ALIMENTOS Y NUTRIENTES En muchas ocasiones utilizamos la palabra alimento o nutriente como si nos refiriéramos a lo mismo, cuando no lo es. Los alimentos son unas sustancias (sólidas o líquidas) que ingerimos y que nuestro organismo transforma obteniendo unas sustancias, nutrientes, necesarios para la formación, crecimiento y reconstrucción de nuestros tejidos. Entre los distintos alimentos se encuentra la leche y sus derivados, las legumbres, las carnes, el pescado, la fruta, las verduras, las hortalizas, los cereales, la mantequilla, etc. y entre los nutrientes, los hidratos de carbono, las proteínas, la fibra, los minerales y los lípidos. ¿Para que se utilizan los nutrientes y en qué alimentos los encontramos? • Hidratos de carbono. Proporcionan energía (tanto para uso inmediato como para tener de reserva) y también tienen una función estructural. Hay distintos tipos en base a la rapidez con la que nuestro organismo los absorbe; h.c. de absorción lenta y h.c. de absorción rápida. Se encuentran principalmente en alimentos de origen vegetal (cereales y derivados, legumbres, tubérculos, etc.). • Lípidos. Constituyen el nutriente energético por excelencia. Además tienen función protectora y estructural Su ingesta es imprescindible, aunque el exceso de su aporte, sobre todo de grasa saturada (como ocurre en la alimentación habitual de los países desarrollados), es perjudicial para la salud. Los más conocidos son los triglicéridos, los fosfolípidos y el colesterol. Pueden ser: o Saturados: los que se obtienen de la grasa de origen animal y del aceite vegetal de palma y de coco. Están relacionados con el aumento del colesterol. Algunos alimentos ricos en grasas saturadas son, la mantequilla, la margarina, los productos de pastelería, las galletas, las vísceras, las carnes rojas, los huevos y el marisco. o Insaturados: se obtienen de los alimentos de origen vegetal, a excepción del aceite de coco y palma. Se caracterizan porque no aumentan el nivel de colesterol. En este grupo se incluyen los aceites de oliva, girasol, maíz, soja y pepita de uva. Su consumo es recomendado frente a los saturados. • Proteínas. Son básicas para los seres vivos. Se necesitan a lo largo de toda la vida para formar y reparar los tejidos pero especialmente en algunos momentos fisiológicos determinantes (embarazo, lactancia, infancia, adolescencia.) Los principales alimentos que contienen proteínas son la carne, el pescado, los huevos, la leche, los cereales, las legumbres y los frutos secos. De forma general, las proteínas de origen animal tienen un mayor valor biológico que las que proceden de los vegetales. • Vitaminas. Son nutrientes esenciales. Su función principal es la regular reacciones metabólicas. Se dividen en : - Hidrosolubles. Se trasportan por el agua sin almacenarse en nuestro organismo (grupo B y vitamina C) - Liposolubles. Se transportan en grasas y se almacenan en el tejido adiposo (A, D, E y K). Están presentes en múltiples alimentos (frutas, leche, huevos, carnes, etc.). • Minerales. Su función es reguladora del metabolismo (forman parte de hormonas y enzimas) y estructural (calcio y fósforo en el hueso. Destacan entre otros : calcio, fósforo, hierro, yodo, flúor, sodio, cloro, potasio, azufre, magnesio, manganeso, cobre, cobalto y zinc, cromo, molibdeno y selenio. Se encuentran presentes en casi todos los alimentos en mayor o menor cantidad.