por la dificultad de acceso a aguas ajenas. La provincia con mayor importancia pesquera es Huelva, seguida de Algeciras (Cádiz). La pesca de especies como la bacaladilla o el salmonete ha sido muy considerable, pero se ha llegado a unos niveles mínimos por el agotamiento de los caladeros. La flota está obsoleta, la pesca es muy tradicional y el Mediterráneo, un mar preocupante por el estado de conservación de sus recursos. 3. La pesca canaria tuvo su edad de oro entre los años 1961 y 1980. Su significación pesquera radicó en la explotación del banco sahariano, muy favorecido por la corriente de Canarias. El cambio de coyuntura en el mar le privó de los caladeros tradicionales y convirtió sus puertos en base de operaciones de las flotas del Atlántico suroriental. Geografía de España. 2º de Bachillerato. Elena García Marín En cuanto a los caladeros españoles presentan los siguientes problemas: recursos hídricos en mal estado, recursos en fase de agotamiento por sobrepesca y un excesivo equipo pesquero de la flota litoral. Para solucionarlo se han establecido normas que regulan las artes de pesca utilizadas, los tipos de redes, las tallas mínimas de las especies y las normas de repoblación de las mismas. Los caladeros españoles tienen pocas posibilidades, es por esto que se hace necesario buscar otros. Así se consolida una gran flota de altura y gran altura cuyas operaciones se hacen en aguas libres, en los límites jurisdiccionales de los países ribereños. La ampliación de las zonas exclusivas de cada país hasta las 200 millas, que se hacen efectivas en los países de la U.E. desde el 1 de enero de 1997, lo que supone la reducción de la actividad pesquera española en una serie de áreas en las que pescaba tradicionalmente, sobre todo en las costas del Sur y Oeste de Irlanda y en el golfo de Vizcaya, desapareciendo las ¾ partes de la flota de arrastre que faenaban allí. Afectará especialmente a las flotas gallega y vasca. El nuevo régimen jurídico de aguas jurisdiccionales se convierte en definitivo con la aprobación en 1982 por Naciones Unidas del Derecho del Mar, lo que provocó el tener que negociar acuerdos y convenios con distintos países costeros para solucionar los problemas de la flota española. Los caladeros internacionales utilizados por los españoles son: Islandia: la especie que se pesca es el bacalao, El banco Atlántico nororiental (Noruega y Svalbard): bacalao, pota, calamar. El banco Atlántico noroccidental (Terranova, Groenlandia): bacalao, fletán negro. Gran Sol, Atlántico Norte (frente a las costas de Bretaña y sur de Irlanda): merluza, rape, jurel. Agua libres del Atlántico, aguas internacionales adyacentes a las costas de Portugal, Azores y España: bonito, pez espada, marrajo. Mauritania y Senegal: merluza negra, atún… En el Índico: Mozambique y Schielles: crustáceos, merluza,… Caladero argentino, Chile y Malvinas: merluza negra Los principales puertos pesqueros españoles son los puertos de Huelva y Algeciras en Andalucía, Bermeo y Pasajes en el País Vasco, A Coruña y Vigo en Galicia, Castellón y Santa Pola (C. Valenciana), Las Palmas en Canarias… En cuanto a la población activa dedicada a la pesca, ésta es escasa, el 0’7 %; está envejecida y sigue disminuyendo por la crisis del sector, la disminución de la flota y la mecanización del trabajo. La flota pesquera ha experimentado una enorme transformación y hoy se halla en la vanguardia de las tecnologías, en lo que se refiere a sistemas de navegación, adelantos náuticos, localización de bancos de pesca.... algunos buques son auténticas factorías, que pescan a grandes distancias, incluso en el Índico y Pacífico. No obstante, coexiste una flota tradicional de bajura en número excesivo que sufre la sobreexplotación de los caladeros nacionales. Las principales artes de pesca son la pesca de cerco, de arrastre, la almadraba… Geografía de España. 2º de Bachillerato. Elena García Marín La mayoría de las especies capturadas son peces (3/4 partes), el resto son moluscos y crustáceos. Destaca por su valor el pescado blanco (merluza y pescadilla) y por su tonelaje las sardinas, anchoas, atún y bonito. El volumen de pesca desembarcada ha decrecido en los últimos 25 años, pasando España de ser un país exportador para convertirse en importador de pescado, tanto para el consumo diario como para satisfacer la demanda de las industrias transformadoras y conserveras. La importancia creciente de la acuicultura en España La situación de crisis actual ha creado la necesidad de reconvertir el sector con medidas como: - la reducción del tamaño de la flota y del número de pescadores - la modernización de la flota para hacerla más competitiva - la ayuda a las regiones más afectadas, creando infraestructura para que resulten más atractivas para otras inversiones y costeando la formación de los desempleados - la recuperación de los caladeros nacionales sobreexplotados y contaminados por vertidos agrarios, urbanos, industriales y de petróleo - el fomento de la acuicultura como una de las soluciones más viables frente al déficit de productos pesqueros. España destaca en cambio por su labor de investigación en el sector (localización de bancos de pesca, nuevos conocimientos en biología marina y protección de especies...) y cabe destacar el desarrollo de la ACUICULTURA, tanto en agua dulce como salada. El estado actual de la acuicultura es muy esperanzador, estando más desarrollada la acuicultura de aguas marinas, que las de aguas dulces, aunque ésta última presenta mayor avance técnico. - La acuicultura en agua dulce incluye cría de peces (trucha, salmón) y producción de huevos y alevines. - La acuicultura marina es una alternativa para la producción de peces (lubina, dorada, rodaballo) y moluscos (mejillón, almejas y ostras). El rodaballo ha tenido gran auge en los últimos años aprovechando las adecuadas temperaturas de las costas gallegas, entre 12º y 19º C. El 70% de la producción de rodaballo se produce en piscifactorías (gran parte de ellas ubicadas en La Coruña). En cuanto a la producción de moluscos, el mejillón presenta un porcentaje muy importante de la producción total y está concentrada en Galicia. También alcanza cierta importancia en la costa mediterránea. Otras especies significativas la ostra plana, ostrión, almeja fina y almeja del Pacífico, concentradas en la región cantábrica y gallega. Cultivar la ostra supone dificultades por la falta de suministro de semillas procedentes de Francia, aunque su actividad es la más rentable Al igual que en el caso de la acuicultura de agua dulce, las empresas dedicadas a la acuicultura de aguas marinas también inciden indirectamente en empresas complementarias, dedicadas a la fabricación de piensos compuestos e, incluso, en las instalaciones dedicadas a la depuración. La producción acuícola tiene importante repercusión sobre las fábricas de conservas, de moluscos y de pescado, que se concentra básicamente en la región gallega. Parece claro que el desarrollo de la acuicultura aportará en el futuro una alternativa importante al dilema entre el crecimiento de la demanda de productos pesqueros y el agotamiento de los recursos, que habitualmente se extraían de los caladeros interiores y exteriores.