Oficio 220-059293 del 14 de diciembre de 2007 Asunto: Impugnación de decisiones del Máximo Órgano Social. Control de Legalidad de las Cámaras de Comercio y Otros Temas Me refiero a su escrito radicado en esta Entidad con el número 2007-01-191626, mediante el cual presenta la siguiente consulta: “ 1: Cuando la decisión de una junta directiva de una sociedad anónima esta viciada de nulidad por falta bien sea de quórum o de citación previa como lo rezan los estatutos y la ley, este necesariamente tiene que ser impugnada mediante proceso de impugnación de acta o se puede solicitar a la cámara de comercio que no la registre? 2: La cámara de comercio al momento de recibir un acata (sic) para registrar, esta acaso no se debe sujetar a los estatutos que allí reposan y deben emitir un concepto previo al registro? 3: Que tan legal es que el revisor fiscal y el contador de la cámara comercio de una localidad, sean en a su vez contador y revisor fiscal en una empresa que pertenece a esta circunscripción de la cámara de comercio?. 4 Cuales son las sanciones que se imponen a un revisor cuando omite su responsabilidad a parte de las consagradas en el código de comercio?. 5. Es permitido a una empresa que tenga una persona como miembro de junta directiva, subgerente y jefe de rodamiento a su vez teniendo en cuenta que seria juez y parte de esta solo porque una parte mayoritaria deciden hacerlo con intereses particulares?” . Con el fin de resolver su consulta, sus interrogantes serán atendidos en el orden en el que fueron planteados. Respuesta a su Primera y Segunda Pregunta En relación con las decisiones de la junta directiva esta Superintendencia ha expresado: “ Además, es la misma la ley la que dispone que la junta directiva debe integrarse y funcionar con no menos de tres (3) miembros principales, cada uno de ellos con su respectivo suplente numérico, si otra cosa no se estipula en el contrato social, y deliberar y decidir con la presencia y votos de la mayoría de sus miembros; luego de no contarse con el quórum y mayorías mínimas previstas en la ley, las decisiones carecen de validez, tal como lo prevé el artículo 437 de la obra citada” 1 En consecuencia es necesario iniciar las acciones de impugnación correspondientes, en razón a que la Cámara de Comercio no le fue atribuida por la Ley el control de legalidad sobre el contenido de las actas, tal como lo expresa la Superintendencia de Industria y Comercio en el Concepto 01028815 del 27 de abril de 2001 “ .Cámaras de comercio – facultad para abstenerse de registrar Tal y como lo señala la resolución 1072 de 1996 expedida por la Superintendencia de Industria y Comercio, “ las cámaras de comercio sólo podrán abstenerse de efectuar registros de los actos, libros y documentos respecto de los cuales se exige esta formalidad, cuando las mismas estén facultadas por la ley para ello. Por lo tanto, si el documento presenta inconsistencias de orden legal que, por ley, no impidan la inscripción, ésta se efectuará.” De acuerdo con lo anterior, se concluye que las cámaras de comercio no están facultadas para verificar si una persona que presenta la solicitud para que se le matricule como comerciante, en efecto ostenta dicha calidad, por lo que deben proceder a matricular a la persona si la solicitud cumple con los requisitos legalmente establecidos” . Respuesta a la Tercera Pregunta Indaga el consultante sobre la legalidad de la actuación de l contador y revisor fiscal de la Cámara de Comercio, quienes a la vez son contador y revisor fiscal de una empresa que tiene su domicilio en la misma jurisdicción de la Cámara. Al respecto es indicar que la normatividad relacionada con la profesión del contador público, esto es la Ley 43 de 1990, establece una serie de inhabilidades e incompatibilidades para los contadores públicos, cuya interpretación y aplicación es de carácter restrictivo y no admite analogía, de las cuales para el caso en estudio es relevante invocar las siguientes: “ ARTICULO 48 El Contador Público no podrá prestar servicios profesionales como asesor, empleado o contratista a personas naturales o jurídicas a quienes haya auditado o controlado en su carácter de funcionario público o revisor fiscal. Esta prohibición se extiende por el término de un año contado a partir de la fecha de su retiro del cargo.” ARTICULO 49. El Contador público que ejerza cualquiera de las funciones descritas en el artículo anterior, rehusará recomendar a las personas con las cuales hubiere intervenido, y no influirá para procurar que el caso sea resuelto favorable o desfavorablemente.