EL CAPITALISMO MONOPOLISTA O IMPERIALISTA EL CAPITALISMO: Este régimen surge gracias al proceso de acumulación originaria del capital. Para que surja el capitalismo fueron necesarias doscondiciones: La existencia de seres personalmente libres pero carenes de medios de producción y medios de existencia lo que les obliga a vender su fuerza de trabajo a cambio de un salario. Laconcentración de grandes sumas de dinero y de medios de producción en manos de la naciente burguesía. En la evolución del capitalismo ha atravesado por dos fases o etapas en su desarrollo; Lapre-monopolista o de libre competencia Monopolista o imperialista. La fase monopolista o imperialista, se extiende desde el último tercio del siglo XIX hasta nuestros días, y se caracteriza por lasustitución de la libre competencia, por la dominación de los monopolios. Lenin en su obra “El Imperialismo Fase Superior del Capitalismo”, señaló cinco características de la fase monopolista oimperialista del capitalismo. • La concentración de la producción y del capital, dan origen a los monopolios. • La fusión del capital industrial con el capital bancario (capital financiero) dan origen ala oligarquía financiera. • Predomina la exportación de capitales, a diferencia de la exportación de mercancías. • Se forman asociaciones monopolistas internacionales que se reparten el mundo. • Seproduce el reparto territorial del mundo entre los países imperialista. Los principales países imperialistas en la actualidad son: Estados Unidos, Canadá, Japón, Alemania, Francia, Inglaterra,Italia y Rusia. En ambas fases del capitalismo, las relaciones de producción se caracterizan por la existencia de la propiedad privada de los capitalistas sobre los medios de producción (empresas,fábricas, maquinarias, materias primas, tierras, edificios, medios de comunicación), y por la ausencia de propiedad sobre el trabajador. La nueva época del la “libre competencia”, del “mercado libre” dejó paso a un sistema económico mundial globalizado que está controlado por unas 200 grandes multinacionales. El monopolio surge inevitablemente del libre mercado. Aquellas empresas que son capaces de producir más barato desalojan de la competencia a aquellas otras que emplean métodos de trabajo más anticuados y, por lo tanto, producen mercancías más caras. Los grandes se comen a los pequeños. La concentración del capital es la consecuencia inevitable del modo de producción capitalista. Cada innovación tecnológica en la producción obliga a nuevos desembolsos y créditos con los bancos, lo que solo se pueden permitir las empresas más fuertes. Una vez que estas grandes empresas conquistan el mercado de su país se vuelven hacia el mercado mundial conquistando nuevas esferas de influencia. Estas multinacionales van desalojando de la competencia a otras grandes empresas en otras partes del mundo, lo que provoca la aparición del monopolio en cada rama de la producción. Así pues, son cuatro o cinco grandes multinacionales y monopolios quienes controlan férreamente cada sector importante de la producción a escala internacional: acero, automóvil, petróleo, química, telefonía móvil, ordenadores, bebidas, café, minería, etc. Son empresas gigantescas con 100.000, 200.000 y hasta 600.000 trabajadores repartidos por todo el mundo. Esos enormes monopolios y multinacionales despliegan una lucha a muerte entre ellas en la arena mundial para controlar las fuentes de materias primas y los mercados. Les va en ello su supervivencia. Con el desarrollo de las multinacionales no desaparece la importancia de los Estados nacionales, al contrario. Éstos se fortalecen. Cuando estas multinacionales no pueden acceder a determinados mercados o controlar determinadas materias primas en algunos rincones del mundo, recurren a la guerra o a la amenaza de la misma, para hacer vales sus intereses. Pero las guerras solo la pueden hacer los ejércitos, y éstos están basados en los estados nacionales, que llevan adheridos una burocracia estatal compuesta por altos funcionarios, jueces y administradores para su funcionamiento cotidiano. Los grandes capitalistas de cada país someten al aparato del Estado y a los Gobiernos a sus intereses más directos. Los Gobiernos burgueses no son más que el Consejo de Administración de los intereses comunes de los capitalistas de cada país. El militarismo, el fortalecimiento de los cuerpos represivos es la consecuencia necesaria de este estado de cosas. El aparato del Estado y las grandes empresas y capitales constituyen un cuerpo único. Please download full document at www.DOCFOC.com Thanks