Consejos para una buena postura en nuestras horas de sueño Como ya sabéis, la higiene postural es básica para la salud de nuestra columna. Durante el día, de manera consciente, uno puede estar atento e ir mejorando sus posturas habituales, pero ¿qué pasa cuando dormimos? Generalmente, agotados de todo el día, simplemente nos dejamos caer en la cama y, si no hay problemas de insomnio, caemos rendidos sin pensar en nada más. Lo ideal es dormir entre siete u ocho horas diarias y, de ser así, estas horas representarían un una cuarta parte del total de horas de un día. Como es bastante, es muy importante no dejar de tener en cuenta nuestra postura. ¿Cuál es la mejor postura? Lo más importante durante la noche, igual que durante el día, es mantener al máximo la postura natural de nuestra columna. Para dormir boca abajo es necesario girar la cabeza hacia uno de los lados, forzando a las cervicales a girarse y provocando una mala colocación de los hombros. Es imprescindible pues, evitar dormir boca abajo. Evidentemente, las contorsiones y las posturas más artísticas, no son para nada saludables para dormir, tampoco. www.puravidaquiropractica.com Lo ideal es dormir de lado, en posición fetal, con la cabeza elevada, con la ayuda de una almohada, de manera que toda la columna siga paralela al colchón. Acomodarse con un cojín entre las piernas, puede haceros sentir más cómodos, pero no es imprescindible. Si no, otra posibilidad es dormir boca arriba, con el cráneo levemente elevado y una almohada detrás de las rodillas para elevar y flexionar un poco las piernas. ¿Cuál es la mejor almohada? Las almohadas pueden sernos de gran ayuda para mantener la curva natural de nuestra columna. De este modo, si preferimos dormir boca arriba, una almohada bien fina nos dará comodidad y no incidirá negativamente en nuestra postura. Si preferimos dormir de lado, la almohada deberá ser suficiente gruesa como para elevar la cabeza de manera que quede perpendicular al colchón y sin inclinarse hacia uno de los dos hombros. Y, si somos de los que damos más vueltas que un ventilador en la cama, necesitaremos una almohada bien flexible, que nos permita adaptarla rápidamente en cada una de nuestras posturas (laterales y boca arriba). En este último caso, las almohadas de plumas podrían ser una solución, aunque en verano nos pueden dar mucho calor. En general, los materiales más recomendables son el gel, el látex, la fibra o la viscoelástica, ya que se adaptan al peso y la forma de nuestra cabeza. Escoger una buena medida afín a nuestras proporciones será ideal. Hay que tener en cuenta por eso, que para cada postura, la medida de la almohada cambia, así que si somos de los que alternamos las distintas www.puravidaquiropractica.com posiciones, estos materiales, según el modelo de la almohada, pueden ser demasiado rígidos e irnos bien para dormir de lado pero no para hacerlo boca arriba. De ser así, y si no puedes soportar las plumas en verano, una almohada de grosor intermedio será lo menos dañino, teniendo en cuenta que no será lo ideal. ¿Cuál es el mejor colchón? Hay varios aspectos que hay que tener en cuenta en el momento de elegir colchón. El más importante es la firmeza. Un colchón debe ser lo suficiente firme y recto para que no nos hundamos en él por ninguna parte y la forma natural de nuestra columna sea respetada. Este nivel de firmeza es el mínimo imprescindible, a partir de ahí, ya entran los gustos de cada uno. Hay que decir por eso, que cuanto más se ajusta un colchón al cuerpo, y a nuestra posición correcta de sueño, menos nos moveremos durante la noche y más tiempo nos mantendremos en la fase de sueño profundo, mejorando así nuestra calidad de descanso. Así, si se duerme boca arriba, el colchón deberá ser más rígido que si se duerme en posición fetal. En el momento de elegir un colchón, dad mucha importancia a las pruebas que podáis hacer en la tienda. Es importante que, tumbados boca arriba, la distancia que separe vuestras lumbares y el colchón sea discreta. Si es muy pronunciada (excepto en casos de escoliosis), el colchón será demasiado rígido para vosotros y, si las lumbares quedan completamente pegadas, el colchón será demasiado blando. www.puravidaquiropractica.com Por lo que respecta el material, nosotros aconsejamos aquellos materiales de más calidad que se mantienen en buen estado durante más tiempo. Los colchones de muelles, suelen desgastarse bastante rápido con el uso, perdiendo su rigidez y, por lo tanto, sus beneficios. Pasa lo mismo, con los colchones de espuma. De este modo, y como en el caso de las almohadas, un colchón de viscoelástica, que se adaptará a vuestro cuerpo o uno de látex (a mayor cantidad de látex vegetal, mejor), el cual absorbe con facilidad los movimientos del cuerpo. Se trata de colchones pesados y difíciles de manejar, pero vale la pena tener dificultades en los días de limpieza, para pasar unas plácidas noches de sueño. Para parejas también suele ser una buena opción, sobretodo si cada uno duerme de una manera distinta. El futón japonés puede ser otra buena opción, pero hay que tener en cuenta que debe cambiarse cuando pierde la rigidez y eso suele pasar mucho más pronto de lo que posiblemente podíamos imaginar. Y para casos especiales... www.puravidaquiropractica.com Extraído del The Wall Street Journal1 os dejamos aquí estos consejos para personas con dolencias específicas. 1 20/01/2013. Versión online: http://online.wsj.com/article/SB10001424127887324624404578253892772134894.html www.puravidaquiropractica.com