ARTÍCULOS ORIGINALES Fracturas Supracondileas Humerales en la Edad Pediátrica. Dr. julio Rico Claros Servicio de Ortopedia y Traumatología, Hospital Escuela, Bloque Materno Infantil. SUMARIO SUMMARY Se hace una revisión de 132 casos de fracturas supracondileas humerales en niños del Hospital Materno Infantil, encontrando que el 96.2% se clasificaron en grados III y IV. 67.4% se manejaron con clavos percutáneos, 13% con tracción 11.3% con reducción cerrada y yeso, y 8.3% con reducción abierta y fijación interna. Como corolario a esta revisión se concluye que el manejo en este tipo de fracturas es de tipo conservador, reservando los métodos de reducción cruenta en casos muy necesarios. We review 132 cases of supracondylar fractures in children from Hospital Materno Infantil and finding 96.2% classified in grade III and IV. 67.4% was treated with percutaneous pinning, 13% with traction 11.3% dosed reduction and cast and 8.3% open reducción and internal fixation. As conclusión the management of that kind fractures is conservative method using open reduction when is necessary. PALABRA CLAVE: Fractura Supracondilea, tratamiento conservador. KEY WORD: Supracondylar Fracture, conservative method. INTRODUCCIÓN: La fractura supracondilea humeral, es el tipo más frecuente de lesión traumatológica de codo en los niños y adolescentes; de acuerdo a la mayoría de las series, acontece entre el 50% y 60%, siendo más frecuentemente en las edades de tres a diez años. Hay predominancia por el sexo masculino, y el lado izquierdo es comprometido dos veces más frecuentemente que el derecho. La alta incidencia de deformidades en el codo, y lascomplicaciones neurovasculares que resultan, convierten estas fracturas en daños serios (31). La línea de la fractura pasan transversalmente por la metáfisis, a distancia variable de la línea epifisiaria distal del húmero, y el rasgo de fractura dependiendo del mecanismo de producción adquiere diversas formas pudiendo en algunos casos equivocarla con el deslizamiento epifisiario distal del húmero. De acuerdo a la posición del antebrazo con respecto al traumatismo, y del desplazamiento del fragmento distal hay dos tipos de fractura, a saber: El tipo en extensión, que se produce por caída con la mano extendida e hiperextensión del codo, constituye el 95%; el tipo en flexión, se produce por caída con el codo en flexión, y representa el 5% de los casos (2) (25) (34). Los Métodos de tratamiento han variado, dependiendo de la experiencia de cada cirujano, así como experiencias en los diversos Servicios de traumatología. De los tratamientos más usados, cuatro son los que se destacan, a saber: Reducción Cerrada y colocación de Yeso, Tracción Olecraneana, Reducción abierta y estabilización con Clavos de Steinmann ó alambres Kirschner, y la reducción Cerrada y colocación de Clavos o alambres percutáneos (4) (9) (15) (24) (35). En nuestra experiencia, la tracción al Cénit y la fijación con clavos percutáneos han sido métodos de elección, siendo éste último el más usado debido a los resultados satisfactorios obtenidos durante su uso, y también por razones de ocupación Hospitalaria; por este motivo hicimos un estudio prospectivo de enero de 1985 a diciembre de 1986 en el Hospital Materno Infantil de Tegucigalpa. HONDURAS PEDIÁTRICA VoL 12 N° 1 MATERIAL Y MÉTODOS Cientro treinta y dos casos fueron manejados con el diagnóstico de Fractura Supracondilea Humeral en el Hospital Materno Infantil; todos los pacientes fueron evaluados al ingreso en la Emergencia encontrándoseles que todos presentaban dolor, edema y deformidad en el miembro lesionado, pero ninguno presentó shock, el examen radiológico consistió en una proyección ante-roposterior y otra lateral, figura No. 1 y se usó la Clasificación del servicio, que es una modificación de Vahve-nen (33), Figura No. 2. Una vez realizado el diagnóstico, y completado el ayuno, fueron llevados a Sala de operaciones bajo, anestesia general y en decúbito prono, se lavó toda la extremidad afectada y luego se colocaron campos estériles. Seguidamente se practicó la reducción cerrada, siguiendo los lineamientos para este tipo de fractura (2), y una vez obtenido el alineamiento clínico se fijó con alambres de Kirschner o clavos de Steinmann en forma percutánea, bien colocado en el lado medial y otro en el lateral, o ambos por el lado externo (13)-(14), luego se tomó control radiológico, y se valoró la reducción de la fractura en forma clínica y radiológica, usando el ángulo de Baumann (8) (19) (36). Si el resultado post-Reducción fue satisfactorio, se colocó canal de yeso, dejando el codo en 110 grados de extensión y el antebrazo en supinación o pronación, dependiendo del desplazamiento del fragmento distal. Los pacientes fueron dados de alta en 24 ó 48 horas sino ocurrieron problemas, se les controló en una semana, para cambiar la férula por yeso braquiopalmar. El yeso y los clavos se retiraron a las cuatro semanas, para que los pacientes iniciaran fisioterapia activa. Figura No. 1 Radiografías AP y latera! de fracturas Supracondileas Humeral Típica. Si el procedimiento de clavos percutáneos no dio el resultado que se buscaba, se escogió el uso de tracción al Cénit con clavo transolecraneano, con lo que se mantuvo al paciente por dos semanas bajo controles radiológicos, y luego se inmovilizó con yeso braquiopalmar el que llevó por dos semanas, para luego retirarlo, y que iniciaran fisioterapia activa. En relación a las fracturas expuestas se les hizo el desbridamiento adecuado, se ENERO - FEBRERO- MARZO 1989 fijaron con clavos percutáneos, y dejamos la herida abierta para cierre diferido sino había problemas además se usó antibióticos a base de penicilina y gentamicina por espacio de cinco días. Las suturas se retiraron en diez días, se colocó yeso braquipalmar y a las cuatro semanas se retiró el yesoy clavos para iniciar fisioterapia activa (1) (17). Los pacientes fueron seguidos en la Consulta Externa y se valoraron cada dos meses, midiendo el grado de flexión y extensión, hasta llegar a la normalidad así como el ángulo de acarreo. El promedio de seguimiento fue de ocho meses. No se hizo valoraciones radiológicas, debido a la escasez de material en el Hospital, y además pensamos que la valoración clínica es más importante que la radiológica. RESULTADOS: 45 pacientes 34%, correspondieron al sexo femenino, y 87 pacientes 66%, al sexo masculino, 93 pacientes, 70.5%, se lesionaron el codo izquierdo, y 39 pacientes 29.5%, el codo derecho. El promedio de edad en estos pacientes fue de 8 años, la procedencia fue de 42% para la zona urbana de Tegucigalpa, pero en forma global el 58% pertenecieron a los demás departamentos del país. 117 pacientes 88.6%, fueron fracturas de variedad en extensión; 8 pacientes 6.1%, variedad de flexión; y 7 pacientes 5.3 %, fueron fracturas expuestas. El mecanismo de producción más frecuente fue caída desde alturas 45.4%, luego los golpes directos 31.1%, caídas de caballo 12.1 %, caída de árboles 7.6%, y por último caídas a nivel del suelo 3.8%. 116fracturas87.9%, resultaron de grado IV; 11 fracturas 83%, de grado III, 4 fueron de grado II3%; y 1 resultó de grado I 0.8% - 89 de éstas fracturas se manejaron con clavos percutáneos 67.4%; 17 con tracción al Cénit 13%; 15 con yeso 11.3%, y 11 con reducción abierta y fijación con clavos de Steinmann o alambres de Kirschner 8.3%. Con relación a la evolución al ingreso y el tiempo de permanencia hospitalaria, en promedio casi todos llegaron al Hospital en 12 horas; de ellos el 60.6% permaneció hospitalizados más de 49 horas; el 25% entre 24 y 48 horas, y 14.4% entre 12 a 13 horas. En cuanto a la consolidación, encontramos que 87 pacientes 65.9% fue de 4 semanas; 39 pacientes 29.6%, entre 3 y 4 semanas, y solo 6 pacientes 4.5%, tuvieron entre 2 y 3 semanas. Valorados desde el punto de vista clínico, sólo a 8 casos 6%, se confirmó consolidación radiológica, y los 124 restantes 94%, carecieron de este tipo de estudio. Aun que las edades no fueron relevantes en cuanto al resultado de consolidación, la mayoría oscilaron entre 3 y 11 años, con una media de 7 años, desde luego la consolidación más rápida entre menor edad. Desde el punto de vista epidemiológico, se muestra que hay al inicio del año un porcentaje bajo de pacientes, lo mismo que al final 3% y 5.3% respectivamente; mientras de los meses de Marzo a Noviembre hay un aumento progresivo de la patología, siendo su mayor incidencia en Octubre y Noviembre. DISCUSIÓN Los métodos de tratamiento para las fracturas supracondileas humerales han variado desde la reducción cerrada y colocación de yeso, uso detracciones de diversa especie, reducción abierta y fijación con clavos percutáneos, o la reducción cerrada bajo anestesia general y estabilización con clavos percutáneos; sin embargo de esta serie de métodos de manejo, todavía algunas complicaciones están presentes, tales como cubito varo, Síndrome de compartimiento, lesiones vasculares, o bien algún tipo de infección asociado al manejo de este tipo de fracturas (11) (12) (23) (28). En nuestro país dos métodos han gozado de aceptación a saber: La reducción Cerrada y clavos percutáneos y la tracción esquelética ya sea al plano de la cama o al Cénit, y por último la reducción abierta y fijación interna. En el Hospital Materno Infantil, hems hecho una revisión de 132 casos, usando el método de clavos percutáneos, sin embargo este método ha sido el de elección desde el inicio del Servicio de Ortopedia Infantil hasta la actualidad (26) (32). Básicamente el manejo se refiere a las fractura de grado ni y IV, mediante el método de reducción Cerrada y clavos percutáneos, el cual nos ha brindado una manera de resolver este tipo de patología en poco tiempo, menos costo Hospitalario, y con buen suceso hasta el momento. Sin embargo el uso de tracción esquelética da muy buenos resultados, con el inconveniente de mayor permanencia hospitalaria, y el costo consiguiente de hospitalización; por esta razón la hacen un método que se use en algunas indicaciones específicas como cuando hay edema muy importante del miembro, algunos tipos de fracturas como las conminutas ó las variedades de flexión y cuando se sospecha alguna complicación como el síndrome de compartimiento (10) (22) (29) (30). Desde luego las complicaciones se encuentran en todos los Centros donde se manejan este tipo de fracturas, y quizás una de las más frecuentes es el cubito varo, aun en las mejores manos y con los mejores métodos de tratamiento (3) (6). Aunque los reportes déla experiencia con clavos percutáneos, han variado, reportando algunas HONDURAS PEDIÁTRICA Vol. 12 Nº1 complicaciones nulas, en general la incidencia es de 2% a 3% que coincide con las de nuestro estudio; por tanto consideramos que el uso de los clavos percutáñeos es un buen método de manejo, y que se puede seguir usando siempre y cuando esté indicado (16) (21). Controversia ha ocurrido con el uso de los clavos percutáneos usados en forma cruzada, dado que es posible la lesión del Nervio Ulnar, por tal motivo se han recomendado el uso de los clavos colocados por el lado externo (18), (20). Nosotros hemos utilizado los clavos en forma cruzada; sin embargo en los casos que hemos estado realizando en las últimas fechas, colocamos la vos en el lado externo, con igual suceso que en la forma cruzada, y pensamos que es buen método, para continuar su uso y evitar problemas ya mencionados. En cuanto a la evaluación final, hemos encontrado que por razones de material, el método de valoración clínica para consolidación es satisfactorio, y nos hace prescindir de los Rayos X en muchos de los casos, dados los escasos recursos hospitalarios de tipo radiológico con que contamos. Desde el punto de vista de función, hemos observado que en un período de 3-6 meses, los niños han recuperado la función completa del codo, siendo en este caso de un 92% de éxito; pero existe un 8% que queda con limitación funcional de 5-10 grados a la flexión y la extensión, que en parte se deba a la poca colaboración por parte de los familiares, y por otro lado al método que se use, que quiérase o no, siempre influencian los componentes articulares (5) (27). Por último un breve comentario sobre el uso de la Radiología, la cual ha tomado importancia en la valoración post-reducción con los métodos cerrados. De ellos el ángulo de Baumann (Relación del eje humeral) y el disco de crecimiento del Capitellum), y el uso de radiografías tangenciales de la región supracondilea, pretenden dar un método de cuantificación para evitar una de las complicaciones más frecuentes, a saber: El cubito Varo. Nosotros los hemos estado usando recientemente y hemos visto que aunque no son exactos como se desea, son de ayuda en el manejo de las fracturas supracondileas humerales en niños; y es por esta razón que estamos recordando el uso de estos Métodos de estudio en nuestro Centro y otros que se dediquen al manejo de este tipo de lesiones. BIBLIOGRAFÍA 1. Armo, V. L., et al.- "Percutaneous Fixation of supracondylarFracturesofthehumerusinchildren" J. BONE J. SURG. 1977. 59-A-914. 2.- Adams, John C. Outline of Fractures. 5ta ed. Livingston, London 1970. pp. 133-137. 3.- Buhl,01eHellbergSteen."DispIacedSupracondylar Fractures of he humerus in children". Acta Orthop. Scand. 1982.53-A(l) 67-71. 4.- Doge H.s. "Displaced Supracondylar Fractures of the humerus in children- treatment by Dunlop's traction". J. BONE J. SURG. 1972.54-A(7):1408. 5.- De la Fuente Villalón Miguel. "Fractura Supracondilea de húmero en niños". Revista de Ortopedia y Traumatología La tino-Americana. 1971. XVI (1): 1-16. 6.- D'Ambrosia Robert D. "Supracondylar Fractures of the humerus prevention of cubitus varas". J. BONE J. SURG. 1972.54-A(l):60-66. 7.- Daniels, Lucille, et. al. PRUEBAS FUNCIONALES MUSCULARES: Técnicas manuales de exploración. 2a. ed. Interamericana, México, 1957. 8.- D'Ambrosia, Robert, WilIiamZink. "Fractures of the in children" PEDIATRIC ANNALS. 11(6)541553,1982.11(6): 541-553. 9.- Edmonson, Alien, A. H. Crenshaw. "CAMPBELL'S OPERATTVE ORTHOPAEDICS. Volumen I.Mosby. St. Louis, 1980. pp 679-681. 10.- Elstron, John A., et al. "Irreducible Supracondylar Fracture of the humerus in children". J. BONE J. SURG. 1975. 57 A(5):670-681. 11.- El Sharkawi, A.H. Abdell Fatah. Treatment of displaced supracondylar fractures of the humerus in children in full extensionand supination" J. BONE J. SURG. 1965.47-B(2):273-278. 12. Eid, Abulfotooh. "Reduction of displaced supracondylar fractures of the humerus in children by manipularon in flexión". ACTA ORTHOP. SCAND. 1978.49:39-45. 13.- Fowles, J. V.., M.T. Kassab. "Displaced Supracondylar fractures of the Elbow in Children: A report on the fixation of extensión and flexión fractures by 2 lateral percutáneos pins. J. BONE SURG. 1974.56-B(3): 490. 14. Flynn, J.C., et. al. "Blind Pinning of displaced Supracondylar fractures of the humerus in children ENERO - FEBRERO- MARZO 1989 -Sixteen year experience with long term Follewup". J. BONE J. SUG. 1974. 56-A (1):263. 26.- Rivera Caraccioli, Gerardo A.. "Estudio sobre las fracturas Supracondileas del húmero en niños en el Hospital Materno Infantil de enero-1979 a diciembre 1983". Tegucigalpa, 1985. 15. Gruber, M.A., O.C. Hudson. "Supracondylar fractures of the humerus in Childhood- end result study of open reduction". J. BONE J. SURG. 1964 46-A (2): 1245. 27.- Rose Steven, et. al. "Epidemiologic Fractures of humeral fractures. Clin Orthop. 1982,168:24-30. 16. Gartland, John. "Managemente of supracondylar fractures of the humerus in children". SURG. OBSTET. AND GYN. 1959, August, 145-154. 28.- Soltampur, A. "Anterior Supracondylar fracture of the humeras (Flexión Type)". J. BONE J. SURG. 1978,60-B(3). 17.- Griffín, Paul. "Supracondylar Fractures". (AAOS, BOSTON MASSACHUSETTS, 1985. October 2426. 29.- Sullivan, andy. "Percutaneous pin Fixation of supracondylar Fractures of the Humerus in Children". (AAOS, Boston, Massachusetts, 1985, October 24.25. 18. Holmes, James, et. al. "Untreated Median nerve entrepment in Bone after fracture of distal end of the humerus: Postmorten findings after forty-seven years". J. BONE J. SURG. 1979. 61-A (2): 309-310. 19.- Iversen, Larry, Kay Clawson. MANUAL OF ACUTE THERAPEUTICS ORTHOPAEDICS- 3a. ed. Little Brown, Boston, 1982. pp. 147-152. 20.- Jones, Eric, Louis Dean. "Median nerve injuries associated whit Supracondylar fractures of the humerus in children". Clin Orthop. 1980,150:181186. 21.- Millis, Michael, et. al. "Supracondylar fracture of the humerus in children" Clin Orthop. 188:90-97, 1984,188:90-97. 22.- Millis, Michael. "Open reduction treatment of the Supracondylar fracture". (AAOS, Boston, Massachusetts, 1985, October 24-26. 23.- Palmer, Edwar, et al. "Supracondylar fracture of the humerus in childre" J. BONE J. SURG. 1978,60A(5): 653-656. 24.- Prieto, C. A. . "Supracondylar fractures of the humerus-A Comparative Study of Dunlop'straction versus percutaneous pinning". J. BONE J. SURG. 1979,61-A (1): 425. 25.-Rang, Mercer. Children's Fractures. 2a. ed. Lippincot, Philadelphia. 1983 pp. 154-169. 30.- Spinner, Morton, Saúl Scheider. "Anterior interosseus nerve Paralysis as a complication of supracondylar fractures of the humerus in children J. BONE J. SURG. 1969,51-A (8) 1584-1589. 31.- Techdjian,Mihran.. 'Tediatric Orthopedic". Volume II. Sauders, Philadelphia, 1972. pp. 15671594. 32.- Villanueva, Rodríguez, Ornar. "Incidencia de la Fractura Supracondilia humeral de codo en niños en el Hospital Leonardo Martínez". Tegucigalpa, 1986. 33.-Vahven,Veijo, AaltoKari. "Supracondylar Fractures of the humerus in children". Acata Orthop, Scand. 1978,49:225-233. 34.- Watson-Jones.Fracturasy heridas Articulares. Tomo II. 3a. ed. Salvat Barcelona, 1980. pp. 592-606. 35.- Weiland,A.J.,et. al.. "Surgical Treatmentof displaced Supracondylar Fractures of the humerus in children". J. BONE J. SURG. 1978,60A(5):657. 36.- Worlock Peter. "Supracondylar fractures of the humerus: Assessment of cubitus varus by the* Baumann angle". J. BONE J. SURG. 1986. 68B(5):755-757.