Pastora Lucila Rotenberg Prédicas Apostólicas El arrepentimiento dispone para lo que Dios quiere hacer. LBLA Luc 5:15 Y su fama se difundía cada vez más, y grandes multitudes se congregaban para oírle y ser sanadas de sus enfermedades. Dios quiere hablarnos de sus bendiciones, de lo que tiene para su iglesia. El tiempo que siembro en la casa de Dios, será recompensado en bendiciones, porque Dios es sobreabundante. Estamos viendo que es el tiempo de una cosecha grande, abundante, de una cosecha que nosotros con el Siervo hemos sembrado con lágrimas, aflicción y pruebas. Sabemos que cuando nuestros ojos lo vean recién en ese momento nuestro corazón va a entender y va a decir: realmente soy un pecador por que no entendía nada. Cambiemos nuestros ojos espirituales para ver la visión de Dios que es más alta que nuestros pensamientos, que nuestro razonamiento. No hemos entendido dónde estamos parados. Debemos tener un corazón que tira a la basura el orgullo y dice me levanto, me despierto, me aliño bajo autoridad, bajo la unción que desciende de la cabeza que es Cristo. Ya están su palabra, su roció, su unción, nosotros ya lo recibimos, ya lo tenemos en nuestro corazón. A los pequeños se les ha concedido el reino, Juan el bautista fue el mayor profeta, pero los pequeños serán los mayores en el reino, los ungidos, aquellos que desea hacen la palabra, obedecer. Dios quiere fe; cuando la visión está tenemos que decir “si, amen” los que se Ministerios Roca de Paz mueven en el Espíritu saben a dónde van y están atentos a lo que baja de lo alto, el Espíritu Santo es quien nos quiere guiar. El que tiene a Cristo dentro suyo va a impactar de tal manera que la gente va a venir a los pies de Cristo. Viene un Espíritu de arrepentimiento que tiene que ver con decir: ¿Dónde estoy parado? ¿Qué estoy haciendo? ¿Conozco verdaderamente a Cristo? ¿Sé lo que es capaz de dar? ¿Sé lo que me pide? ¿Sé a lo que me está llamando? Necesitamos sumergirnos en el arrepentimiento. Cuando el Cristo de la gloria fue partido fue ahí cuando su cuerpo, su iglesia se une a Él. Hay poder en el partimiento del pan que tiene que ver con que une su cuerpo. Cuando ese cuerpo está unido Él es parte de nosotros y la unción de ese cuerpo desciende a todo el mundo. Estar en el cuerpo no es estar en mi concepto ni en mis prejuicios. Por eso necesitamos unirnos, adherirnos al cuerpo. Dios da, no quita. Dios ama. Es deseo de Dios es bendecirnos. Necesitamos arrepentirnos desde la cabeza hasta abajo, porque Dios está llamando a una generación, a una iglesia, que bajo la unción se mueva con poder para ver los milagros y las proezas. Cristo prevalece, no, mi voluntad, no, lo que yo pienso. Como siervos tenemos una alineación donde vemos sin ver las multitudes, donde tenemos que darnos aliento para prepararnos. Viene algo que no nos va a dar tiempo porque van a empezar a venir autoridades de todas las alturas. Van a tener tanta hambre que van a decir “¿Qué hay que hacer?” Dios está dispuesto a detenernos hasta que estemos listos para pasar a otro nivel. El diablo está desesperado porque sabe lo que viene. Él está atacando con todo. Lo que viene tenemos que postrarnos frente al Cordero y decirle que nos prepare y que haga simplemente lo que tenga que Ministerios Roca de Paz hacer, que nos cambie todo lo que nos hace mal. Muchas veces somos nosotros los que nos resistimos. Necesitamos conocer a Dios, para tener vida, y que esa vida fluya. LBLA JUAN 1:4-5 En El estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. Y la luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no prevalecieron. Cristo es la luz de los hombres. Somos luz cuando la Sangre de Cristo impregna nuestras venas y su carácter manso y humilde de cordero. En su iglesia hay maltrato físico, verbal. Por eso es tiempo de arrepentirnos, muchas veces nuestra boca no es de bendición. Dios va a cambiar la manera de hablar de la Iglesia, para dar multiplicación, revelación. Hay que decirle a Dios que nos purifique para ser parte del cuerpo. Hay disciplina para la iglesia de Jesucristo La corrección del cordero ha descendido y lo que nos queda por hacer es arrepentirnos y decirle que no somos dignos. Tenemos que ser conforme al corazón de Dios, para dar fruto de justicia, y no de maltrato, de engaño, de violencia. Estamos siendo pesados porque nuestro Siervo va adelante y está ministrando a la iglesia en todas partes y nosotros tenemos que prepáranos para ser parte. Los planes de Dios están en la cabeza, y el cuerpo obedece. Cuando la cabeza y el cuerpo están en el mismo espíritu nada los detiene. Necesitamos limpiarnos de nuestros pecados porque estamos en tiempo donde todo monte caerá, lo torcido se enderezará para gozarnos, porque el que obedece sus mandatos es llenado de la unción, es uno con Cristo, con la vid. En la Sangre de Cristo está la Sangre del Padre. Necesitamos la sangre para cambiar, hemos dejado a un lado el medicamento que Dios nos ha puesto. Para el hijo de Dios no hay arma que prospere contra él, porque la sangre del cordero ha descendido y está intacta en el altar. Ministerios Roca de Paz Necesitamos la Sangre para ser verdaderamente luz, ser pequeños ungidos de Cristo. La sangre está para limpiarnos, sanarnos. LUCAS 5:1 Aconteció que estando Jesús junto al lago de Genesaret, el gentío se agolpaba sobre él para oír la palabra de Dios. El Señor vino para hacer la voluntad del Padre. Un testigo tiene que estar muerto a sus pasiones, VIVO para servir a Cristo, con un corazón que no escatima. Cuando sembramos en la casa de Dios, estamos edificando en los cielos. Estamos en una tierra fértil, donde Dios multiplica. Sucede que muchas veces no vemos simplemente porque estamos viendo con nuestros ojos carnales. Hoy hay una iglesia que se ha levantado, la sangre de Cristo habla, esa sangre esta clamando al padre. ¿Que evangelio estamos viviendo? El que se somete a las delegaciones de Dios recibe bendiciones en abundancia, no tenemos que depender de un hombre, sino de Cristo. Pero tenemos que someternos a los siervos y autoridades delegadas por Dios como dice la Palabra para alcanzar las bendiciones que Dios quiere darnos como consecuencia de esa obediencia. GENESARET: significa Jardín de las Riquezas Donde hay autoridad de Dios respaldada y enviada por Dios es tierra fértil. No miremos conforme a lo que vemos en este mundo, hay que mirar la tierra fértil que Dios nos ha dado y eso puede verse por Fe. LBLA Mat 14:33-35 Entonces los que estaban en la barca le adoraron, diciendo: En verdad eres Hijo de Dios. Terminada la travesía, bajaron a tierra en Genesaret. Y cuando los hombres de aquel lugar reconocieron Ministerios Roca de Paz a Jesús, enviaron a decirlo por toda aquella comarca de alrededor y le trajeron todos los que tenían algún mal. En la medida que rindamos nuestra vida y nos arrepintamos para que lo de Dios tome lugar en nuestras vidas, vamos a manifestar a Cristo, y los que se acerquen lo verán en su Iglesia y traerán vidas a los pies del Señor para salvación, para sanidad, para libertad. Ministerios Roca de Paz