¡El costo! 1 Timoteo 6:14 que guardes el mandamiento sin mácula

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¡El costo!
1 Timoteo 6:14
que guardes el mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de nuestro
Señor Jesucristo,
Aquí Pablo nos dice de guardar los mandamiento sin mancha ni reprensión (o reproche). Si
usted está siguiendo a Cristo, debe haber una evidencia que eres genuino y diferente a los
demás, así que para ser un discípulo hay un costo que pagar ¿Cual costo?
Bueno, particularmente es en 4 maneras el costo:
1. El costo de la familia y amigos..
2. El costo de vivir en convicción..
3. El costo de la cruz..
4. El costo de una aventura de fe..
El costo de la familia y amigos...
Habrá miembros de la familia, entre padres, tíos, primos y amigos que se convertirán en tus
primeros enemigos por el solo hecho de seguir a Jesucristo. La razón es porque es una
especie de rompimiento con las estructuras actuales que no permiten el cambios vivimos bajo
un sistema ya regularizado.
El costo de vivir en convicción...
Todos en un momento o otro debemos hacer una decisión sobre quien es Jesus en tu vida. Es
un decisión que no es fácil porque en medio de un estilo de vida, donde todos siguen la moda o
la corriente del momento, implica tomar distancia y atreverse a vivir una vida santa. Dejar de
lado muchas cosas que me gustan implica el llamamiento a caminar junto con Jesús. De
alguna manera, nuestra paz es violentada por una paz que va en busca de un nuevo orden, de
algo mejor, donde impere la justicia y el Amor de Dios.
El costo de la cruz...
Todos los seguidores de Jesús sabían lo que significaba morir en la cruz, ellos sabían que ya
no era vuela atrás, es decir que la persona no iba a regresar. Esa misma cruz es la que Cristo
ofrece a sus seguidores hoy en día, ahí, en la cruz, debemos sacrificar nuestras ambiciones
personales, la comodidad, el lujo, el triunfo personal, los proyectos personales, los sueños.
Jesucristo nos ofrece un camino diferente para vivir una vida plena, pero ésta tiene un precio: la
cruz.
El costo de una aventura de fe.
Jesus dijo: el que quiera hallar su vida la perderá; y el que pierda su vida la hallará. Así que sus
seguidores abrazaron sus enseñanzas se encarnaron en ellos y dejaron todo para empezar a
vivir una aventura de fe. Todos tenemos una misión para llevar el reino de Dios basto los
confines de la tierra.
El mundo no puede darnos esta paz, sólo Jesús nos ha prometido dárnosla:
Leamos Juan 14:27
La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro
corazón, ni tenga miedo”
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