155-63379 Septiembre 29 de 2000 REF: Suspensión de la reunión

155-63379 Septiembre 29 de 2000
REF: Suspensión de la reunión de determinación de derechos de voto y celebración del acuerdo en dicha
reunión.
1.
En los términos del inciso 6° del artículo 23 de la Ley 550 de 1999, ¿ pueden repetirse "cuantas veces se
requiera" las suspensiones de la reunión?
La reunión de determinación de votos y acreencias, señalada en el artículo 23 de la ley 550 de 1999, tiene
como objeto principal, la determinación de los votos que corresponderán a cada acreedor en razón de la
cuantía del crédito, en consecuencia, a mayor cuantía, mayor será el número de votos que obtendrá un
acreedor.
Ahora bien, esta reunión, de ser necesario, puede ser suspendida por el promotor, por sí o por solicitud de
la mayoría de los acreedores que se hagan presentes, cuantas veces se requiera, sin que se extienda en
ningún caso, por más de cinco días hábiles consecutivos,1 es decir, cada reunión cuando sea suspendida,
debe ser programada para reanudarse máximo, dentro de los cinco días hábiles siguientes.
".. De ser necesario, el promotor, por sí o por solicitud de la mayoría de los acreedores que se hagan
presentes o sean representados en la reunión, podrá suspenderla cuantas veces se requiera, sin que se
extienda en ningún caso por más de cinco días hábiles consecutivos seguidos, sin incluir sábados.."
1
Por otra parte, el mismo artículo señala que la reunión de determinación de derechos de voto, debe
llevarse a cabo dentro de los 4 meses siguientes a la fecha en que haya quedado definida la designación
del promotor,2 esto es, la misma ley establece un plazo máximo para la celebración de la reunión de
determinación de derechos de voto.
"..Dentro de los cuatro (4) meses siguientes a la fecha en que haya quedado definida la designación del
promotor, de conformidad con lo dispuesto en los artículos 7° y 12° de esta ley, deberá realizarse una
reunión para comunicar a los interesados el número de votos admisibles y la determinación de la
existencia y cuantía de las acreencias..".
2
Teniendo en cuenta lo anterior, se tiene que, si bien es cierto que de acuerdo al inciso 6 del artículo 23 de
la Ley 550 de 1999, la reunión de determinación de derechos de voto puede ser suspendida cuantas veces
se requiera, no lo es menos, que el mismo artículo señala el tiempo máximo en que el promotor debe
llevar a cabo dicha reunión, el cual es de cuatro meses(4) siguientes a la fecha en que ha quedado
definida su designación, en consecuencia, y visto que la misma ley señala este plazo, la reunión de
determinación de derechos de voto, puede ser suspendida, siempre y cuando no se superen los cuatro
meses establecidos como limite máximo para llevar a cabo dicha reunión.
2.
Es viable, que las dos etapas de la negociación del acuerdo de reestructuración que prevé la ley 550 , se
cumplan en un mismo acto? No interferiría con este deseo la estipulación del artículo 26 de la Ley,
referente al plazo que tiene cualquier acreedor para objetar la definición de acreencias y de derechos de
voto?
De acuerdo a lo consignado en la Ley 550 de 1999, el trámite del acuerdo de reestructuración, puede dividirse, en
dos etapas a saber:
La primera de ellas, que va desde la fijación del aviso por medio del cual se da publicidad a la aceptación de una
sociedad a la promoción de un acuerdo de reestructuración, hasta la celebración de la reunión de determinación de
derechos de voto, que es el momento en el que se va a fijar el número de votos que corresponde a cada acreedor y
la segunda, que se extiende desde esta fecha, hasta la suscripción del acuerdo.
En esta primera etapa, tal como se mencionó, se celebra la reunión de determinación de votos, que tiene por objeto
"..determinar el número de votos que corresponde a cada uno de los acreedores para efectos de decidir la
aprobación del acuerdo de reestructuración, al igual que determinar las acreencias objeto del acuerdo..". 3
3
Exposición de motivos. Ley 550 de 1999.
Refiriéndose a este punto, la Ley 550 de 1999, a través del artículo 26, otorgó tanto al empresario, como a los
acreedores internos como externos, un término de cinco días hábiles siguientes a la celebración de dicha reunión,
para efectos de que se presentarán las objeciones que se tuviesen frente a la determinación de votos realizada por
el promotor y que no hubiese sido posible resolverlas en la mencionada reunión,4 por lo tanto, si un acreedor de los
ya anotados o un empresario, tiene objeciones contra la determinación de votos, deberá presentar ante esta
Superintendencia dicha objeción, dentro del plazo señalado.
4
Artículo 26. Objeciones a la determinación de derechos de voto y de acreencias.
Cuando cualquier acreedor interno o externo, o un administrador del empresario con facultades de representación,
tenga una objeción a las decisiones del promotor a que se refieren los artículos 22 y 25 de la presente ley que no
pueda ser resuelta en la reunión prevista en su artículo 23, dentro de los cinco días siguientes a la fecha de
terminación de dicha reunión el objetante tendrá derecho a solicitar por escrito a la Superintendencia de Sociedades
que resuelva su objeción. "
En lo que se refiere a la segunda etapa del trámite, es precisamente en ésta, donde va a propugnarse por la
celebración de un acuerdo, es decir, las funciones de mediador y conciliador que da la Ley al promotor, deben ser
ejercidas por este con mayor esfuerzo durante el desarrollo de esta etapa.
Teniendo en cuenta lo anterior, se tiene que concluir, que al otorgar la Ley un plazo para objetar la determinación
de votos realizada por el promotor dentro del trámite de un acuerdo de reestructuración, lo que quiso el legislador
fue defender el derecho tanto de los acreedores, como del mismo empresario, a que la determinación que se haga
del voto, corresponda a la acreencia real que tengan dentro del acuerdo, es así como, necesariamente debe
transcurrir el término otorgado por la Ley para presentar las objeciones, toda vez que, la celebración del acuerdo en
la reunión de determinación de votos, estaría interfiriendo con el derecho que tienen tanto los acreedores como el
mismo empresario de objetar la determinación de votos realizada por el promotor, caso distinto sería si en la
reunión, con todos lo acreedores presentes se manifiesta que no se presenta ninguna objeción a la determinación
de votos y acreencias, en cuyo caso, podría suscribirse el acuerdo, pero, si hay acreedores que no asisten a la
reunión, o se presenta alguna objeción contra la determinación de votos, mal se haría en suscribir dicho acuerdo de
reestructuración, máxime si se tiene en cuenta que esa objeción, podría resultar a favor del objetante, variar el
derecho de voto que tendría ese acreedor o el empresario según sea el caso.
Finalmente es importante aclarar que el objetivo o fin de la reunión de determinación de derechos de voto y
acreencias, es diferente al de la reunión o reuniones, para la consecución o logro del acuerdo, toda vez que, en la
primera, no existe votación y su propósito es únicamente conciliatorio, precisamente frente al derecho de voto
(derecho político en las futuras reuniones) y la cuantía y existencia de la acreencia, y en las segundas, el objetivo es
votar el acuerdo, determinar si existe o hay una decisión frente a una proposición.
Así mismo, podría suceder, por ejemplo, que un acreedor previamente a la reunión, éste de acuerdo con el saldo de
su deuda y el calculo de su derecho de voto, y no asista a la reunión, en donde simultáneamente, además de
determinar los derechos de voto, se vote el acuerdo, en este caso, se desfiguraría los objetivos, medios y fines que
persiguen cada una de las distintas reuniones establecidas en la ley.
Rad.461.931